Reflexión diaria de la Palabra de Dios con el profesor Carlos Andrés Agudelo Henao
El deseo del Señor, sus planes para nuestra vida se cumplen, por difícil que parezca, pero debemos asumir la actitud de humildad y apertura a la acción de Dios como José.
La Palabra de Dios en este día nos invita a reconciliarnos con nuestra humanidad, pues sobre un verdadero humano se construye un verdadero santo. Jesús asume en todo la condición humana, menos en el pecado. Permitamos que Él nos reconcilie con el Padre.
Las palabras de Jesús son avaladas por sus actos. La vida cristiana tiene que estar regida no tanto por el decir, cuanto por el hacer: hacer siempre la voluntad del Padre.
Nos invita la Palabra de Dios a vivir nuestra vida de fe en actitud de constante cambio y conversión. Cada día es una nueva oportunidad para volver a Dios. para obedecer a sus mandatos después de haber sido desobedientes.
La Palabra de Dios en este día nos enseña a ser dóciles a la acción de Dios y a la novedad del Evangelio. Que nuestra experiencia religiosa no sea simple tradicionalismo, sino una vivencia, una experiencia personal con Jesús.
Domingo III del tiempo del Adviento, "Gaudete". Nos invita la Palabra a la conversión, a limpiar nuestra mente y nuestro corazón para estar preparados para vestir el vestido de gala.
Fiesta de Nuestra Señora, la Virgen de Guadalupe. Nos enseña el Señor en su Palabra a ser, como María, custodios, defensores y protectores de la vida.
"Ojalá estuvieras atento a mis mandatos". Nos pide el Señor vivir nuestra fe abiertos a la novedad del Evangelio para comprender aceptar y vivir la revelación de su amor misericordioso.
1. La Palabra de Dios en este día nos invita a no tener miedo, Dios está con nosotros como Padre tierno y cariñoso. 2. En la figura de Juan el Bautista se nos invita a la conversión, al cambio de vida y de mentalidad como respuesta a ese amor misericordioso del Padre. 3. Nos propone e invita el Papa Francisco a meditar y contemplar la imagen de San José, como patrono de la Iglesia.
La Palabra de Dios en este día nos invita al descanso; nos invita a poner nuestras cargas, penas, angustias y dificultades en manos de Jesús, y a conocerle en su Palabra para descubrir así cuál es su yugo, que es liviano y llevadero.
Solemnidad de la Inmaculada Concepción de la Bienaventurada Virgen María. Nos invita la Palabra de Dios a ser velas encendidas, antorchas que iluminen el caminar de tantas personas que caminan en la oscuridad.
El Señor Jesús nos rescata para la vida eterna donde no existe el dolor ni el sufrimiento. Y nos sana en el cuerpo y en el alma. Jesús no quiere salvos.
II domingo del Tiempo de Adviento. La Palabra de Dios nos recuerda el llamado que nos hace el Señor a la conversión y a la vida nueva. Allí radica la fuerza, el poder del cristiano, en la misericordia, en la compasión, en la humildad para ayudar también en el anuncio del Reino.
Orar por las vocaciones a la vida consagrada, ser compasivos los unos con los otros y dejarnos orientar por Jesús, son las invitaciones de la Palabra de Dios en este día.
Hoy encontramos en el Evangelio la curación de dos ciegos, pero a la luz del profeta Isaías, entendemos que no sólo de las enfermedades físicas nos cura Jesús, sino, sobre todo, de las enfermedades espirituales que son aquellas que pueden matarnos para la eternidad. Jesús quiere sanarnos y nosotros debemos hacer nuestra profesión de fe: "Hijo de David, ten compasión de nosotros".
La Palabra de Dios en este día nos trae la figura de la puerta y nos enseña que la puerta para entrar al Reino de los Cielos, es hacer la voluntad del Padre.
1. ¿A quién buscamos cuando tenemos problemas, enfermedades, pecados? Quien busca a Jesús encuentra sanación y liberación, encuentra bendición. 2. Jesús, en el evangelio de hoy, nos enseña que todos somos responsables de los hermanos. 3. La vida cristiana es un banquete, en donde el manjar suculento es el mismo Cuerpo de Jesús y el vino exquisito es su sangre.
La liturgia de la Palabra en este día es completamente Trinitaria; se ve la acción del Espíritu Santo en Jesús, que hoy se dirige al Padre para alabarlo porque revela sus misterios a los más sencillos. Alaba también Jesús a aquellos que pueden ver los misterios del amor de Dios.
Fiesta de San Andrés, Apóstol. Nos invita San Pablo a profesar con los labios y a creer en el corazón que Jesús es el Señor. Y Él nos invita a dejar las redes para seguirle.
I Domingo del Tiempo de Adviento. Nos invita la Palabra de Dios en este día a la vigilancia en la espera y a reconocer a Dios como nuestro Padre que nos ama. Debemos ser en sus manos como la arcilla en manos del alfarero.
Terminamos hoy un año litúrgico y nos preparamos para iniciar otro. Y la invitación de la Palabra de Dios es un constante llamado a la conversión y a la vida nueva.
En este mundo nos encontramos como simples peregrinos, nuestra patria, nuestro hogar, nuestra casa, es el cielo. Allí contemplaremos a Dios.
La Palabra de Dios nos sigue invitando a la conversión, y nos muestra cómo el pecado, el mal, Satanás y sus ángeles, son derrotados por la gracia y la misericordia.
Este día es una oportunidad para que nos preguntemos por qué razón seguimos al Señor y para que confirmemos nuestra fe y nos motivemos a seguir en este bello discipulado, sabiendo que, a pesar de las dificultades, abandonos, persecuciones, lo que nos espera es Gloria en la vida eterna. Que el Espíritu Santo nos regale fidelidad y perseverancia.
Tres enseñanzas concretas encontramos en la Palabra de Dios en este día: 1. En nuestra vida de fe no quedarnos con lo externo, sino trascender a lo importante que es la intimidad personal con Dios. 2. Formarnos, conocer nuestra fe a través de la Sagrada Escritura y la doctrina católica. 3. Trabajar cada día por nuestra conversión.
La Palabra de Dios nos recuerda en este día que estamos llamados a la santidad, haciendo de lo ordinario algo extraordinario, viviendo de manera fiel, buscando agradar al Señor en todo lo que hacemos, buscando nuestra conversión y cambio de vida constantemente.
La Palabra de Dios en este día nos enseña las diferencias entre los reinados humanos y el Reinado de Jesucristo el Señor, que es un Reinado de amor, misericordia, entrega, donación; Jesús Rey nos invita a participar de su Reino en la Vida Eterna.
Memoria Obligatoria: Presentación de la Bienaventurada Virgen María. La Palabra de Dios en este día nos enseña que hay dos actitud concretas de un hermano de Jesucristo, que busca hacer la voluntad del Padre: 1. La humildad 2. Su vida es alabanza a Dios.
La liturgia de la Palabra en este día nos está llamando una vez más a los católicos a acercarnos a la Sagrada Escritura, conocerla y permitir que nos transforme la vida.
¿Qué tendría que sentir Jesús de cada uno de nosotros en este momento? ¿Tendría que dar gracias a Dios Padre por revelar estos misterios a los sencillo y humildes de corazón, como en Lc 10, 21ss o tendría que llorar por nosotros como lloró por Jerusalén, al ver que no lo hemos aceptado en nuestra vida, al ver que no nos queremos convertir, al ver que estamos llenos de miedos, desconfianza, desesperanza, al ver que vivimos como paganos, indiferentes ante las necesidades de los hermanos?
Nos invita la Palabra a reconocer al Señor como el tres veces Santo y a dedicar nuestra vida a obedecerle y agradarle.
Guardemos en la memoria y en el corazón las palabras de los versículos 19 y 20 de este capítulo 3 del Apocalipsis: “A los que yo amo los reprendo y los corrijo. Sé ferviente y arrepiéntete. Estoy a la puerta llamando: si alguien oye y me abre, entraré y comeremos juntos”.
Todos somos y hemos sido ciegos en muchos momentos de la vida y la peor ceguera es la generada por el pecado; pues así como aquel hombre que se encontraba al borde del camino, debemos sin pena, con humildad, con fe, gritar: Jesús, quiero volver a ver, quiero volver al amor primero, quiero redescubrir tu presencia y tu amor en mi vida, me quiero dejar amar por ti otra vez. Señor, que vea otra vez.
Nos dice el P. Pagola: “Es sorprendente ver que el tercer criado es condenado sin haber cometido ninguna acción mala. Su único error consiste en no hacer nada: no arriesga su talento, no lo hace fructificar, lo conserva intacto en un lugar seguro. El mensaje de Jesús es claro. No al conservadurismo, sí a la creatividad. No a una vida estéril, sí a la respuesta activa a Dios. No a la obsesión por la seguridad, sí al esfuerzo arriesgado por transformar el mundo. No a la fe enterrada bajo el conformismo, sí al trabajo comprometido en abrir caminos al reino de Dios”.
“Cuando venga el Hijo del hombre, ¿encontrará esta fe en la tierra?”. Jesús nos interpela en este día con esta pregunta, y para permitirnos meditar y profundizar en ella nos presenta la parábola de la viuda y el juez que no teme ni a Dios ni a los hombres.
Ayer meditábamos a la luz del Evangelio cómo el Reino de Dios está en medio de nosotros y somos los responsables de hacerlo concreto en nuestra vida. Y hoy, seguimos escuchando a Jesús con ese lenguaje enigmático, hablando sobre cómo será el fin
Ya, la gran manifestación del Reino, se ha dado en Jesucristo el Señor, que muere y resucita para liberarnos de la esclavitud del pecado y de la muerte. Pero ahora, es responsabilidad nuestra vivir ese Reino, hacerlo palpable, hacerlo realidad; Jesús el Maestro nos ha enseñado el camino, nosotros debemos hacer lo mismo que hizo Él
Memoria obligatoria de San Martín de Tours, obispo. Nos invita la Palabra de Dios a vivir la gratitud.
La Palabra de Dios en este día nos invita para que, reconociéndonos amigos de Jesús, seamos siervos, servidores de los demás, buscando que el Señor sea nuestra delicia, pues Él nos dará lo que pida nuestro corazón.
Fiesta: Dedicación de la Basílica de Letrán. Nos invita la Palabra de Dios a cuidar nuestro cuerpo como templo del Espíritu Santo.
Domingo XXXII del Tiempo Ordinario. Nos invita la Palabra de Dios a dejarnos encontrar por la sabiduría, anhelar su presencia y madrugar por el Dios vivo.
En la Palabra de Dios aprendemos hoy: a utilizar y administrar de manera correcta y sensata el dinero y los bienes materiales y a vivir toda circunstancia fortalecidos en el Señor.
"Ciertamente, los hijos de este mundo son más astutos con su gente que los hijos de la luz"
Escuchamos en este día el Evangelio de la misericordia, dónde entendemos que Jesús siempre está esperando por nuestra conversión.
El seguimiento de Jesús implica renuncia y cruz. ¿Estamos dispuestos a seguirlo?
Memoria obligatoria de San Martín de Porres. Humildad y obediencia.
Conmemoración de los fieles difuntos.
Solemnidad de todos los santos.
La Palabra de Dios nos invita en este día al servicio en humildad y sencillez. Debemos revisar nuestras motivaciones para que todo lo que hagamos sea para la gloria de Dios y el bien de la iglesia.
Nos invita la Palabra de Dios en este día a vivir la fe y nuestras celebraciones con toda la atención y respeto que ello merece, sin estar pendientes de lo externo. Si vamos a mirar a otros que sea para ayudarlos, no para criticarlos.
El Señor Jesús nos enseña en su Palabra a asumir la vida con la fe de que todo es en el tiempo de Dios.