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Agradece a este podcast tantas horas de entretenimiento y disfruta de episodios exclusivos como éste. ¡Apóyale en iVoox! ¡Llegamos al último Backstage del año 2024! Wohoooooooo. Como no podía ser de otra manera, comenzamos con una pequeña crítica de Rober al calendario de adviento de Ibai y, por supuesto, acabamos de la mano de la Davidcracia con un poco de hateo respecto a la animación de la nueva película del señor de los anillos "La Guerra de los Rohirrim". Davidenko ya la ha visto y viene a darnos su opinión. ¡Feliz año a todos y todas! ¡Disfrutadloooo! Redes Sociales: Instagram: https://www.instagram.com/puente4podcast/ X: https://twitter.com/Puente4Podcast iVoox: https://www.ivoox.com/s_p2_1105139_1.html Discord: https://discord.com/invite/PVJfnzBE82 Patreon: https://Patreon.com/puente4podcast Youtube: https://www.youtube.com/channel/UCgIHIhM0CmCWOFe0qWt2eBg TikTok: https://www.tiktok.com/@puente4podcast? Reddit: https://www.reddit.com/r/Puente4Podcast/Escucha este episodio completo y accede a todo el contenido exclusivo de Puente4Podcast. Descubre antes que nadie los nuevos episodios, y participa en la comunidad exclusiva de oyentes en https://go.ivoox.com/sq/1105139
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En una aldea de África, una mujer caminaba kilómetros para buscar agua para su familia. Cada día, con su cántaro vacío, emprendía el recorrido. Un misionero le preguntó cómo podía soportar ese esfuerzo diario, y ella le respondió: “Voy con alegría porque sé que el agua dará vida a los míos”. Esa actitud refleja el valor de la espera con propósito. El Adviento es un tiempo para aprender a esperar con gozo. Los profetas esperaron la llegada del Mesías y su paciencia fue recompensada con la gloria del cumplimiento de la promesa de Dios. Hoy también vivimos en esperanza, anticipando Su segunda venida con corazones llenos de fe. Espera en Dios con la certeza de que Él tiene el tiempo perfecto para Su obra en tu vida. Confía en que Su plan traerá gozo y propósito. La Biblia dice en el Salmo 40:1: "Pacientemente esperé a Jehová, y se inclinó a mí, y oyó mi clamor".
En una aldea de África, una mujer caminaba kilómetros para buscar agua para su familia. Cada día, con su cántaro vacío, emprendía el recorrido. Un misionero le preguntó cómo podía soportar ese esfuerzo diario, y ella le respondió: “Voy con alegría porque sé que el agua dará vida a los míos”. Esa actitud refleja el valor de la espera con propósito. El Adviento es un tiempo para aprender a esperar con gozo. Los profetas esperaron la llegada del Mesías y su paciencia fue recompensada con la gloria del cumplimiento de la promesa de Dios. Hoy también vivimos en esperanza, anticipando Su segunda venida con corazones llenos de fe. Espera en Dios con la certeza de que Él tiene el tiempo perfecto para Su obra en tu vida. Confía en que Su plan traerá gozo y propósito. La Biblia dice en el Salmo 40:1:"Pacientemente esperé a Jehová, y se inclinó a mí, y oyó mi clamor".
Durante la Segunda Guerra Mundial, la familia de Corrie ten Boom escondió a judíos en su casa, arriesgando sus vidas. Aunque finalmente fueron descubiertos y enviados a campos de concentración, Corrie encontró alegría en las pequeñas cosas: el amor de su hermana Betsie, una Biblia escondida, e incluso en las pulgas que evitaban que los guardias entraran a sus barracas. El Adviento nos llama a experimentar un gozo que no depende de las circunstancias. El nacimiento de Jesús trajo una alegría eterna al mundo, una alegría que permanece incluso en medio del sufrimiento. Su presencia nos da razones para regocijarnos, porque sabemos que nuestras pruebas son temporales, pero Su amor es eterno. ¿Dónde puedes encontrar gozo hoy? Permite que las pequeñas bendiciones diarias sean un recordatorio de la gran alegría que Jesús ofrece. La Biblia dice en Filipenses 4:4: "Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez digo: ¡Regocijaos!"
Durante la Segunda Guerra Mundial, la familia de Corrie Ten Boom escondió a judíos en su casa, arriesgando sus vidas. Aunque finalmente fueron descubiertos y enviados a campos de concentración, Corrie encontró alegría en las pequeñas cosas como el amor de su hermana Betsie, una Biblia escondida e incluso en las pulgas que evitaban que los guardias entraran a sus celdas. El Adviento nos llama a experimentar un gozo que no depende de las circunstancias. El nacimiento de Jesús trajo una alegría eterna al mundo, una alegría que permanece incluso en medio del sufrimiento. Su presencia nos da razones para regocijarnos, porque sabemos que nuestras pruebas son temporales, pero Su amor es eterno. ¿Dónde puedes encontrar gozo hoy? Permite que las pequeñas bendiciones diarias sean un recordatorio de la gran alegría que Jesús te ofrece. La Biblia dice en Filipenses 4:4:"Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez digo: ¡Regocijaos!"
En 1873, Horatio Spafford, un abogado exitoso, perdió a sus cuatro hijas en un trágico naufragio mientras viajaban a Europa. Poco después, mientras cruzaba el océano para reunirse con su esposa, escribió el famoso himno "It Is Well with My Soul" (Está bien con mi alma). A pesar de su dolor, Spafford encontró consuelo y esperanza en la presencia de Dios. El Adviento nos recuerda que, aunque enfrentemos tormentas en la vida, Jesús es nuestra ancla. Su nacimiento nos asegura que Dios está con nosotros en medio de cada dificultad. Su paz y Su presencia no eliminan las pruebas, pero nos sostienen y nos dan esperanza para el futuro. Hoy, cualquiera que sea tu tormenta, recuerda que Jesús está contigo. Él es tu refugio y tu esperanza. Como Spafford, confía en que Dios tiene el control, incluso cuando no entiendes el porqué. La Biblia dice en Hebreos 6:19: "La cual tenemos como segura y firme ancla del alma, y que penetra hasta dentro del velo."
En 1873, Horatio Spafford, un abogado exitoso, perdió a sus cuatro hijas en un trágico naufragio mientras viajaban a Europa. Poco después, mientras cruzaba el océano para reunirse con su esposa, escribió el famoso himno "It Is Well with My Soul" traducido al español como Estoy bien. A pesar de su dolor, Spafford encontró consuelo y esperanza en la presencia de Dios. El Adviento nos recuerda que, aunque enfrentemos tormentas en la vida, Jesús es nuestra ancla de fe. Su nacimiento nos asegura que Dios está con nosotros en medio de cada dificultad. Su paz y Su presencia no eliminan las pruebas, pero nos sostienen y nos dan esperanza para el futuro. Hoy, cualquiera que sea tu tormenta, recuerda que Jesús está contigo. Él es tu refugio y tu esperanza. Como Spafford, confía en que Dios tiene el control, incluso cuando no entiendes el porqué. La Biblia dice en Hebreos 6:19: "La cual tenemos como segura y firme ancla del alma, y que penetra hasta dentro del velo".
En el Adviento debe acompañarnos un adecuado arrepentimiento, reflexionar sobre lo mal que actuamos y sus consecuencias para así poder enmendarnos.
Recuerdo el entusiasmo del primer día de clases cuando era niño. Aunque había nervios, también había mucha emoción por lo nuevo que iba a aprender y experimentar. Ese día simbolizaba un nuevo comienzo lleno de posibilidades. El Adviento nos ofrece un nuevo comienzo. La llegada de Jesús al mundo nos da la oportunidad de experimentar una vida renovada, llena de propósito y gozo. Su presencia trae una alegría que no depende de nuestras circunstancias, sino de la certeza de que Él camina con nosotros. En esta temporada, permite que Jesús renueve tu corazón y te llene de Su gozo. Cada día es una oportunidad para experimentar Su gracia y compartir esa alegría con quienes te rodean. La Biblia dice en Salmo 30:5: "Por la noche durará el lloro, y a la mañana vendrá la alegría".
Recuerdo el entusiasmo del primer día de clases cuando era niño. Aunque había nervios, también había mucha emoción por lo nuevo que iba a aprender y experimentar. Ese día simbolizaba un nuevo comienzo lleno de posibilidades.El Adviento nos ofrece un nuevo comienzo. La llegada de Jesús al mundo nos da la oportunidad de experimentar una vida renovada, llena de propósito y gozo. Su presencia trae una alegría que no depende de nuestras circunstancias, sino de la certeza de que Él camina con nosotros.En esta temporada, permite que Jesús renueve tu corazón y te llene de Su gozo. Cada día es una oportunidad para experimentar Su gracia y compartir esa alegría con quienes te rodean.La Biblia dice en Salmo 30:5:“Por la noche durará el lloro, y a la mañana vendrá la alegría”.
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Año XIX. Núm. 12. Un cuento para reflexionar en este tiempo de Adviento.
El Adviento es un tiempo especial de preparación para la Navidad. Con el Adviento se abre un año litúrgico. Y aquí le enseñamos el origen y significado de este tiempo que viene antes de recibir al Niño Dios. Adquiera el Libro digital de Preparación para la Navidad. Oraciones de Adviento, Novena de Navidad, Villancicos y mucho más: https://hotm.art/LibroNavidad
El Adviento, con el que empieza el año litúrgico, es el periodo de tiempo comprendido entre el cuarto domingo antes de Navidad y el día de Nochebuena. Sus colores litúrgicos son el morado y el rosa. L'articolo 11 Iconos que representan la espera de Cristo: San José – Padre José Azcárraga proviene da Radio Maria.
El Adviento, con el que empieza el año litúrgico, es el periodo de tiempo comprendido entre el cuarto domingo antes de Navidad y el día de Nochebuena. Sus colores litúrgicos son el morado y el rosa. L'articolo 06 Meditaciones Teológicas de Adviento 2parte – Padre Luis Laguna proviene da Radio Maria.
El Adviento, con el que empieza el año litúrgico, es el periodo de tiempo comprendido entre el cuarto domingo antes de Navidad y el día de Nochebuena. Sus colores litúrgicos son el morado y el rosa. L'articolo 07 Iconos que representan la espera de Cristo: Juan Bautista – Padre José Azcárraga proviene da Radio Maria.
El Adviento, con el que empieza el año litúrgico, es el periodo de tiempo comprendido entre el cuarto domingo antes de Navidad y el día de Nochebuena. Sus colores litúrgicos son el morado y el rosa. L'articolo 08 Acción del Espíritu Santo en la espera del Señor – Padre Marcelino González proviene da Radio Maria.
El Adviento, con el que empieza el año litúrgico, es el periodo de tiempo comprendido entre el cuarto domingo antes de Navidad y el día de Nochebuena. Sus colores litúrgicos son el morado y el rosa. L'articolo 09 Los sueños de San José – Padre Ángel Acuña proviene da Radio Maria.
El Adviento, con el que empieza el año litúrgico, es el periodo de tiempo comprendido entre el cuarto domingo antes de Navidad y el día de Nochebuena. Sus colores litúrgicos son el morado y el rosa. L'articolo 10 María de Nazareth, modelo de espera del Señor – Padre Eduardo Henríquez proviene da Radio Maria.
El Adviento, con el que empieza el año litúrgico, es el periodo de tiempo comprendido entre el cuarto domingo antes de Navidad y el día de Nochebuena. Sus colores litúrgicos son el morado y el rosa. L'articolo 12 Iconos que representan la espera de Cristo: Simeón y Ana – Padre José Azcárraga proviene da Radio Maria.
Lee Romanos 8:21–25 Emily Dickinson llamó a la esperanza “la cosa con plumas”. La esperanza, dijo la poeta, es como un pajarito que canta a pesar de la tormenta. En Romanos 8, Pablo describió el gemido de la creación. No es un grito de desesperación, sino una expresión de anhelo de transformación. Este gemido doloroso no es solo una evidencia de que el mundo está quebrantado, es una promesa de la liberación que está por venir. Jesús dijo a Sus discípulos que mientras otros se desmayan de terror y se preocupan por “lo que va a sucederle al mundo”, su respuesta debería ser diferente. En Cristo, tenemos esperanza (Lucas 21:26–28). Los problemas nos recuerdan que debemos apoyarnos en la esperanza del regreso de Cristo. Al igual que la creación, “gemimos”, esperando ansiosamente la transformación que Él traerá (v. 23). El hecho de que el mundo parezca estar desmoronándose no deteriora nuestra esperanza. Incluso cuando nuestras circunstancias parecen desalentadoras, seguimos adelante porque “esperar lo que ya se ve no es esperanza” (v. 24). No debemos esperar que la vida sea diferente de este lado de la nueva creación. De la misma manera, no debemos sorprendernos cuando a veces luchamos con el daño colateral del pecado en nosotros mismos incluso después de haber puesto nuestra fe en Cristo. La etapa final de nuestra experiencia de salvación será “la redención de nuestro cuerpo” (v. 23). El Adviento habla de la llegada, pero hasta que Cristo venga nuevamente, estamos en una época de espera. Esto no debe entristecernos porque la espera es una señal de esperanza. El apóstol observa en el v. 24: “¿Quién espera lo que ya ve?” Aunque esperar no es cómodo, es una forma de esperanza. Solo aquellos que esperan recibir algo están dispuestos a esperar. La esperanza garantiza paciencia. La certeza de la promesa de Dios da alas a nuestra esperanza. ¿Hay algo que puedas hacer para animar tu esperanza hoy? ¿Deberías cantar una canción, hablar con un amigo o leer un versículo de las Escrituras? Ora con nosotros Padre, danos una mejor comprensión de la conexión entre la espera y la esperanza en la lectura de hoy. Enséñanos a esperar pacientemente el regreso de Cristo y a apoyarnos en esta esperanza. Que nuestra esperanza realmente tenga alas.See omnystudio.com/listener for privacy information.
Recuerdo una Navidad cuando recibí un regalo inesperado de un amigo de la infancia. Era algo simple, pero lo importante no era el contenido, sino el amor y la intención con que fue entregado. Sentí que ese regalo representaba algo mucho más grande que el objeto en sí: simbolizaba una conexión, un cuidado y un amor sincero. El Adviento nos recuerda el regalo más grande que hemos recibido: Jesús. Dios, en Su infinito amor, nos envió a Su Hijo como una muestra tangible de cuánto nos valora. Este regalo no vino envuelto en papeles brillantes, sino en la humildad de un pesebre. Su llegada trajo esperanza, paz y salvación para todos nosotros. Hoy, reflexiona sobre este regalo de amor divino. Así como Dios nos dio a Su Hijo, nosotros también podemos dar amor, gracia y esperanza a los demás. Permite que esta temporada de Adviento sea una oportunidad para expresar Su amor a través de tus acciones. La Biblia dice en Juan 3:16: "Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, más tenga vida eterna"
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Recuerdo una Navidad cuando recibí un regalo inesperado de un amigo de la infancia. Era algo simple, pero lo importante no era el contenido, sino el amor y la intención con que fue entregado. Sentí que ese regalo representaba algo mucho más grande que el objeto en sí: simbolizaba una conexión, un cuidado y un amor sincero. El Adviento nos recuerda el regalo más grande que hemos recibido: Jesús. Dios, en Su infinito amor, nos envió a Su Hijo como una muestra tangible de cuánto nos valora. Este regalo no vino envuelto en papeles brillantes, sino en la humildad de un pesebre. Su llegada trajo esperanza, paz y salvación para todos nosotros. Hoy, reflexiona sobre este regalo de amor divino. Así como Dios nos dio a Su Hijo, nosotros también podemos dar amor, gracia y esperanza a los demás. Permite que esta temporada de Adviento sea una oportunidad para expresar Su amor a través de tus acciones. La Biblia dice en Juan 3:16: "Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, más tenga vida eterna"
Lee Romanos 8:18–20 Muchas personas celebran el Adviento encendiendo velas. Otros abren pequeños compartimentos en un calendario de Adviento para revelar un versículo bíblico, o incluso un caramelo. Pero la creación también celebra una especie de Adviento. Romanos 8:19 dice que “la creación aguarda con ansiedad la revelación de los hijos de Dios”. El apóstol describe a la creación como que “gime a una, como si tuviera dolores de parto”, mientras espera el regreso de Cristo y la nueva creación (v. 22). Este gemido es figurativo y se hace eco en varios pasajes del Antiguo Testamento (Isaías 66:8; Jeremías 4:31; Miqueas 4:8–9). Jesús habló que “será apenas el comienzo de los dolores” (Marcos 13:8), incluidos falsos mesías, guerras, hambrunas y terremotos que tendrían lugar antes de Su segunda venida. Estas imágenes vívidas no nos ayudan a predecir el día y la hora del regreso de Cristo, pero sí indican el fin hacia el cual se mueve toda la historia humana. El primer advenimiento de Jesucristo es el eje sobre el cual oscila, y el segundo es el clímax hacia el cual se mueve. La anticipación de la creación por el regreso de Cristo no comenzó con la encarnación, sino con la caída de Adán, cuando la creación “Fue sometida a la frustración, no por su propia voluntad, sino por la del que así lo dispuso. Pero queda la firme esperanza” (v. 20). El gemido de la creación está lleno de lamento y anticipación. La vida en un mundo caído a menudo está marcada por problemas y tristeza, incluso para aquellos de nosotros que conocemos a Cristo. La experiencia de la salvación no nos hace inmunes al daño causado por el pecado. Hay momentos en que gemimos ansiando el nuevo mundo. Incluso podemos sentirnos frustrados por el ciclo continuo de nacimiento, decadencia y muerte de la naturaleza, que está más allá de nuestro control (v. 20). El Adviento puede ser una época de dolor para quienes han perdido a seres queridos. ¿Estás lleno de dolor este Adviento? ¿Cómo puedes expresar tu dolor a Dios hoy? Ora con nosotros Jesús, cuando los problemas parezcan venir como olas gigantes, que podamos correr hacia Ti y con honestidad dar voz a nuestro dolor, pérdida, ira y desesperación. Sólo Tú nos elevas por encima de las olas y nos ofreces un fundamento firme. Contigo, estamos parados sobre tierra firme.See omnystudio.com/listener for privacy information.
El cristianismo se fundamenta en un evento, en una llegada, en una presencia. Nuestra fe no busca a Dios en la penumbra, como los pueblos que no aceptan la revelación cristiana, sino que sabe que ha sido Dios el que ha salido de su ocultamiento y nos ha buscado. Lo que sí se nos pide es preparar el corazón: darle a Cristo el lugar central. Nos bastará Cristo.
Diciembre 02, 2024 - El Adviento nos invita a hacer una pausa en medio de un mundo acelerado y lleno de impaciencia, y nos llama a una pausa activa y reflexiva que nos lleva a recordar como el pueblo de Israel espero durante siglos al Mesias prometido. Hoy el pastor Carlos A. Zazueta nos invita a reflexionar sobre el primer Adviento y a recordar que el tiempo de Dios es siempre perfecto. El nacimiento de Jesus no fue un plan improvisado sino parte de una soberana orquestacion divina.
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1) Angustia: La presencia de la angustia es lo que puede atarte a no ver nada, pero complicarte en todo. Es cuando sentís que todo está terminado y no podés hacer nada. La angustia, cuando te toma, no te deja salir adelante porque es el golpe al corazón y te deja sin respirar, por lo que lo único que puedes hacer es llorar. La angustia puede ser motivo de desilusión, de miedo o de impotencia; es por ello que aquí lo que puede ayudarte a enfrentarla es la fe y el mirar; mirar que hay algo más y la fe de saber que Dios está. 2) Ánimo: Es una de las palabras que más me gusta. Porque viene de la raíz “ánima” que es “alma”. Implica que tenés que recordar que hay en vos una eternidad y que esto va a pasar. No detengas tu vida en algo temporario, cuando en el fondo vos sabes que sos eterno. No dejes que esa persona que te lastimó o difamó te quite la mirada a la eternidad. 3) Levanten: Es saber que tenés que poner ante la angustia que vivís la mirada hacia donde querés vivir y como querés vivir. Soltá todo aquello que te hace perder la paz y levántate para buscar tu paz. Aquí la clave es no quedarte ni aislarte, sino más bien salir y poder apostar por tu felicidad. Hoy pedí en el inicio del Adviento que Dios te ayude a superar lo que te angustia y caminar hacia donde la vida perdura eternamente. Algo bueno está por venir. --- Support this podcast: https://podcasters.spotify.com/pod/show/misioneros-digitales-catlicos/support
El Adviento es un periodo de preparación espiritual en la tradición cristiana que antecede a la Navidad. Durante cuatro semanas, simboliza la espera del nacimiento de Jesús, marcado por esperanza, reflexión y renovación.
Lee Hechos 1:1–11 Muchos cristianos celebran los primeros cuatro domingos antes de Navidad como la temporada de Adviento. Pero lo que quizás no sepas es que hay dos Advientos. El primer Adviento se goza en los eventos que rodean el nacimiento del Salvador. El segundo recuerda que este no es el final de nuestra historia de salvación. Jesús ha venido y ¡vendrá otra vez! Cada vez que la iglesia celebra la cena del Señor, recuerda ambos Advientos (1 Corintios 11:26). Dos hechos pueden sorprender a quienes esperamos con ansias esta temporada. Primero, el Adviento fue una adición bastante tardía al calendario tradicional de la iglesia, que apareció en algún momento entre los siglos IV y VI. Segundo, el Adviento fue inicialmente un tiempo de ayuno en lugar de celebración. El Adviento era una especie de temporada de cuaresma de Navidad. La iglesia del Nuevo Testamento no celebraba el Adviento. Lo vivían, viendo las promesas de la primera venida de Cristo cumplirse ante sus ojos. Después de la resurrección de Jesús, se dieron cuenta de que muchas promesas seguían sin cumplirse. Su pregunta candente se expresa en el v. 6: “Señor, ¿es ahora cuando vas a restablecer el reino a Israel? “La respuesta de Jesús fue esencialmente un no. En lugar de decirles cuándo llegaría ese momento, les dijo cómo vivir durante el tiempo entre Su primera y segunda venida. En lugar de especular sobre “tiempos o fechas”, que el Padre ya ha establecido, la iglesia ha sido llamada a dar testimonio de Cristo en el poder del Espíritu Santo (vv. 7–8). Un testigo da evidencia al informar lo que ha visto y experimentado. Más que esto, estamos llamados a cumplir esta misión en anticipación de un nuevo advenimiento cuando “este mismo Jesús” regrese y nos lleve consigo. La iglesia ejerce una especie de doble visión mientras vive entre el primer y el segundo advenimiento de Cristo. ¿Qué significa cuando decimos que hay dos advenimientos? ¿Cómo nos traen esperanza ambos advenimientos? Ora con nosotros Al entrar en la temporada de Adviento, te damos gracias, Señor, porque viniste a nuestro mundo de oscuridad y lágrimas para dar vida a los muertos e impartir justicia a los injustos. Nos regocijamos en tu don y esperamos con ansias el segundo Adviento.See omnystudio.com/listener for privacy information.
Meditación sobre el sentido del Adviento en el Primer Domingo de Adviento. Jesús nos anima en el Evangelio a tener cuidado, velar y estar atentos: recogimiento, sobriedad y alegría no tanto exterior, sino íntima, deben caracterizar este tiempo de alegre espera. Conversión por medio de la oración, la rectitud de intención y el servicio.
Meditación sobre el comienzo de un nuevo año litúrgico, primer domingo de Adviento. Caridad. Esperanza,
PRIMER DOMINGO DE ADVIENTO, CICLO C La esperanza en este momento es fundamental porque el mundo la necesita, porque este Año Santo que empieza con el Adviento está sellado por la esperanza y porque estamos iniciando el Adviento.
Estamos a punto de iniciar el Adviento, ese tiempo que precede a la Navidad. ¿sabes lo que significa? ¿sabes cómo aprovecharlo? en esta meditación hablaremos de eso y sacaremos un propósito que nos ayude a preparar muy bien la llegada del Niño Jesús.
La Vida En Cristo programa conducido por el P. Silvio Ortiz. En esta entrega les presentaos el tema El Adviento Y El Libro De Apocalipsis Recuerda que Radio María se sostiene exclusivamente con las donaciones de sus oyentes.Ayúdenos a continuar esta obra de la Virgen María con su donativo, por pequeño que sea.
5ta Temporada de Easy Spanish nivel avanzado del español Episodio 227 ¿Qué es el Adviento? El Adviento es esperanza, preparación y celebración. Es una temporada de profunda espiritualidad y renovación, en la que los cristianos se enfocan en reflexionar y prepararse para la llegada de la Navidad. El Adviento marca el inicio del año litúrgico en la tradición cristiana y se celebra durante cuatro domingos consecutivos, comenzando con el domingo más cercano al 30 de noviembre y finalizando el 24 de diciembre, la Nochebuena. En el episodio de hoy les hablaré de: Qué es el Adviento? Si quieres aprender español de una manera diferente ¡ No te pierdas este episodio! Easy Spanish. Tu mejor experiencia aprendiendo español. --- Support this podcast: https://podcasters.spotify.com/pod/show/duq/support
Como cada primer sábado del mes, las chicas de MQV nos traen este tema tan interesante, haciendo una previa a la navidad. Sumate. La entrada El Adviento se publicó primero en Obedira.
El Adviento es un tiempo especial de preparación para la Navidad. Con el Adviento se abre un año litúrgico. Y aquí le enseñamos el origen y significado de este tiempo que viene antes de recibir al Niño Dios
Adviento es tiempo para enfocarse en la venida del Señor. Es realmente triste que es cuando más se ve la desviación de tantos católicos. En lugar de vivir de acuerdo con la luz de la fe y la voz del Señor, vivimos como los paganos. La Navidad no debe celebrarse antes de tiempo. El Adviento es tiempo de preparación espiritual, de conversión, de confesarse, y de meditar en las tres venidas de Jesús. ¡Prepárate para salir al encuentro de tu Dios!Pulsa Aqui para ver el video del programa¡Convierte en Miembro Cristero de Nuestro Canal Hoy!! Pulsa aquiSupport the show YouTube Facebook Telegram Instagram Tik Tok Twitter
Preparar el camino es preparar el corazón. Y a veces hay cosas que están impidiendo que Jesús venga. No entro en psicología profunda (que sería interesante) pero es que aceptar a Dios y a su Espíritu Santo es todo un arte. El Adviento es el tiempo ideal para esto. Al Lío! . . Ya sabes que la música es de Trigo13 y de Jatari https://www.instagram.com/trigo13_/ https://instagram.com/misionjatari?igshid=MzRlODBiNWFlZA== . Por cierto, me tienes en Instagram https://instagram.com/joaquinconp?igshid=YmMyMTA2M2Y= . Y la edición me la hace el gran Edu, de Archi, cuya paciencia es infinita https://archidigitalgroup.com . Sé feliz! +
DOMINGO II DE ADVIENTO, CICLO B Quita lo que te está quitando a Dios, apártate de lo que te aparta de Él, así preparas el camino para que Él venga y te traiga la victoria a tu vida.
Meditación sobre el sentido del Adviento en el Primer Domingo (A) de Adviento. Jesús nos anima en el Evangelio a tener cuidado, velar y estar atentos: recogimiento, sobriedad y alegría no tanto exterior, sino íntima, deben caracterizar este tiempo de alegre espera. Conversión por medio de la oración, la rectitud de intención y el servicio.
El cristianismo se fundamenta en un evento, en una llegada, en una presencia. Nuestra fe no busca a Dios en la penumbra, como los pueblos que no aceptan la revelación cristiana, sino que sabe que ha sido Dios el que ha salido de su ocultamiento y nos ha buscado. Lo que sí se nos pide es preparar el corazón: darle a Cristo el lugar central. Nos bastará Cristo.
P. Federico (Guatemala)El tiempo es relativo. Depende de aquello que se vive y de aquello que se espera. El Adviento llena de sentido el presente ante la espera del Don más precioso que la humanidad haya recibido jamás. [Ver Meditación Escrita] https://www.10minconjesus.net/meditacion_escrita/el-tiempo-es-relativo/
Adviento es un recordatorio de la humildad que caracterizó el nacimiento de nuestro Salvador, Jesús. En un mundo lleno de poder y grandiosidad, la humildad de María y José al recibir a Jesús en un humilde establo nos muestra un ejemplo extraordinario. La humildad nos permite reconocer que no somos el centro del universo, sino que Dios lo es. Al igual que María, que dijo: "He aquí la sierva del Señor; hágase conmigo conforme a tu palabra" (Lucas 1:38), nuestra humildad nos capacita para someternos a la voluntad de Dios. El Adviento también nos invita a practicar la humildad en nuestras relaciones con los demás, porque miramos más allá de nosotros mismos y consideramos las necesidades de los demás. La humildad de Adviento nos recuerda que en un mundo lleno de vanidad y egoísmo, el servicio desinteresado y el amor son los valores que Cristo nos enseñó como expresiones de Su humildad. Por lo tanto, sigamos el ejemplo de humildad de Jesús y vivamos de manera que reflejemos Su amor a todos los que nos rodean al ser emisarios vivos de Su gran propósito. La Biblia dice en Filipenses 2:8 “8 y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz.” (RV1960)