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Ningún partido prioriza la financiación autonómica.Es cierto que en Catalunya, los independentistas siempre y alguna vez los socialistas aprietan para tener una financiación diferenciada al resto de españoles pero ayer la vicepresidenta Montero en ningún caso apuntó esa tesis ni por asomo. Se lo aseguro porque yo sí me tome la molestia de escuchar las declaraciones íntegras. Al César lo que es del César. Dicho esto, a nivel autonómico y nacional, veo a las derechas obsesionadas y dando la máxima prioridad a su cruzada contra la anmistía y a las izquierdas lo mismo con el fango y la renovación de la cúpula judicial. No dudo de la trascendencia de estos temas pero ninguno es más importante que el nuevo sistema de financiación autonómica. ¿Para cuándo un ultimátum de un lado y otro para impulsarlo de una vez por todas?Cuando se quiere, se puede y en esa materia nadie hace nada serio. Todo son excusas para no priorizar el tema, mareando la perdiz y tomándole el pelo al personal. Todos, sin excepción.
Primer año de Mazón tras el 28-M.Es cierto que falta más de mes y medio para que se cumpla el primer aniversario de Carlos Mazón al frente de la Generalitat pero no lo es menos que hoy hace un año se celebraron las elecciones autonómicas y es una buena excusa para hacer balance. El gran resultado obtenido ese 28 de mayo por el líder de los populares valencianos le sirvió para acceder a la Presidencia desplazando al trio botánico que había gobernado nuestra Comunitat durante dos legislaturas creándoles una crisis de la que todavía se recuperan pero necesitando a Vox como socio algo que, sin duda, es lo que más quebraderos de cabeza le está provocando y que, a buen seguro, seguirá haciéndolo. Por lo demás, Mazón ha tirado de manual. Por un lado recurrir constantemente a la herencia recibida argumento que cada vez le valdrá menos y confrontar continuamente con el gobierno central al que culpa de todos los males y con el que justifica allá donde no llega su acción de gobierno. Todo muy previsible y, de momento, manejado con gran habilidad aunque no debe olvidar que al final se le juzgará por lo que él y su ejecutivo sean capaces de gestionar y poner en marcha.
Ataques en campaña, socios en el Gobierno.Es evidente que en todas las campañas electorales hay una dosis de exageración y teatralización pero cada uno debe ser responsable de lo que hace y dice cuando se dirige a la ciudadanía pidiéndole el voto sino quiere quedar retratado y desacreditado para siempre. Es por eso que, una vez más, habrá que tomar nota de, por ejemplo, las durísimas críticas que se están lanzado estas días los socios que sostienen, por un lado, al Gobierno Central y, por otro, al Autonómico. Por ejemplo, aquí en la Comunitat ayer mismo los líderes nacionales y regionales de Vox cargaron de forma muy dura contra el PP equiparándolo totalmente con el PSOE. Pues bien admito apuestas pero me veo el lunes 10 de Junio, el día después de las Europeas, a Vicente Barrera y Carlos Mazón abrazados como hermanos diciéndonos que todo era broma y pelillos a la mar.
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Falta compromiso de la gran banca con la Comunitat.El nuevo intento del BBVA para fusionar al Sabadell y convertirse en el primer banco español ha reabierto el debate sobre la enorme concentración del sector en los últimos años buscando una mayor competitividad y rentabilidad para esas entidades pero con el peligro de reducir la competencia y el número de oficinas y trabajadores. Pero además de los beneficios empresariales y repercusiones para empleados y clientes me gustaría poner el foco en otro aspecto trascendente como el del desarraigo y falta de compromiso de esos bancos con nuestra tierra olvidado, por una parte, que buena parte de su origen parte de las grandes cajas de ahorros de la Comunitat y, por otra, que aquí tienen un porcentaje muy elevado de sus negocios. Tener sede social o algún departamento corporativo no es suficiente ni mucho menos. En este nuevo escenario la sociedad valenciana con sus dirigentes políticos al frente deberían reivindicar el compromiso real de esos bancos con nuestra Comunitat.
Versión valenciana de la guerra política española.En nuestra Comunitat, cada vez que los gobiernos central y autonómico no han sido del mismo signo político el clima político ha sido especialmente tenso y de confrontación. Esta situación se ha repetido desde hace 9 meses cuando las últimas elecciones autonómicas y generales nos han situado de nuevo en ese escenario. Ahora tras conocer las conclusiones de la reflexión de 5 días de Pedro Sánchez, escuchar sus primeras declaraciones y las del líder popular Alberto Núñez Feijóo, todo apunta a que vamos a un confrontación política y social de bloques en toda España y con plus añadido en nuestra tierra. Sin embargo y al menos de momento, ayer el popular Carlos Mazón optó por el silencio y la socialista Diana Morant por un breve mensaje en redes sociales dejando que sus segundos escalones protagonizaran la batalla dialéctica. El jueves se reúnen por primera vez y la duda a esta hora es si protagonizan una tregua de 48 horas en espera del encuentro o se lanzan hoy mismo a emular a sus líderes nacionales en la guerra abierta.
Tensión política a la valenciana.Aunque cada caso es un mundo y están lleno de matices, es evidente que en nuestra Comunitat los socialistas han cerrado filas para defender y reivindicar la figura de Pedro Sánchez y que en Compromís han aprovechado el escenario para hacer lo mismo con la de Mónica Oltra. Mientras tanto, los del Partido Popular recuerdan las figuras de Rita Barberá y Paco Camps pero con una diferencia muy importante, al menos hasta ahora, lo hacen en privado y no en público. Por cierto de Zaplana ni palabra. Sin embargo, la excepcionalidad del momento no justifica algunos excesos verbales como el de la portavoz adjunta de Compromís, Isaura Navarro, que ayer imitó lo que la derecha y la extrema derecha han venido diciendo del Gobierno español cuando dijo que el actual Consell es ilegítimo. En la crítica y el análisis hay líneas rojas que no deberían sobrepasarse.
Pacto ferroviario entre la Safor y la Marina Alta.El problema de intercomunicacion entre dos de nuestras principales comarcas como La Safor y la Marina Alta es uno de los más graves de nuestra Comunitat. La falta de inversiones y soluciones en materia de transporte público, especialmente en materia ferroviaria, prácticamente les limitan al uso del coche privado. En ese contexto, desde hace muchos años, se habla de dos posibles soluciones como la del denominado tren de la costa y un tranvía. Ambas son complejas pero especialmente la primera. Si todos somos sinceros, parece bastante inviable a corto, medio y largo plazo, solo nos quedaría el larguísimo plazo por su gran coste económico, enorme afección medioambiental y también las discrepancias de trazados y ubicación de estaciones entre los distintos ayuntamientos. Sin embargo, nadie se atreve en público a renunciar al proyecto y, por ejemplo, centrar todos los esfuerzos en la segunda solución que sería más factible. Por qué no se reúnen de una vez por todas y al mismo tiempo los gobiernos central, autonómico y locales para lograr un consenso. O cada parte renuncia a algunos de sus objetivos y con sinceridad se cierra un acuerdo o no habrá ni tren ni tranvía nunca.
Yolanda Díaz no da la caraAlguno pensará que es una reivindicación gremialista e interesada pero créanme que lO hago convencido del papel de mediación que tenemos los medios de comunicación entre nuestra clase dirigente con la ciudadanía. En ese contexto, creo censurable e inaceptable la actitud de algunas y algunas negándose a responder a los periodistas e intentar limitar sus obligatorias explicaciones a la opinión pública a través de comunicados o mensajes enlatados. El último ejemplo lo vivimos el pasado viernes en València protagonizado por la Vicepresidenta Yolanda Díaz, a la que parece que se le ha olvidado su discurso de apertura y transparencia absoluta que defendía hace cuatro días cuando no pisaba moqueta. ¡Vivir para ver!
La inaceptable Ley de la Concordia.Como saben, el anuncio de varios gobiernos autonómicos gobernados actualmente por PP y Vox de cambiar las leyes de la memoria pro las denominadas de la concordia ha provocado la toda una ofensiva del gobierno central que anunció primero recursos ante el Tribunal Constitucional y que ayer dio un paso más con una batería de medidas ante la las Naciones Unidas y la Unión Europea. Independientemente de las estrategias ideológicas, partidistas y hasta judiciales de unos y otros creo que el tema merece una seria reflexión. Por ejemplo aquí en nuestra Comunitat, PP y Vox cogidos de la mano, pretenden impulsar una Ley que reescriba la historia igualando la Segunda República con el franquismo lo que, de facto, supondría blanquear la dictadura que padecimos durante 40 años. Intentar que esto pase como un asunto menor de escaso interés para la ciudadanía o lo que es mucho peor como una falsa equiparación de hechos que nada tienen que ver es sencillamente inaceptable.