Un podcast trasnochado y simple sobre la vida, los miedos, las dudas y otros condimentos. Dos viejos amigos, Ale Dalto y Nico Falchi, buscan excusas para charlar sin certezas, con la sola seguridad de que nadie está libre de estos asuntos.
¡Un episodio para tirar la chancleta! Ale Dalto y Nico Piche presentan todos los bloopers y "detrás de cámaras" en la grabación de la temporada, mientras hablan del año del que -definitivamente- nadie estuvo libre.
Con la reposera abajo de un brazo y la sombrilla abajo del otro, Nico y Ale anticipan el momento de poner las patitas en remojo y preocuparse por la nada misma, porque Nadie Está Libre de la licencia.
De pasajeros y choferes, vendedores ambulantes y peleas estratégicas por el asiento: Nico y Ale sacan un boleto dos horas para un largo viaje, porque Nadie Está Libre del Ómnibus.
De monedas detrás de la oreja, bolas de fuego y abracadabras: Nico y Ale no tienen nada por aquí, ni nada por allá, pero te sacan este podcast de la galera, porque Nadie Está Libre de la Magia.
De medallas y superhombres, perfeccionistas y ganadores, maniáticos del control y kilos y kilos de presión para lograr el objetivo. Nico y Ale se llenan de dieces, porque Nadie Está Libre de la Excelencia
Del terror y la ciencia ficción, de películas llenas de clichés, de disfraces que salen mal, gente sonámbula y anuncios escalofriantes. Ale y Nico no escapan a una de las festividades más globalizadas; prenden su fogón, cuentan historias, leen anécdotas de los oyentes y comparten dos ficciones originales, porque Nadie Está Libre de Halloween.
De rachas y mufas, supersticiones y cábalas Nico y Ale se arrojan a los brazos de la diosa fortuna para despejar las nubes negras, porque Nadie Está Libre de la Suerte
De piñas de garrón, palabras que duelen, límites del ser humano, espacios controlados para el desahogo y sobre nuestra propia naturaleza: Nico y Ale pelean en el barro espalda con espalda, porque Nadie Está Libre de la violencia.
De viajes en el tiempo que son y no son, de reuniones con extraños que son y no son, de viejas amistades y amores que son y no son: entre anécdotas y anclas adolescentes, Nico y Ale reconocen que NEL de los reencuentros
De estrellas y estrellados, autógrafos, paparazzis y selfies: Nico y Ale tratan de escapar a los flashes y los followers, porque Nadie Está Libre de la fama.
De blancas palomitas, olor a tiza, niños que mugen, penillanuras y narices aguileñas: Nico y Ale se ponen sus túnicas y sus orejas de burro para desde el aula festejar el capítulo 50 de la serie, porque NEL de la escuela
De mundos fantásticos, cuentos de ensueño, nubes de algodón y metáforas que pueden dar diabetes: Ale y Nico se adentran en los inabarcables confines de la mente, porque Nadie Está Libre de la imaginación.
Entre carcajadas y morisquetas, humoristas y reidores, guionistas y maestros de la improvisiación, Ale y Nico estrenan el capítulo cachichién de su descacharrante podcast, porque Nadie Está Libre del humor.
De buenos y malos obsequios, la duda eterna sobre practicidad u originalidad y el flagelo de los amigos invisibles: Nico y Ale le hacen un moño al capítulo y lo dejan sin boleta de cambio, porque Nadie está libre de los regalos
Ni tan limpitos ni tan mugrientos: Nico y Ale charlan sobre la pulcritud pasada, presente y futura en una edición reconfortante como ducha tibia y enredada como pelusa de ombligo, porque Nadie Está Libre de la Higiene
De destinos anhelados, barreras idiomáticas, gestos de supervivencia y aquellos lugares secretos o escondidos que pueden convertirse en la gran anécdota de la aventura: Nico y Ale hacen la fila con el pasaporte en la mano, porque nadie está libre de los viajes
Sobre culpables y acusadores, el perdón y sus implicancias, y ese peso horrible que se carga en las espaldas cuando la cagamos. Nico y Ale abren el confesionario y alivian males, porque nadie está libre de la culpa.
¿Vivimos tiempos en los que la diplomacia se está dejando de lado? De empatía, adecuación lingüística y consideraciones por el interlocutor hablaron Ale Dalto y Nico Piche en este episodio, porque Nadie Está Libre de la diplomacia.
¡Luz, cámara y acción! para un episodio dedicado enteramente al séptimo arte, a la experiencia de las salas de cine, las mejoras en la comodidad del hogar, a los directores y películas que dejan y dejarán huellas, porque Nadie Está Libre del Cine
A medio camino entre el creer o reventar y la ciencia en pañales, Nico y Ale piensan en voz alta sobre esas situaciones que se dan porque estaban para vos, sobre esas casualidades tan, pero tan casuales que parecen guionadas o esas personas que nacen con una estrella y cuyo futuro no parece tan complejo de imaginar. Porque nadie está libre del destino
De la hinchada, de la termeada y de los cánticos. Del baby fútbol, de las pelotas de trapo y de los futbolitos. Nico y Ale saben que Nadie Está Libre del fútbol.
De cobardía, de falsos valientes y de supervivencia. Ale y Nico saben que Nadie Está Libre del miedo.
Tan necesaria como cuestionable, tan imperfecta como perfectible, tan dura como frágil; Nico y Ale se ponen las pelucas blancas y la toga para blandir sus martillos al aire, porque Nadie Está Libre de la Ley
De expectativas laborales, de educación y talentos. ¿Definimos muy temprano la vocación? ¿Cómo sería el mundo si cada cual trabajara de lo que quiere? En este episodio, Ale y Nico saben que #NadieEstáLibre de la vocación.
De viajar en el tiempo para atrás y para adelante, de esa maldita costumbre de siempre que pensamos en viajar al pasado acordarnos de la timba; de cómo imaginamos el futuro y el pasado, de agujeros negros, universos paralelos y paradojas temporales. Nico y Ale se suben al DeLorean sin miedo, porque Nadie está libre de viajar en el tiempo
De libros imposibles de terminar, de los clásicos de la literatura, y hasta de las cuentas troll de bioy Casares y platón. Ale Dalto y Nico Piche saben que Nadie Está Libre de la literatura.
De la complicidad entre abuelos y nietos, de quinielas y fotógrafos, de abuelos malcriadores. Ale y Nico saben que nadie está libre de los abuelos.
De viajes espaciales, visitantes de otros mundos, las corridas en el Área 51 y la posibilidad de conocer a Marcelo, el sobreviviente interestelar de Roswell. Nadie Está Libre de la vida en otros planetas.
¿Cuándo expira una deuda pendiente? ¿Nos da lo mismo deber que que nos deban? ¿Con quiénes se 'deben favores'? ¿Prestar libros genera una deuda de esas que querés cobrar sí o sí? De deudas de dinero, de sangre y de amistad; de almas en pena y materias pendientes. Nadie está libre de las deudas.
La primera temporada de nuestro podcast llega a su fin, y tras treinta episodios vimos un buen momento para recordar algunas reflexiones, furcios o bromas que surgieron durante 2019.
De la tendencia del ser humano a creer en dioses, de las cosas a las que recurrimos cuando las papas queman, de las sectas y de las creencias a las que nuestro cerebro se aferra. Ale y Nico saben que Nadie Está Libre de la fe.
De las amistades que arrastramos desde la infancia, de Roberto Carlos y su conteo cuantitativo, de reencuentros, grupos de Whatsapp, alejamientos y mejores amigos. Ale y Nico, dos viejos amigos de años, saben que Nadie Está Libre de los amigos
De máquinas de bolsillo, videoclubes de videojuegos, la maldición de los Sims, juegos de terror que es mejor no jugar, consolas y más. Ale y Nico sabe que Nadie Está Libre de los videojuegos.
De pastillas y medicina alternativa, de antivacunas y de la industria farmacéutica, de salud mental y miedos irracionales. Ale y Nico saben que Nadie Está Libre de la salud... ¿O de la enfermedad?
De la asociación de recuerdos con algunas canciones, de la definición de una persona a través de sus gustos musicales, de los "dealers" de música, del baile y el salón. Ale y Nico saben que Nadie Está Libre de la música.
De su gusto amargo, de sus diferencias con la justicia, de justicia divina, de las frustradas y también de formas sanas de mitigar el dolor. Ale y Nico saben que el rencor más la ira son el motor por excelencia de la venganza, y por eso: nadie está libre de ella.
De la estación de las flores y la pelusa de los plátanos, de la asociada a lo sexual, de ella como metáfora de la vida. Ale y Nico aprovechan los primeros calores de la temporada para recordar que nadie está libre de la primavera.
De ese sentir adolescente, de admiración, humanidad y deidad. ¿Necesitamos creer en algo perfecto? Ale y Nico hablan desde la tribuna, porque saben que Nadie Está Libre de los ídolos.
De consumismo y préstamos para pagar préstamos. Del divorcio de la publicidad pero también de objetos que nos conectan, de alguna manera, con la sociedad. De alardeos y de darse un gustito... Ale y Nico saben que nadie está libre del consumo.
De las señales de la vejez, de sabiduría e impunidad. Del "uruguayan dream" vs el "american dream", de la muerte, los chistes y los nietos. Ale y Nico saben que Nadie Está Libre de la vejez.
De arte callejero, de museos y de vuelos estéticos. ¿Qué carajos es el arte? ¿Todos somos potenciales artistas? Brocha en mano, Ale y Nico hacen el vigésimo episodio de este podcast sabiendo que Nadie Está Libre del arte.
De videojuegos, juegos de caja y juguetes. De aprender desde lo lúdico y aprender jugando. De chicos o de grandes, Ale y Nico saben que nadie está libre de jugar.
De patria y patriotismo. De reconocer un lugar en el mundo, de olas migratorias y crisis humanitarias. De armar la valija con costumbres e idealizaciones, y cómo mantenerla armada a donde sea que vayas. Ale y Nico saben que Nadie Está Libre del destierro.
Del arte del buen comer, de platos que antes detestabas pero que hoy matarías por tener, de los loquitos que viajan por el mundo probando comida, y de la magia de la comida fea de los "espeto corrido". Ale y Nico saben que nadie está libre de la comida.
De cómo el mítico televisor de tubo mutó en formas extrañas, de la responsabilidad de los nuevos comunicadores detrás de un celular, y de la ausencia de filtro que sufren y disfrutan las nuevas tecnologías. Ale y Nico no quieren ser Youtubers, aunque saben que nadie está libre de ellos.
De casas nuevas y ¿vidas nuevas? De llorar el barrio, de estresarse buscando un nuevo hogar, de cajas, cajones y frascos. Ale y Nico saben que Nadie Está Libre de las mudanzas.
Del realismo mágico de las historias de bar, de intelectuales, parroquianos e intelecuales. Nico y Ale saben que Nadie Está Libre del Bar.
De adicciones, placeres culposos y círculos viciosos. Todo el mundo tiene uno, desde el dulce de leche hasta la pornografía, pasando por los casinos y las redes sociales. Ale y Nico saben que nadie está libre de los vicios.
De animales fantásticos, extraterrestres y fantasmas. De llamadas, sugestiones y maldiciones. Ale y Nico saben que nadie está libre de lo paranormal, así como también que "con lo paranormal no se jode".
De tiempo libre y cómo usarlo, ya sea haciendo o sin hacer. De la siesta, las vacaciones, de los días para descansar de las vacaciones... Nico y Ale saben que nadie está libre del ocio.
De cómo nos hacen creer que nos gusta trabajar, de las mentiras piadosas en nuestros currículums y el abuso. En este décimo episodio, Ale y Nico hablan de entrevistas grupales, dinámicas lúdicas y empleos miserables, sabiendo que nadie está libre de las ocho horas.