2019 Serapis Bey - La voz del YO SOY

Si el individuo asumiera su postura ante cualquier pregunta de la mente y dijera: "Dios mío, muéstrame y dime la Verdad acerca de esto", daría inicio a una actividad que produciría la explicación completa. Hay que mantenerse firmes hasta que la respuesta llegue, ya que siempre llegará. "Diario de El Puente a la Libertad - Saint Germain", vol. 2, cap. 40, p. 86. Ser de Luz: Saint Germain.

Vuelvo a venir ahora con Mi gloriosa Visión, una Visión de un mundo en donde no hay causa para el pecado, donde no hay dolor, infelicidad ni necesidad de llorar, donde no hay enfermedad, desintegración, ¡ni muerte! En esta Visión, hay una absoluta libertad y liberación de todos los que aquí encarnan, para partir de este Planeta con dignidad y júbilo. "Diario de El Puente a la Libertad - Saint Germain", cap. 40, p. 72 y 73. Ser de Luz: Saint Germain.

Otras sustancias consumidas en exceso, tales como el azúcar, la sal, el tabaco o el café fuerte afectan nuestro cerebro. Invocar a la Presencia YO SOY para eliminar la causa y efecto que producen estas sustancias ayuda a nuestro vehículo físico, junto con la purificación de nuestros vehículos etérico, mental y emocional, a ser un Templo del Altísimo. "La Mágica Presencia". Ser de Luz: Saint Germain.

Para la purificación del vehículo físico podemos modificar nuestros hábitos. Dentro de esos hábitos encontramos sustancias que son necesarias descartar de nuestro cuerpo, tales como el uso de los narcóticos, alcohol, la carne, entre otras, ya que afectan nuestro cerebro y las funciones del sistema nervioso, adormeciéndolo, descontrolándolo, llenándolo de miedo o haciéndonos inconscientes. "La Mágica Presencia". Ser de Luz: Saint Germain.

Una de las formas por medio de las cuales podemos ser beneficiarios de dispensaciones otorgadas por parte de la Ley Cósmica. "El Espíritu de la Edad Dorada", vol. 2. Ser de Luz: Zadkiel.

Mediante ejercicios de respiración rítmica, utilizando nuestra atención, poder de calificación y mediante la visualización de la Llama Violeta, podemos purificar cada uno de nuestros vehículos inferiores, elevando así la vibración de cada uno. "Boletines Privados Thomas Printz", vol. 3, "Discursos del YO SOY del Gran Director Divino". Seres de Luz: Kuthumi, Gran Director Divino. La parte 1 de esta clase está en el espacio "Tu responsabilidad por el uso de la Vida" del 5 de noviembre de 2019.

El trabajo de los Ángeles en el ámbito astral de la tierra. "El Espíritu de la Edad Dorada", vol. 2. Ser de Luz: Zadkiel.

Dos cualidades tangibles, prácticas, comprobables y que son necesarias para la descarga y expansión del Puro Amor Divino son la Bondad y Amabilidad. Ambas son perceptibles por toda Vida y elevan la vibración de lo que contacten. "Instrucción de un Maestro Ascendido", "El Espíritu de la Edad Dorada", vol. 1. Seres de Luz: Saint Germain, Astrea.

Equilibrio de la Vida. Cómo usar los poderes de Invocación y con ello ser un Sacerdote del Fuego Sagrado. "El Espíritu de la Edad Dorada", vol. 2. Ser de Luz: Zadkiel.

Cada instante de nuestra vida es una oportunidad para auto observarnos, ver dónde está puesta nuestra atención, invocar a la Presencia YO SOY a la acción, invocar la Llama Violeta y/o utilizar todas las herramientas que tenemos a nuestro alcance con convicción y constancia para nuestra Liberación. "Discursos del YO SOY del Gran Director Divino", "Diario de El Puente a la Libertad - Arcángel Miguel y Señora Fe". Ser de Luz: Gran Director Divino, Arcángel Miguel.

Como usar los poderes de Invocación y con ello ser un Sacerdote del Fuego Sagrado. "El Espíritu de la Edad Dorada: los Arcángeles". Ser de Luz: Zadkiel. La parte 5 de esta clase está en el espacio "La vida práctica del YO SOY" del 12 de octubre de 2019.

Como usar los poderes de Invocación y con ello ser un Sacerdote del Fuego Sagrado. "El Espíritu de la Edad Dorada: los Arcángeles". Ser de Luz: Zadkiel.

Como usar los poderes de Invocación y con ello ser un Sacerdote del Fuego Sagrado. "Servicio de Transmisión de la Llama de la Purificación" (folleto). Ser de Luz: Arcángel Zadkiel. La primera parte de esta clase está en el espacio "La vida práctica del YO SOY" del 14 de septiembre de 2019.

Ustedes no cesan de existir cuando mueren, eso es solo una ilusión. Entran vivos por la puerta de la llamada "muerte” y no experimentan ninguna alteración de la conciencia. Lo que la puerta de la llamada muerte ofrece, es un resurgimiento de tremenda vitalidad, ya que ustedes están pasando de “una versión aguada de la vida" a la versión original. No hay nada que temer en el Universo. Nada. "El libro de Emmanuel", cap. 11, p. 115-116.

Si ustedes envían una curación a alguien que está lejos, que esta sea una oración pidiendo que dicha persona acepte su enfermedad y permita que esta le traiga la Sabiduría que la misma propone traer. En su infinita sabiduría, el cuerpo conoce lo que se requiere para el equilibrio. Ustedes harían su propio diagnóstico, si tan solo prestaran atención. "El libro de Emmanuel", cap. 8, p. 112 a 114.

Ustedes no han fallado cuando se enferman. Si les fuera a dar algo del "Reino de Dios", les daría la Verdad de que lo que existe aquí y ahora, está rodeado por una Eternidad de Amor y de Luz. "El libro de Emmanuel", cap. 8, p. 109 a 111.

La oportunidad de aprender está aquí. ¿Por qué esperar? Explórenlo todo, examínenlo todo en sus vidas, pero siempre con la pregunta: ¿estoy escogiendo el Amor o estoy escogiendo el miedo? "El libro de Emmanuel", cap. 10, p. 108 y 109.

Tu cuerpo enfermo no es tu enemigo... es tu amigo fiel. Ha sido programado por tu alma para reaccionar precisamente de esa manera y en ese momento preciso. Haz caso a lo que te está indicando. Escucha atentamente. "El libro de Emmanuel", cap. 10, p. 107 y 208.

La enfermedad existe primero en el plano inmaterial de la necesidad espiritual, de la confusión emocional o de la aberración mental. La enfermedad nunca se inicia en lo físico. Este vibra con la tensión y no es más que una manifestación externa de la baraúnda interna. "El libro de Emmanuel", cap. 10, p. 106 y 107.

La enfermedad es una enseñanza, es un mensaje del alma. Es la confusión de esa alma en particular que se manifiesta físicamente para que la conciencia la vea. Cuando las lecciones se aprenden, la enfermedad se convierte en algo que nunca ocurre. "El libro de Emmanuel", cap. 10, p. 105 y 106.

Encontrarán su propio sendero y lo seguirán hasta el final. Después de todo, este lugar tampoco está tan mal. ¿Acaso no han podido ver aquí belleza y fealdad, amor y odio, luz y oscuridad? No le salgan huyendo. "El libro de Emmanuel", cap. p. 102 a 104.

En todos los campos de la educación se está haciendo sentir cierta demanda en todo el género humano, que hace obligatorio el reconocimiento de la Magna Presencia YO SOY. Esta es la Única Fundamentación sobre la cual se puede erigir la Felicidad, la Liberación y la Perfección permanentes. "La Mágica Presencia", cap. 9, p. 182 y 183. Ser de Luz: Saint Germain.

Ustedes no están aquí para pagar o para que se les pague. Están aquí para crecer. Es en su "disposición para crecer" que se sueltan los nudos kármicos. "El libro de Emmanuel", cap. 9, p. 99 a 101.

Karma es el conjunto de circunstancias en el cual ustedes han escogido habitar en esta vida, a fin de encontrar aquellas áreas en que todavía no están en la Verdad. Karma es un modo de aprendizaje. "El Libro de Emmanuel", cap. 9, p. 98 y 99.

Todos ustedes han "firmado un contrato" antes de estar de acuerdo en nacer de nuevo, el cual lee: "Sí, entro en este juego y estoy de acuerdo en someterme a todas las reglas". Estoy aquí no para promover una rebelión, sino para asegurarles que lo que están haciendo es valioso, y que lo que están estudiando es necesario, aunque todo no es más que una ilusión temporal. "El Libro de Emmanuel", cap. 9, p. 92 y 93.

Hubo una época en que las glándulas conocidas en la actualidad como la pineal y la pituitaria eran una. Constituían el Ojo Todo Avizor. Por lo tanto, fórmense sus imágenes adentro. La actividad de la visión en la mente actúa justo de la manera opuesta a la actividad de los ojos, o visión física. "Instrucción de un Maestro Ascendido", discurso XXI, p. 136 y 137. Ser de Luz: Saint Germain.

Cuando comiencen a florecer y a brillar y a bailar por la calle solo porque están contentos, y sepan que la ilusión es creación suya aquí para su propia educación y que pueden alterar lo que les dé la gana simplemente por el acto de amor a sí mismos, serán libres. "El libro de Emmanuel", cap. 8. p. 89-90.

Sin duda, lo más difícil de todo en la totalidad de la experiencia humana es reclamar tu Yo, tu Vida, tu Luz, tu Verdad, tu Dios. Vayan donde está el verdadero placer: el placer del reconocimiento propio y del Amor, el de tratarse los unos a los otros con suavidad y compasión. "El libro de Emmanuel", cap. 8. p. 87-88.

Yo diría que ya es hora de que asumas tu poder creativo y que diseñes un trabajo elegante para ti. Ustedes, queridas almas, caminan tan cautelosamente cuando entran al Jardín del Edén. ¿Acaso no saben que ese es su legítimo hogar? "El libro de Emmanuel", cap. 8. p. 86-87.

El amor a sí mismos les abrirá las manos para recibir, así como para dar. Y ciertamente, no se le quita nada a nadie. El Universo suyo no tiene fronteras. Hay abundancia de todo para todos. Mientras que no llegue el momento en que hayan dominado "el arte de recibir", deberán proveer sus propias necesidades materiales. "El libro de Emmanuel", cap. 8. p. 85-86.

Nada en el planeta de ustedes es un depresor y ciertamente no el compartir el amor físico. Sus cuerpos son programados en el útero, mucho antes de que la sociedad los ajuste a sus propios patrones de miedo. "El libro de Emmanuel", cap. 8. p. 85.

Ustedes pueden crear por cuenta propia un jardín del deleite, si creen en él. Podrán igualmente crear por sí mismos un sufrimiento intolerable si consideran que es necesario. "El libro de Emmanuel", cap. 8, p. 84.

Cuando quiera que los invada el sentimiento de que no tienen alternativas, los insto a detenerlo todo... ¡allí mismo! Eso no es más que un truco que ustedes mismos se hacen para evitar asumir la responsabilidad y, por lo tanto, el regocijo de la vida. "El libro de Emmanuel", cap. 8, p. 82-83.

La vida es pesada solamente cuando no se tiene esa identificación con la alegría eterna. La gran solemnidad no aporta contribución alguna. Ustedes necesitan reír. Necesitan jugar cada uno a su manera. Alegría es aprender, tener la experiencia sin dolor. "El libro de Emmanuel", p. 81.

Si no pueden ustedes tolerar la delicia de lo humano, ¿cómo podrán soportar la Delicia de la Unicidad Eterna? Si se vive la vida con cuidado y atención, esta les dará el alimento y la riqueza que tanto añoran. "El libro de Emmanuel", cap. 8, p. 80.

Creación, alegría, abundancia, realización. Regocijo, alegría, gozo, es ver cómo se levanta el Dios dentro de ti, cómo se sacude... y cómo comienza a sonreír. En tu alegría tú estás celebrando a Dios, tú estás celebrando el Festín de la Vida. "El libro de Emmanuel", cap. 8, p. 79.

Responsabilidad y culpa son dos cosas distintas. La culpa es algo negativo e impráctico. La responsabilidad es algo maduro y te sacará de la selva, llevándote a la Luz. Soberbia, ira, miedo, duda...etc... Confíen en la vida amigos míos. Por más que a veces la vida nos lleva por caminos equívocos, dicho viaje es necesario. "El libro de Emmanuel", cap. 7, p. 67 a 78.

Caigan en la cuenta de que en esta Tierra solo puede existir la perfección relativa. Caigan en la cuenta también de que ustedes no necesitan ser perfectos para ser amados. Ámense los unos a los otros con sus imperfecciones, cariñosa y totalmente.

La responsabilidad suya consiste en oír a su propio corazón. Esta es una aula para aprender cómo amar lo que aparenta ser absolutamente in-amable.

Muchos en el mundo humano se deleitarían con el castigo al que sería sujeto un asesino al entrar en la otra vida, a fin de pagar por su violencia. Sin embargo ustedes no pueden juzgar eso, solo pueden bendecir, orar, abrirse, confiar y agradecer.

He aquí una llave para todos: vean, hasta en el más despreciable, la Cualidad Divina que se ha distorsionado. La violencia puede ser transformada dentro de uno mismo y, por ende, dentro del mundo.

Ustedes utilizan la dualidad a fin de que los ayude a encontrar la unidad, para no perderse en ella. Aunque puedan vivir en dicha creación, no son ustedes sus prisioneros. Esta no es su cárcel, sino su salón de clase.

En todo el universo, no hay más que Un Poder, Una Luz, Una Sustancia, Una Inteligencia –YO SOY– el Poder del Altísimo anunciando Su Autoridad en el foco de actividad de ustedes en la octava física.

Ustedes experimentan según lo que creen. En el mismo mundo en que ustedes existen, tanto lo positivo como lo negativo son producto de lo que ustedes sostienen como verdad.

Nada existe en el mundo humano que no sea Divino. La Unicidad del Amor de Dios rodea la distorsión y la dualidad de la Tierra. El mal es tan solo ignorancia de la Voluntad y de la Ley Divinas.

Ustedes son como niños que, estando en un cuarto iluminado, cierran los ojos y dicen que le tienen miedo a la oscuridad.

Ustedes no entrarían en un jardín de infancia denunciando a todos los niños allí presentes como almas perdidas, porque no saben leer ni escribir. La oscuridad necesita ser considerada como una oportunidad de amar, no como una amenaza.

Hacer conciencia de que el llamado a la Presencia YO SOY no conoce de interrupción alguna para realizar el requerimiento pedido, pero mantener la armonía en los sentimientos es requisito fundamental para que se dé la manifestación.

De toda la ansiedad y angustia por la que ustedes han pasado, en realidad, ¡ni siquiera la mas mínima parte era realmente necesaria! ( Gran Director Divino). Deben oír lo que se dice y, esencialmente, permitir que su corazón, y su propia sabiduría interior, su propia intuición, sean la autoridad final. Recuerden amados, que ustedes son Dios, confíen en esa parte de ustedes (Emmanuel).

De corazón a corazón, ojalá me crean cuando les digo que lo más importante en toda su encarnación es mantener sus sentimientos armonizados, ya que sin eso ustedes solo podrán tener un fragmento de esta actividad (Gran Director Divino). Podemos llevarlos a un entendimiento más profundo. Mas allá de esto ustedes tienen que caminar toda la distancia, paso por paso (Emmanuel).