Una reflexión para acompañar cada misa dominical y empezar la semana con buen pie
Un año duro se acaba. Jesús nos trae el reto de salir de nosotros mismos y vivir menos centrados en uno mismo.
Vivir positivos, esperanzados, atentos a las necesidades del otro. Siento testigos de la luz.
Tantas veces desfiguramos quién Jesús es. Es importante entender quién es, quién no es y cómo seguirlo.
Necesitamos aprender cómo hacer para impulsar nuestros intelectos a la Sabiduría, misma que se deja conocer, si la buscamos.
El miedo paraliza porque estamos a nivel de ciervos, no de hijos. Somos hijos de Dios. Nadie puede quitarnos eso.
La virtud del amor incluye tantas cosas, entre ellas, el aprender a pensar y reaccionar con el amor de Dios en el corazón.
¡Todo! Si no hay paz y alegría en el corazón, algo no le estamos entregando a Él.
En tiempos de confusión, ¿qué modo tenemos para distinguir y luego habitar en la paz?
Hace falta hermanar conocimiento con el ungüento de la sencillez para ser cristianos equilibrados
Siempre se puede encontrar cómo dar luz, alegría y amor aún en la oscuridad.
¡Qué común se ha hecho "no meterse en la vida ajena" como medio para que todos seamos mediocres!
Su lenguaje del amor es no ir con la corriente, sin ser una ofrenda viva, agradable a Él.
¿Qué estamos dispuestos a hacer por el Gran Artista?
A donde le dediquemos el tiempo, ahí es donde suele haber fruto.
Conocer a Cristo y a su Padre logra elegir otros métodos para llevar nuestra vida.
Solo con la fuerza de Dios podemos aspirar a una belleza del corazón y del alma que no pertenece a este mundo.
¿A qué recurrimos los católicos cuando estamos acorralados? ¿A quién iremos, si solo Tú tienes palabras de vida eterna?
El cristiano, como la Trinidad, está llamado a la unión y a la comunión. Pero el mundo está sembrando división. El demonio anda suelto.
No podemos soñar con un mundo mejor y nosotros no ser los primeros que lo construyen.
¿Cuál es la línea divisoria entre respeto y miedo a la hora de hablar de Jesucristo, de tu fe?
A veces nuestros dolores vienen de que aún no lo hemos hecho a Él el Dueño de todo.
Cristo viene a presentarse como la Roca, el Camino... nuestra Fuerza.
¿En qué cosas yo aún miro muy abajo?
Esa es la mayor misericordia que Jesús nos trajo.
Esta Pascua será diferente. La misma felicidad, pero Dios nos pedirá estar menos apoyados en lo externo.
El mundo está viviendo un drama de la mentira. Pero esta semana, La Verdad será crucificada, y la Verdad triunfará.
¿Por qué no nos acabamos de convencer? ¿Por qué cuesta creerle todo a Dios?
Buscamos mucho las mismas aguas del pasado, y no nos llenan. Para conseguir el Agua, hay que salir a buscarla.
Nos cansamos del agua que hemos buscado cientas de veces. Queremos otra agua. Pero hay que salir a buscarla.
Si no vemos cuál es la batalla que se está librando, más necesitamos purificación.
Hacer lo que no hemos hecho, es posible, pero requiere un proceso.
Solo donándonos podemos encontrar mayor paz y salud integral. ¡Inténtalo!
¿Qué mensaje querrías tú transmitir si hoy murieras y con ese mensaje te recordaríamos?
El bautismo es un regalo para ir de la mediocridad a la excelencia.
No lo conocemos a Él. Y Él busca una relación personal con nosotros.
Espera. Escucha. Emprende. José fue un modelo de precaución en sus acciones.
Tenemos 2 grandísimos ejemplos esta semana. Nos muestran cómo.
Cristo es la promesa final que nos fue dada.
A veces hay que dejarlo claro a los más cercanos, cuando no coincidimos.
Buscamos ser valorados, luchamos por ganar el cariño, incluso de Dios.
NO rechacemos lo que Dios quiere transformar cuando pasamos malos momentos.
Jesús está más cerca del que sufre, y todos pasamos por eso.
Se puede aprender o no del sufrimiento. A fin de cuentas, todos nos lo encontramos.