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Al norte de Lima, la costa está gravemente impactada por la marea negra que provocó la petrolera Repsol. Cinco meses después, la catástrofe ecológica ha salido de los titulares internacionales pero los habitantes y pescadores de la región dicen sentirse abandonados, entre indemnizaciones insuficientes y falta de reacción del Estado para reparar una contaminación que podría durar décadas. “Triste, da pena, que los pescaditos, bastantes, muertos, cangrejos, mariscos, patillos, muertos en la playa… Ahorita no hay peces”, se lamenta Agripino Quispe mientras mira el mar en el que ha pescado desde que tenía 14 años. Ahora tiene 67 y teme no poder volver a ejercer su oficio. Está sentado en la orilla de la playa de Aucallama, a unos 70 kilómetros al norte de Lima, y sabe que ya no puede ingresar a ese mar debido al derrame de petróleo de enero pasado. La marea negra fue la consecuencia de la rotura de las tuberías por las que la empresa española Repsol descargaba el crudo desde un buque hacia la refinería La Pampilla, en la costa limeña. “Ninguna ayuda” Varios kilómetros al sur de Aucallama, Miguel Núñez, presidente de la Asociación de Pescadores de la playa Bahía Blanca, vive el mismo drama, ya no puede vivir de la pesca. “No sé si llorar, no sé si pedir a gritos al cielo, cuando veo un desastre natural que arruinó a nuestros seres vivos que hay dentro del agua. Estamos al aire, cero, no tenemos nada de ingreso. Ninguna ayuda, ni del Estado, ni de la empresa”, comenta. Lea también: Perú declara la emergencia ambiental por el derrame de petróleo provocado por tsunami Fueron 11.900 barriles de petróleo los que se derramaron al mar, lo que en un inicio la empresa intentó minimizar dando una cifra menor. Por la lentitud y poca eficacia de la petrolera para contener el derrame, y la debilidad del Estado para responder al desastre, la marea negra se extendió a 11.000 hectáreas de mar y 10.000 hectáreas de playas. De acuerdo a las autoridades peruanas, cerca de medio centenar de playas y dos áreas naturales protegidas han sido afectadas. El derrame de crudo ocurrió al inicio de la temporada de verano, que es temporada alta para la pesca artesanal y para los negocios relacionados a los meses de playa, como restaurantes y otros. Son unos 2.800 pescadores artesanales, la mayoría pescadores de orilla, los que se han quedado sin poder pescar, es decir, sin trabajo y sin ingresos. Y 3.200 comerciantes fueron afectados. “Están jugando con el pueblo” “Todo lo que ha pasado, esto es un ecocidio. Nos han dañado el mar, no podemos trabajar, no podemos ni siquiera venir para comer, no es como en la pandemia, en la pandemia no se podía vender, pero sacábamos pescado para comer. Nos han afectado al cien por ciento. Tenemos hijos y tienen que estudiar, no se les puede comprar los cuadernos, el material necesario para que tengan educación. Están jugando con el pueblo, están jugando con la comunidad que ha sido afectada”, dice Luis Díaz, nieto de pescadores y pescador desde niño, ahora presidente de la Asociación de Pescadores de Aucallama, creada luego del derrame para responder a la crisis. Lea también: Derrame de petróleo en Perú: ‘Nada de dónde nosotros pescábamos tiene vida' Otro pescador, Julián Chávez, con 35 años viviendo del mar, señala que “el impacto que llegó acá a la playa Aucallama ha sido un desastre. No hay pescado, ha muerto todo, todo lo que es marisco, cangrejo, pulpo, no hay. ¡Cuándo va a limpiar! Nosotros tenemos hijos que mantener, y ahora estamos como locos. El Estado nunca ha venido”. Cerca de 50 kilómetros al sur de Aucallama vive Mercedes Pando, que es pescadora en las playas de Ventanilla, donde se originó el derrame. Según ella, “el derrame para nosotros ha sido algo que nos ha atado de brazos. Ahorita prácticamente estamos en la nada. Cómo podemos trabajar nosotros, no hay manera… No tenemos ningún apoyo”. La situación de los pescadores es muy crítica, denuncia asimismo Juan Narváez: “No podemos vivir ya de la pesca y sustentar a nuestro hogar, nuestros hijos, nuestra familia, solamente vivimos de bolsitas de víveres, de ayuda social”. Ollas comunes Las ollas comunes, abastecidas con donaciones, es la estrategia de sobrevivencia de las distintas comunidades que por el derrame de petróleo se han quedado sin trabajo y sin ingresos. Lea también: Derrame de petróleo en Perú: crece la desolación al norte de Lima Clara Yacuachaqui, que se dedicaba a vender pescado, es la presidenta de una de estas ollas comunes, que alimenta diariamente a más de 150 personas. “Estamos pidiendo donaciones, gracias a Dios nos dan donaciones de un lado, de otro lado. Estamos cocinando con leña. Normalmente estamos comiendo casi diario menestras, arroz. No comemos ni pollo, ni carne, porque no tenemos. No tenemos donaciones de verduras. Es una decepción tremenda que no tengamos apoyo del Estado”, explica. Algún trabajo en la agricultura, limpiando casas, el reciclaje de basura, en el transporte público informal, son empleos que ahora los pescadores realizan eventualmente para sobrevivir. Una contaminación oculta De acuerdo a un estudio de Naciones Unidas, con una tecnología adecuada para la remediación de los daños causados, algo que no se está haciendo, tomará entre seis y diez años para que se recupere el ecosistema marino y los pescadores puedan volver a pescar como antes. Lea también: El derrame de petróleo de Repsol deja un 'daño irreparable' en una reserva marítima A fines de abril, Repsol emitió un comunicado diciendo que ya había terminado de limpiar las playas. Pobladores de estas zonas y especialistas desmienten esa versión de la empresa. “Adentro en el suelo marino está lleno de petróleo crudo, está asentado como una brea, eso ha matado a toda la especie. Cómo dice Repsol que ya limpió. Eso es una gran mentira”, denuncia, visiblemente indignado, Teófilo Andazabal, que vive en la zona afectada de Ventanilla. Cuando se recorre las playas donde ocurrió el derrame de petróleo ya no se ve la marea negra que cubría extensas zonas de mar, pero el problema grave de contaminación está oculto en el suelo marino. Alejandro Huaroto es pescador y buzo. Ha buceado la zona del derrame y ha comprobado que el crudo está asentado en el fondo del mar: “Superficialmente en varios lugares aparenta que está limpio, pero hay zonas que incluso a dos metros de profundidad, dos metros, tres metros y medio, se ha asentado en el suelo marino un sedimento de color negro, que cuando lo hemos sacado a flote ha tenido olor a químicos, bien fuerte, y bastante, no poco, bastante. Hasta el momento no hemos visto directamente nosotros una limpieza profunda al fondo del mar, en el suelo marino. Todo lo que es pesca de rivera ha desaparecido. El círculo de la muerte sigue, sigue avanzando”, lamenta. Desconfianza hacia Repsol Autoridades, especialistas y pobladores cuestionan las acciones realizadas por Repsol para contener el derrame y limpiar las zonas afectadas. “El trabajo de la empresa nosotros lo hemos visto deficiente desde el inicio. No es que haya hecho un trabajo de limpieza integral. No tenemos conocimiento que esté realizando trabajos propiamente de remediación”, explica Miriam Alegría, gerente general del Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA), que ha multado a Repsol por una serie de deficiencias e incumplimientos por 2 millones 300 mil soles, unos 600 mil dólares. Alegría señala que las sanciones podrían elevarse hasta unos 23 millones de dólares. Lea también: Activistas peruanos se movilizan para reclamar a Repsol la responsabilidad del derrame Desde la sociedad civil, Alejandro Chirinos, especialista en gestión marino-costera y director ejecutivo de la ONG CooperAcción, que trabaja en las zonas afectadas, analiza la respuesta de la petrolera al derrame que causó un desastre ecológico: “La respuesta de la empresa en todo momento ha sido de cómo librarse de sus responsabilidades. En todo momento la empresa ha tenido una actitud irresponsable”, afirma. “La empresa lo que ha hecho es utilizar metodología rudimentaria, cavar huecos en las zonas de playa, levantan la arena que está con petróleo y la echan dentro de estos pozos y la tapan. Esa metodología fue la que se empleó el primer mes de afectación, luego lo que ha hecho la empresa al ver que no funcionaba esa metodología, porque estaba tapando y OEFA le llamó la atención, es mezclar la arena limpia con la arena contaminada para disipar, expandir, y de esa manera según su lógica hacer que el crudo se diluya, pero lo que está haciendo la empresa con esa metodología, totalmente inadecuada, es recontaminar. No vemos hasta ahora planes de descontaminación y remediación, lo único que hemos visto son estrategias de limpieza, que además no sirven. Si uno va a las playas, como estamos aquí ahorita en Chacrimar, va a ver que el mar está superficialmente, entre comillas, en ‘condiciones normales', pero el problema está en el fondo marino”, detalla Chirinos. “Estado totalmente ineficiente” En la extensa playa de Chacrimar hay más de 20 pequeños restaurantes de comida marina alineados frente a la orilla, que en verano solían estar abarrotados de bañistas y que desde el verano de este año están cerrados. Desde el derrame de petróleo es una playa fantasma. También se cuestiona el rol que viene cumpliendo el Estado. La excongresista María Elena Foronda, que trabaja con pescadores artesanales, se refiere al tema: “Ha sido un Estado totalmente ineficiente, para mí inexistente. Una institucionalidad ambiental débil, un ministro que estaba pintado en la pared, porque no tuvo la capacidad de articular una respuesta mucho más firme”. Miriam Alegría, de la autoridad fiscalizadora ambiental, admite que una actuación desarticulada de las distintas entidades públicas ha impedido una adecuada respuesta integral a este derrame de petróleo: “Desde OEFA hemos tenido una respuesta rápida y oportuna, con las acciones legales que hemos iniciado rápidamente imponiendo las multas coercitivas. Sé que la solución del problema va más allá de la propia fiscalización. Yo entiendo que este es un problema integral que involucra la competencia y la intervención de diferentes entidades, la normativa ahí tiene que mejorarse para que la respuesta del Estado en conjunto se dé de manera rápida y efectiva. Por esa razón entiendo que no se tiene una solución concreta para poder atender a las poblaciones que han sido afectadas”. Indemnización insuficiente Las protestas y movilizaciones de los afectados presionaron a la empresa y al Estado, que acordaron darles una indemnización de 3.000 soles, unos 800 dólares, un acuerdo pactado a espalda de ellos. Ese monto, aseguran los pescadores, no cubre ni la mitad de lo que han dejado de ganar en un solo mes por no poder pescar. Las protestas siguieron y a fines de abril se anunció que se duplicaría esa cifra. Acosados por la falta de ingresos, unos han aceptado a pesar de considerar insuficiente el monto, otros se han negado y siguen reclamando. “Lo tomamos como una ofensa, es como si nos estuvieran escupiendo y tratando de pisar la cara, diciéndonos ya tomen esto y cállense, no molesten más. No, no es justo. Nosotros realmente estamos indignados, estamos muy molestos”, denuncia, contundente, Francisco Bedón. Lea también: Repsol reclama a buque italiano por derrame petrolero en Perú Los pescadores que se han negado a pactar en las condiciones impuestas por la empresa han decidido entablar demandas ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos y tribunales españoles. “Están demandando la respuesta desordenada del Estado, que el Estado peruano no ha cautelado la defensa de sus derechos. Además demandando a la empresa remediar ambientalmente las zonas de pesca afectadas y por otro lado indemnizarlos por la afectación económica”, explica Alejandro Chirinos, de CooperAcción, que asesora a un grupo de pescadores. Teófilo Andazabal, que tiene cerca de dos décadas vivienda de la pesca artesanal de orilla, comenta sobre la indemnización que esperan obtener: “Estamos pidiendo que Repsol nos indemnice todo el tiempo que estamos perdiendo de trabajar y el tiempo que vamos a dejar de trabajar, porque simplemente esto de acá de la playa no es para un año ni dos años, tiene como para diez años para recuperarse”. Los pescadores y comerciantes afectados se sienten solos, no ven una solución cercana, pero no renuncian a su lucha por lo que consideran justo: “No tenemos una esperanza a corto plazo para decir que vamos a volver rápidamente a nuestra zona de labor”, se preocupa Juan Arellan. Por su parte, Luis Díaz asegura que no se resignarán: “Vamos a lucharla hasta que la indemnización sea justa y no nos den migajas”. Contactada por RFI para pedirle su versión ante las críticas que se le hacen, la empresa Repsol se negó a responder.
Más de 30 días han transcurrido desde que se dio a conocer el desastre ecológico del derrame de petróleo en el mar de Ventanilla, cuando la empresa Repsol descargaba crudo en La Pampilla, contaminando una gran extensión del mar peruano. Para conocer qué ha pasado desde esa fecha hoy, cuáles han sido las acciones de remediación y qué sanciones recibirá la empresa, Rocío Pereyra conversa con el ministro de Ambiente Modesto Montoya en una nueva edición de #MesaPolítica. --- Send in a voice message: https://anchor.fm/ntvpodcast/message
El secretario de estado de España para Iberoamérica y el Caribe, Juan Fernández Trigo, evitó comentar las medidas que aplica el gobierno peruano contra REPSOL, como la paralización de las operaciones de la refinería La Pampilla.
El secretario de estado de España para Iberoamérica y el Caribe, Juan Fernández Trigo, evitó comentar las medidas que aplica el gobierno peruano contra REPSOL, como la paralización de las operaciones de la refinería La Pampilla.
El Gobierno dispuso la paralización de actividades de carga y descarga de La Pampilla para prevenir más derrames de petroleo, ¿Qué implica esta decisión? ¿Cuál es el impacto económico para los hogares peruanos?
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Debate 316 - ¡Se va Mirtha Vásquez!En un nuevo arribo de Lapadula, la premier renuncia por crisis en el ministerio del Interior. El Minam paraliza La Pampilla. Y el PJ absuelve a Guillermo Bermejo.Síguenos en Sudaca.pewww.facebook.com/sudacaperu.petwitter.com/SudacaPeruwww.linkedin.com/company/suda...www.instagram.com/sudacaperu/Lima – Perú#Sudaca #Debate #AlexandraAmes #DavidRivera #PaoloBenza
Peruvian prosecutors are seeking to bar the president and three other executives of Spanish oil firm Repsol SA's local refinery from leaving Peru for 18 months while an investigation into an immense oil leak is conducted. The government said that Repsol spilled some 6,000 barrels of oil into the ocean near the La Pampilla refinery on January 15, after unusual waves were triggered by a volcanic eruption near Tonga. Peruvian President Pedro Castillo called it the biggest ecological disaster to affect the South American nation in recent years, as more than 180 hectares of beach and 713 hectares of the sea were affected.
Mañana se cumple dos semanas del derrame de petróleo en la refineria La Pampilla, presuntamente por irregularidades de Repsol. Precisamente, han salido a la luz, información que implicaría de responsabilidad a la empresa gasolinera, al punto que hay un pedido fiscal en su contra. ¿Qué está pasando con los directivos de la compañía? ¿Cuánto ha aumentado el daño ambiental?See omnystudio.com/listener for privacy information.
Esta semana centenares de ambientalistas protestaron en Perú y España frente a las sedes de la petrolera Repsol. Piden respuestas de la empresa por el grave derrame de crudo que ha contaminado las costas peruanas y que califican de ecocidio. El derrame de unos 6.000 barriles de crudo, calificado como "desastre ecológico" por el gobierno peruano, ocurrió mientras el buque tanque "Mare Doricum", de bandera italiana, descargaba en la refinería de La Pampilla en Ventanilla, 30 km al norte de Lima. Repsol atribuyó el accidente al oleaje causado por la erupción volcánica en Tonga. El buque ahora está fondeado, con prohibición de zarpar, frente al puerto del Callao, contiguo a Lima, mientras cientos de brigadistas limpian el crudo en una veintena de playas. Cacerolazos y marchas se han organizado a lo largo de la semana en Perú. Varias ONG, como Alianza para los Océanos Sostenibles (SOA por sus siglas en inglés), reclaman que la empresa Repsol tome responsabilidad en las playas perjudicadas por el derrame de crudo. Impacto en la naturaleza y los humanos “Hemos tenido pérdidas de distintas especies de ave, como cormoranes, piqueros, pelicanos… Este petróleo también se alimenta en el fondo causando así una pérdida en los ciclos reproductivos de las especies, como los peces o las futuras generaciones de cangrejos”, subrayaClaudia Jacobo, coordinadora de Relaciones Institucionales de la Alianza para los Océanos Sostenibles (SOA) en Perú. Los ambientalistas se han movilizado para intentar brindar asistencia a las comunidades aledañas, porque el impacto humano también es visible: “Afecta a las personas que fileteen el pescado, a las personas que hacen el traslado de producto, y también en las mismas ventas. Esto sumado al movimiento turístico en las playas justo en la época del verano… Es sumamente grave porque está dejando a miles de familias sin trabajo”, detalla Claudia Jacobo. Además, “estas playas tienen contaminación también en el aire porque el petróleo mismo se evapora, lo cual genera daños a la salud pública”, enfatiza. Medidas insuficientes Repsol publicó comunicados insistiendo en su compromiso para remediar los efectos del accidente en el distrito de Ventanilla. Algo que no convence las asociaciones. “La empresa misma no está tomando las medidas correspondientes. Los primeros cinco días mandó a 20 personas a limpiar los espacios con recogedores, instrumentos que no eran los mejores para realizar esta limpieza. Luego subcontrataron a otras empresas que supuestamente tienen la experiencia para realizar limpiezas, que subcontrataron a los pescadores artesanales para realizar las limpiezas sin los implementos correspondientes, sin la capacitación necesaria. Esto nos indigna porque aprovechan la necesidad de estas personas de trabajar”, denuncia Claudia Jacobo. El presidente peruano, Pedro Castillo, dijo el martes que la petrolera "tiene que pagar por los daños a la población y a la naturaleza", y al día siguiente su ministro de Medio Ambiente, Rubén Ramírez, advirtió que las sanciones "podrían incluso conllevar a la paralización de la empresa" en el país. La fiscalía peruana pidió este jueves a la justicia que prohíba salir del país durante 18 meses a cuatro directivos de la petrolera española mientras avanzan las investigaciones por el derrame de crudo.
Mañana se cumple dos semanas del derrame de petróleo en la refineria La Pampilla, presuntamente por irregularidades de Repsol. Precisamente, han salido a la luz, información que implicaría de responsabilidad a la empresa gasolinera, al punto que hay un pedido fiscal en su contra. ¿Qué está pasando con los directivos de la compañía? ¿Cuánto ha aumentado el daño ambiental? See omnystudio.com/listener for privacy information.
En esta edición del Miércoles de Debate conversamos sobre el derrame de petróleo en la refinería La Pampilla con el biólogo marino Daniel Cáceres Bartra y el velerista Alec Hughes. Esta sesión fue grabada el miércoles 26 de enero. También puedes ver esta conversación en YouTube: https://youtu.be/xZtik8hdNKw Si deseas participar en nuestra sesiones de debate, te invitamos a suscribirte a Comité de Lectura desde nuestra página web: comitedelectura.pe/planes/
La situación de la española Repsol, dueña de La Pampilla, se complica, después de que el capitán del buque tanque Mare Doricum, Giacomo Pisani, acusara en una carta a la empresa energética de diversas irregularidades vinculadas con el desastre ecológico por derrame de petróleo en costas peruanas el pasado 15 de enero.
Debido al desastre ecológico que ha contaminado a más de siete millones de m2 de mar y afecta a la fauna silvestre de este ecosistema, ayer cientos de ciudadanos llegaron hasta la puerta principal de la refinería La Pampilla, de la empresa Repsol, para protestar por el derrame de petróleo. Además, se ha llevado a cabo una campaña bien intencionada para mitigar el problema, lo cual consiste en utilizar cabello. ¿Qué tan viable es esto? See omnystudio.com/listener for privacy information.
Debido al desastre ecológico que ha contaminado a más de siete millones de m2 de mar y afecta a la fauna silvestre de este ecosistema, ayer cientos de ciudadanos llegaron hasta la puerta principal de la refinería La Pampilla, de la empresa Repsol, para protestar por el derrame de petróleo. Además, se ha llevado a cabo una campaña bien intencionada para mitigar el problema, lo cual consiste en utilizar cabello. ¿Qué tan viable es esto?See omnystudio.com/listener for privacy information.
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Debate 310 - Castillo personifica a la nadaLa primera entrevista del presidente con Hildebrandt. ¿Es bueno que acepte que le está costando gobernar? ¡Y seguimos comentando el derrame de La Pampilla!Síguenos en Sudaca.pewww.facebook.com/sudacaperu.petwitter.com/SudacaPeruwww.linkedin.com/company/suda...www.instagram.com/sudacaperu/Lima – Perú#Sudaca #Debate #AlexandraAmes #DavidRivera #PaoloBenza
Rubén Ramírez dijo que la empresa propietaria de la refinería La Pampilla no puede dejar de asumir su responsabilidad por el derrame.
En este podcast especial, nuestro curador Kenneth Sánchez conversa sobre el derrame de petróleo en la refinería La Pampilla, propiedad del grupo Repsol, con Percy Grandez, especialista en gobernanza marina de la Sociedad Peruana de Derecho Ambiental (SPDA).
Rubén Ramírez dijo que la empresa propietaria de la refinería La Pampilla no puede dejar de asumir su responsabilidad por el derrame.
El derrame de petróleo en la Refinería de La Pampilla, propiedad del Grupo Repsol, ha llegado a afectar 18 mil metros cuadrados de litoral peruano, afirma el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA).
La empresa energética Repsol, propietaria de la refinería de La Pampilla, rechazó tener responsabilidad en el derrame de 6 mil barriles de crudo en el mar de Ventanilla.
El alcalde de Coquimo, Marcelo Pereira, aseguró en La Mañana Informativa que junto a otros ediles de la región presentarán una petición al Gobierno para revocar los permisos anunciados para que la gente pueda visitar a sus familias en Fiestas Patrias.
El alcalde de Coquimo, Marcelo Pereira, aseguró en La Mañana Informativa que junto a otros ediles de la región presentarán una petición al Gobierno para revocar los permisos anunciados para que la gente pueda visitar a sus familias en Fiestas Patrias.