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Entrevista en La FM con Víctor Tamayo, Gobernador de Risaralda, sobre derrumbe en Risaralda.
El escritor nos presenta 'Vengo de ese miedo', en Tusquets. Un libro de terror, suspense, testimonial y también luminoso. La historia de un infierno, un padre maltratador en la España del tardofranquismo.
Ser padre divorciado no es fácil, sobre todo si tienes que volver a ligar con chicas cuando has alcanzado la mediana edad y no tienes tanto tiempo para salir y divertirte. Jesús Manzano lo sabe, pero no dejará de intentarlo.
“¡Creo que Dios me ama!” Es un acto de fe en el amor de Dios que debemos meditar y repetir siempre que nos encontremos con la contradicción, con el sufrimiento y la cruz. Creo que Dios me ama y, porque me ama, quiere que yo sea feliz, y porque quiere que yo sea feliz, me envía esto, que no me gusta, que me duele, una pequeña molestia o una gran contrariedad. Creo, Señor, que me amas. «… mi Corazón te ama sin cesar. ¿Verdad que no te das cuenta de ello? ¿Verdad que te extraña este amor de tu Dios? Aunque le conozcas mal, procura pensar en él con más frecuencia y que te sea grato. Y yo Me sentiré tan feliz. Parece como si vuestro Dios no os amase más que para daros alegría. Sin embargo, ¡hay tantos que se niegan a creerlo!… Esa era mi angustia en el Huerto de los Olivos: sufro hasta la muerte porque los amo. Pero ellos ni siquiera soportarán que se les diga… Hija mía, cree sencillamente en el amor. Dale las gracias al Amor. Ama al Amor» (Gabrielle Bossis). El amor ilusionado de Cristo y la respuesta indiferente de tantos hombres parece la historia de una gran decepción. Sufre por nosotros porque nos ama, y desea hacernos felices para siempre, pero muchos ni siquiera soportan que se les diga… O bien porque han rechazado a Dios y adoran los ídolos de su egoísmo y su orgullo, o bien porque no han sabido aceptar un sufrimiento, no han querido creer en el amor de Dios y se han rebotado contra Él, o bien… Cristo es el gran amigo defraudado por los que deberían ser sus amigos y estar eternamente agradecidos. Señor, cuando reflexiono sobre esta triste realidad, brota en mi corazón el deseo de compensar tanto desamor, aun sabiendo que también yo soy capaz de cualquier traición. Quiero pensar con más frecuencia en tu amor, imaginar que estoy contigo en el Huerto de los Olivos, y veo tu rostro ensangrentado por el dolor que te producen mis pecados, y escucho tus palabras de unión total con la voluntad del Padre: «Pero no se haga mi voluntad, sino la tuya» (Lc 22, 42). Y todo eso porque quieres hacerme feliz. Ayúdame a responder hoy a tu amor, en mi oración de hoy, en mis deberes de hoy, en el trato con los demás a lo largo del día de hoy.
Ser padre divorciado no es fácil, sobre todo si tienes que volver a ligar con chicas cuando has alcanzado la mediana edad y no tienes tanto tiempo para salir y divertirte. Jesús Manzano lo sabe, pero no dejará de intentarlo.
QFELV - 05/May/20 - 23:00
¿ Quién es Jesús? ¿Cuál es su relación con el Padre? Pero, ¿cuál es su condición en su divinidad? ¿Cuál era su relación con Dios antes de su encarnación? ¿Cuál es su identidad? ¿Quién es él? ¿Quién es Jesús? El testimonio de la Biblia es claro, pristino y univoco. Vea en esta segunda presentación las evidencias bíblicas que nos muestran que Jesús verdaderamente es el Hijo de Dios. Ver presentación en Youtube: https://youtu.be/l6wY336S_Uo Si quieres saber más sobre la enseñanza respecto del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, descarga Estudio sobre la Divinidad en el siguiente link: https://www.queteconozcan.org/wp-cont... Presentado por Daniel Bernhardt Imágenes cortesía de pixabay.com y wikipedia.org. Ponte en contacto: https://www.queteconozcan.org/contacto/ Suscribete al podcast: https://anchor.fm/que-te-conozcan Copyright Disclaimer Under Section 107 of the Copyright Act 1976, allowance is made for fair use for purposes such as criticism, comment, news reporting, teaching, scholarship, and research.
¿Quién es Jesús? ¿Cuál es su relación con el Padre? Pero, ¿cuál es su condición en su divinidad? ¿Cuál era su relación con Dios antes de su encarnación? ¿Cuál es su identidad? ¿Quién es él? ¿Quién es Jesús? El testimonio de la Biblia es claro, pristino y univoco. Vea en esta primera presentación las evidencias bíblicas que nos muestran que Jesús verdaderamente es el Hijo de Dios. Vea presentación en Youtube: https://youtu.be/lfls_BFgZDo Si quieres saber más sobre la enseñanza respecto del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, descarga Estudio sobre la Divinidad en el siguiente link: https://www.queteconozcan.org/wp-content/uploads/2019/05/Estudio-sobre-la-Divinidad.pdf Presentado por Daniel Bernhardt Imágenes cortesía de pixabay.com y wikipedia.org. Ponte en contacto: https://www.queteconozcan.org/contacto/ Suscribete al podcast: https://anchor.fm/que-te-conozcan Copyright Disclaimer Under Section 107 of the Copyright Act 1976, allowance is made for fair use for purposes such as criticism, comment, news reporting, teaching, scholarship, and research.
Lucas 2, 41-52 Los padres de Jesús solían ir cada año a Jerusalén por las fiestas de Pascua. Cuando Jesús cumplió doce años, subieron a la fiesta según la costumbre, y cuando terminó, se volvieron; pero el niño Jesús se quedó en Jerusalén, sin que lo supieran sus padres. Estos, creyendo que estaba en la caravana, hicieron una jornada y se pusieron a buscarlo entre los parientes y conocidos; al no encontrarlo, se volvieron a Jerusalén en su busca. A los tres días, lo encontraron en el templo, sentado en medio de los maestros, escuchándolos y haciéndoles preguntas: todos los que le oían, quedaban asombrados de su talento y de las respuestas que daba. Al verlo, se quedaron atónitos, y le dijo su madre: –Hijo, ¿por qué nos has tratado así? Mira que tu padre y yo te buscábamos angustiados. El les contestó: –¿Por qué me buscabais? ¿No sabíais que yo debía estar en la casa de mi Padre? Pero ellos no comprendieron lo que quería decir. El bajó con ellos a Nazaret y siguió bajo su autoridad. Su madre conservaba todo esto en su corazón. Y Jesús iba creciendo en sabiduría, en estatura y en gracia ante Dios y los hombres
SEH Benito Cerati 28/09/2018
SEH Benito Cerati 28/09/2018
Lectura del santo evangelio según san Lucas (2,41-51):Cuando Jesús cumplió doce años, subieron a la fiesta según la costumbre y, cuando terminó, se volvieron; pero el niño Jesús se quedó en Jerusalén sin que lo supieran sus padres. Éstos, creyendo que estaba en la caravana, hicieron una jornada y se pusieron a buscarlo entre los parientes y conocidos; al no encontrarlo, se volvieron a Jerusalén en su busca. A los tres días, lo encontraron en el templo, sentado en medio de los maestros, escuchándolos y haciéndoles preguntas; todos los que le oían quedaban asombrados de su talento y de las respuestas que daba.Al verlo, se quedaron atónitos, y le dijo su madre: «Hijo, ¿por qué nos has tratado así? Mira que tu padre y yo te buscábamos angustiados.»Él les contestó: «¿Por qué me buscabais? ¿No sabíais que yo debía estar en la casa de mi Padre?»Pero ellos no comprendieron lo que quería decir. Él bajó con ellos a Nazaret y siguió bajo su autoridad. Su madre conservaba todo esto en su corazón. ---------ACOGIDOS EN EL CORAZÓN DE MARIA QUE ES LA COMUNIDAD DONDE APRENDER LA MANSEDUMBRE Y LA HUMILDAD DEL CORAZÓN DE CRISTOAquella vez, para la Santa Familia de Nazaret, el viaje a Jerusalén fue especial: se fue para celebrar el Bar Mitswá de Jesús que, como cada chico hebreo, llegado a los doce años, tuvo que ir al Templo para convertirse en hijo de la Ley. Para Maria se trató de un nuevo parto: su Hijo estava a punto de entrar en el mundo de los adultos, y Ella tambien estava allí a acompañarlo, como aquella noche a Belén. Y no es casualidad que se trata de los dos momentos en los que el evangelista Lucas afirma que "su madre guardaba todas este cosas en su corazón." A Belén Maria ha dado a luz su Hijo en el mundo, al Templo lo tenia que parir a la obediencia que acoge y se somete a la voluntad de Dios expresada en la Torah. La "angustia" de Maria inicia aquí, en su corazón inmaculado que empieza a ser traspasado por la espada; como aquello de cada madre frente al futuro adulto de los hijos. Junta a Josè lo llevaron a Jerusalén "según la costumbre", pero seguramente Maria intuyó que el de Jesús no fue un Bar Mitswà como todos los otros. Sabia de ser la Madre del Mesías. Y en efecto, sobre el camino de la vuelta ocurre de nuevo un imprevisto misterioso y doloroso: aquel Hijo se les habia escapado, "sin que" se enteraran. Maria tuvo todavía que aprender, porque también esto hace un "corazón inmaculado." Lo "busca" en la carne, en los afectos, en las costumbres, en los mapas de la existencia dibujados fatigosamente con la experiencia, aquellos con los que todos intentan orientarse entre los acontecimientos y las personas; pero no era allí que tuvo que "buscarlo" y, en efecto, no habiendolo encontrado, vuelve en busca de Él a Jerusalén. Es un primer paso, aceptar de no haber entendido y volver atrás, porque la fe es un camino de liberación continua de si mismo y Maria, para acompañar Jesús al Bar Mitswà de la Cruz, para ser Madre de la Iglesia y Madre nuestra, tuvo que caminar dócil en la voluntad de Dios, custodiando en el corazón cada cosa que la desvistió de las certezas humanas, para entrar en la noche que señala el paso al día de la resurrección.Después de "tres días", en efecto, encontraron Jesús en el Templo, sentado entre los Doctores. Y todos los que lo oyan estavan llenos de estupor por su inteligencia y sus respuestas. Se trata de una profecía de lo que, después de la resurrección Cristo habría cumplido en su Iglesia durante los siglos, hasta a los confines de la tierra: colmada de la "inteligencia" de la Cruz, ofrecerá la "respuesta" de la resurrección a la pregunta de cada hombre frente al dolor y a la muerte. Maria llegó justo allí, dentro de aquella profecía. Habia descendido en la carne para buscar a su Hijo, y allí ha encontrado en la fe el Mesías Hijo de Dios que tiene que ocuparse de las cosas de su Padre. Y Maria calla. Su corazón inmaculado que acepta de no entender. Es la fe de Madre que se hace adulta abrazando la Palabra para custodiar y meditar en el corazón lo que anuncia. Sin esta fe ninguna Bar Mitswà del Hijo sería auténtica. En la fe Maria deja ir su Hijo, en la espera humilde que sea Dios, en su corazón inmaculado, a explicarselo, si, como y cuando El quiera.¿Cuánta Bar Mitswà hemos celebrado con nuestros hijos? Ninguna, probablemente, y no porque no somos hebreos. ¿Cuántas veces, es decir, nos hemos parado delante de su misterio? Hay actitudes, palabras, gestos incomprensibles, sobre todo pecados inaceptables. ¿Has discutido con él? Si es sí, significa que has buscado "en la caravana" de la carne las respuestas, también cuando has creído encontrarle en la religión, porque, a diferencia de Maria, tu relación con tu hijo es viciada al origen por la mentira del demonio. Dudas de Dios, y por esto el corazón no está abierto a la esperanza del Cielo capaz de poner la relación sobre el plan divino. Te falta la fe adulta que, también frente al pecado inaceptable, conoce la esperanza; quieres a tu hijo en la carne, no con el amor que surge de un "corazón inmaculado." Pero nos es imposible cambiar nuestro corazón. Ciertamente, pero no lo es para Dios, y por su Iglesia, en la que podemos renacer con un "corazón inmaculado." Un corazón capaz de acompañar los hijos a sus Bar Mitswà, a acoger la Palabra para que se la luz que ilumine cada paso; y esto no se puede hacer si ella no lo es para nosotros. También nuestros hijos, en efecto, para ocuparse de las cosas de su Padre necesitan como Jesús de una madre que se lo enseñas. Necesitan de padres quepo primeros sean sometidos a su Dios, como Jesús propio en la sumisión de Maria a la voluntad de Dios ha aprendido a obedecerle al Torah "volver a casa" para "estarles le sometido" como a Dios; ¿quieres que tu hijo te obedezca? Sométete a Dios, y verás que antes o después reconocerá en las tuyas las Palabras de Dios autentificate de tu vida. Nuestros hijos necesitan padres que, antes de ellos, han aprendido a la escuela de Maria a pensar, discernir y querer con un "corazón inmaculado" gestado, nato y crecido en la fe en el regazo fecundo de la Iglesia. Entonces sabremos ser salir de la "caravana" para estar delante de nuestros hijos como Maria delante del suyo; porque quererlos como Usted ha querido a su Hijo significa querer y servir ante todo la voluntad de Dios en ellos. Por ti y por mí significa querer Dios más de tu hijo, de tu hijo en la carne, de tus esperanzas y de tus proyectos, de todo lo que se aprende y se vive "en la caravana, entre parientes y conocidos." Porque si eres un cristiano, eres hijo del Virgo Maria, y también a ti ha sido anunciada la misma profecía de Simeón: también tu hijo tiene una elección especial, será una señal de contradicción, y por este, y no por otro, también hoy tu corazón será traspasado por una espada. Aprende de Maria, entonces, y te percatarás que necesitan tu fe, sólo de aquél. A todo evento se esconde, en efecto, la mano de Dios que conduce a tu hijo, con paciencia y fidelidad hasta al cumplimiento de su vocación.
Domingo 30 de Diciembre del 2012 Primera lectura Lectura del libro del Eclesiástico (3,2-6.12-14): Dios hace al padre más respetable que a los hijos y afirma la autoridad de la madre sobre su prole. El que honra a su padre expía sus pecados, el que respeta a su madre acumula tesoros; el que honra a su padre se alegrará de sus hijos y, cuando rece, será escuchado; el que respeta a su padre tendrá larga vida, al que honra a su madre el Señor lo escucha. Hijo mío, sé constante en honrar a tu padre, no lo abandones mientras vivas; aunque chochee, ten indulgencia, no lo abochornes mientras vivas. La limosna del padre no se olvidará, será tenida en cuenta para pagar tus pecados. Palabra de Dios Salmo Sal 127,1-2.3.4-5 R/. Dichosos los que temen al Señor y siguen sus caminos Dichoso el que teme al Señor y sigue sus caminos. Comerás del fruto de tu trabajo, serás dichoso, te irá bien. R/. Tu mujer, como parra fecunda, en medio de tu casa; tus hijos, como renuevos de olivo, alrededor de tu mesa. R/. Ésta es la bendición del hombre que teme al Señor. Que el Señor te bendiga desde Sión, que veas la prosperidad de Jerusalén todos los días de tu vida. R/. Segunda lectura Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Colosenses (3,12-21): Como elegidos de Dios, santos y amados, vestíos de la misericordia entrañable, bondad, humildad, dulzura, comprensión. Sobrellevaos mutuamente y perdonaos, cuando alguno tenga quejas contra otro. El Señor os ha perdonado: haced vosotros lo mismo. Y por encima de todo esto, el amor, que es el ceñidor de la unidad consumada. Que la paz de Cristo actúe de árbitro en vuestro corazón; a ella habéis sido convocados, en un solo cuerpo. Y sed agradecidos. La palabra de Cristo habite entre vosotros en toda su riqueza; enseñaos unos a otros con toda sabiduría; corregíos mutuamente. Cantad a Dios, dadle gracias de corazón, con salmos, himnos y cánticos inspirados. Y, todo lo que de palabra o de obra realicéis, sea todo en nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él. Mujeres, vivid bajo la autoridad de vuestros maridos, como conviene en el Señor. Maridos, amad a vuestras mujeres, y no seáis ásperos con ellas. Hijos, obedeced a vuestros padres en todo, que eso le gusta al Señor. Padres, no exasperéis a vuestros hijos, no sea que pierdan los ánimos. Palabra de Dios Evangelio Lectura del santo evangelio según san Lucas (2,41-52) Los padres de Jesús solían ir cada año a Jerusalén por las fiestas de Pascua. Cuando Jesús cumplió doce años, subieron a la fiesta según la costumbre y, cuando terminó, se volvieron; pero el niño Jesús se quedó en Jerusalén, sin que lo supieran sus padres. Éstos, creyendo que estaba en la caravana, hicieron una jornada y se pusieron a buscarlo entre los parientes y conocidos; al no encontrarlo, se volvieron a Jerusalén en su busca. A los tres días, lo encontraron en el templo, sentado en medio de los maestros, escuchándolos y haciéndoles preguntas; todos los que le oían quedaban asombrados de su talento y de las respuestas que daba. Al verlo, se quedaron atónitos, y le dijo su madre: «Hijo, ¿por qué nos has tratado así? Mira que tu padre y yo te buscábamos angustiados.» Él les contestó: « ¿Por qué me buscabais? ¿No sabíais que yo debía estar en la casa de mi Padre?» Pero ellos no comprendieron lo que quería decir. Él bajó con ellos a Nazaret y siguió bajo su autoridad. Su madre conservaba todo esto en su corazón. Y Jesús iba creciendo en sabiduría, en estatura y en gracia ante Dios y los hombres. Palabra del Señor