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En aquel tiempo, Jesús se les apareció otra vez a los discípulos junto al lago de Tiberíades. Se les apareció de esta manera:Estaban juntos Simón Pedro, Tomás (llamado el Gemelo), Natanael (el de Caná de Galilea), los hijos de Zebedeo y otros dos discípulos. Simón Pedro les dijo: "Voy a pescar". Ellos le respondieron: "También nosotros vamos contigo". Salieron y se embarcaron, pero aquella noche no pescaron nada.Estaba amaneciendo, cuando Jesús se apareció en la orilla, pero los discípulos no lo reconocieron. Jesús les dijo: "Muchachos, ¿han pescado algo?" Ellos contestaron: "No". Entonces él les dijo: "Echen la red a la derecha de la barca y encontrarán peces". Así lo hicieron, y luego ya no podían jalar la red por tantos pescados.Entonces el discípulo a quien amaba Jesús le dijo a Pedro: "Es el Señor". Tan pronto como Simón Pedro oyó decir que era el Señor, se anudó a la cintura la túnica, pues se la había quitado, y se tiró al agua. Los otros discípulos llegaron en la barca, arrastrando la red con los pescados, pues no distaban de tierra más de cien metros.Tan pronto como saltaron a tierra, vieron unas brasas y sobre ellas un pescado y pan. Jesús les dijo: "Traigan algunos pescados de los que acaban de pescar". Entonces Simón Pedro subió a la barca y arrastró hasta la orilla la red, repleta de pescados grandes. Eran ciento cincuenta y tres, y a pesar de que eran tantos, no se rompió la red. Luego les dijo Jesús: "Vengan a almorzar". Y ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle: '¿Quién eres?', porque ya sabían que era el Señor. Jesús se acercó, tomó el pan y se lo dio y también el pescado. Ésta fue la tercera vez que Jesús se apareció a sus discípulos después de resucitar de entre los muertos.Después de almorzar le preguntó Jesús a Simón Pedro: "Simón, hijo de Juan, ¿me amas más que éstos?" Él le contestó: "Sí, Señor, tú sabes que te quiero". Jesús le dijo: "Apacienta mis corderos". Por segunda vez le preguntó: "Simón, hijo de Juan, ¿me amas?" Él le respondió: "Sí, Señor, tú sabes que te quiero". Jesús le dijo: "Pastorea mis ovejas". Por tercera vez le preguntó: "Simón, hijo de Juan, ¿me quieres?" Pedro se entristeció de que Jesús le hubiera preguntado por tercera vez si lo quería y le contestó: "Señor, tú lo sabes todo; tú bien sabes que te quiero". Jesús le dijo: "Apacienta mis ovejas. Yo te aseguro: cuando eras joven, tú mismo te ceñías la ropa e ibas a donde querías; pero cuando seas viejo, extenderás los brazos y otro te ceñirá y te llevará a donde no quieras". Esto se lo dijo para indicarle con qué género de muerte habría de glorificar a Dios. Después le dijo: "Sígueme".

Meditación del Evangelio según San Juan 21, 1-14 por el biblista P. Norberto Padilla, misionero claretiano.Viernes 25/abr/2025, Jesús se acerca, toma el pan y se lo da, y lo mismo el pescado.Canción: Cristo Resucitó (2023), de Ally & Juan----------Lectura del santo evangelio según san Juan 21, 1-14En aquel tiempo, Jesús se apareció otra vez a los discípulos junto al lago de Tiberíades. Y se apareció de esta manera: Estaban juntos Simón Pedro, Tomás apodado el Mellizo, Natanael de Caná de Galilea, los Zebedeos y otros dos discípulos suyos. Simón Pedro les dice: "Me voy a pescar." Ellos contestan: "Vamos también nosotros contigo." Salieron y se embarcaron; y aquella noche no cogieron nada. Estaba ya amaneciendo, cuando Jesús se presentó en la orilla; pero los discípulos no sabían que era Jesús. Jesús les dice: "Muchachos, ¿tienen pescado?" Ellos contestaron: "No." Él les dice: "Echen la red a la derecha." La echaron, y no tenían fuerzas para sacarla, por la multitud de peces. Y aquel discípulo que Jesús tanto quería, dice a Pedro: "Es el Señor." Al oír que era el Señor, Simón Pedro, que estaba desnudo, se ató la túnica y se echó al agua. Los demás discípulos se acercaron en la barca, porque no distaba de tierra más que unos cien metros, remolcando la red con los peces. Al saltar a tierra, ven unas brasas preparadas y encima pescado y pan. Jesús les dice: "Traigan algo de lo que acaban de pescar." Pedro subió a la barca, arrastró hasta la orilla la red repleta de peces grandes: ciento cincuenta y tres. Y aunque eran tantos, no se rompió la red. Jesús les dice: "Vengan a comer." Ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle quién era, porque sabían bien que era el Señor. Jesús se acerca, toma el pan y se lo da, y lo mismo el pescado. Esta fue la tercera vez que Jesús se apareció a los discípulos, después de resucitar de entre los muertos.Palabra del Señor... Gloria a ti, Señor Jesús#SoyClaretiano #Evangelio #MisionerosClaretianos #CMFAntillasIntro: Lámpara Es Tu Palabra, de Ain Karem

En aquel tiempo, Jesús se les apareció otra vez a los discípulos junto al lago de Tiberíades. Se les apareció de esta manera: Estaban juntos Simón Pedro, Tomás (llamado el Gemelo), Natanael (el de Caná de Galilea), los hijos de Zebedeo y otros dos discípulos. Simón Pedro les dijo: “Voy a pescar”. Ellos le respondieron: “También nosotros vamos contigo”. Salieron y se embarcaron, pero aquella noche no pescaron nada.Estaba amaneciendo, cuando Jesús se apareció en la orilla, pero los discípulos no lo reconocieron. Jesús les dijo: “Muchachos, ¿han pescado algo?” Ellos contestaron: “No”. Entonces él les dijo: “Echen la red a la derecha de la barca y encontrarán peces”. Así lo hicieron, y luego ya no podían jalar la red por tantos pescados.Entonces el discípulo a quien amaba Jesús le dijo a Pedro: “Es el Señor”. Tan pronto como Simón Pedro oyó decir que era el Señor, se anudó a la cintura la túnica, pues se la había quitado, y se tiró al agua. Los otros discípulos llegaron en la barca, arrastrando la red con los pescados, pues no distaban de tierra más de cien metros.Tan pronto como saltaron a tierra, vieron unas brasas y sobre ellas un pescado y pan. Jesús les dijo: “Traigan algunos pescados de los que acaban de pescar”. Entonces Simón Pedro subió a la barca y arrastró hasta la orilla la red, repleta de pescados grandes. Eran ciento cincuenta y tres, y a pesar de que eran tantos, no se rompió la red. Luego les dijo Jesús: “Vengan a almorzar”. Y ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle: ‘¿Quién eres?', porque ya sabían que era el Señor. Jesús se acercó, tomó el pan y se lo dio y también el pescado.Ésta fue la tercera vez que Jesús se apareció a sus discípulos después de resucitar de entre los muertos.

+ Del Evangelio según san Juan +En aquel tiempo, Jesús se les apareció otra vez a los discípulos junto al lago de Tiberíades. Se les apareció de esta manera: Estaban juntos Simón Pedro, Tomás (llamado el Gemelo), Natanael (el de Caná de Galilea), los hijos de Zebedeo y otros dos discípulos. Simón Pedro les dijo: "Voy a pescar". Ellos le respondieron: "También nosotros vamos contigo". Salieron y embarcaron, pero aquella noche no pescaron nada.Estaba amaneciendo, cuando Jesús se apareció en la orilla, pero los discípulos no lo reconocieron. Jesús les dijo: "Muchachos, ¿han pescado algo?" Ellos contestaron: "No". Entonces él les dijo: "Echen la red a la derecha de la barca y encontrarán peces". Así lo hicieron, y luego ya no podían jalar la red por tantos pescados.Entonces el discípulo a quien amaba Jesús le dijo a Pedro: "Es el Señor". Tan pronto como Simón Pedro oyó decir que era el Señor, se anudó a la cintura la túnica, pues se lo había quitado, y se tiró al agua. Los otros discípulos llegaron en la barca, arrastrando la red con los pescados, pues no distaban de tierra más de cien metros.Tan pronto como saltaron a tierra, vieron unas brasas y sobre ellas un pescado y pan. Jesús les dijo: "Traigan algunos pescados de los que acaban de pescar": Entonces Simón Pedro subió a la barca y arrastró hasta la orilla la red, repleta de pescados grandes. Eran ciento cincuenta y tres, y a pesar de que eran tantos, no se rompió la red. Luego les dijo Jesús: "Vengan a almorzar". Y ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle: '¿Quién eres?', porque ya sabían que era el Señor. Jesús se acercó, tomó el pan y se lo dio y también el pescado.Esta fue la tercera vez que Jesús se apareció a sus discípulos después de resucitar de entre los muertos.Palabra del Señor.

Juan 21, 1-14: En aquel tiempo, Jesús se les apareció otra vez a los discípulos junto al lago de Tiberíades. Se les apareció de esta manera: Estaban juntos Simón Pedro, Tomás (llamado el Gemelo), Natanael (el de Caná de Galilea), los hijos de Zebedeo y otros dos discípulos. Simón Pedro les dijo: “Voy a pescar”. Ellos le respondieron: “También nosotros vamos contigo”. Salieron y se embarcaron, pero aquella noche no pescaron nada.Estaba amaneciendo, cuando Jesús se apareció en la orilla, pero los discípulos no lo reconocieron. Jesús les dijo: “Muchachos, ¿han pescado algo?” Ellos contestaron: “No”. Entonces él les dijo: “Echen la red a la derecha de la barca y encontrarán peces”. Así lo hicieron, y luego ya no podían jalar la red por tantos pescados.Entonces el discípulo a quien amaba Jesús le dijo a Pedro: “Es el Señor”. Tan pronto como Simón Pedro oyó decir que era el Señor, se anudó a la cintura la túnica, pues se la había quitado, y se tiró al agua. Los otros discípulos llegaron en la barca, arrastrando la red con los pescados, pues no distaban de tierra más de cien metros.Tan pronto como saltaron a tierra, vieron unas brasas y sobre ellas un pescado y pan. Jesús les dijo: “Traigan algunos pescados de los que acaban de pescar”. Entonces Simón Pedro subió a la barca y arrastró hasta la orilla la red, repleta de pescados grandes. Eran ciento cincuenta y tres, y a pesar de que eran tantos, no se rompió la red. Luego les dijo Jesús: “Vengan a almorzar”. Y ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle: ‘¿Quién eres?', porque ya sabían que era el Señor. Jesús se acercó, tomó el pan y se lo dio y también el pescado.Ésta fue la tercera vez que Jesús se apareció a sus discípulos después de resucitar de entre los muertos.

Comparecencia del entrenador del Alavés tras caer ante el Rayo Vallecano.

San Lucas 5, 1 – 11En una oportunidad, la multitud se amontonaba alrededor de Jesús para escuchar la Palabra de Dios, y él estaba de pie a la orilla del lago de Genesaret.Desde allí vio dos barcas junto a la orilla del lago; los pescadores habían bajado y estaban limpiando las redes.Jesús subió a una de las barcas, que era de Simón, y le pidió que se apartara un poco de la orilla; después se sentó, y enseñaba a la multitud desde la barca.Cuando terminó de hablar, dijo a Simón: “Navega mar adentro, y echen las redes”.Simón le respondió: “Maestro, hemos trabajado la noche entera y no hemos sacado nada, pero si tú lo dices, echaré las redes”.Así lo hicieron, y sacaron tal cantidad de peces, que las redes estaban a punto de romperse.Entonces hicieron señas a los compañeros de la otra barca para que fueran a ayudarlos. Ellos acudieron, y llenaron tanto las dos barcas, que casi se hundían.Al ver esto, Simón Pedro se echó a los pies de Jesús y le dijo: “Aléjate de mí, Señor, porque soy un pecador”.El temor se había apoderado de él y de los que lo acompañaban, por la cantidad de peces que habían recogido;y lo mismo les pasaba a Santiago y a Juan, hijos de Zebedeo, compañeros de Simón. Pero Jesús dijo a Simón: “No temas, de ahora en adelante serás pescador de hombres”.Ellos atracaron las barcas a la orilla y, abandonándolo todo, lo siguieron.……………Spotify: https://open.spotify.com/show/2M0Ubx3Jh55B6W3b20c3GOApple podcast: https://podcasts.apple.com/us/podcast/evangelio-del-d%C3%ADa/id1590423907 Para más información puede consultar nuestro sitio: https://www.vozcatolica.com o escríbanos a info@vozcatolica.com .Si quiere colaborar con este Apostolado lo puede hacer dirigiéndose a: https://vozcatolica.com/ayudanos . Desde ya muchas gracias.

Autor knihy o historii libereckého hokeje David Lukšů byl hostem 39. dílu Nad(h)ledu. Na Rodokmenu Tygra pracoval více než tři roky a soustředil se především na příběhy největších osobností klubu. Rozsahem se jedná o největší knihu, jakou kdy napsal. Co ho při psaní nejvíc zaujalo? A na co všechno se můžete jako čtenáři těšit?

Escucha la historia de un bato que fue descubierto haciéndose el huevón en la chamba y los consejos que te damos para que estar de perezoso sin que se den tus jefes. Mantente al día con los últimos de 'El Bueno, la Mala y el Feo'. ¡Suscríbete para no perderte ningún episodio!Ayúdanos a crecer dejándonos un review ¡Tu opinión es muy importante para nosotros!¿Conoces a alguien que amaría este episodio? ¡Compárteselo por WhatsApp, por texto, por Facebook, y ayúdanos a correr la voz!Escúchanos en Uforia App, Apple Podcasts, Spotify, y el canal de YouTube de Uforia Podcasts, o donde sea que escuchas tus podcasts.'El Bueno, la Mala y el Feo' es un podcast de Uforia Podcasts, la plataforma de audio de TelevisaUnivision.

Los líderes de Morena en el Senado presentaron una iniciativa para impedir que la Suprema Corte de Justicia eche abajo la Reforma Judicial.See omnystudio.com/listener for privacy information.

La mayoría de gente que toma licor, ha llegado alguna vez bien peda o cruda a trabajar. Escucha las lecciones de un tipo que llegó casi pedo al trabajo y nos da consejos para que no sea el peor día de tu vida. Mantente al día con los últimos de 'El Bueno, la Mala y el Feo'. ¡Suscríbete para no perderte ningún episodio!Ayúdanos a crecer dejándonos un review ¡Tu opinión es muy importante para nosotros!¿Conoces a alguien que amaría este episodio? ¡Compárteselo por WhatsApp, por texto, por Facebook, y ayúdanos a correr la voz!Escúchanos en Uforia App, Apple Podcasts, Spotify, y el canal de YouTube de Uforia Podcasts, o donde sea que escuchas tus podcasts.'El Bueno, la Mala y el Feo' es un podcast de Uforia Podcasts, la plataforma de audio de TelevisaUnivision.

+ Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Mateo 25, 14-30 Jesús dijo a sus discípulos esta parábola: El Reino de los Cielos es también como un hombre que, al salir de viaje, llamó a sus servidores y les confió sus bienes. A uno le dio cinco talentos, a otro dos, y uno solo a un tercero, a cada uno según su capacidad; y después partió. En seguida, el que había recibido cinco talentos, fue a negociar con ellos y ganó otros cinco. De la misma manera, el que recibió dos, ganó otros dos, pero el que recibió uno solo, hizo un pozo y enterró el dinero de su señor. Después de un largo tiempo, llegó el señor y arregló las cuentas con sus servidores. El que había recibido los cinco talentos se adelantó y le presentó otros cinco. «Señor, le dijo, me has confiado cinco talentos: aquí están los otros cinco que he ganado.» «Está bien, servidor bueno y fiel, le dijo su señor, ya que respondiste fielmente en lo poco, te encargaré de mucho más: entra a participar del gozo de tu señor.» Llegó luego el que había recibido dos talentos y le dijo: «Señor, me has confiado dos talentos: aquí están los otros dos que he ganado.» «Está bien, servidor bueno y fiel, ya que respondiste fielmente en lo poco, te encargaré de mucho más: entra a participar del gozo de tu señor.» Llegó luego el que había recibido un solo talento. «Señor, le dijo, sé que eres un hombre exigente: cosechas donde no has sembrado y recoges donde no has esparcido. Por eso tuve miedo y fui a enterrar tu talento: ¡aquí tienes lo tuyo!» Pero el señor le respondió: «Servidor malo y perezoso, si sabías que cosecho donde no he sembrado y recojo donde no he esparcido, tendrías que haber colocado el dinero en el banco, y así, a mi regreso, lo hubiera recuperado con intereses. Quítenle el talento para dárselo al que tiene diez, porque a quien tiene, se le dará y tendrá de más, pero al que no tiene, se le quitará aun lo que tiene. Echen afuera, a las tinieblas, a este servidor inútil; allí habrá llanto y rechinar de dientes.» Palabra del Señor.

Mt 25,14-30.Jesús dijo a sus discípulos esta parábola:El Reino de los Cielos es también como un hombre que, al salir de viaje, llamó a sus servidores y les confió sus bienes.A uno le dio cinco talentos, a otro dos, y uno solo a un tercero, a cada uno según su capacidad; y después partió. En seguida,el que había recibido cinco talentos, fue a negociar con ellos y ganó otros cinco.De la misma manera, el que recibió dos, ganó otros dos,pero el que recibió uno solo, hizo un pozo y enterró el dinero de su señor.Después de un largo tiempo, llegó el señor y arregló las cuentas con sus servidores.El que había recibido los cinco talentos se adelantó y le presentó otros cinco. 'Señor, le dijo, me has confiado cinco talentos: aquí están los otros cinco que he ganado'.'Está bien, servidor bueno y fiel, le dijo su señor, ya que respondiste fielmente en lo poco, te encargaré de mucho más: entra a participar del gozo de tu señor'.Llegó luego el que había recibido dos talentos y le dijo: 'Señor, me has confiado dos talentos: aquí están los otros dos que he ganado'.'Está bien, servidor bueno y fiel, ya que respondiste fielmente en lo poco, te encargaré de mucho más: entra a participar del gozo de tu señor'.Llegó luego el que había recibido un solo talento. 'Señor, le dijo, sé que eres un hombre exigente: cosechas donde no has sembrado y recoges donde no has esparcido.Por eso tuve miedo y fui a enterrar tu talento: ¡aquí tienes lo tuyo!'.Pero el señor le respondió: 'Servidor malo y perezoso, si sabías que cosecho donde no he sembrado y recojo donde no he esparcido,tendrías que haber colocado el dinero en el banco, y así, a mi regreso, lo hubiera recuperado con intereses.Quítenle el talento para dárselo al que tiene diez,porque a quien tiene, se le dará y tendrá de más, pero al que no tiene, se le quitará aun lo que tiene.Echen afuera, a las tinieblas, a este servidor inútil; allí habrá llanto y rechinar de dientes'.

San Mateo 25, 14 – 30 Jesús dijo a sus discípulos esta parábola: El Reino de los Cielos es también como un hombre que, al salir de viaje, llamó a sus servidores y les confió sus bienes. A uno le dio cinco talentos, a otro dos, y uno solo a un tercero, a cada uno según su capacidad; y después partió. En seguida, el que había recibido cinco talentos, fue a negociar con ellos y ganó otros cinco. De la misma manera, el que recibió dos, ganó otros dos, pero el que recibió uno solo, hizo un pozo y enterró el dinero de su señor. Después de un largo tiempo, llegó el señor y arregló las cuentas con sus servidores. El que había recibido los cinco talentos se adelantó y le presentó otros cinco. ‘Señor, le dijo, me has confiado cinco talentos: aquí están los otros cinco que he ganado'. ‘Está bien, servidor bueno y fiel, le dijo su señor, ya que respondiste fielmente en lo poco, te encargaré de mucho más: entra a participar del gozo de tu señor'. Llegó luego el que había recibido dos talentos y le dijo: ‘Señor, me has confiado dos talentos: aquí están los otros dos que he ganado'. ‘Está bien, servidor bueno y fiel, ya que respondiste fielmente en lo poco, te encargaré de mucho más: entra a participar del gozo de tu señor'. Llegó luego el que había recibido un solo talento. ‘Señor, le dijo, sé que eres un hombre exigente: cosechas donde no has sembrado y recoges donde no has esparcido. Por eso tuve miedo y fui a enterrar tu talento: ¡aquí tienes lo tuyo!'. Pero el señor le respondió: ‘Servidor malo y perezoso, si sabías que cosecho donde no he sembrado y recojo donde no he esparcido, tendrías que haber colocado el dinero en el banco, y así, a mi regreso, lo hubiera recuperado con intereses. Quítenle el talento para dárselo al que tiene diez, porque a quien tiene, se le dará y tendrá de más, pero al que no tiene, se le quitará aun lo que tiene. Echen afuera, a las tinieblas, a este servidor inútil; allí habrá llanto y rechinar de dientes'. …………………… Además, puedes escuchar el Evangelio diario en las siguientes plataformas: Spotify: https://open.spotify.com/show/2M0Ubx3Jh55B6W3b20c3GO Apple podcast: https://podcasts.apple.com/us/podcast/evangelio-del-d%C3%ADa/id1590423907 Para más información puede consultar nuestro sitio: https://www.vozcatolica.com o escríbanos a info@vozcatolica.com . Si quiere colaborar con este Apostolado lo puede hacer dirigiéndose a: https://vozcatolica.com/ayudanos . Desde ya muchas gracias.

Con nuestros humoristas Goyo Jiménez, Agustín Jiménez, Leo Harlem y Borja Fernández Sedano invitamos a Santiago Segura para hablar de la falta de rendimiento de Leo en el programa, pues cada año se ausenta durante semanas para grabar sus películas. Con él hablamos de películas de nuestra infancia y hablamos del rodaje de 'Padre no hay más que uno 4: Campanas de boda', que se estrena la semana que viene. Luego, Agustín Jiménez cede su espacio en el programa para emplazamiento publicitario con Cornelio y Porreti, que promocionan el Circampamento de verano. 

Con nuestros humoristas Goyo Jiménez, Agustín Jiménez, Leo Harlem y Borja Fernández Sedano invitamos a Santiago Segura para hablar de la falta de rendimiento de Leo en el programa, pues cada año se ausenta durante semanas para grabar sus películas. Con él hablamos de películas de nuestra infancia y hablamos del rodaje de 'Padre no hay más que uno 4: Campanas de boda', que se estrena la semana que viene. Luego, Agustín Jiménez cede su espacio en el programa para emplazamiento publicitario con Cornelio y Porreti, que promocionan el Circampamento de verano. 

Con nuestros humoristas Goyo Jiménez, Agustín Jiménez, Leo Harlem y Borja Fernández Sedano invitamos a Santiago Segura para hablar de la falta de rendimiento de Leo en el programa, pues cada año se ausenta durante semanas para grabar sus películas. Con él hablamos de películas de nuestra infancia y hablamos del rodaje de 'Padre no hay más que uno 4: Campanas de boda', que se estrena la semana que viene. Luego, Agustín Jiménez cede su espacio en el programa para emplazamiento publicitario con Cornelio y Porreti, que promocionan el Circampamento de verano. 

Grandes momentos familiares, lugares, adolescencia y televisión... de todo eso hablamos en este episodio y sí, de cosas que nos hacen suspirar de nostalgia a Shiky, Mónica y Tamarauuu.Además, hoy en "Recomiéndame lo que hay" Tama se rifó con un perfilazo de redes super interesantes y que nos puede cambiar la vida, de verdad, no estamos exagerando. Echen ojo... y ya saben a cargo de quién corrió la mentiiiira de hoy... ¡De MónicaAlfarouuuu!La merch oficial de Somos lo que hay está disponible aquí y llega a todos lados: https://chunchos.mx/collections/somos-lo-que-haySíganos en de nuestro perfil de Instagram: @somosloquehaymx y en las redes de cada une:Mónica Alfarouuuu // @monicalfaroShiky Shikardi // @nodigamosmasTamara Vargas // @ tamaravargasof

Pastora Lupita SV LaIglesia.co GloriosoDerramamiento.com EsperanzaConJesus.com LA IGLESIA – LaIglesia.co es UNA VOZ PROFÉTICA PRECUSORA QUE ANUNCIA LA VENIDA DEL GLORIOSO DERRAMAMIENTO que marcará el comienzo de la Hora Final antes del regreso de Cristo y del movimiento global del Evangelio del Reino de los Cielos. Una Voz preparando al Cuerpo de Cristo para la nueva era de la Hora Final que pronto comenzará, en la cual LA IGLESIA se levantará gloriosamente y predicará El glorioso Evangelio en la plenitud del Espíritu de Cristo y la gloria postrera; y preparará el camino para el regreso de nuestro Mesías. PL LaIglesia.co - GloriosoDerramamiento.com -⁠⁠⁠⁠⁠⁠EsperanzaConJesus.com --- Send in a voice message: https://podcasters.spotify.com/pod/show/laiglesia/message

Con Ketty Garat, Joaquín Manso y Pablo Pombo.

CELÝ ROZHOVOR V DÉLCE 58 MIN. JEN NA HTTPS://HEROHERO.CO/CESTMIR Jakub Vejmola alias Kicom je kryptoměnový, resp. bitcoinový evangelista, nikoli investiční poradce a rozhovor s ním tak není investičním doporučením. V praxi to znamená, že se před šesti lety nadchl pro bitcoin a o rok později o něm začal natáčet videa na Youtube, přestože to pro něj coby introverta znamenalo překročit hranice své komfortní zóny a posadit se před kameru. Dnes má jeho Bitcoinovej kanál bezmála 100 tisíc odběratelů. Sám Kicom je přesvědčený, že bitcoin pomalu, ale jistě mění svět, do kterého jsme se narodili a kde peníze kontrolovaly státy. Považuje ho za jednoduchý nástroj, prostřednictvím kterého lze smysluplně a dlouhodobě spořit, aniž by měnu devalvovala inflace, zkrátka za aktuálně nejlepší spořicí účet. Vadí mu, že například těm, kteří si před třemi lety našetřili milion, klesla jeho kupní síla o 33 %. Lidem by podle něj měl být dostupný snadný způsob, jak uchovat reálnou hodnotu toho, co odpracovali, i jak ji utratit později. Fakt, že v Salvadoru už je bitcoin zákonným platidlem, a i banky v Česku se na něj přestávají dívat jako na zábavu geeků a podivných lidí ve flanelových košilích, jeho legitimitě nahrává. Pravdou nicméně je, že je extrémně volatilní, což není chyba systému, ale důsledek chování spekulantů, kteří jsou schopní jeho kurz vyhnat nahoru i srazit dolů. Jinými slovy je super, ale jak už to tak bývá, kazí ho lidi. V čem spočívají další výhody bitcoinu, kdo za ním stojí, jak energeticky náročné je ho těžit a jak snadné zneužít k financování organizovaného zločinu nebo terorismu a co si myslí o ostatních kryptoměnách? I na to jsem se Kicoma ptal.

Meditación del Evangelio según San Juan 21, 1-14 por el biblista P. Norberto Padilla, misionero claretiano. Viernes de Pascua 5/abr/2024, Jesús se acerca, toma el pan y se lo da, y lo mismo el pescado. Canción: Cristo Resucitó (2023), de Ally & Juan ---------- Lectura del santo evangelio según san Juan 21, 1-14 En aquel tiempo, Jesús se apareció otra vez a los discípulos junto al lago de Tiberíades. Y se apareció de esta manera: Estaban juntos Simón Pedro, Tomás apodado el Mellizo, Natanael de Caná de Galilea, los Zebedeos y otros dos discípulos suyos. Simón Pedro les dice: "Me voy a pescar." Ellos contestan: "Vamos también nosotros contigo." Salieron y se embarcaron; y aquella noche no cogieron nada. Estaba ya amaneciendo, cuando Jesús se presentó en la orilla; pero los discípulos no sabían que era Jesús. Jesús les dice: "Muchachos, ¿tienen pescado?" Ellos contestaron: "No." Él les dice: "Echen la red a la derecha." La echaron, y no tenían fuerzas para sacarla, por la multitud de peces. Y aquel discípulo que Jesús tanto quería, dice a Pedro: "Es el Señor." Al oír que era el Señor, Simón Pedro, que estaba desnudo, se ató la túnica y se echó al agua. Los demás discípulos se acercaron en la barca, porque no distaba de tierra más que unos cien metros, remolcando la red con los peces. Al saltar a tierra, ven unas brasas preparadas y encima pescado y pan. Jesús les dice: "Traigan algo de lo que acaban de pescar." Pedro subió a la barca, arrastró hasta la orilla la red repleta de peces grandes: ciento cincuenta y tres. Y aunque eran tantos, no se rompió la red. Jesús les dice: "Vengan a comer." Ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle quién era, porque sabían bien que era el Señor. Jesús se acerca, toma el pan y se lo da, y lo mismo el pescado. Esta fue la tercera vez que Jesús se apareció a los discípulos, después de resucitar de entre los muertos. Palabra del Señor... Gloria a ti, Señor Jesús #SoyClaretiano #Evangelio #MisionerosClaretianos #CMFAntillas Música de introducción: Lámpara Es Tu Palabra, de Ain Karem

En aquel tiempo, Jesús se les apareció otra vez a los discípulos junto al lago de Tiberíades. Se les apareció de esta manera: Estaban juntos Simón Pedro, Tomás (llamado el Gemelo), Natanael (el de Caná de Galilea), los hijos de Zebedeo y otros dos discípulos. Simón Pedro les dijo: “Voy a pescar”. Ellos le respondieron: “También nosotros vamos contigo”. Salieron y se embarcaron, pero aquella noche no pescaron nada.Estaba amaneciendo, cuando Jesús se apareció en la orilla, pero los discípulos no lo reconocieron. Jesús les dijo: “Muchachos, ¿han pescado algo?” Ellos contestaron: “No”. Entonces él les dijo: “Echen la red a la derecha de la barca y encontrarán peces”. Así lo hicieron, y luego ya no podían jalar la red por tantos pescados.Entonces el discípulo a quien amaba Jesús le dijo a Pedro: “Es el Señor”. Tan pronto como Simón Pedro oyó decir que era el Señor, se anudó a la cintura la túnica, pues se la había quitado, y se tiró al agua. Los otros discípulos llegaron en la barca, arrastrando la red con los pescados, pues no distaban de tierra más de cien metros.Tan pronto como saltaron a tierra, vieron unas brasas y sobre ellas un pescado y pan. Jesús les dijo: “Traigan algunos pescados de los que acaban de pescar”. Entonces Simón Pedro subió a la barca y arrastró hasta la orilla la red, repleta de pescados grandes. Eran ciento cincuenta y tres, y a pesar de que eran tantos, no se rompió la red. Luego les dijo Jesús: “Vengan a almorzar”. Y ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle: ‘¿Quién eres?', porque ya sabían que era el Señor. Jesús se acercó, tomó el pan y se lo dio y también el pescado.Ésta fue la tercera vez que Jesús se apareció a sus discípulos después de resucitar de entre los muertos.

- Presione el botón PLAY para escuchar la catequesis del día, y comparte si lo quieres -+ Del Evangelio según san Juan +En aquel tiempo, Jesús se les apareció otra vez a los discípulos junto al lago de Tiberíades. Se les apareció de esta manera: Estaban juntos Simón Pedro, Tomás (llamado el Gemelo), Natanael (el de Caná de Galilea), los hijos de Zebedeo y otros dos discípulos. Simón Pedro les dijo: "Voy a pescar". Ellos le respondieron: "También nosotros vamos contigo". Salieron y embarcaron, pero aquella noche no pescaron nada.Estaba amaneciendo, cuando Jesús se apareció en la orilla, pero los discípulos no lo reconocieron. Jesús les dijo: "Muchachos, ¿han pescado algo?" Ellos contestaron: "No". Entonces él les dijo: "Echen la red a la derecha de la barca y encontrarán peces". Así lo hicieron, y luego ya no podían jalar la red por tantos pescados.Entonces el discípulo a quien amaba Jesús le dijo a Pedro: "Es el Señor". Tan pronto como Simón Pedro oyó decir que era el Señor, se anudó a la cintura la túnica, pues se lo había quitado, y se tiró al agua. Los otros discípulos llegaron en la barca, arrastrando la red con los pescados, pues no distaban de tierra más de cien metros.Tan pronto como saltaron a tierra, vieron unas brasas y sobre ellas un pescado y pan. Jesús les dijo: "Traigan algunos pescados de los que acaban de pescar": Entonces Simón Pedro subió a la barca y arrastró hasta la orilla la red, repleta de pescados grandes. Eran ciento cincuenta y tres, y a pesar de que eran tantos, no se rompió la red. Luego les dijo Jesús: "Vengan a almorzar". Y ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle: '¿Quién eres?', porque ya sabían que era el Señor. Jesús se acercó, tomó el pan y se lo dio y también el pescado.Esta fue la tercera vez que Jesús se apareció a sus discípulos después de resucitar de entre los muertos.Palabra de Dios.

Jn 21, 1-14: En aquel tiempo, Jesús se les apareció otra vez a los discípulos junto al lago de Tiberíades. Se les apareció de esta manera: Estaban juntos Simón Pedro, Tomás (llamado el Gemelo), Natanael (el de Caná de Galilea), los hijos de Zebedeo y otros dos discípulos. Simón Pedro les dijo: “Voy a pescar”. Ellos le respondieron: “También nosotros vamos contigo”. Salieron y se embarcaron, pero aquella noche no pescaron nada. Estaba amaneciendo, cuando Jesús se apareció en la orilla, pero los discípulos no lo reconocieron. Jesús les dijo: “Muchachos, ¿han pescado algo?” Ellos contestaron: “No”. Entonces él les dijo: “Echen la red a la derecha de la barca y encontrarán peces”. Así lo hicieron, y luego ya no podían jalar la red por tantos pescados. Entonces el discípulo a quien amaba Jesús le dijo a Pedro: “Es el Señor”. Tan pronto como Simón Pedro oyó decir que era el Señor, se anudó a la cintura la túnica, pues se la había quitado, y se tiró al agua. Los otros discípulos llegaron en la barca, arrastrando la red con los pescados, pues no distaban de tierra más de cien metros. Tan pronto como saltaron a tierra, vieron unas brasas y sobre ellas un pescado y pan. Jesús les dijo: “Traigan algunos pescados de los que acaban de pescar”. Entonces Simón Pedro subió a la barca y arrastró hasta la orilla la red, repleta de pescados grandes. Eran ciento cincuenta y tres, y a pesar de que eran tantos, no se rompió la red. Luego les dijo Jesús: “Vengan a almorzar”. Y ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle: ‘¿Quién eres?', porque ya sabían que era el Señor. Jesús se acercó, tomó el pan y se lo dio y también el pescado. Ésta fue la tercera vez que Jesús se apareció a sus discípulos después de resucitar de entre los muertos.

# Señora bonita, véngase a lo más cancelado, lo más desinformado, lo más ‘funado' del internet, de este mundo y los que vienen. Aquí está la Radio de la República, el peor noticiero con su tuitero favorito.

De purititita casualidad el título del episodio tuvo más que ver con lo que hablamos de lo que habíamos pensado, pero bueee... Sólo diremos: ¡pobre Shiky! Tamara y Mónicalfarouuu cooperaron con varias frases de esas que nomásss nos hacen correr al baño, frases que nos hacen arder de coraje, que nos hacen explotar de ira, que nos provocan soltar bofetones del tipo Lola. Frases de mierda, pues...En "Recomiéndame lo que hay" Tamara se rifa con una recomendación musical muy especial, el concepto de Tiny Desk de NPR y la lista de los 10 mejores que tienen en su colección. Echen ojo aquí.¿Será que hoy será el día en que la NOTICREO será la SITICREO? Veamos si Mónica logra convencer a Shikardi y Tamara.¿Y la merca oficial? ¡Pues aquí!Síganos en de nuestro perfil de Instagram: @SomoloquehayMX y en las redes de cada une: Mónica Alfarouuuu / monicalfaro Shiky Shikardi / nodigamosmas Tamara Vargas / tamaravargasof

El director del Larguero analiza la eliminación copera del FC Barcelona en San Mamés y se centra en la figura del entrenador blaugrana, Xavi Hernández. 

+ Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Mateo 25, 14-30 Jesús dijo a sus discípulos esta parábola: El Reino de los Cielos es también como un hombre que, al salir de viaje, llamó a sus servidores y les confió sus bienes. A uno le dio cinco talentos, a otro dos, y uno solo a un tercero, a cada uno según su capacidad; y después partió. En seguida, el que había recibido cinco talentos, fue a negociar con ellos y ganó otros cinco. De la misma manera, el que recibió dos, ganó otros dos, pero el que recibió uno solo, hizo un pozo y enterró el dinero de su señor. Después de un largo tiempo, llegó el señor y arregló las cuentas con sus servidores. El que había recibido los cinco talentos se adelantó y le presentó otros cinco. «Señor, le dijo, me has confiado cinco talentos: aquí están los otros cinco que he ganado». «Está bien, servidor bueno y fiel, le dijo su señor, ya que respondiste fielmente en lo poco, te encargaré de mucho más: entra a participar del gozo de tu señor». Llegó luego el que había recibido dos talentos y le dijo: «Señor, me has confiado dos talentos: aquí están los otros dos que he ganado». «Está bien, servidor bueno y fiel, ya que respondiste fielmente en lo poco, te encargaré de mucho más: entra a participar del gozo de tu señor». Llegó luego el que había recibido un solo talento. «Señor, le dijo, sé que eres un hombre exigente: cosechas donde no has sembrado y recoges donde no has esparcido. Por eso tuve miedo y fui a enterrar tu talento: ¡aquí tienes lo tuyo!». Pero el señor le respondió: «Servidor malo y perezoso, si sabías que cosecho donde no he sembrado y recojo donde no he esparcido, tendrías que haber colocado el dinero en el banco, y así, a mi regreso, lo hubiera recuperado con intereses. Quítenle el talento para dárselo al que tiene diez, porque a quien tiene, se le dará y tendrá de más, pero al que no tiene, se le quitará aun lo que tiene. Echen afuera, a las tinieblas, a este servidor inútil; allí habrá llanto y rechinar de dientes». Palabra del Señor.

Mt 25,14-30. Jesús dijo a sus discípulos esta parábola: El Reino de los Cielos es también como un hombre que, al salir de viaje, llamó a sus servidores y les confió sus bienes. A uno le dio cinco talentos, a otro dos, y uno solo a un tercero, a cada uno según su capacidad; y después partió. En seguida, el que había recibido cinco talentos, fue a negociar con ellos y ganó otros cinco. De la misma manera, el que recibió dos, ganó otros dos, pero el que recibió uno solo, hizo un pozo y enterró el dinero de su señor. Después de un largo tiempo, llegó el señor y arregló las cuentas con sus servidores. El que había recibido los cinco talentos se adelantó y le presentó otros cinco. 'Señor, le dijo, me has confiado cinco talentos: aquí están los otros cinco que he ganado'. 'Está bien, servidor bueno y fiel, le dijo su señor, ya que respondiste fielmente en lo poco, te encargaré de mucho más: entra a participar del gozo de tu señor'. Llegó luego el que había recibido dos talentos y le dijo: 'Señor, me has confiado dos talentos: aquí están los otros dos que he ganado'. 'Está bien, servidor bueno y fiel, ya que respondiste fielmente en lo poco, te encargaré de mucho más: entra a participar del gozo de tu señor'. Llegó luego el que había recibido un solo talento. 'Señor, le dijo, sé que eres un hombre exigente: cosechas donde no has sembrado y recoges donde no has esparcido. Por eso tuve miedo y fui a enterrar tu talento: ¡aquí tienes lo tuyo!'. Pero el señor le respondió: 'Servidor malo y perezoso, si sabías que cosecho donde no he sembrado y recojo donde no he esparcido, tendrías que haber colocado el dinero en el banco, y así, a mi regreso, lo hubiera recuperado con intereses. Quítenle el talento para dárselo al que tiene diez, porque a quien tiene, se le dará y tendrá de más, pero al que no tiene, se le quitará aun lo que tiene. Echen afuera, a las tinieblas, a este servidor inútil; allí habrá llanto y rechinar de dientes'. Voz y Meditación Fr Pedro Brassesco www.rosariodelaaurora.org

Respondiste fielmente en lo poco, te encargaré de mucho más¡Hola, soy Alekz! Te comparto la lectura del evangelio de hoy en audio, ¡suscríbee para escuchar siempre el evangelio del día!19 de noviembre de 2023Trigésimo tercer domingo del Tiempo OrdinarioEvangelio según San Mateo 25,14-30.Jesús dijo a sus discípulos esta parábola:El Reino de los Cielos es también como un hombre que, al salir de viaje, llamó a sus servidores y les confió sus bienes.A uno le dio cinco talentos, a otro dos, y uno solo a un tercero, a cada uno según su capacidad; y después partió. En seguida,el que había recibido cinco talentos, fue a negociar con ellos y ganó otros cinco.De la misma manera, el que recibió dos, ganó otros dos,pero el que recibió uno solo, hizo un pozo y enterró el dinero de su señor.Después de un largo tiempo, llegó el señor y arregló las cuentas con sus servidores.El que había recibido los cinco talentos se adelantó y le presentó otros cinco. 'Señor, le dijo, me has confiado cinco talentos: aquí están los otros cinco que he ganado'.'Está bien, servidor bueno y fiel, le dijo su señor, ya que respondiste fielmente en lo poco, te encargaré de mucho más: entra a participar del gozo de tu señor'.Llegó luego el que había recibido dos talentos y le dijo: 'Señor, me has confiado dos talentos: aquí están los otros dos que he ganado'.'Está bien, servidor bueno y fiel, ya que respondiste fielmente en lo poco, te encargaré de mucho más: entra a participar del gozo de tu señor'.Llegó luego el que había recibido un solo talento. 'Señor, le dijo, sé que eres un hombre exigente: cosechas donde no has sembrado y recoges donde no has esparcido.Por eso tuve miedo y fui a enterrar tu talento: ¡aquí tienes lo tuyo!'.Pero el señor le respondió: 'Servidor malo y perezoso, si sabías que cosecho donde no he sembrado y recojo donde no he esparcido,tendrías que haber colocado el dinero en el banco, y así, a mi regreso, lo hubiera recuperado con intereses.Quítenle el talento para dárselo al que tiene diez,porque a quien tiene, se le dará y tendrá de más, pero al que no tiene, se le quitará aun lo que tiene.Echen afuera, a las tinieblas, a este servidor inútil; allí habrá llanto y rechinar de dientes'.Conoce el proyecto de Ora Evangelis en nuestro sitio web: https://evangelio.mx

Se empieza este episodio pidiendo perdón pero se termina con gracia y risas, pero sobre todo, en este episodio nos rifamos una serie de consejazos que tienen que escuchar y que seguro les van a servir. Disfraces, suegras, funerales y amigas peruanas y despidos, de todo eso hablan Shiky, Tamara, y sí, Mónicalfarouuuu desde España.Y de la Recomendación de es lo que hay, ¡sí hay! Y es de amor a primera vista. Shiky habla de un amor de aeropuerto que evoluciona de lo mejorrrr

Die Bears polstern ihre Defense mit Sweat auf. Und das ist auch dringend nötig. Jetzt müssen die Bears gegen die Saints ran. Wird es reichen? Oder geht das Team aus der Windy City mit wehenden Fahnen unter? Mike und Carsten sprechen drüber. Genauwie alle anderen Spiele und natürlich auch die restlichen News! Raiders ohne Headcoach und GM! Wie gehts weiter für Las Vegas? Reißen die Raiders jetzt gegen die Giants das Ruder rum? Hosted on Acast. See acast.com/privacy for more information.

José Luis Martín, un estudiante de la UNED senior, ha puesto en marcha una recogida de firmas para reclamar la readmisión de su profesora de 75 años, Pilar Ruiz-Va. En Por fin no es lunes hablamos con ellos.

† Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Mateo 25, 14-30 Jesús dijo a sus discípulos esta parábola: El Reino de los Cielos es también como un hombre que al salir de viaje, llamó a sus servidores y les confió sus bienes. A uno le dio cinco talentos, a otro dos, y uno solo a un tercero, a cada uno según su capacidad; y después partió. En seguida, el que había recibido cinco talentos fue a negociar con ellos y ganó otros cinco. De la misma manera, el que recibió dos ganó otros dos, pero el que recibió uno solo hizo un pozo y enterró el dinero de su señor. Después de un largo tiempo, llegó el señor y arregló las cuentas con sus servidores. El que había recibido los cinco talentos se adelantó y le presentó otros cinco. «Señor, le dijo, me has confiado cinco talentos aquí: están los otros cinco que he ganado». «Está bien, servidor bueno y fiel, le dijo su señor, ya que respondiste fielmente en lo poco, te encargaré de mucho más: entra a participar del gozo de tu señor». Llegó luego el que había recibido dos talentos y le dijo: «Señor, me has confiado dos talentos: aquí están, los otros dos que he ganado». «Está bien, servidor bueno y fiel, ya que respondiste fielmente en lo poco, te encargaré de mucho más: entra a participar del gozo de tu señor». Llegó luego el que había recibido un solo talento. «Señor, le dijo, sé que eres un hombre exigente: cosechas donde no has sembrado y recoges donde no has esparcido. Por eso tuve miedo y fui a enterrar tu talento: ¡aquí tienes lo tuyo!». Pero el señor le respondió: «Servidor malo y perezoso, si sabías que cosecho donde no he sembrado y recojo donde no he esparcido, tendrías que haber colocado el dinero en el banco, y así, a mi regreso, lo hubiera recuperado con intereses. Quítenle el talento para dárselo al que tiene diez, porque a quien tiene, se le dará y tendrá de más, pero al que no tiene, se le quitará aun lo que tiene. Echen afuera, a las tinieblas, a este servidor inútil; allí habrá llanto y rechinar de dientes» Palabra del Señor.

Mt 25,14-30. Jesús dijo a sus discípulos esta parábola: El Reino de los Cielos es también como un hombre que, al salir de viaje, llamó a sus servidores y les confió sus bienes. A uno le dio cinco talentos, a otro dos, y uno solo a un tercero, a cada uno según su capacidad; y después partió. En seguida, el que había recibido cinco talentos, fue a negociar con ellos y ganó otros cinco. De la misma manera, el que recibió dos, ganó otros dos, pero el que recibió uno solo, hizo un pozo y enterró el dinero de su señor. Después de un largo tiempo, llegó el señor y arregló las cuentas con sus servidores. El que había recibido los cinco talentos se adelantó y le presentó otros cinco. 'Señor, le dijo, me has confiado cinco talentos: aquí están los otros cinco que he ganado'. 'Está bien, servidor bueno y fiel, le dijo su señor, ya que respondiste fielmente en lo poco, te encargaré de mucho más: entra a participar del gozo de tu señor'. Llegó luego el que había recibido dos talentos y le dijo: 'Señor, me has confiado dos talentos: aquí están los otros dos que he ganado'. 'Está bien, servidor bueno y fiel, ya que respondiste fielmente en lo poco, te encargaré de mucho más: entra a participar del gozo de tu señor'. Llegó luego el que había recibido un solo talento. 'Señor, le dijo, sé que eres un hombre exigente: cosechas donde no has sembrado y recoges donde no has esparcido. Por eso tuve miedo y fui a enterrar tu talento: ¡aquí tienes lo tuyo!'. Pero el señor le respondió: 'Servidor malo y perezoso, si sabías que cosecho donde no he sembrado y recojo donde no he esparcido, tendrías que haber colocado el dinero en el banco, y así, a mi regreso, lo hubiera recuperado con intereses. Quítenle el talento para dárselo al que tiene diez, porque a quien tiene, se le dará y tendrá de más, pero al que no tiene, se le quitará aun lo que tiene. Echen afuera, a las tinieblas, a este servidor inútil; allí habrá llanto y rechinar de dientes'. Voz y meditación Fr Pedro Brassesco www.rosariodelaaurora.org

Respondiste fielmente en lo poco, te encargaré de mucho más¡Hola, soy Alekz! Te comparto la lectura del evangelio de hoy en audio, ¡suscríbee para escuchar siempre el evangelio del día!2 de septiembre de 2023Sábado de la vigesimoprimera semana del Tempo OrdinarioEvangelio según San Mateo 25,14-30.Jesús dijo a sus discípulos esta parábola:El Reino de los Cielos es también como un hombre que, al salir de viaje, llamó a sus servidores y les confió sus bienes.A uno le dio cinco talentos, a otro dos, y uno solo a un tercero, a cada uno según su capacidad; y después partió. En seguida,el que había recibido cinco talentos, fue a negociar con ellos y ganó otros cinco.De la misma manera, el que recibió dos, ganó otros dos,pero el que recibió uno solo, hizo un pozo y enterró el dinero de su señor.Después de un largo tiempo, llegó el señor y arregló las cuentas con sus servidores.El que había recibido los cinco talentos se adelantó y le presentó otros cinco. 'Señor, le dijo, me has confiado cinco talentos: aquí están los otros cinco que he ganado'.'Está bien, servidor bueno y fiel, le dijo su señor, ya que respondiste fielmente en lo poco, te encargaré de mucho más: entra a participar del gozo de tu señor'.Llegó luego el que había recibido dos talentos y le dijo: 'Señor, me has confiado dos talentos: aquí están los otros dos que he ganado'.'Está bien, servidor bueno y fiel, ya que respondiste fielmente en lo poco, te encargaré de mucho más: entra a participar del gozo de tu señor'.Llegó luego el que había recibido un solo talento. 'Señor, le dijo, sé que eres un hombre exigente: cosechas donde no has sembrado y recoges donde no has esparcido.Por eso tuve miedo y fui a enterrar tu talento: ¡aquí tienes lo tuyo!'.Pero el señor le respondió: 'Servidor malo y perezoso, si sabías que cosecho donde no he sembrado y recojo donde no he esparcido,tendrías que haber colocado el dinero en el banco, y así, a mi regreso, lo hubiera recuperado con intereses.Quítenle el talento para dárselo al que tiene diez,porque a quien tiene, se le dará y tendrá de más, pero al que no tiene, se le quitará aun lo que tiene.Echen afuera, a las tinieblas, a este servidor inútil; allí habrá llanto y rechinar de dientes'.Conoce el proyecto de Ora Evangelis en nuestro sitio web: https://evangelio.mx

================================================== ==SUSCRIBETEhttps://www.youtube.com/channel/UCNpffyr-7_zP1x1lS89ByaQ?sub_confirmation=1================================================== == DEVOCIÓN MATUTINA PARA MUJERES 2023“HIJA MÍA, NO TENGAS MIEDO”Narrado por: Sirley DelgadilloDesde: Bucaramanga, ColombiaUna cortesía de DR'Ministries y Canaan Seventh-Day Adventist Church  02 DE AGOSTO EN MANOS DE LOS BABILONIOSGuedalias les aseguró bajo juramento: "No tendrán miedo de someterse a los caldeos. Quédense a vivir en el país, sométanse al rey de Babilonia, y les irá bien". Jeremías 40:9, DHH.Jeremías fue profeta durante cinco reinados diferentes (los últimos cinco reyes de Judá), y sufrió muchas penalidades por llevar a cabo su misión. Bajo el reinado de Sedequías, el profeta fue azotado y encerrado en la casa del escriba Jonatán (Jeremías 37:15, 16), la cual se fuertes en cárcel. Allí, el rey lo visitó para interrogarlo acerca de las profecías (vers. 17) y confesó su miedo. Sedequías respondió: "Tengo miedo de los judíos que se han pasado a los caldeos; si caigo en manos de ellos, me torturarán" (Jeremías 38:19, DHH). Donde no hay temor de Dios, el miedo reina.El rey permitió a Jeremías salir al patio de la cárcel durante poco tiempo, y desde allí dio su mensaje. Entonces lo culparon de debilitar a los soldados que quedaran, y lo echaron a una cisterna llena de barro. Allí Jeremías por poco muere, si no hubiera sido por la bondad e intercesión de un extranjero etiope, Ebed-melec. Cuando Babilonia tomó a Judá tal como había sido profetizado, Dios no olvidó la bondad del extranjero con su siervo en tiempo de necesidad. El mismo profeta debía llevarle la buena noticia de protección de su vida (ver Jeremías 39:16-18). Dios honró a este desconocido caballero que arriesgó su carrera y su vida por rescatar al siervo de Dios. Cuando elegimos hacer lo correcto, aunque la recompensa se demore, siempre llega.Gedalias fue nombrado representante del gobierno babilónico entre los judíos, y el capitán de la guardia trató cortésmente a Jeremías, como un representante de Dios que había instado al pueblo a someterse. Le permitió ir donde quisiera, pero decidió quedarse con los pocos sobrevivientes de lo que una vez fuera la orgullosa Judá. El miedo azotaba a los pocos que quedaban, al punto que el nuevo gobernante los animó a confiar y ser obedientes al recién establecido reino. ¡Cuán diferente habría sido la historia si Judá hubiese atendido a las amonestaciones de Jeremías! Los últimos eventos pasaron muy rápido: el palacio del rey y el templo fueron quemados, las murallas fueron derribadas, dejando la ciudad en ruina total, con solo un puñado de sobrevivientes. "Es el propósito especial de Satanás inducir a los hombres a pecar, y dejarlos luego, sin defensa ni esperanza, pero con temor de ir en busca de perdón. Más Dios los invita así: "Echen mano esos enemigos de mi fortaleza, y hagan paz conmigo. ¡Sí, que hagan paz conmigo!' (Isaías 27:5, V.M.) En Cristo han sido tomadas todas las medidas, y se ofrece todo aliento" (PR, p. 241)Escucha las advertencias de la Biblia y sé fiel en medio de cualquier crisis. 224

En este episodio comentamos el debate de las primarias de oposición, y evaluamos a cada candidato. Echen el cuento aquí, ¿cuál es su favorito? Además hablamos sobre nuestros primeros días en Threads. Todavía no vemos claro hacia dónde va la cosa. Patreon: ⁠⁠⁠https://www.patreon.com/pueblopeople⁠⁠⁠ Y por aquí le llegan al resto: ⁠⁠⁠https://linktr.ee/pueblopeople⁠⁠⁠ Creado por Oswaldo Graziani y Raúl Stolk

Seguimos con la meditación del Sermón del Monte.

péndice al libro: La manifestación de Jesús a orillas del lago  21 :B:1 Después de esto, nuevamente se manifestó Jesús a sus discípulos en la orilla del lago de Tiberíades. Y se manifestó como sigue: 2 Estaban reunidos Simón Pedro, Tomás el Mellizo, Na tanael, de Caná de Galilea, los hijos del Zebedeo y otros dos discípulos. 3 Simón Pedro les dijo: «Voy a pescar.» Contestaron: «Vamos tam bién nosotros contigo.» Salieron, pues, y subieron a la barca, pero aquella noche no pescaron nada. 4 Al amanecer, Jesús estaba pa rado en la orilla, pero los discípulos no sabían que era él. 5 Jesús les dijo: «Muchachos, ¿tienen algo que comer?» Le contestaron: «Nada.» 6 Entonces Jesús les dijo: «Echen la red a la derecha y encontrarán pes ca.» Echaron la red, y no tenían fuer zas para recogerla por la gran cantidad de peces. 7 El discípulo al que Jesús amaba dijo a Simón Pedro: «Es el Señor.» 8 Apenas Pedro oyó decir que era el Señor, se puso la ropa, pues estaba sin nada, y se echó al agua. Los otros discípulos llegaron con la barca —de hecho, no estaban lejos, a unos cien metros de la orilla; arrastraban la red llena de peces. 9 Al bajar a tierra encontraron fuego encendido, pescado sobre las brasas y pan. 10 Jesús les dijo: «Traigan algunos de los pescados que acaban de sacar.» 11 Simón Pedro subió a la barca y sacó la red llena con ciento cincuenta y tres pescados grandes. Y a pesar de que hubiera tantos, no se rompió la red. 12 Entonces Jesús les dijo: «Vengan a desayunar». Ninguno de los discípulos se atrevió a preguntarle quién era, pues sabían que era el Señor. 13 Jesús se acercó, tomó el pan y se lo repartió. Lo mismo hizo con los pescados. 14 Esta fue la tercera vez que Jesús se manifestó a sus discípulos después de resucitar de entre los muertos. 15 Cuando terminaron de comer, Jesús dijo a Simón Pedro: «Simón, hijo de Juan, ¿me amas más que éstos?» Contestó: «Sí, Señor, tú sa bes que te quiero.» Jesús le dijo: «Apacienta mis corderos.» 16 Le preguntó por segunda vez: «Simón, hijo de Juan, ¿me amas?» Pedro volvió a contestar: «Sí, Señor, tú sabes que te quiero.» Jesús le dijo: «Cuida de mis ovejas.» ...

Hoy hablamos con Adriana Arismendi, vicepresidenta de mercadeo y ventas digitales para grupo Bancolombia, además de ser la autora del amazon bestseller "Líder Irrevenrente"En esta conversación vas a encontrar:Los valores que necesitas desarrollar para liderar estirando los límites.Cómo descubrir el talento de las personas en tus equiposCómo entender las renuncias que se deben hacer en la creación de branding.Bienvenidos a una nueva conversación de CMO Latam.Accede a CMO LATAM TOOLKIT, una página con recursos pensados para que conozcas las nuevas tendencias del marketing y lleves tus campañas al siguiente nivel.Entra a https://naranjamedia.co/cmo-latam-toolkit/ y prepárate para transformar tu estrategia en una experiencia inigualable.

Jesús se acerca, toma el pan y se lo da, y lo mismo el pescado. Meditación del Evangelio según San Juan 21, 1-14 por el biblista P. Norberto Padilla, misionero claretiano. Canción: Cristo Resucitó (2023), de Ally & Juan ---------- Lectura del santo evangelio según san Lucas 24, 35-48 En aquel tiempo, Jesús se apareció otra vez a los discípulos junto al lago de Tiberíades. Y se apareció de esta manera: Estaban juntos Simón Pedro, Tomás apodado el Mellizo, Natanael el de Caná de Galilea, los Zebedeos y otros dos discípulos suyos. Simón Pedro les dice: "Me voy a pescar." Ellos contestan: "Vamos también nosotros contigo." Salieron y se embarcaron; y aquella noche no cogieron nada. Estaba ya amaneciendo, cuando Jesús se presentó en la orilla; pero los discípulos no sabían que era Jesús. Jesús les dice: "Muchachos, ¿tienen pescado?" Ellos contestaron: "No." Él les dice: "Echen la red a la derecha." La echaron, y no tenían fuerzas para sacarla, por la multitud de peces. Y aquel discípulo que Jesús tanto quería, dice a Pedro: "Es el Señor." Al oír que era el Señor, Simón Pedro, que estaba desnudo, se ató la túnica y se echó al agua. Los demás discípulos se acercaron en la barca, porque no distaba de tierra más que unos cien metros, remolcando la red con los peces. Al saltar a tierra, ven unas brasas preparadas y encima pescado y pan. Jesús les dice: "Traigan algo de lo que acaban de pescar." Pedro subió a la barca, arrastró hasta la orilla la red repleta de peces grandes: ciento cincuenta y tres. Y aunque eran tantos, no se rompió la red. Jesús les dice: "Vengan a comer." Ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle quién era, porque sabían bien que era el Señor. Jesús se acerca, toma el pan y se lo da, y lo mismo el pescado. Esta fue la tercera vez que Jesús se apareció a los discípulos, después de resucitar de entre los muertos. Palabra del Señor... Gloria a ti, Señor Jesús #SoyClaretiano #Evangelio #MisionerosClaretianos Música de introducción: Lámpara Es Tu Palabra, de Ain Karem

En aquel tiempo, Jesús se les apareció otra vez a los discípulos junto al lago de Tiberíades. Se les apareció de esta manera: Estaban juntos Simón Pedro, Tomás (llamado el Gemelo), Natanael (el de Caná de Galilea), los hijos de Zebedeo y otros dos discípulos. Simón Pedro les dijo: “Voy a pescar”. Ellos le respondieron: “También nosotros vamos contigo”. Salieron y se embarcaron, pero aquella noche no pescaron nada.Estaba amaneciendo, cuando Jesús se apareció en la orilla, pero los discípulos no lo reconocieron. Jesús les dijo: “Muchachos, ¿han pescado algo?” Ellos contestaron: “No”. Entonces él les dijo: “Echen la red a la derecha de la barca y encontrarán peces”. Así lo hicieron, y luego ya no podían jalar la red por tantos pescados.Entonces el discípulo a quien amaba Jesús le dijo a Pedro: “Es el Señor”. Tan pronto como Simón Pedro oyó decir que era el Señor, se anudó a la cintura la túnica, pues se la había quitado, y se tiró al agua. Los otros discípulos llegaron en la barca, arrastrando la red con los pescados, pues no distaban de tierra más de cien metros.Tan pronto como saltaron a tierra, vieron unas brasas y sobre ellas un pescado y pan. Jesús les dijo: “Traigan algunos pescados de los que acaban de pescar”. Entonces Simón Pedro subió a la barca y arrastró hasta la orilla la red, repleta de pescados grandes. Eran ciento cincuenta y tres, y a pesar de que eran tantos, no se rompió la red. Luego les dijo Jesús: “Vengan a almorzar”. Y ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle: ‘¿Quién eres?', porque ya sabían que era el Señor. Jesús se acercó, tomó el pan y se lo dio y también el pescado.Ésta fue la tercera vez que Jesús se apareció a sus discípulos después de resucitar de entre los muertos.

- Presione el botón PLAY para escuchar la catequesis del día, y comparte si lo quieres -+ Del Evangelio según san Juan +En aquel tiempo, Jesús se les apareció otra vez a los discípulos junto al lago de Tiberíades. Se les apareció de esta manera: Estaban juntos Simón Pedro, Tomás (llamado el Gemelo), Natanael (el de Caná de Galilea), los hijos de Zebedeo y otros dos discípulos. Simón Pedro les dijo: "Voy a pescar". Ellos le respondieron: "También nosotros vamos contigo". Salieron y embarcaron, pero aquella noche no pescaron nada.Estaba amaneciendo, cuando Jesús se apareció en la orilla, pero los discípulos no lo reconocieron. Jesús les dijo: "Muchachos, ¿han pescado algo?" Ellos contestaron: "No". Entonces él les dijo: "Echen la red a la derecha de la barca y encontrarán peces". Así lo hicieron, y luego ya no podían jalar la red por tantos pescados.Entonces el discípulo a quien amaba Jesús le dijo a Pedro: "Es el Señor". Tan pronto como Simón Pedro oyó decir que era el Señor, se anudó a la cintura la túnica, pues se lo había quitado, y se tiró al agua. Los otros discípulos llegaron en la barca, arrastrando la red con los pescados, pues no distaban de tierra más de cien metros.Tan pronto como saltaron a tierra, vieron unas brasas y sobre ellas un pescado y pan. Jesús les dijo: "Traigan algunos pescados de los que acaban de pescar": Entonces Simón Pedro subió a la barca y arrastró hasta la orilla la red, repleta de pescados grandes. Eran ciento cincuenta y tres, y a pesar de que eran tantos, no se rompió la red. Luego les dijo Jesús: "Vengan a almorzar". Y ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle: '¿Quién eres?', porque ya sabían que era el Señor. Jesús se acercó, tomó el pan y se lo dio y también el pescado.Esta fue la tercera vez que Jesús se apareció a sus discípulos después de resucitar de entre los muertos.Palabra de Dios.

Este episodio es muy especial para nosotros pues después de lo vivido por uno de nosotros, se ha vuelto básico transmitirles la importancia de tener cariño y cuidado con una parte en especial de nuestro cuerpo. ¿Adivinan cuál es? Echen ojo... En este episodio, Shiky, Mónica y Tamara hablan de grandes éxitos y supeeeeer fracasos, de esos que casi nadie quiere hablar pero que son inevitables en el camino a la pinshicima. ¿Nuestros? La Recomendación POSTCOVID hoy corre a cuenta de uno de los románticos del grupo, ¿adivinan quién? E de la que están disponibles facilito facilito. Y hoy, la cosa se pone peluda con las NOTAS MENTIROSAS.Nos leemos y chismeamos en @somosloquehaymx en Instagram :)

Dios te bendiga de manera especial. Este es el día que El Señor ha hecho, nos alegraremos y gozaremos en su presencia. Te invito conmigo a participar de una experiencia maravillosa. Donde Jesús invita a sus discípulos a cenar. Pero no es cualquier cena. Es una cena reparadora, transformadora y liberadora. Juan capítulo 21 versículo del 1 al 19 voy a leer desde el versículo 3:   3 Simón Pedro dijo: —Me voy a pescar. —Nosotros también vamos—dijeron los demás. Así que salieron en la barca, pero no pescaron nada en toda la noche. 4 Al amanecer, Jesús apareció en la playa, pero los discípulos no podían ver quién era. 5 Les preguntó: —Amigos,[c] ¿pescaron algo? —No—contestaron ellos. 6 Entonces él dijo: —¡Echen la red a la derecha de la barca y tendrán pesca! Ellos lo hicieron y no podían sacar la red por la gran cantidad de peces que contenía. 7 Entonces el discípulo a quien Jesús amaba le dijo a Pedro: «¡Es el Señor!». Cuando Simón Pedro oyó que era el Señor, se puso la túnica (porque se la había quitado para trabajar), se tiró al agua y se dirigió hacia la orilla. 8 Los otros se quedaron en la barca y arrastraron la pesada red llena de pescados hasta la orilla, porque estaban solo a unos noventa metros[d] de la playa. 9 Cuando llegaron, encontraron el desayuno preparado para ellos: pescado a la brasa y pan. 10 «Traigan algunos de los pescados que acaban de sacar», dijo Jesús. 11 Así que Simón Pedro subió a la barca y arrastró la red hasta la orilla. Había 153 pescados grandes, y aun así la red no se había roto. 12 «¡Ahora acérquense y desayunen!», dijo Jesús. Ninguno de los discípulos se atrevió a preguntarle: «¿Quién eres?». Todos sabían que era el Señor. 13 Entonces Jesús les sirvió el pan y el pescado. 14 Esa fue la tercera vez que se apareció a sus discípulos después de haber resucitado de los muertos. 15 Después del desayuno, Jesús le preguntó a Simón Pedro: —Simón, hijo de Juan, ¿me amas más que estos?[e] —Sí, Señor—contestó Pedro—, tú sabes que te quiero. —Entonces, alimenta a mis corderos—le dijo Jesús. 16 Jesús repitió la pregunta: —Simón, hijo de Juan, ¿me amas? —Sí, Señor—dijo Pedro—, tú sabes que te quiero. —Entonces, cuida de mis ovejas—dijo Jesús. 17 Le preguntó por tercera vez: —Simón, hijo de Juan, ¿me quieres? A Pedro le dolió que Jesús le dijera la tercera vez: «¿Me quieres?». Le contestó: —Señor, tú sabes todo. Tú sabes que yo te quiero.   La Biblia relata que Cristo comparte esta cena de reconciliación, no solo con sus discípulos, es que es especialmente con Pedro. En esa experiencia el Señor le confirma su llamado y también restaura su relación con él. Yo pienso que no es casualidad, que Jesús le haya preguntado a Pedro tres veces si lo amaba. Yo creo que allí alrededor de esas brasas y alrededor de ese pescado y alrededor de ese grupo íntimo y precioso de amigos; se estaban sanando los recuerdos de la traición. Y esto es maravilloso... Porque el Señor también nos invita, para que podamos compartir su pan, para que podamos ser sanados de toda nuestra culpa y de toda nuestra vergüenza. Que maravilloso es que el Señor nos invite a comer. Y yo creo que el día de hoy, en algún lugar, Dios quiere sanar alguien. Es el Señor invitando a alguien a participar de una mesa distinta, de una mesa única; donde no sé recrimina. Dónde simplemente se perdona, se cancela la deuda pendiente y desde ese momento estamos seguros que Pedro fue otra persona. Posiblemente esa carga de amargura y dolor que había dentro del corazón se fue. Y yo creo que debemos buscar esos espacios. Espacios reconciliadores con gente bella, hermosa; con gente que necesita ser escuchada, para que todas esas cargas que oprimen la vida del ser humano se vayan. Y comiencen experiencias nuevas, experiencias nuevas que transforman la vida del ser humano. Que así nos ayuda El Señor.

† Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Mateo 25, 14-30 Jesús dijo a sus discípulos esta parábola: El Reino de los Cielos es también como un hombre que al salir de viaje, llamó a sus servidores y les confió sus bienes. A uno le dio cinco talentos, a otro dos, y uno solo a un tercero, a cada uno según su capacidad; y después partió. En seguida, el que había recibido cinco talentos fue a negociar con ellos y ganó otros cinco. De la misma manera, el que recibió dos ganó otros dos, pero el que recibió uno solo hizo un pozo y enterró el dinero de su señor. Después de un largo tiempo, llegó el señor y arregló las cuentas con sus servidores. El que había recibido los cinco talentos se adelantó y le presentó otros cinco. «Señor, le dijo, me has confiado cinco talentos aquí: están los otros cinco que he ganado». «Está bien, servidor bueno y fiel, le dijo su señor, ya que respondiste fielmente en lo poco, te encargaré de mucho más: entra a participar del gozo de tu señor». Llegó luego el que había recibido dos talentos y le dijo: «Señor, me has confiado dos talentos: aquí están, los otros dos que he ganado». «Está bien, servidor bueno y fiel, ya que respondiste fielmente en lo poco, te encargaré de mucho más: entra a participar del gozo de tu señor». Llegó luego el que había recibido un solo talento. «Señor, le dijo, sé que eres un hombre exigente: cosechas donde no has sembrado y recoges donde no has esparcido. Por eso tuve miedo y fui a enterrar tu talento: ¡aquí tienes lo tuyo!». Pero el señor le respondió: «Servidor malo y perezoso, si sabías que cosecho donde no he sembrado y recojo donde no he esparcido, tendrías que haber colocado el dinero en el banco, y así, a mi regreso, lo hubiera recuperado con intereses. Quítenle el talento para dárselo al que tiene diez, porque a quien tiene, se le dará y tendrá de más, pero al que no tiene, se le quitará aun lo que tiene. Echen afuera, a las tinieblas, a este servidor inútil; allí habrá llanto y rechinar de dientes» Palabra del Señor.

Señora bonita. Amigo amo de casa. YA ES MIÉRCOLES. Mitad de semana y lo que queda es resbaladilla. Pero no ande por el mundo sin saber qué es lo que pasa en él. Y para eso nos tiene. Pare la oreja, súbale a su radito que estas son las noticias:-¡ECHEN PAJA!… Puente colgante, con todo y alcalde, se derrumba en Cuernavaca. Estaban re inaugurando el lugar. -¿RED ALITO?… Acusan a líder nacional del PRI y familia que lo acompaña de triangular lanitas para comprar propiedades en su natal Campeche. -AY EQUIS GOEY SON MIGRANTES… 30 mil elementos del Ejército, Marina y Guardia Nacional para frenar las olas migratorias. Bienvenidos a México.-Y EN LA MAÑANERA: ¿QUÉN POMPÓ? AMLO ameniza la conferencia, ahora con Chico-Che. ¡TODOS A LA PISTA!Completamente en vivo y en directo. De Grupo Fórmula, transmitiendo a todo México, quiera México o no quiera. Abriendo la conversación. Haciendo el bien sin mirar a quien. Ya llegaron, ya están listos, usted no esperaba nada y eso es justo lo que ellos dan: La Radio de La República.