No te pierdas las predicaciones semanales del campus Miguel Hidalgo de Tierra Prometida
Cuando te expones al sol, tu piel cambia. De igual manera, si te expones a Jesús por tiempo suficiente, tu corazón será transformado de gloria en gloria.
Se un hijo de Dios que habla con sus acciones, se cómo un niño dependiente del padre, amable, alegré, valiente y que habla la verdad.
Alguien que está solo puede ser atacado y vencido, pero si son dos, se ponen de espalda con espalda y vencen; mejor todavía si son tres, porque una cuerda triple no se corta fácilmente.
Alguien que está solo puede ser atacado y vencido, pero si son dos, se ponen de espalda con espalda y vencen; mejor todavía si son tres, porque una cuerda triple no se corta fácilmente.
Alguien que está solo puede ser atacado y vencido, pero si son dos, se ponen de espalda con espalda y vencen; mejor todavía si son tres, porque una cuerda triple no se corta fácilmente.
No te preocupes por nada, ora por todo, dile a Dios lo que necesitas y dale gracias por todo lo que él ha hecho. Así experimentarás la paz de Dios, que supera todo lo que podemos entender. La paz de Dios cuidará tu corazón y tu mente mientras vivas en Cristo Jesús.
No te preocupes por nada, ora por todo, dile a Dios lo que necesitas y dale gracias por todo lo que él ha hecho. Así experimentarás la paz de Dios, que supera todo lo que podemos entender. La paz de Dios cuidará tu corazón y tu mente mientras vivas en Cristo Jesús.
No te preocupes por nada, ora por todo, dile a Dios lo que necesitas y dale gracias por todo lo que él ha hecho. Así experimentarás la paz de Dios, que supera todo lo que podemos entender. La paz de Dios cuidará tu corazón y tu mente mientras vivas en Cristo Jesús.
Levántate, consagraos para a que quitéis el anatema de en medio de vosotros.
A fin de que la verdad del evangelio permanezca con vosotros.
A fin de que la verdad del evangelio permanezca con vosotros.
Huye, pues, de las pasiones juveniles y sigue la justicia, la fe, el amor y la paz, con los que invocan al Señor con un corazón puro.
Pues así como en un cuerpo tenemos muchos miembros, pero no todos los miembros tienen la misma función, así nosotros, que somos muchos, somos un cuerpo en Cristo e individualmente miembros los unos de los otros.
Pues así como en un cuerpo tenemos muchos miembros, pero no todos los miembros tienen la misma función, así nosotros, que somos muchos, somos un cuerpo en Cristo e individualmente miembros los unos de los otros.
Pues así como en un cuerpo tenemos muchos miembros, pero no todos los miembros tienen la misma función, así nosotros, que somos muchos, somos un cuerpo en Cristo e individualmente miembros los unos de los otros.
La perspectiva humana jamás percibirá lo que Dios tiene preparado, confiemos en Dios y en que su voluntad es buena, agradable y perfecta.
Acerquémonos con toda confianza al trono de la gracia de nuestro Dios. Allí recibiremos su misericordia y encontraremos la gracia que nos ayudará cuando más la necesitemos.
Estén siempre alegres. No dejen de orar. Sean agradecidos en toda circunstancia, pues esta es la voluntad de Dios para ustedes, los que pertenecen a Cristo Jesús.
No se preocupen por nada; en cambio, oren por todo. Díganle a Dios lo que necesitan y denle gracias por todo lo que él ha hecho. Así experimentarán la paz de Dios, que supera todo lo que podemos entender. La paz de Dios cuidará su corazón y su mente mientras vivan en Cristo Jesús.
Cuando dependemos de Dios, la vejez no es limitante, porque aún incluso en la vejez produciremos fruto, seguiremos fuertes y llenos de vitalidad.
La alabanza sea para Dios, quien nos ha bendecido con toda clase de bendiciones espirituales.
El Señor no tarda en cumplir su promesa, sino que es paciente para con vosotros, no queriendo que nadie perezca, sino que todos vengan al arrepentimiento.
Espera con paciencia al Señor; sé valiente y esforzado; sí, espera al Señor con paciencia.
Pero que se alegren todos los que en ti se refugian; que canten alegres alabanzas por siempre. Cúbrelos con tu protección, para que todos los que aman tu nombre estén llenos de alegría.
Pero que se alegren todos los que en ti se refugian; que canten alegres alabanzas por siempre. Cúbrelos con tu protección, para que todos los que aman tu nombre estén llenos de alegría.
Pondré mis leyes en su mente y las escribiré en su corazón. Yo seré su Dios, y ellos serán mi pueblo. Y no habrá necesidad de enseñar a sus vecinos ni habrá necesidad de enseñar a sus parientes, Pues todos ya me conocerán, perdonaré sus maldades y nunca más me acordaré de sus pecados.
Sé fuerte y valiente, porque, sé fuerte y muy valiente. No te desvíes todas las instrucciones que Dios te da, entonces te irá bien en todo lo que hagas. Estudia constantemente este libro de instrucción. Medita en él de día y de noche para asegurarte de obedecer todo lo que allí está escrito. Solamente entonces prosperarás y te irá bien en todo lo que hagas.
Como padres Dios nos dio lineamientos para ser grandes padres y varones, honrándolo siempre.
No se preocupen por nada; en cambio, oren por todo. Díganle a Dios lo que necesitan y denle gracias por todo lo que él ha hecho. Así experimentarán la paz de Dios, que supera todo lo que podemos entender. La paz de Dios cuidará su corazón y su mente mientras vivan en Cristo Jesús.
Porque ninguna cosa es imposible para Dios.
Aprendamos a vivir con casi nada o con todo lo necesario. Aprendido el secreto de vivir en cualquier situación, sea con el estómago lleno o vacío, con mucho o con poco. Pues todo lo podemos hacer por medio de Cristo, quien nos da las fuerzas.
Que nadie pueda criticarlos. Lleven una vida limpia e inocente como corresponde a hijos de Dios y brillen como luces radiantes en un mundo lleno de gente perversa y corrupta. Aférrense a la palabra de vida; entonces, el día que Cristo vuelva, me sentiré orgulloso de no haber corrido la carrera en vano y de que mi trabajo no fue inútil.
Olvidemos el pasado y fijemos la mirada en lo que está por venir, para así avanzar hasta llegar al final de la carrera para recibir el premio celestial al cual Dios nos ha llamado.
En Dios puso su esperanza; ni después ni antes de él hubo otro como él entre todos los reyes de Judá. Porque siguió a Jehová, y no se apartó de él, sino que guardó los mandamientos que Jehová prescribió a Moisés
Pelea la buena batalla por la fe verdadera. Aférrate a la vida eterna a la que Dios te llamó y que declaraste tan bien delante de muchos testigos.
Estas pruebas demostrarán que su fe es auténtica. Está siendo probada de la misma manera que el fuego prueba y purifica el oro, aunque la fe de ustedes es mucho más preciosa que el mismo oro. Entonces su fe, al permanecer firme en tantas pruebas, les traerá mucha alabanza, gloria y honra en el día que Jesucristo sea revelado a todo el mundo.
Por lo tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Enseñen a los nuevos discípulos a obedecer todos los mandatos que les he dado. Y tengan por seguro esto: que estoy con ustedes siempre, hasta el fin de los tiempos.
Pero el que siembra abundantemente obtendrá una cosecha abundante.
La vida está llena de problemas que causan dolor, y el único que puede sanar ese dolor es Dios.
Pese a todas las adversidades que atravesamos podemos ver la bondad de Dios. Él nos acompaña, nos guarda, nos bendice, aún desde antes de que le conociéramos, solo hace falta prestar atención para ver su gran amor por nosotros, y lo único que nos queda hacer es agradecerle, agradecerle porque en esta tempestad Él esta con nosotros, y nos llevará de victoria en victoria, por el poder de su amor.
Mateo 6:33 nos dice: “Buscad primeramente el reino de Dios y su justicia y todo lo demás llegará por añadidura” Sin duda tener una relación estrecha con Dios, no solo nos llevará a tener nuestras necesidades cumplidas, sino que transformará nuestra vida en base al propósito de Dios.
El buen cristiano no es el que no ofende, sino el que no se ofende. Cuando reflejamos el carácter de Cristo, mediante amor, perdón y gracia, mostramos lo que Dios a obrado en nosotros. Debemos dejar de ser, hablar y actuar como niños espirituales, y demostrar el carácter de Cristo.
Los hábitos son prácticas que las personas aprendemos, y al vivir en un mundo pecaminoso y con una naturaleza pecaminosa, los hábitos que tenemos nos alejan de Dios y nos conducen al pecado. Es tiempo de cambiar los viejos y pecaminosos hábitos, por la santidad, justicia y el amor de Dios.
Como cristianos debemos vivir con fe, fe que nos lleve a creer y confiar que todo ayuda para bien a aquellos que amamos a Dios. Por ello debemos depender de Dios, en cada área de nuestra vida, en los momentos buenos y en los momentos difíciles, porque las dificultades que vivimos, sirven para que Dios se glorifique en nuestra vida.
Muchas veces tomamos decisiones o realizamos acciones que nos alejan de Dios, y llegan momentos en que parece que nos hemos alejado tanto o hemos sido tan malos hijos, que no hay vuelta a atrás. Pero Dios quiere que sepas, que no importa que hayas hecho, o en que te hayas convertido Él te ama y quiere que vuelvas a casa, que vuelvas ante su presencia, porque Él te restaurará otra vez.
El mundo constantemente nos dice que si no tenemos lo mejor de todo, nuestra vida está mal, y constante olvidamos que aún las bendiciones que nos parecen muy pequeñas son gracias al amor inagotable de Dios, así como a su misericordia. No olvidemos que Dios es nuestro proveedor y sustentador, y que aún en dificultad, todo lo que viene a nuestras vidas es usado por Él para bendecirnos.
En todas las áreas de nuestra vida, en todos nuestros logros, en nuestros conflictos, en las adversidades, en los triunfos, en las buenas y en las malas, siempre debemos dar la gloría a Dios. Porque no importa lo que suceda, Él siempre esta con nosotros, nos alienta, nos sustenta y nos da la victoria.
La mejor forma de darle la gloria a Dios es a través de nuestro servicio, pero si queremos aprender a servir debemos comenzar sirviendo a quienes tenemos más cerca, a nuestra familia, porque ¿Si no podemos servir a quienes vemos y con quienes convivimos frecuentemente, cómo podremos servir a Dios como se lo merece?
El mejor lugar para que todo cristiano pueda demostrar lo que Dios ha hecho en su vida, para ser un testimonio vivo y fiel de lo que la Biblia nos enseña y sobre todo, para darle la gloria a Dios con cada una de sus acciones, es en su hogar. Porque las personas que más tiempo pasan contigo y que mejor te conocen podrán ser testigos del poder, amor, gracia, y redención que Dios trae a tu vida.
En todas las áreas de nuestra vida, en todos nuestros logros, en nuestros conflictos, en las adversidades, en los triunfos, en las buenas y en las malas, siempre debemos dar la gloría a Dios. Porque no importa lo que suceda, Él siempre esta con nosotros, nos alienta, nos sustenta y nos da la victoria.
¿Quieres arrebatar las bendiciones de Dios en nuestra vida? Es tiempo que reconozcamos en qué hemos fallado, y dejemos que Dios obre en nosotros, para hacer su obra, para cumplir su voluntad y para poder ser participes de las bendiciones que Él ha prometido dar a aquellos que le aman y sirven.