Podcasts about Tiber

river in Italy

  • 362PODCASTS
  • 795EPISODES
  • 22mAVG DURATION
  • 5WEEKLY NEW EPISODES
  • May 20, 2025LATEST
Tiber

POPULARITY

20172018201920202021202220232024


Best podcasts about Tiber

Latest podcast episodes about Tiber

A Piccoli Sorsi - Commento alla Parola del giorno delle Apostole della Vita Interiore
riflessioni sul Vangelo di Mercoledì 21 Maggio 2025 (Gv 15, 1-8) - Apostola Tiziana

A Piccoli Sorsi - Commento alla Parola del giorno delle Apostole della Vita Interiore

Play Episode Listen Later May 20, 2025 6:47


- Premere il tasto PLAY per ascoltare la catechesi del giorno -+ Dal Vangelo secondo Giovanni +In quel tempo, Gesù passò all'altra riva del mare di Galilea, cioè di Tiberìade, e lo seguiva una grande folla, perché vedeva i segni che compiva sugli infermi. Gesù salì sul monte e là si pose a sedere con i suoi discepoli. Era vicina la Pasqua, la festa dei Giudei.Allora Gesù, alzàti gli occhi, vide che una grande folla veniva da lui e disse a Filippo: «Dove potremo comprare il pane perché costoro abbiano da mangiare?». Diceva così per metterlo alla prova; egli infatti sapeva quello che stava per compiere. Gli rispose Filippo: «Duecento denari di pane non sono sufficienti neppure perché ognuno possa riceverne un pezzo».Gli disse allora uno dei suoi discepoli, Andrea, fratello di Simon Pietro: «C'è qui un ragazzo che ha cinque pani d'orzo e due pesci; ma che cos'è questo per tanta gente?». Rispose Gesù: «Fateli sedere». C'era molta erba in quel luogo. Si misero dunque a sedere ed erano circa cinquemila uomini.Allora Gesù prese i pani e, dopo aver reso grazie, li diede a quelli che erano seduti, e lo stesso fece dei pesci, quanto ne volevano. E quando furono saziati, disse ai suoi discepoli: «Raccogliete i pezzi avanzati, perché nulla vada perduto». Li raccolsero e riempirono dodici canestri con i pezzi dei cinque pani d'orzo, avanzati a coloro che avevano mangiato.Allora la gente, visto il segno che egli aveva compiuto, diceva: «Questi è davvero il profeta, colui che viene nel mondo!». Ma Gesù, sapendo che venivano a prenderlo per farlo re, si ritirò di nuovo sul monte, lui da solo.Parola del Signore.

Catholic History Trek
198. When a Raft of Barbers Crossed the Tiber

Catholic History Trek

Play Episode Listen Later May 5, 2025 8:54


A family of converts played a big role in the early years of New Hampshire's first Catholic church, St. Mary's in Claremont.("Cradles of Catholicism" series, no. 37, New Hampshire)

Soy Claretiano
Lámpara para mis pasos - Trabajen no por el alimento que perece, sino por el que perdura para la vida eterna.

Soy Claretiano

Play Episode Listen Later May 5, 2025 11:34


Meditación del Evangelio según San Juan 6, 22-29 por el biblista P. Norberto Padilla, misionero claretiano.Lunes 5/may/2025, Trabajen no por el alimento que perece, sino por el que perdura para la vida eterna.Canción: Yo creo en las promesas de Dios (2018), de Daniel Poli----------Lectura del santo evangelio según san Juan 6, 22-29Después que Jesús hubo saciado a cinco mil hombres, sus discípulos lo vieron caminando sobre el lago. Al día siguiente, la gente que se había quedado al otro lado del lago, notó que allí no había habido más que una lancha y que Jesús no había embarcado con sus discípulos, sino que sus discípulos se habían marchado solos. Entre tanto, unas lanchas de Tiberíades, llegaron cerca del sitio, donde habían comido el pan, sobre el que el Señor pronunció la acción de gracias. Cuando la gente vio que ni Jesús ni sus discípulos estaban allí, se embarcaron y fueron a Cafarnaúm, en busca de Jesús. Al encontrarlo en la otra orilla del lago, le preguntaron: "Maestro, ¿cuándo has venido aquí?". Jesús les contestó: "Les aseguro que me buscan, no por las señales que han visto, sino porque han comido pan hasta saciarse. Trabajen, no por el alimento que perece, sino por el alimento que perdura para la vida eterna, el que les dará el Hijo del hombre, pues a éste lo ha sellado el Padre, Dios". Ellos le preguntaron: "¿Y qué obras tenemos que hacer para trabajar en lo que Dios quiere?". Respondió Jesús: "La obra que Dios quiere es esta: que crean en el que Él ha enviado".Palabra del Señor... Gloria a ti, Señor Jesús#SoyClaretiano #Evangelio #MisionerosClaretianos #CMFAntillasIntro: Lámpara Es Tu Palabra, de Ain Karem

Algo del Evangelio - Padre Rodrigo Aguilar
Juan 6, 22-29 - III Lunes de Pascua

Algo del Evangelio - Padre Rodrigo Aguilar

Play Episode Listen Later May 5, 2025 8:20


+ Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Juan 6, 22-29 Después de que Jesús alimentó a unos cinco mil hombres, sus discípulos lo vieron caminando sobre el agua. Al día siguiente, la multitud que se había quedado en la otra orilla vio que Jesús no había subido con sus discípulos en la única barca que había allí, sino que ellos habían partido solos. Mientras tanto, unas barcas de Tiberíades atracaron cerca del lugar donde habían comido el pan, después que el Señor pronunció la acción de gracias. Cuando la multitud se dio cuenta de que Jesús y sus discípulos no estaban allí, subieron a las barcas y fueron a Cafarnaún en busca de Jesús. Al encontrarlo en la otra orilla, le preguntaron: «Maestro, ¿cuándo llegaste?» Jesús les respondió: «Les aseguro que ustedes me buscan, no porque vieron signos, sino porque han comido pan hasta saciarse. Trabajen, no por el alimento perecedero, sino por el que permanece hasta la Vida eterna, el que les dará el Hijo del hombre; porque es él a quien Dios, el Padre, marcó con su sello.» Ellos le preguntaron: « ¿Qué debemos hacer para realizar las obras de Dios?» Jesús les respondió: « La obra de Dios es que ustedes crean en aquel que él ha enviado.»Palabra del Señor.

Evangelio del día y su meditación
Evangelio del Lunes 5 de Mayo. Juan 6,22-29

Evangelio del día y su meditación

Play Episode Listen Later May 5, 2025 4:53


Jn 6,22-29.Después de que Jesús alimentó a unos cinco mil hombres, sus discípulos lo vieron caminando sobre el agua. Al día siguiente, la multitud que se había quedado en la otra orilla vio que Jesús no había subido con sus discípulos en la única barca que había allí, sino que ellos habían partido solos.Mientras tanto, unas barcas de Tiberíades atracaron cerca del lugar donde habían comido el pan, después que el Señor pronunció la acción de gracias.Cuando la multitud se dio cuenta de que Jesús y sus discípulos no estaban allí, subieron a las barcas y fueron a Cafarnaún en busca de Jesús.Al encontrarlo en la otra orilla, le preguntaron: "Maestro, ¿cuándo llegaste?".Jesús les respondió: "Les aseguro que ustedes me buscan, no porque vieron signos, sino porque han comido pan hasta saciarse.Trabajen, no por el alimento perecedero, sino por el que permanece hasta la Vida eterna, el que les dará el Hijo del hombre; porque es él a quien Dios, el Padre, marcó con su sello".Ellos le preguntaron: "¿Qué debemos hacer para realizar las obras de Dios?".Jesús les respondió: "La obra de Dios es que ustedes crean en aquel que él ha enviado".

Evangelio Católico del Día
Lunes, 5 de mayo de 2025 | Juan 6,22-29

Evangelio Católico del Día

Play Episode Listen Later May 5, 2025 2:22


Después de la multiplicación de los panes, cuando Jesús dio de comer a cinco mil hombres, sus discípulos lo vieron caminando sobre el lago. Al día siguiente, la multitud, que estaba en la otra orilla del lago, se dio cuenta de que allí no había más que una sola barca y de que Jesús no se había embarcado con sus discípulos, sino que éstos habían partido solos. En eso llegaron otras barcas desde Tiberíades al lugar donde la multitud había comido el pan. Cuando la gente vio que ni Jesús ni sus discípulos estaban allí, se embarcaron y fueron a Cafarnaúm para buscar a Jesús.Al encontrarlo en la otra orilla del lago, le preguntaron: "Maestro, ¿cuándo llegaste acá?" Jesús les contestó: "Yo les aseguro que ustedes no me andan buscando por haber visto signos, sino por haber comido de aquellos panes hasta saciarse. No trabajen por ese alimento que se acaba, sino por el alimento que dura para la vida eterna y que les dará el Hijo del hombre; porque a éste, el Padre Dios lo ha marcado con su sello".Ellos le dijeron: "¿Qué necesitamos para llevar a cabo las obras de Dios?" Respondió Jesús: "La obra de Dios consiste en que crean en aquel a quien él ha enviado".

Homilias - IVE
”Senhor eu creio, mas aumentai a minha fé”

Homilias - IVE

Play Episode Listen Later May 5, 2025 2:37


Homilia Padre Davidson Coelho, IVE:Evangelho de Jesus Cristo segundo João 6,22-29Depois que Jesus saciara os cinco mil homens,seus discípulos o viram andando sobre o mar.No dia seguinte, a multidãoque tinha ficado do outro lado do marconstatou que havia só uma barcae que Jesus não tinha subido para ela com os discípulos,mas que eles tinham partido sozinhos.Entretanto, tinham chegado outras barcas de Tiberíades,perto do lugar onde tinham comido o pãodepois de o Senhor ter dado graças.Quando a multidão viuque Jesus não estava ali,nem os seus discípulos,subiram às barcas e foram à procura de Jesus, em Cafarnaum.Quando o encontraram no outro lado do mar,perguntaram-lhe:"Rabi, quando chegaste aqui?"Jesus respondeu:"Em verdade, em verdade, eu vos digo:estais me procurando não porque vistes sinais,mas porque comestes pão e ficastes satisfeitos.Esforçai-vos não pelo alimento que se perde,mas pelo alimento que permanece até a vida eterna,e que o Filho do homem vos dará.Pois este é quem o Pai marcou com seu selo".Então perguntaram:"Que devemos fazer para realizar as obras de Deus?"Jesus respondeu:"A obra de Deus é que acrediteisnaquele que ele enviou".Palavra da Salvação.

Palavra do Dia
Palavra do dia - Jo 6,22-29 - 05/05/25

Palavra do Dia

Play Episode Listen Later May 5, 2025 4:43


Depois que Jesus saciara os cinco mil homens, seus discípulos o viram andando sobre o mar. 22 No dia seguinte, a multidão que tinha ficado do outro lado do mar constatou que havia só uma barca e que Jesus não tinha subido para ela com os discípulos, mas que eles tinham partido sozinhos. 23 Entretanto, tinham chegado outras barcas de Tiberíades, perto do lugar onde tinham comido o pão depois de o Senhor ter dado graças. 24 Quando a multidão viu que Jesus não estava ali, nem os seus discípulos, subiram às barcas e foram à procura de Jesus, em Cafarnaum. 25 Quando o encontraram no outro lado do mar, perguntaram-lhe: "Rabi, quando chegaste aqui?" 26 Jesus respondeu: "Em verdade, em verdade, eu vos digo: estais me procurando não porque vistes sinais, mas porque comestes pão e ficastes satisfeitos. 27 Esforçai-vos não pelo alimento que se perde, mas pelo alimento que permanece até a vida eterna, e que o Filho do homem vos dará. Pois este é quem o Pai marcou com seu selo". 28 Então perguntaram: "Que devemos fazer para realizar as obras de Deus?" 29 Jesus respondeu: "A obra de Deus é que acrediteis naquele que ele enviou".

La Gioia del Vangelo
Lunedì della III settimana di Pasqua

La Gioia del Vangelo

Play Episode Listen Later May 5, 2025 4:19


Il giorno dopo, la folla, rimasta dall'altra parte del mare, vide che c'era soltanto una barca e che Gesù non era salito con i suoi discepoli sulla barca, ma i suoi discepoli erano partiti da soli. Altre barche erano giunte da Tiberìade, vicino al luogo dove avevano mangiato il pane, dopo che il Signore aveva reso grazie. Quando dunque la folla vide che Gesù non era più là e nemmeno i suoi discepoli, salì sulle barche e si diresse alla volta di Cafàrnao alla ricerca di Gesù. Lo trovarono di là dal mare e gli dissero: «Rabbì, quando sei venuto qua?». Gesù rispose loro: «In verità, in verità io vi dico: voi mi cercate non perché avete visto dei segni, ma perché avete mangiato di quei pani e vi siete saziati. Datevi da fare non per il cibo che non dura, ma per il cibo che rimane per la vita eterna e che il Figlio dell'uomo vi darà. Perché su di lui il Padre, Dio, ha messo il suo sigillo». Gli dissero allora: «Che cosa dobbiamo compiere per fare le opere di Dio?». Gesù rispose loro: «Questa è l'opera di Dio: che crediate in colui che egli ha mandato».

Algo del Evangelio - Padre Rodrigo Aguilar
Juan 21, 1-19 - III Domingo de Pascua (C)

Algo del Evangelio - Padre Rodrigo Aguilar

Play Episode Listen Later May 4, 2025 7:51


+ Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Juan 21,1-19 Jesús se apareció otra vez a los discípulos a orillas del mar de Tiberíades. Sucedió así: estaban juntos Simón Pedro, Tomás, llamado el Mellizo, Natanael, el de Caná de Galilea, los hijos de Zebedeo y otros dos discípulos. Simón Pedro les dijo: "Voy a pescar". Ellos le respondieron: "Vamos también nosotros". Salieron y subieron a la barca. Pero esa noche no pescaron nada. Al amanecer, Jesús estaba en la orilla, aunque los discípulos no sabían que era él. Jesús les dijo: "Muchachos, ¿tienen algo para comer?". Ellos respondieron: "No". Él les dijo: "Tiren la red a la derecha de la barca y encontrarán". Ellos la tiraron y se llenó tanto de peces que no podían arrastrarla. El discípulo al que Jesús amaba dijo a Pedro: "¡Es el Señor!". Cuando Simón Pedro oyó que era el Señor, se ciñó la túnica, que era lo único que llevaba puesto, y se tiró al agua. Los otros discípulos fueron en la barca, arrastrando la red con los peces, porque estaban sólo a unos cien metros de la orilla. Al bajar a tierra vieron que había fuego preparado, un pescado sobre las brasas y pan. Jesús les dijo: "Traigan algunos de los pescados que acaban de sacar". Simón Pedro subió a la barca y sacó la red a tierra, llena de peces grandes: eran ciento cincuenta y tres y, a pesar de ser tantos, la red no se rompió. Jesús les dijo: "Vengan a comer". Ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle: "¿Quién eres?", porque sabían que era el Señor. Jesús se acercó, tomó el pan y se lo dio, e hizo lo mismo con el pescado. Esta fue la tercera vez que Jesús resucitado se apareció a sus discípulos. Después de comer, Jesús dijo a Simón Pedro: "Simón, hijo de Juan, ¿me amas más que estos?". Él le respondió: "Sí, Señor, tú sabes que te quiero". Jesús le dijo: "Apacienta mis corderos". Le volvió a decir por segunda vez: "Simón, hijo de Juan, ¿me amas?". Él le respondió: "Sí, Señor, sabes que te quiero". Jesús le dijo: "Apacienta mis ovejas". Le preguntó por tercera vez: "Simón, hijo de Juan, ¿me quieres?". Pedro se entristeció de que por tercera vez le preguntara si lo quería, y le dijo: "Señor, tú lo sabes todo; sabes que te quiero". Jesús le dijo: "Apacienta mis ovejas. Te aseguro que cuando eras joven, tú mismo te vestías e ibas a donde querías. Pero cuando seas viejo, extenderás tus brazos, y otro te atará y te llevará a donde no quieras". De esta manera, indicaba con qué muerte Pedro debía glorificar a Dios. Y después de hablar así, le dijo: "Sígueme".Palabra del Señor

Evangelio del día y su meditación
Evangelio del Domingo 4 de Mayo. Jn. 21, 1-19

Evangelio del día y su meditación

Play Episode Listen Later May 4, 2025 5:44


Jn 21,1-19.Jesús se apareció otra vez a los discípulos a orillas del mar de Tiberíades. Sucedió así:estaban juntos Simón Pedro, Tomás, llamado el Mellizo, Natanael, el de Caná de Galilea, los hijos de Zebedeo y otros dos discípulos.Simón Pedro les dijo: "Voy a pescar". Ellos le respondieron: "Vamos también nosotros". Salieron y subieron a la barca. Pero esa noche no pescaron nada.Al amanecer, Jesús estaba en la orilla, aunque los discípulos no sabían que era él.Jesús les dijo: "Muchachos, ¿tienen algo para comer?". Ellos respondieron: "No".El les dijo: "Tiren la red a la derecha de la barca y encontrarán". Ellos la tiraron y se llenó tanto de peces que no podían arrastrarla.El discípulo al que Jesús amaba dijo a Pedro: "¡Es el Señor!". Cuando Simón Pedro oyó que era el Señor, se ciñó la túnica, que era lo único que llevaba puesto, y se tiró al agua.Los otros discípulos fueron en la barca, arrastrando la red con los peces, porque estaban sólo a unos cien metros de la orilla.Al bajar a tierra vieron que había fuego preparado, un pescado sobre las brasas y pan.Jesús les dijo: "Traigan algunos de los pescados que acaban de sacar".Simón Pedro subió a la barca y sacó la red a tierra, llena de peces grandes: eran ciento cincuenta y tres y, a pesar de ser tantos, la red no se rompió.Jesús les dijo: "Vengan a comer". Ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle: "¿Quién eres", porque sabían que era el Señor.Jesús se acercó, tomó el pan y se lo dio, e hizo lo mismo con el pescado.Esta fue la tercera vez que Jesús resucitado se apareció a sus discípulos.Después de comer, Jesús dijo a Simón Pedro: "Simón, hijo de Juan, ¿me amas más que estos?". El le respondió: "Sí, Señor, tú sabes que te quiero". Jesús le dijo: "Apacienta mis corderos".Le volvió a decir por segunda vez: "Simón, hijo de Juan, ¿me amas?". El le respondió: "Sí, Señor, sabes que te quiero". Jesús le dijo: "Apacienta mis ovejas".Le preguntó por tercera vez: "Simón, hijo de Juan, ¿me quieres?". Pedro se entristeció de que por tercera vez le preguntara si lo quería, y le dijo: "Señor, tú lo sabes todo; sabes que te quiero". Jesús le dijo: "Apacienta mis ovejas.Te aseguro que cuando eras joven, tú mismo te vestías e ibas a donde querías. Pero cuando seas viejo, extenderás tus brazos, y otro te atará y te llevará a donde no quieras".De esta manera, indicaba con qué muerte Pedro debía glorificar a Dios. Y después de hablar así, le dijo: "Sígueme".

Evangelio del día - Evangelio de hoy
Evangelio 5 mayo 2025 (Trabajad por el alimento que perdura para la vida eterna)

Evangelio del día - Evangelio de hoy

Play Episode Listen Later May 4, 2025 8:59


Muchos más recursos para tu vida de fe (Santo Rosario, Oración, etc.) en nuestra web https://sercreyente.com________________Lunes, 5 de mayo de 2025 (3ª Semana de Pascua)Evangelio del día y reflexión... ¡Deja que la Palabra del Señor transforme tu vida! Texto íntegro del Evangelio y de la Reflexión en https://sercreyente.com/jueves-santo/[Juan 6, 22-29] Después de que Jesús hubo saciado a cinco mil hombres, sus discípulos lo vieron caminando sobre el mar. Al día siguiente, la gente que se había quedado al otro lado del mar notó que allí no había habido más que una barca y que Jesús no había embarcado con sus discípulos, sino que sus discípulos se habían marchado solos. Entretanto, unas barcas de Tiberíades llegaron cerca del sitio donde habían comido el pan después que el Señor había dado gracias. Cuando la gente vio que ni Jesús ni sus discípulos estaban allí, se embarcaron y fueron a Cafarnaún en busca de Jesús. Al encontrarlo en la otra orilla del lago, le preguntaron: «Maestro, ¿cuándo has venido aquí?». Jesús les contestó: «En verdad, en verdad os digo: me buscáis no porque habéis visto signos, sino porque comisteis pan hasta saciaros. Trabajad no por el alimento que perece, sino por el alimento que perdura para la vida eterna, el que os dará el Hijo del hombre; pues a este lo ha sellado el Padre, Dios». Ellos le preguntaron: «Y ¿qué tenemos que hacer para realizar las obras de Dios?». Respondió Jesús: «La obra de Dios es esta: que creáis en el que él ha enviado».________________Descárgate la app de SerCreyente en https://sercreyente.com/app/¿Conoces nuestra Oración Online? Más información en: https://sercreyente.com/oracion¿Quieres recibir cada día el Evangelio en tu whatsapp? Alta en: www.sercreyente.com/whatsappTambién puedes hacer tu donativo en https://sercreyente.com/ayudanos/Contacto: info@sercreyente.com

A Piccoli Sorsi - Commento alla Parola del giorno delle Apostole della Vita Interiore
riflessioni sul Vangelo di Lunedì 5 Maggio 2025 (Gv 6, 22-29) - Apostola Tiziana

A Piccoli Sorsi - Commento alla Parola del giorno delle Apostole della Vita Interiore

Play Episode Listen Later May 4, 2025 6:10


- Premere il tasto PLAY per ascoltare la catechesi del giorno -+ Dal Vangelo secondo Giovanni +Il giorno dopo, la folla, rimasta dall'altra parte del mare, vide che c'era soltanto una barca e che Gesù non era salito con i suoi discepoli sulla barca, ma i suoi discepoli erano partiti da soli. Altre barche erano giunte da Tiberìade, vicino al luogo dove avevano mangiato il pane, dopo che il Signore aveva reso grazie.Quando dunque la folla vide che Gesù non era più là e nemmeno i suoi discepoli, salì sulle barche e si diresse alla volta di Cafàrnao alla ricerca di Gesù. Lo trovarono di là dal mare e gli dissero: «Rabbì, quando sei venuto qua?».Gesù rispose loro: «In verità, in verità io vi dico: voi mi cercate non perché avete visto dei segni, ma perché avete mangiato di quei pani e vi siete saziati. Datevi da fare non per il cibo che non dura, ma per il cibo che rimane per la vita eterna e che il Figlio dell'uomo vi darà. Perché su di lui il Padre, Dio, ha messo il suo sigillo».Gli dissero allora: «Che cosa dobbiamo compiere per fare le opere di Dio?». Gesù rispose loro: «Questa è l'opera di Dio: che crediate in colui che egli ha mandato».Parola del Signore.

La catequesis del dìa de Tiziana, Apòstol de la Vida Interior
reflexiones sobre el Evangelio del lunes 5 de mayo de 2025 (Jn 6, 22-29)

La catequesis del dìa de Tiziana, Apòstol de la Vida Interior

Play Episode Listen Later May 4, 2025 5:48


+ Del Evangelio según san Juan +Después de la multiplicación de los panes, cuando Jesús dio de comer a cinco mil hombres, sus discípulos lo vieron caminando sobre el lago. Al día siguiente, la multitud, que estaba en la otra orilla del lago, se dio cuenta de que allí no había más que una sola barca y de que Jesús no se había embarcado con sus discípulos, sino que éstos habían partido solos. En eso llegaron otras barcas desde Tiberíades al lugar donde la multitud había comido el pan. Cuando la gente vio que ni Jesús ni sus discípulos estaban allí, se embarcaron y fueron a Cafarnaúm para buscar a Jesús.Al encontrarlo en la otra orilla del lago, le preguntaron: "Maestro, ¿cuándo llegaste acá?" Jesús les contestó: "Yo les aseguro que ustedes no me andan buscando por haber visto señales milagrosas, sino por haber comido de aquellos panes hasta saciarse. No trabajen por ese alimento que se acaba, sino por el alimento que dura para la vida eterna y que les dará el Hijo del hombre; porque a éste, el Padre Dios lo ha marcado con su sello".Ellos le dijeron: "¿Qué necesitamos para llevar a cabo las obras de Dios?" Respondió Jesús: "La obra de Dios consiste en que crean en aquel a quien él ha enviado".Palabra del Señor.

Evangelio Católico del Día
Domingo, 4 de mayo de 2025 | Juan 21,1-19

Evangelio Católico del Día

Play Episode Listen Later May 4, 2025 4:29


En aquel tiempo, Jesús se les apareció otra vez a los discípulos junto al lago de Tiberíades. Se les apareció de esta manera:Estaban juntos Simón Pedro, Tomás (llamado el Gemelo), Natanael (el de Caná de Galilea), los hijos de Zebedeo y otros dos discípulos. Simón Pedro les dijo: "Voy a pescar". Ellos le respondieron: "También nosotros vamos contigo". Salieron y se embarcaron, pero aquella noche no pescaron nada.Estaba amaneciendo, cuando Jesús se apareció en la orilla, pero los discípulos no lo reconocieron. Jesús les dijo: "Muchachos, ¿han pescado algo?" Ellos contestaron: "No". Entonces él les dijo: "Echen la red a la derecha de la barca y encontrarán peces". Así lo hicieron, y luego ya no podían jalar la red por tantos pescados.Entonces el discípulo a quien amaba Jesús le dijo a Pedro: "Es el Señor". Tan pronto como Simón Pedro oyó decir que era el Señor, se anudó a la cintura la túnica, pues se la había quitado, y se tiró al agua. Los otros discípulos llegaron en la barca, arrastrando la red con los pescados, pues no distaban de tierra más de cien metros.Tan pronto como saltaron a tierra, vieron unas brasas y sobre ellas un pescado y pan. Jesús les dijo: "Traigan algunos pescados de los que acaban de pescar". Entonces Simón Pedro subió a la barca y arrastró hasta la orilla la red, repleta de pescados grandes. Eran ciento cincuenta y tres, y a pesar de que eran tantos, no se rompió la red. Luego les dijo Jesús: "Vengan a almorzar". Y ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle: '¿Quién eres?', porque ya sabían que era el Señor. Jesús se acercó, tomó el pan y se lo dio y también el pescado. Ésta fue la tercera vez que Jesús se apareció a sus discípulos después de resucitar de entre los muertos.Después de almorzar le preguntó Jesús a Simón Pedro: "Simón, hijo de Juan, ¿me amas más que éstos?" Él le contestó: "Sí, Señor, tú sabes que te quiero". Jesús le dijo: "Apacienta mis corderos". Por segunda vez le preguntó: "Simón, hijo de Juan, ¿me amas?" Él le respondió: "Sí, Señor, tú sabes que te quiero". Jesús le dijo: "Pastorea mis ovejas". Por tercera vez le preguntó: "Simón, hijo de Juan, ¿me quieres?" Pedro se entristeció de que Jesús le hubiera preguntado por tercera vez si lo quería y le contestó: "Señor, tú lo sabes todo; tú bien sabes que te quiero". Jesús le dijo: "Apacienta mis ovejas. Yo te aseguro: cuando eras joven, tú mismo te ceñías la ropa e ibas a donde querías; pero cuando seas viejo, extenderás los brazos y otro te ceñirá y te llevará a donde no quieras". Esto se lo dijo para indicarle con qué género de muerte habría de glorificar a Dios. Después le dijo: "Sígueme".

Evangelio del Día
Reflexión del Evangelio del 05 de Mayo de 2025

Evangelio del Día

Play Episode Listen Later May 4, 2025 7:03


Juan 6, 22-29: Después de la multiplicación de los panes, cuando Jesús dio de comer a cinco mil hombres, sus discípulos lo vieron caminando sobre el lago. Al día siguiente, la multitud, que estaba en la otra orilla del lago, se dio cuenta de que allí no había más que una sola barca y de que Jesús no se había embarcado con sus discípulos, sino que éstos habían partido solos. En eso llegaron otras barcas desde Tiberíades al lugar donde la multitud había comido el pan. Cuando la gente vio que ni Jesús ni sus discípulos estaban allí, se embarcaron y fueron a Cafarnaúm para buscar a Jesús.Al encontrarlo en la otra orilla del lago, le preguntaron: "Maestro, ¿cuándo llegaste acá?" Jesús les contestó: "Yo les aseguro que ustedes no me andan buscando por haber visto signos, sino por haber comido de aquellos panes hasta saciarse. No trabajen por ese alimento que se acaba, sino por el alimento que dura para la vida eterna y que les dará el Hijo del hombre; porque a éste, el Padre Dios lo ha marcado con su sello".Ellos le dijeron: "¿Qué necesitamos para llevar a cabo las obras de Dios?" Respondió Jesús: "La obra de Dios consiste en que crean en aquel a quien él ha enviado".

Homilias - IVE
”A missão do Papa”

Homilias - IVE

Play Episode Listen Later May 4, 2025 4:55


Homilia Padre Vagner Souza, IVE:Evangelho de Jesus Cristo segundo João 21,1-19Naquele tempo,Jesus apareceu de novo aos discípulos,à beira do mar de Tiberíades.A aparição foi assim:Estavam juntos Simão Pedro, Tomé, chamado Dídimo,Natanael de Caná da Galiléia,os filhos de Zebedeue outros dois discípulos de Jesus.Simão Pedro disse a eles: "Eu vou pescar".Eles disseram: "Também vamos contigo".Saíram e entraram na barca,mas não pescaram nada naquela noite.Já tinha amanhecido, e Jesus estava de pé na margem.Mas os discípulos não sabiam que era Jesus.Então Jesus disse:"Moços, tendes alguma coisa para comer?"Responderam: "Não".Jesus disse-lhes:"Lançai a rede à direita da barca, e achareis".Lançaram pois a redee não conseguiam puxá-la para fora,por causa da quantidade de peixes.Então, o discípulo a quem Jesus amavadisse a Pedro: "É o Senhor!"Simão Pedro, ouvindo dizer que era o Senhor,vestiu sua roupa, pois estava nu, e atirou-se ao mar.Os outros discípulos vieram com a barca,arrastando a rede com os peixes.Na verdade, não estavam longe da terra,mas somente a cerca de cem metros.Logo que pisaram a terra,viram brasas acesas, com peixe em cima, e pão.Jesus disse-lhes:"Trazei alguns dos peixes que apanhastes".Então Simão Pedro subiu ao barcoe arrastou a rede para a terra.Estava cheia de cento e cinquenta e três grandes peixes;e apesar de tantos peixes, a rede não se rompeu.Jesus disse-lhes: "Vinde comer".Nenhum dos discípulosse atrevia a perguntar quem era ele,pois sabiam que era o Senhor.Jesus aproximou-se, tomou o pão e distribuiu-o por eles.E fez a mesma coisa com o peixe.Esta foi a terceira vez que Jesus,ressuscitado dos mortos,apareceu aos discípulos.Depois de comerem,Jesus perguntou a Simão Pedro:"Simão, filho de João,tu me amas mais do que estes?"Pedro respondeu:"Sim, Senhor, tu sabes que eu te amo".Jesus disse: "Apascenta os meus cordeiros".E disse de novo a Pedro:"Simão, filho de João, tu me amas?"Pedro disse: "Sim, Senhor, tu sabes que eu te amo".Jesus lhe disse:"Apascenta as minhas ovelhas".Pela terceira vez, perguntou a Pedro:"Simão, filho de João, tu me amas?"Pedro ficou triste,porque Jesus perguntou três vezes se ele o amava.Respondeu: "Senhor, tu sabes tudo;tu sabes que eu te amo".Jesus disse-lhe: "Apascenta as minhas ovelhas.Em verdade, em verdade te digo:quando eras jovem,tu te cingias e ias para onde querias.Quando fores velho,estenderás as mãos e outro te cingiráe te levará para onde não queres ir".Jesus disse isso,significando com que morte Pedro iria glorificar a Deus. E acrescentou : "Segue-me".Palavra da Salvação.

Liturgia Diária
3° Domingo da Páscoa

Liturgia Diária

Play Episode Listen Later May 4, 2025 6:06


Evangelho de Jesus Cristo segundo João 21,1-19 Naquele tempo, 1 Jesus apareceu de novo aos discípulos, à beira do mar de Tiberíades. A aparição foi assim: 2 Estavam juntos Simão Pedro, Tomé, chamado Dídimo, Natanael de Caná da Galiléia, os filhos de Zebedeu e outros dois discípulos de Jesus. 3 Simão Pedro disse a eles: "Eu vou pescar". Eles disseram: "Também vamos contigo". Saíram e entraram na barca, mas não pescaram nada naquela noite. 4 Já tinha amanhecido, e Jesus estava de pé na margem. Mas os discípulos não sabiam que era Jesus. 5 Então Jesus disse: "Moços, tendes alguma coisa para comer?" Responderam: "Não". 6 Jesus disse-lhes: "Lançai a rede à direita da barca, e achareis". Lançaram pois a rede e não conseguiam puxá-la para fora, por causa da quantidade de peixes. 7 Então, o discípulo a quem Jesus amava disse a Pedro: "É o Senhor!" Simão Pedro, ouvindo dizer que era o Senhor, vestiu sua roupa, pois estava nu, e atirou-se ao mar. 8 Os outros discípulos vieram com a barca, arrastando a rede com os peixes. Na verdade, não estavam longe da terra, mas somente a cerca de cem metros. 9 Logo que pisaram a terra, viram brasas acesas, com peixe em cima, e pão. 10 Jesus disse-lhes: "Trazei alguns dos peixes que apanhastes". 11 Então Simão Pedro subiu ao barco e arrastou a rede para a terra. Estava cheia de cento e cinquenta e três grandes peixes; e apesar de tantos peixes, a rede não se rompeu. 12 Jesus disse-lhes: "Vinde comer". Nenhum dos discípulos se atrevia a perguntar quem era ele, pois sabiam que era o Senhor. 13 Jesus aproximou-se, tomou o pão e distribuiu-o por eles. E fez a mesma coisa com o peixe. 14 Esta foi a terceira vez que Jesus, ressuscitado dos mortos, apareceu aos discípulos. 15 Depois de comerem, Jesus perguntou a Simão Pedro: "Simão, filho de João, tu me amas mais do que estes?" Pedro respondeu: "Sim, Senhor, tu sabes que eu te amo". Jesus disse: "Apascenta os meus cordeiros". 16 E disse de novo a Pedro: "Simão, filho de João, tu me amas?" Pedro disse: "Sim, Senhor, tu sabes que eu te amo". Jesus lhe disse: "Apascenta as minhas ovelhas". 17 Pela terceira vez, perguntou a Pedro: "Simão, filho de João, tu me amas?" Pedro ficou triste, porque Jesus perguntou três vezes se ele o amava. Respondeu: "Senhor, tu sabes tudo; tu sabes que eu te amo". Jesus disse-lhe: "Apascenta as minhas ovelhas. 18 Em verdade, em verdade te digo: quando eras jovem, tu te cingias e ias para onde querias. Quando fores velho, estenderás as mãos e outro te cingirá e te levará para onde não queres ir". 19 Jesus disse isso, significando com que morte Pedro iria glorificar a Deus. E acrescentou : "Segue-me". Palavra da Salvação.

La Gioia del Vangelo
III Domenica di Pasqua

La Gioia del Vangelo

Play Episode Listen Later May 4, 2025 4:19


In quel tempo, Gesù si manifestò di nuovo ai discepoli sul mare di Tiberìade. E si manifestò così: si trovavano insieme Simon Pietro, Tommaso detto Dìdimo, Natanaèle di Cana di Galilea, i figli di Zebedèo e altri due discepoli. Disse loro Simon Pietro: «Io vado a pescare». Gli dissero: «Veniamo anche noi con te». Allora uscirono e salirono sulla barca; ma quella notte non presero nulla. Quando già era l'alba, Gesù stette sulla riva, ma i discepoli non si erano accorti che era Gesù. Gesù disse loro: «Figlioli, non avete nulla da mangiare?». Gli risposero: «No». Allora egli disse loro: «Gettate la rete dalla parte destra della barca e troverete». La gettarono e non riuscivano più a tirarla su per la grande quantità di pesci. Allora quel discepolo che Gesù amava disse a Pietro: «È il Signore!». Simon Pietro, appena udì che era il Signore, si strinse la veste attorno ai fianchi, perché era svestito, e si gettò in mare. Gli altri discepoli invece vennero con la barca, trascinando la rete piena di pesci: non erano infatti lontani da terra se non un centinaio di metri. Appena scesi a terra, videro un fuoco di brace con del pesce sopra, e del pane. Disse loro Gesù: «Portate un po' del pesce che avete preso ora». Allora Simon Pietro salì nella barca e trasse a terra la rete piena di centocinquantatré grossi pesci. E benché fossero tanti, la rete non si squarciò. Gesù disse loro: «Venite a mangiare». E nessuno dei discepoli osava do- mandargli: «Chi sei?», perché sapevano bene che era il Signore. Gesù si avvicinò, prese il pane e lo diede loro, e così pure il pesce. Era la terza volta che Gesù si manifestava ai discepoli, dopo essere risorto dai morti. Quand'ebbero mangiato, Gesù disse a Simon Pietro: «Simone, figlio di Giovanni, mi ami più di costoro?». Gli rispose: «Certo, Signore, tu lo sai che ti voglio bene». Gli disse: «Pasci i miei agnelli». Gli disse di nuovo, per la seconda volta: «Simone, figlio di Giovanni, mi ami?». Gli rispose: «Certo, Signore, tu lo sai che ti voglio bene». Gli disse: «Pascola le mie pecore». Gli disse per la terza volta: «Simone, figlio di Giovanni, mi vuoi bene?». Pietro rimase addolorato che per la terza volta gli domandasse: «Mi vuoi bene?», e gli disse: «Signore, tu conosci tutto; tu sai che ti voglio bene». Gli rispose Gesù: «Pasci le mie pecore. In verità, in verità io ti dico: quando eri più giovane ti vestivi da solo e andavi dove volevi; ma quando sarai vecchio tenderai le tue mani, e un altro ti vestirà e ti porterà dove tu non vuoi». Questo disse per indicare con quale morte egli avrebbe glorificato Dio. E, detto questo, aggiunse: «Seguimi».

EVANGELIO DIARIO
Evangelio del lunes 5 de mayo de 2025 - «La obra de Dios es esta: que creáis en el que Él ha enviado».

EVANGELIO DIARIO

Play Episode Listen Later May 4, 2025 2:18


Lectura del santo evangelio según san Juan 6, 22-29Después de que Jesús hubo saciado a cinco mil hombres, sus discípulos lo vieron caminando sobre el mar.Al día siguiente, la gente que se había quedado al otro lado del mar notó que allí no había habido más que una barca y que Jesús no había embarcado con sus discípulos, sino que sus discípulos se habían marchado solos.Entretanto, unas barcas de Tiberíades llegaron cerca del sitio donde habían comido el pan después que el Señor había dado gracias. Cuando la gente vio que ni Jesús ni sus discípulos estaban allí, se embarcaron y fueron a Cafarnaún en busca de Jesús.Al encontrarlo en la otra orilla del lago, le preguntaron:«Maestro, ¿cuándo has venido aquí?».Jesús les contestó:«En verdad, en verdad os digo: me buscáis no porque habéis visto signos, sino porque comisteis pan hasta saciaros. Trabajad no por el alimento que perece, sino por el alimento que perdura para la vida eterna, el que os dará el Hijo del hombre; pues a este lo ha sellado el Padre, Dios».Ellos le preguntaron:«Y, ¿qué tenemos que hacer para realizar las obras de Dios?».Respondió Jesús:«La obra de Dios es esta: que creáis en el que Él ha enviado».

Evangelio del día - Evangelio de hoy
Evangelio 4 mayo 2025 (Señor, tú sabes que te quiero)

Evangelio del día - Evangelio de hoy

Play Episode Listen Later May 3, 2025 10:54


Muchos más recursos para tu vida de fe (Santo Rosario, Oración, etc.) en nuestra web https://sercreyente.com________________Domingo, 4 de mayo de 2025 (3ª Semana de Pascua - Ciclo C)Evangelio del día y reflexión... ¡Deja que la Palabra del Señor transforme tu vida! Texto íntegro del Evangelio y de la Reflexión en https://sercreyente.com/jueves-santo/[Juan 21, 1-19] En aquel tiempo, Jesús se apareció otra vez a los discípulos junto al lago de Tiberíades. Y se apareció de esta manera: Estaban juntos Simón Pedro, Tomás, apodado el Mellizo; Natanael, el de Caná de Galilea; los Zebedeos y otros dos discípulos suyos. Simón Pedro les dice: «Me voy a pescar». Ellos contestan: «Vamos también nosotros contigo». Salieron y se embarcaron; y aquella noche no cogieron nada. Estaba ya amaneciendo, cuando Jesús se presentó en la orilla; pero los discípulos no sabían que era Jesús. Jesús les dice: «Muchachos, ¿tenéis pescado?». Ellos contestaron: «No». Él les dice: «Echad la red a la derecha de la barca y encontraréis». La echaron, y no podían sacarla, por la multitud de peces. Y aquel discípulo a quien Jesús amaba le dice a Pedro: «Es el Señor». Al oír que era el Señor, Simón Pedro, que estaba desnudo, se ató la túnica y se echó al agua. Los demás discípulos se acercaron en la barca, porque no distaban de tierra más que unos doscientos codos, remolcando la red con los peces. Al saltar a tierra, ven unas brasas con un pescado puesto encima y pan. Jesús les dice: «Traed de los peces que acabáis de coger». Simón Pedro subió a la barca y arrastró hasta la orilla la red repleta de peces grandes: ciento cincuenta y tres. Y aunque eran tantos, no se rompió la red. Jesús les dice: «Vamos, almorzad». Ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle quién era, porque sabían bien que era el Señor. Jesús se acerca, toma el pan y se lo da, y lo mismo el pescado. Esta fue la tercera vez que Jesús se apareció a los discípulos después de resucitar de entre los muertos. Después de comer, dice Jesús a Simón Pedro: «Simón, hijo de Juan, ¿me amas más que estos?». Él le contestó: «Sí, Señor, tú sabes que te quiero». Jesús le dice: «Apacienta mis corderos». Por segunda vez le pregunta: «Simón, hijo de Juan, ¿me amas?». Él le contesta: «Sí, Señor, tú sabes que te quiero». Él le dice: «Pastorea mis ovejas». Por tercera vez le pregunta: «Simón, hijo de Juan, ¿me quieres?». Se entristeció Pedro de que le preguntara por tercera vez: «¿Me quieres?» y le contestó: «Señor, tú conoces todo, tú sabes que te quiero». Jesús le dice: «Apacienta mis ovejas. En verdad, en verdad te digo: cuando eras joven, tú mismo te ceñías e ibas adonde querías; pero, cuando seas viejo, extenderás las manos, otro te ceñirá y te llevará adonde no quieras». Esto dijo aludiendo a la muerte con que iba a dar gloria a Dios. Dicho esto, añadió: «Sígueme».________________Descárgate la app de SerCreyente en https://sercreyente.com/app/¿Conoces nuestra Oración Online? Más información en: https://sercreyente.com/oracion¿Quieres recibir cada día el Evangelio en tu whatsapp? Alta en: www.sercreyente.com/whatsappTambién puedes hacer tu donativo en https://sercreyente.com/ayudanos/Contacto: info@sercreyente.com

EVANGELIO DIARIO
Evangelio del domingo 4 mayo de 2025 - «Señor, tú conoces todo, tú sabes que te quiero».

EVANGELIO DIARIO

Play Episode Listen Later May 3, 2025 5:02


Lectura del santo Evangelio según San Juan 21, 1-19En aquel tiempo, Jesús se apareció otra vez a los discípulos junto al lago de Tiberíades. Y se apareció de esta manera:Estaban juntos Simón Pedro, Tomás, apodado el Mellizo; Natanael, el de Caná de Galilea; los Zebedeos y otros dos discípulos suyos.Simón Pedro les dice:«Me voy a pescar».Ellos contestan:«Vamos también nosotros contigo».Salieron y se embarcaron; y aquella noche no cogieron nada. Estaba ya amaneciendo, cuando Jesús se presentó en la orilla; pero los discípulos no sabían que era Jesús.Jesús les dice:«Muchachos, ¿tenéis pescado?».Ellos contestaron:«No».Él les dice:«Echad la red a la derecha de la barca y encontraréis».La echaron, y no podían sacarla, por la multitud de peces. y aquel discípulo a quien Jesús amaba le dice a Pedro:«Es el Señor».Al oír que era el Señor, Simón Pedro, que estaba desnudo, se ató la túnica y se echó al agua. Los demás discípulos se acercaron en la barca, porque no distaban de tierra más que unos doscientos codos, remolcando la red con los peces.Al saltar a tierra, ven unas brasas con un pescado puesto encima y pan.Jesús les dice:«Traed de los peces que acabáis de coger».Simón Pedro subió a la barca y arrastró hasta la orilla la red repleta de peces grandes: ciento cincuenta y tres. Y aunque eran tantos, no se rompió la red.Jesús les dice:«Vamos, almorzad».Ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle quién era, porque sabían bien que era el Señor. Jesús se acerca, toma el pan y se lo da, y lo mismo el pescado.Esta fue la tercera vez que Jesús se apareció a los discípulos después de resucitar de entre los muertos.Después de comer, dice Jesús a Simón Pedro:«Simón, hijo de Juan, ¿me amas más que estos?».Él le contestó:«Sí, Señor, tú sabes que te quiero».Jesús le dice:«Apacienta mis corderos».Por segunda vez le pregunta:«Simón, hijo de Juan, ¿me amas?».Él le contesta:«Sí, Señor, tú sabes que te quiero».Él le dice:«Pastorea mis ovejas».Por tercera vez le pregunta:«Simón, hijo de Juan, ¿me quieres?».Se entristeció Pedro de que le preguntara por tercera vez:«¿Me quieres?»Y le contestó:«Señor, tú conoces todo, tú sabes que te quiero».Jesús le dice:«Apacienta mis ovejas. En verdad, en verdad te digo: cuando eras joven, tú mismo te ceñías e ibas adonde querías; pero, cuando seas viejo, extenderás las manos, otro te ceñirá y te llevará adonde no quieras».Esto dijo aludiendo a la muerte con que iba a dar gloria a Dios. Dicho esto, añadió:«Sígueme».

Soy Claretiano
Lámpara para mis pasos - Repartió a los que estaban sentados todo lo que quisieron.

Soy Claretiano

Play Episode Listen Later May 2, 2025 13:41


Meditación del Evangelio según San Juan 6, 1-15 por el biblista P. Norberto Padilla, misionero claretiano.Viernes 2/may/2025, Repartió a los que estaban sentados todo lo que quisieron.Canción: La mano de Dios (2009), de Jon Carlo----------Lectura del santo evangelio según san Juan 6, 1-15En aquel tiempo, Jesús se marchó a la otra parte del lago de Galilea (o de Tiberíades). Lo seguía mucha gente, porque habían visto los signos que hacía con los enfermos. Jesús, subió entonces a la montaña y se sentó allí con sus discípulos. Estaba cerca la Pascua, la fiesta de los judíos. Jesús entonces levantó los ojos, y al ver que acudía mucha gente, dijo a Felipe: "¿Con qué compraremos panes para que coman estos?" Lo decía para tantearlo, pues bien sabía él lo que iba a hacer. Felipe le contestó: "Doscientos denarios de pan no basta para que cada uno le toque un pedazo." Uno de sus discípulos, Andrés, el hermano de Simón Pedro, le dice: "Aquí hay un muchacho que tiene cinco panes de cebada y un par de peces; pero, ¿qué es eso para tantos?" Jesús dijo: "Digan a la gente que se siente en el suelo." Había mucha hierba en aquel sitio. Se sentaron; sólo los hombres eran unos cinco mil. Jesús tomó los panes, dijo la acción de gracias y los repartió a los que estaban sentados, y lo mismo todo lo que quisieron del pescado. Cuando se saciaron, dice a sus discípulos: "Recojan los pedazos que han sobrado; que nada se desperdicie." Los recogieron y llenaron doce canastas con los pedazos de los cinco panes de cebada, que sobraron a los que habían comido. La gente entonces, al ver el signo que había hecho, decía: "Este sí que es el Profeta que tenía que venir al mundo." Entonces, Jesús, sabiendo que iban a llevárselo para proclamarlo rey, se retiró otra vez a la montaña él solo.Palabra del Señor... Gloria a ti, Señor Jesús#SoyClaretiano #Evangelio #MisionerosClaretianos #CMFAntillasIntro: Lámpara Es Tu Palabra, de Ain Karem

Algo del Evangelio - Padre Rodrigo Aguilar
Juan 6, 1-15 - II Viernes de Pascua

Algo del Evangelio - Padre Rodrigo Aguilar

Play Episode Listen Later May 2, 2025 8:01


+ Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Juan 6, 1-15 Jesús atravesó el mar de Galilea, llamado Tiberíades. Lo seguía una gran multitud, al ver los signos que hacía curando a los enfermos. Jesús subió a la montaña y se sentó allí con sus discípulos. Se acercaba la Pascua, la fiesta de los judíos. Al levantar los ojos, Jesús vio que una gran multitud acudía a él y dijo a Felipe: «¿Dónde compraremos pan para darles de comer?» El decía esto para ponerlo a prueba, porque sabía bien lo que iba a hacer. Felipe le respondió: «Doscientos denarios no bastarían para que cada uno pudiera comer un pedazo de pan.» Uno de sus discípulos, Andrés, el hermano de Simón Pedro, le dijo: «Aquí hay un niño que tiene cinco panes de cebada y dos pescados, pero ¿qué es esto para tanta gente?» Jesús le respondió: «Háganlos sentar.» Había mucho pasto en ese lugar. Todos se sentaron y eran uno cinco mil hombres. Jesús tomó los panes, dio gracias y los distribuyó a los que estaban sentados. Lo mismo hizo con los pescados, dándoles todo lo que quisieron. Cuando todos quedaron satisfechos, Jesús dijo a sus discípulos: «Recojan los pedazos que sobran, para que no se pierda nada.» Los recogieron y llenaron doce canastas con los pedazos que sobraron de los cinco panes de cebada. Al ver el signo que Jesús acababa de hacer, la gente decía: «Este es, verdaderamente, el Profeta que debe venir al mundo.» Jesús, sabiendo que querían apoderarse de él para hacerlo rey, se retiró otra vez solo a la montaña.Palabra del Señor.

Evangelio del día y su meditación
Evangelio del Viernes 2 de Mayo. Jn. 6,1-15

Evangelio del día y su meditación

Play Episode Listen Later May 2, 2025 5:24


Jn 6,1-15.Jesús atravesó el mar de Galilea, llamado Tiberíades.Lo seguía una gran multitud, al ver los signos que hacía curando a los enfermos.Jesús subió a la montaña y se sentó allí con sus discípulos.Se acercaba la Pascua, la fiesta de los judíos.Al levantar los ojos, Jesús vio que una gran multitud acudía a él y dijo a Felipe: "¿Dónde compraremos pan para darles de comer?".El decía esto para ponerlo a prueba, porque sabía bien lo que iba a hacer.Felipe le respondió: "Doscientos denarios no bastarían para que cada uno pudiera comer un pedazo de pan".Uno de sus discípulos, Andrés, el hermano de Simón Pedro, le dijo:"Aquí hay un niño que tiene cinco panes de cebada y dos pescados, pero ¿qué es esto para tanta gente?".Jesús le respondió: "Háganlos sentar". Había mucho pasto en ese lugar. Todos se sentaron y eran uno cinco mil hombres.Jesús tomó los panes, dio gracias y los distribuyó a los que estaban sentados. Lo mismo hizo con los pescados, dándoles todo lo que quisieron.Cuando todos quedaron satisfechos, Jesús dijo a sus discípulos: "Recojan los pedazos que sobran, para que no se pierda nada".Los recogieron y llenaron doce canastas con los pedazos que sobraron de los cinco panes de cebada.Al ver el signo que Jesús acababa de hacer, la gente decía: "Este es, verdaderamente, el Profeta que debe venir al mundo".Jesús, sabiendo que querían apoderarse de él para hacerlo rey, se retiró otra vez solo a la montaña.

Evangelio Católico del Día
Viernes, 2 de mayo de 2025 | Juan 6,1-15

Evangelio Católico del Día

Play Episode Listen Later May 2, 2025 2:52


En aquel tiempo, Jesús se fue a la otra orilla del mar de Galilea o lago de Tiberíades. Lo seguía mucha gente, porque habían visto los signos que hacía curando a los enfermos. Jesús subió al monte y se sentó allí con sus discípulos.Estaba cerca la Pascua, festividad de los judíos. Viendo Jesús que mucha gente lo seguía, le dijo a Felipe: “¿Cómo compraremos pan para que coman éstos?” Le hizo esta pregunta para ponerlo a prueba, pues él bien sabía lo que iba a hacer. Felipe le respondió: “Ni doscientos denarios de pan bastarían para que a cada uno le tocara un pedazo de pan”. Otro de sus discípulos, Andrés, el hermano de Simón Pedro, le dijo: “Aquí hay un muchacho que trae cinco panes de cebada y dos pescados. Pero, ¿qué es eso para tanta gente?” Jesús le respondió: “Díganle a la gente que se siente”. En aquel lugar había mucha hierba. Todos, pues, se sentaron ahí; y tan sólo los hombres eran unos cinco mil.Enseguida tomó Jesús los panes, y después de dar gracias a Dios, se los fue repartiendo a los que se habían sentado a comer. Igualmente les fue dando de los pescados todo lo que quisieron. Después de que todos se saciaron, dijo a sus discípulos: “Recojan los pedazos sobrantes, para que no se desperdicien”. Los recogieron y con los pedazos que sobraron de los cinco panes llenaron doce canastos.Entonces la gente, al ver el signo que Jesús había hecho, decía: “Éste es, en verdad, el profeta que habría de venir al mundo”. Pero Jesús, sabiendo que iban a llevárselo para proclamarlo rey, se retiró de nuevo a la montaña, él solo.

Palavra do Dia
Palavra do dia - Jo 6,1-15 - 02/05/25

Palavra do Dia

Play Episode Listen Later May 2, 2025 4:30


Naquele tempo, 1 Jesus foi para o outro lado do mar da Galileia, também chamado de Tiberíades. 2 Uma grande multidão o seguia, porque via os sinais que ele operava a favor dos doentes. 3 Jesus subiu ao monte e sentou-se aí, com os seus discípulos. 4 Estava próxima a Páscoa, a festa dos judeus. 5 Levantando os olhos, e vendo que uma grande multidão estava vindo ao seu encontro, Jesus disse a Filipe: "Onde vamos comprar pão para que eles possam comer?" 6 Disse isso para pô-lo à prova, pois ele mesmo sabia muito bem o que ia fazer. 7 Filipe respondeu: "Nem duzentas moedas de prata bastariam para dar um pedaço de pão a cada um". 8 Um dos discípulos, André, o irmão de Simão Pedro, disse: 9 "Está aqui um menino com cinco pães de cevada e dois peixes. Mas o que é isso para tanta gente?" 10 Jesus disse: "Fazei sentar as pessoas". Havia muita relva naquele lugar, e lá se sentaram, aproximadamente, cinco mil homens. 11 Jesus tomou os pães, deu graças e distribuiu-os aos que estavam sentados, tanto quanto queriam. E fez o mesmo com os peixes. 12 Quando todos ficaram satisfeitos, Jesus disse aos discípulos: "Recolhei os pedaços que sobraram, para que nada se perca!" 13 Recolheram os pedaços e encheram doze cestos com as sobras dos cinco pães, deixadas pelos que haviam comido. 14 Vendo o sinal que Jesus tinha realizado, aqueles homens exclamavam: "Este é verdadeiramente o Profeta, aquele que deve vir ao mundo". 15 Mas, quando notou que estavam querendo levá-lo para proclamá-lo rei, Jesus retirou-se de novo, sozinho, para o monte.

Homilias - IVE
”Milagre da multiplicação“

Homilias - IVE

Play Episode Listen Later May 2, 2025 3:19


Homilia Padre Fábio Sousa, IVE:Evangelho de Jesus Cristo segundo João 6,1-15Naquele tempo,Jesus foi para o outro lado do mar da Galileia,também chamado de Tiberíades.Uma grande multidão o seguia, porque via os sinais que ele operavaa favor dos doentes.Jesus subiu ao montee sentou-se aí, com os seus discípulos.Estava próxima a Páscoa, a festa dos judeus.Levantando os olhos, e vendo que uma grande multidãoestava vindo ao seu encontro,Jesus disse a Filipe:"Onde vamos comprar pão para que eles possam comer?"Disse isso para pô-lo à prova, pois ele mesmo sabia muito bem o que ia fazer.Filipe respondeu:"Nem duzentas moedas de prata bastariampara dar um pedaço de pão a cada um".Um dos discípulos, André, o irmão de Simão Pedro, disse:"Está aqui um menino com cinco pães de cevada e dois peixes.Mas o que é isso para tanta gente?"Jesus disse:"Fazei sentar as pessoas".Havia muita relva naquele lugar,e lá se sentaram, aproximadamente, cinco mil homens.Jesus tomou os pães,deu graçase distribuiu-os aos que estavam sentados,tanto quanto queriam.E fez o mesmo com os peixes.Quando todos ficaram satisfeitos,Jesus disse aos discípulos:"Recolhei os pedaços que sobraram,para que nada se perca!"Recolheram os pedaçose encheram doze cestoscom as sobras dos cinco pães,deixadas pelos que haviam comido.Vendo o sinal que Jesus tinha realizado,aqueles homens exclamavam:"Este é verdadeiramente o Profeta,aquele que deve vir ao mundo".Mas, quando notou que estavam querendo levá-lopara proclamá-lo rei,Jesus retirou-se de novo, sozinho, para o monte.Palavra da Salvação.

La Gioia del Vangelo
Sant'Atanasio, vescovo e dottore della Chiesa

La Gioia del Vangelo

Play Episode Listen Later May 2, 2025 4:19


In quel tempo, Gesù passò all'altra riva del mare di Galilea, cioè di Tiberìade, e lo seguiva una grande folla, perché vedeva i segni che compiva sugli infermi. Gesù salì sul monte e là si pose a sedere con i suoi discepoli. Era vicina la Pasqua, la festa dei Giudei. Allora Gesù, alzàti gli occhi, vide che una grande folla veniva da lui e disse a Filippo: «Dove potremo comprare il pane perché costoro abbiano da mangiare?». Diceva così per metterlo alla prova; egli infatti sapeva quello che stava per compiere. Gli rispose Filippo: «Duecento denari di pane non sono sufficienti neppure perché ognuno possa riceverne un pezzo». Gli disse allora uno dei discepoli, Andrea, fratello di Simon Pietro: «C'è qui un ragazzo che ha cinque pani d'orzo e due pesci; ma che cos'è questo per tanta gente?». Rispose Gesù: «Fateli sedere». C'era molta erba in quel luogo. Si misero dunque a sedere ed erano circa cinquemila uomini. Allora Gesù prese i pani e, dopo aver reso grazie, li diede a quelli che erano seduti, e lo stesso fece dei pesci, quanto ne volevano. E quando furono saziati, disse ai suoi discepoli: «Raccogliete i pezzi avanzati, perché nulla vada perduto». Li raccolsero e riempirono dodici canestri con i pezzi dei cinque pani d'orzo, avanzati a coloro che avevano mangiato. Allora la gente, visto il segno che egli aveva compiuto, diceva: «Questi è davvero il profeta, colui che viene nel mondo!». Ma Gesù, sapendo che venivano a prenderlo per farlo re, si ritirò di nuovo sul monte, lui da solo.

A Piccoli Sorsi - Commento alla Parola del giorno delle Apostole della Vita Interiore
riflessioni sul Vangelo di Venerdì 2 Maggio 2025 (Gv 6, 1-15) - Apostola Tiziana

A Piccoli Sorsi - Commento alla Parola del giorno delle Apostole della Vita Interiore

Play Episode Listen Later May 1, 2025 6:48


- Premere il tasto PLAY per ascoltare la catechesi del giorno -+ Dal Vangelo secondo Giovanni +In quel tempo, Gesù passò all'altra riva del mare di Galilea, cioè di Tiberìade, e lo seguiva una grande folla, perché vedeva i segni che compiva sugli infermi. Gesù salì sul monte e là si pose a sedere con i suoi discepoli. Era vicina la Pasqua, la festa dei Giudei.Allora Gesù, alzàti gli occhi, vide che una grande folla veniva da lui e disse a Filippo: «Dove potremo comprare il pane perché costoro abbiano da mangiare?». Diceva così per metterlo alla prova; egli infatti sapeva quello che stava per compiere. Gli rispose Filippo: «Duecento denari di pane non sono sufficienti neppure perché ognuno possa riceverne un pezzo».Gli disse allora uno dei suoi discepoli, Andrea, fratello di Simon Pietro: «C'è qui un ragazzo che ha cinque pani d'orzo e due pesci; ma che cos'è questo per tanta gente?». Rispose Gesù: «Fateli sedere». C'era molta erba in quel luogo. Si misero dunque a sedere ed erano circa cinquemila uomini.Allora Gesù prese i pani e, dopo aver reso grazie, li diede a quelli che erano seduti, e lo stesso fece dei pesci, quanto ne volevano. E quando furono saziati, disse ai suoi discepoli: «Raccogliete i pezzi avanzati, perché nulla vada perduto». Li raccolsero e riempirono dodici canestri con i pezzi dei cinque pani d'orzo, avanzati a coloro che avevano mangiato.Allora la gente, visto il segno che egli aveva compiuto, diceva: «Questi è davvero il profeta, colui che viene nel mondo!». Ma Gesù, sapendo che venivano a prenderlo per farlo re, si ritirò di nuovo sul monte, lui da solo.Parola del Signore.

Evangelio del día - Evangelio de hoy
Evangelio 2 mayo 2025 (Jesús tomó los panes y los repartió)

Evangelio del día - Evangelio de hoy

Play Episode Listen Later May 1, 2025 8:24


Muchos más recursos para tu vida de fe (Santo Rosario, Oración, etc.) en nuestra web https://sercreyente.com________________Viernes, 2 de mayo de 2025 (2ª Semana de Pascua)Evangelio del día y reflexión... ¡Deja que la Palabra del Señor transforme tu vida! Texto íntegro del Evangelio y de la Reflexión en https://sercreyente.com/multiplicacion-de-los-panes-y-los-peces/[Juan 6, 1-15] En aquel tiempo, Jesús se marchó a la otra parte del mar de Galilea (o de Tiberíades). Lo seguía mucha gente, porque habían visto los signos que hacía con los enfermos. Subió Jesús entonces a la montaña y se sentó allí con sus discípulos. Estaba cerca la Pascua, la fiesta de los judíos. Jesús entonces levantó los ojos y, al ver que acudía mucha gente, dice a Felipe: «¿Con qué compraremos panes para que coman estos?». Lo decía para probarlo, pues bien sabía él lo que iba a hacer. Felipe le contestó: «Doscientos denarios de pan no bastan para que a cada uno le toque un pedazo». Uno de sus discípulos, Andrés, el hermano de Simón Pedro, le dice: «Aquí hay un muchacho que tiene cinco panes de cebada y dos peces; pero ¿qué es eso para tantos?». Jesús dijo: «Decid a la gente que se siente en el suelo». Había mucha hierba en aquel sitio. Se sentaron; solo los hombres eran unos cinco mil. Jesús tomó los panes, dijo la acción de gracias y los repartió a los que estaban sentados, y lo mismo todo lo que quisieron del pescado. Cuando se saciaron, dice a sus discípulos: «Recoged los pedazos que han sobrado; que nada se pierda». Los recogieron y llenaron doce canastos con los pedazos de los cinco panes de cebada que sobraron a los que habían comido. La gente entonces, al ver el signo que había hecho, decía: «Este es verdaderamente el Profeta que va a venir al mundo». Jesús, sabiendo que iban a llevárselo para proclamarlo rey, se retiró otra vez a la montaña él solo.________________Descárgate la app de SerCreyente en https://sercreyente.com/app/¿Conoces nuestra Oración Online? Más información en: https://sercreyente.com/oracion¿Quieres recibir cada día el Evangelio en tu whatsapp? Alta en: www.sercreyente.com/whatsappTambién puedes hacer tu donativo en https://sercreyente.com/ayudanos/Contacto: info@sercreyente.com

Radio Rut | Jesus en mi Vida Diaria
DOMINGO III DE PASCUA DE RESURRECCION Ciclo C para Mayo 4- 2025

Radio Rut | Jesus en mi Vida Diaria

Play Episode Listen Later May 1, 2025 29:25


Celebramos el Domingo Tercero de Pascua de Resurrección y la Liturgia sigue proclamando el gran gozo de la Pascua. La Liturgia de los domingos anteriores nos ha presentado los relatos de las apariciones del Resucitado. Juan en su Evangelio nos presenta  tres ocasiones bien determinadas, la primera el encuentro con Magdalena en el jardín del sepulcro. la Segunda la manifestación a los apóstoles estando presente Tomas en el cenáculo y la tercera manifestación, que podemos decir es la más bella de todas, la que nos trae el Evangelio de hoy. Este encuentro se realiza  al aire libre en el lago de Tiberíades o Genesaret, entre la noche y el amanecer, que para Juan tiene además un gran sentido: el fracaso y el éxito de una jornada de trabajo, un desayuno especial y la alegría que produce la amistad y el amor del amigo y Maestro, hombre sencillo que goza participando de la vida simple de la gente sencilla como eran los discípulos. Y hoy tenemos una clara referencia a la Eucaristía, el desayuno que Jesús Resucitado les prepara en la orilla del lago, después de la dura jornada que han realizado durante la noche. En esta mañana Jesús, toma el pan y se lo da y lo mismo hace con el pescado. Por eso el pez se convertirá en el símbolo de la vida de   Fe. E inmediatamente después del desayuno viene el diálogo o examen a Pedro sobre la misión que le encomendara en su nuevo Pueblo la Iglesia. Este bello diálogo lo escuchamos hoy en el Cap. 21, 1 19  del Evangelio de S. Juan. Feliz Semana de Pascua. Hna. Maria Ruth  Radio Paulinas Boston

Evangelio del Día
Evangelio de hoy, 2 de mayo de 2025 | La multiplicación de los panes

Evangelio del Día

Play Episode Listen Later May 1, 2025 13:47


San Juan 6, 1 – 15Después de esto, se fue Jesús a la otra ribera del mar de Galilea, el de Tiberíades, y mucha gente le seguía porque veían las señales que realizaba en los enfermos. Subió Jesús al monte y se sentó allí en compañía de sus discípulos. Estaba próxima la Pascua, la fiesta de los judíos. Al levantar Jesús los ojos y ver que venía hacia él mucha gente, dice a Felipe: «¿Donde vamos a comprar panes para que coman éstos?» Se lo decía para probarle, porque él sabía lo que iba a hacer. Felipe le contestó: «Doscientos denarios de pan no bastan para que cada uno tome un poco». Le dice uno de sus discípulos, Andrés, el hermano de Simón Pedro: «Aquí hay un muchacho que tiene cinco panes de cebada y dos peces; pero ¿qué es eso para tantos?» Dijo Jesús: «Haced que se recueste la gente». Había en el lugar mucha hierba. Se recostaron, pues, los hombres en número de unos cinco mil. Tomó entonces Jesús los panes y, después de dar gracias, los repartió entre los que estaban recostados y lo mismo los peces, todo lo que quisieron. Cuando se saciaron, dice a sus discípulos: «Recoged los trozos sobrantes para que nada se pierda». Los recogieron, pues, y llenaron doce canastos con los trozos de los cinco panes de cebada que sobraron a los que habían comido. Al ver la gente la señal que había realizado, decía: «Este es verdaderamente el profeta que iba a venir al mundo». Dándose cuenta Jesús de que intentaban venir a tomarle por la fuerza para hacerle rey, huyó de nuevo al monte él solo.………………..Además puedes escuchar el Evangelio diario en las siguientes plataformas:Spotify: https://open.spotify.com/show/2M0Ubx3Jh55B6W3b20c3GOApple podcast: https://podcasts.apple.com/us/podcast/evangelio-del-d%C3%ADa/id1590423907 Para más información puede consultar nuestro sitio: https://www.vozcatolica.com o escríbanos a info@vozcatolica.com .Si quiere colaborar con este Apostolado lo puede hacer dirigiéndose a: https://vozcatolica.com/ayudanos . Desde ya muchas gracias.

Evangelio del Día
Reflexión del Evangelio del 02 de Mayo de 2025

Evangelio del Día

Play Episode Listen Later May 1, 2025 7:02


Juan 6, 1-15: En aquel tiempo, Jesús se fue a la otra orilla del mar de Galilea o lago de Tiberíades. Lo seguía mucha gente, porque habían visto los signos que hacía curando a los enfermos. Jesús subió al monte y se sentó allí con sus discípulos.Estaba cerca la Pascua, festividad de los judíos. Viendo Jesús que mucha gente lo seguía, le dijo a Felipe: “¿Cómo compraremos pan para que coman éstos?” Le hizo esta pregunta para ponerlo a prueba, pues él bien sabía lo que iba a hacer. Felipe le respondió: “Ni doscientos denarios de pan bastarían para que a cada uno le tocara un pedazo de pan”. Otro de sus discípulos, Andrés, el hermano de Simón Pedro, le dijo: “Aquí hay un muchacho que trae cinco panes de cebada y dos pescados. Pero, ¿qué es eso para tanta gente?” Jesús le respondió: “Díganle a la gente que se siente”. En aquel lugar había mucha hierba. Todos, pues, se sentaron ahí; y tan sólo los hombres eran unos cinco mil.Enseguida tomó Jesús los panes, y después de dar gracias a Dios, se los fue repartiendo a los que se habían sentado a comer. Igualmente les fue dando de los pescados todo lo que quisieron. Después de que todos se saciaron, dijo a sus discípulos: “Recojan los pedazos sobrantes, para que no se desperdicien”. Los recogieron y con los pedazos que sobraron de los cinco panes llenaron doce canastos.Entonces la gente, al ver el signo que Jesús había hecho, decía: “Éste es, en verdad, el profeta que habría de venir al mundo”. Pero Jesús, sabiendo que iban a llevárselo para proclamarlo rey, se retiró de nuevo a la montaña, él solo.

EVANGELIO DIARIO
Evangelio del viernes 2 de mayo de 2025 (Juan 6, 1-15)

EVANGELIO DIARIO

Play Episode Listen Later May 1, 2025 2:48


Lectura del santo evangelio según san Juan 6, 1-15En aquel tiempo, Jesús se marchó a la otra parte del mar de Galilea, o de Tiberíades. Lo seguía mucha gente, porque habían visto los signos que hacía con los enfermos.Subió Jesús entonces a la montaña y se sentó allí con sus discípulos.Estaba cerca la Pascua, la fiesta de los judíos. Jesús entonces levantó los ojos y, al ver que acudía mucha gente, dice a Felipe:«¿Con qué compraremos panes para que coman estos?».Lo decía para probarlo, pues bien sabía él lo que iba a hacer.Felipe le contestó:«Doscientos denarios de pan no bastan para que a cada uno le toque un pedazo».Uno de sus discípulos, Andrés, el hermano de Simón Pedro, le dice:«Aquí hay un muchacho que tiene cinco panes de cebada y dos peces; pero ¿qué es eso para tantos?».Jesús dijo:«Decid a la gente que se siente en el suelo».Había mucha hierba en aquel sitio. Se sentaron; solo los hombres eran unos cinco mil.Jesús tomó los panes, dijo la acción de gracias y los repartió a los que estaban sentados, y lo mismo todo lo que quisieron del pescado.Cuando se saciaron, dice a sus discípulos:«Recoged los pedazos que han sobrado; que nada se pierda».Los recogieron y llenaron doce canastos con los pedazos de los cinco panes de cebada que sobraron a los que habían comido. La gente entonces, al ver el signo que había hecho, decía:«Este es verdaderamente el Profeta que va a venir al mundo».Jesús, sabiendo que iban a llevárselo para proclamarlo rey, se retiró otra vez a la montaña él solo.

Soy Claretiano
Lámpara para mis pasos - Jesús se acerca, toma el pan y se lo da, y lo mismo el pescado.

Soy Claretiano

Play Episode Listen Later Apr 25, 2025 12:51


Meditación del Evangelio según San Juan 21, 1-14 por el biblista P. Norberto Padilla, misionero claretiano.Viernes 25/abr/2025, Jesús se acerca, toma el pan y se lo da, y lo mismo el pescado.Canción: Cristo Resucitó (2023), de Ally & Juan----------Lectura del santo evangelio según san Juan 21, 1-14En aquel tiempo, Jesús se apareció otra vez a los discípulos junto al lago de Tiberíades. Y se apareció de esta manera: Estaban juntos Simón Pedro, Tomás apodado el Mellizo, Natanael de Caná de Galilea, los Zebedeos y otros dos discípulos suyos. Simón Pedro les dice: "Me voy a pescar." Ellos contestan: "Vamos también nosotros contigo." Salieron y se embarcaron; y aquella noche no cogieron nada. Estaba ya amaneciendo, cuando Jesús se presentó en la orilla; pero los discípulos no sabían que era Jesús. Jesús les dice: "Muchachos, ¿tienen pescado?" Ellos contestaron: "No." Él les dice: "Echen la red a la derecha." La echaron, y no tenían fuerzas para sacarla, por la multitud de peces. Y aquel discípulo que Jesús tanto quería, dice a Pedro: "Es el Señor." Al oír que era el Señor, Simón Pedro, que estaba desnudo, se ató la túnica y se echó al agua. Los demás discípulos se acercaron en la barca, porque no distaba de tierra más que unos cien metros, remolcando la red con los peces. Al saltar a tierra, ven unas brasas preparadas y encima pescado y pan. Jesús les dice: "Traigan algo de lo que acaban de pescar." Pedro subió a la barca, arrastró hasta la orilla la red repleta de peces grandes: ciento cincuenta y tres. Y aunque eran tantos, no se rompió la red. Jesús les dice: "Vengan a comer." Ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle quién era, porque sabían bien que era el Señor. Jesús se acerca, toma el pan y se lo da, y lo mismo el pescado. Esta fue la tercera vez que Jesús se apareció a los discípulos, después de resucitar de entre los muertos.Palabra del Señor... Gloria a ti, Señor Jesús#SoyClaretiano #Evangelio #MisionerosClaretianos #CMFAntillasIntro: Lámpara Es Tu Palabra, de Ain Karem

Algo del Evangelio - Padre Rodrigo Aguilar
Juan 21, 1-14 - Viernes de la Octava de Pascua

Algo del Evangelio - Padre Rodrigo Aguilar

Play Episode Listen Later Apr 25, 2025 8:02


+ Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Juan 21, 1-14 Jesús se apareció otra vez a los discípulos a orillas del mar de Tiberíades. Sucedió así: estaban juntos Simón Pedro, Tomás, llamado el Mellizo, Natanael, el de Caná de Galilea, los hijos de Zebedeo y otros dos discípulos. Simón Pedro les dijo: «Voy a pescar.» Ellos le respondieron: «Vamos también nosotros.» Salieron y subieron a la barca. Pero esa noche no pescaron nada. Al amanecer, Jesús estaba en la orilla, aunque los discípulos no sabían que era él. Jesús les dijo: «Muchachos, ¿tienen algo para comer?» Ellos respondieron: «No.» El les dijo: «Tiren la red a la derecha de la barca y encontrarán.» Ellos la tiraron y se llenó tanto de peces que no podían arrastrarla. El discípulo al que Jesús amaba dijo a Pedro: « ¡Es el Señor!» Cuando Simón Pedro oyó que era el Señor, se ciñó la túnica, que era lo único que llevaba puesto, y se tiró al agua. Los otros discípulos fueron en la barca, arrastrando la red con los peces, porque estaban sólo a unos cien metros de la orilla. Al bajar a tierra vieron que había fuego preparado, un pescado sobre las brasas y pan. Jesús les dijo: «Traigan algunos de los pescados que acaban de sacar.» Simón Pedro subió a la barca y sacó la red a tierra, llena de peces grandes: eran ciento cincuenta y tres y, a pesar de ser tantos, la red no se rompió. Jesús les dijo: «Vengan a comer.» Ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle: «¿Quién eres?», porque sabían que era el Señor. Jesús se acercó, tomó el pan y se lo dio, e hizo lo mismo con el pescado. Esta fue la tercera vez que Jesús resucitado se apareció a sus discípulos.Palabra del Señor.

Evangelio del día y su meditación
Evangelio del Viernes 25 de Abril. Juan 21,1-14

Evangelio del día y su meditación

Play Episode Listen Later Apr 25, 2025 5:16


Jn 21,1-14.Jesús se apareció otra vez a los discípulos a orillas del mar de Tiberíades. Sucedió así:estaban juntos Simón Pedro, Tomás, llamado el Mellizo, Natanael, el de Caná de Galilea, los hijos de Zebedeo y otros dos discípulos.Simón Pedro les dijo: "Voy a pescar". Ellos le respondieron: "Vamos también nosotros". Salieron y subieron a la barca. Pero esa noche no pescaron nada.Al amanecer, Jesús estaba en la orilla, aunque los discípulos no sabían que era él.Jesús les dijo: "Muchachos, ¿tienen algo para comer?". Ellos respondieron: "No".El les dijo: "Tiren la red a la derecha de la barca y encontrarán". Ellos la tiraron y se llenó tanto de peces que no podían arrastrarla.El discípulo al que Jesús amaba dijo a Pedro: "¡Es el Señor!". Cuando Simón Pedro oyó que era el Señor, se ciñó la túnica, que era lo único que llevaba puesto, y se tiró al agua.Los otros discípulos fueron en la barca, arrastrando la red con los peces, porque estaban sólo a unos cien metros de la orilla.Al bajar a tierra vieron que había fuego preparado, un pescado sobre las brasas y pan.Jesús les dijo: "Traigan algunos de los pescados que acaban de sacar".Simón Pedro subió a la barca y sacó la red a tierra, llena de peces grandes: eran ciento cincuenta y tres y, a pesar de ser tantos, la red no se rompió.Jesús les dijo: "Vengan a comer". Ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle: "¿Quién eres", porque sabían que era el Señor.Jesús se acercó, tomó el pan y se lo dio, e hizo lo mismo con el pescado.Esta fue la tercera vez que Jesús resucitado se apareció a sus discípulos.

Evangelio Católico del Día
Viernes, 25 de abril de 2025 | Juan 21,1-14

Evangelio Católico del Día

Play Episode Listen Later Apr 25, 2025 3:05


En aquel tiempo, Jesús se les apareció otra vez a los discípulos junto al lago de Tiberíades. Se les apareció de esta manera: Estaban juntos Simón Pedro, Tomás (llamado el Gemelo), Natanael (el de Caná de Galilea), los hijos de Zebedeo y otros dos discípulos. Simón Pedro les dijo: “Voy a pescar”. Ellos le respondieron: “También nosotros vamos contigo”. Salieron y se embarcaron, pero aquella noche no pescaron nada.Estaba amaneciendo, cuando Jesús se apareció en la orilla, pero los discípulos no lo reconocieron. Jesús les dijo: “Muchachos, ¿han pescado algo?” Ellos contestaron: “No”. Entonces él les dijo: “Echen la red a la derecha de la barca y encontrarán peces”. Así lo hicieron, y luego ya no podían jalar la red por tantos pescados.Entonces el discípulo a quien amaba Jesús le dijo a Pedro: “Es el Señor”. Tan pronto como Simón Pedro oyó decir que era el Señor, se anudó a la cintura la túnica, pues se la había quitado, y se tiró al agua. Los otros discípulos llegaron en la barca, arrastrando la red con los pescados, pues no distaban de tierra más de cien metros.Tan pronto como saltaron a tierra, vieron unas brasas y sobre ellas un pescado y pan. Jesús les dijo: “Traigan algunos pescados de los que acaban de pescar”. Entonces Simón Pedro subió a la barca y arrastró hasta la orilla la red, repleta de pescados grandes. Eran ciento cincuenta y tres, y a pesar de que eran tantos, no se rompió la red. Luego les dijo Jesús: “Vengan a almorzar”. Y ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle: ‘¿Quién eres?', porque ya sabían que era el Señor. Jesús se acercó, tomó el pan y se lo dio y también el pescado.Ésta fue la tercera vez que Jesús se apareció a sus discípulos después de resucitar de entre los muertos.

Evangelio del Día
Evangelio de hoy, 25 de abril de 2025 | ¡Es el Señor Resucitado!

Evangelio del Día

Play Episode Listen Later Apr 25, 2025 7:28


San Juan 21, 1 – 14Después de esto, se manifestó Jesús otra vez a los discípulos a orillas del mar de Tiberíades. Se manifestó de esta manera. Estaban juntos Simón Pedro, Tomás, llamado el Mellizo, Natanael, el de Caná de Galilea, los de Zebedeo y otros dos de sus discípulos. Simón Pedro les dice: «Voy a pescar». Le contestan ellos: «También nosotros vamos contigo». Fueron y subieron a la barca, pero aquella noche no pescaron nada. Cuando ya amaneció, estaba Jesús en la orilla; pero los discípulos no sabían que era Jesús. Díceles Jesús: «Muchachos, ¿no tenéis pescado?» Le contestaron: «No». Él les dijo: «Echad la red a la derecha de la barca y encontraréis». La echaron, pues, y ya no podían arrastrarla por la abundancia de peces. El discípulo a quien Jesús amaba dice entonces a Pedro: «Es el Señor», se puso el vestido - pues estaba desnudo - y se lanzó al mar. Los demás discípulos vinieron en la barca, arrastrando la red con los peces; pues no distaban mucho de tierra, sino unos doscientos codos. Nada más saltar a tierra, ven preparadas unas brasas y un pez sobre ellas y pan. Díceles Jesús: «Traed algunos de los peces que acabáis de pescar». Subió Simón Pedro y sacó la red a tierra, llena de peces grandes: ciento cincuenta y tres. Y, aun siendo tantos, no se rompió la red. Jesús les dice: «Venid y comed». Ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle: «¿Quién eres tú?», sabiendo que era el Señor. Viene entonces Jesús, toma el pan y se lo da; y de igual modo el pez. Esta fue ya la tercera vez que Jesús se manifestó a los discípulos después de resucitar de entre los muertos.……………….Además puedes escuchar el Evangelio diario en las siguientes plataformas:Spotify: https://open.spotify.com/show/2M0Ubx3Jh55B6W3b20c3GOApple podcast: https://podcasts.apple.com/us/podcast/evangelio-del-d%C3%ADa/id1590423907 Para más información puede consultar nuestro sitio: https://www.vozcatolica.com o escríbanos a info@vozcatolica.com .Si quiere colaborar con este Apostolado lo puede hacer dirigiéndose a: https://vozcatolica.com/ayudanos . Desde ya muchas gracias.

Meditaciones diarias
1872. Así cualquiera pesca (EDITADA)

Meditaciones diarias

Play Episode Listen Later Apr 24, 2025 19:28


Meditación sobre el Evangelio del viernes de la Octava de Pascua: la aparición de Jesús Resucitado junto al lago de Tiberíades, y la segunda pesca milagrosa. Tomás está junto a Pedro: ha aprendido la lección. Humildad de instrumentos: es Dios quien hace las cosas, pero con nuestra ayuda.

A Piccoli Sorsi - Commento alla Parola del giorno delle Apostole della Vita Interiore
riflessioni sul Vangelo di Venerdì 25 Aprile 2025 (Gv 21 1-14) - Apostola Tiziana

A Piccoli Sorsi - Commento alla Parola del giorno delle Apostole della Vita Interiore

Play Episode Listen Later Apr 24, 2025 8:14


- Premere il tasto PLAY per ascoltare la catechesi del giorno -+ Dal Vangelo secondo Giovanni +In quel tempo, Gesù si manifestò di nuovo ai discepoli sul mare di Tiberìade. E si manifestò così: si trovavano insieme Simon Pietro, Tommaso detto Dìdimo, Natanaèle di Cana di Galilea, i figli di Zebedèo e altri due discepoli. Disse loro Simon Pietro: «Io vado a pescare». Gli dissero: «Veniamo anche noi con te». Allora uscirono e salirono sulla barca; ma quella notte non presero nulla.Quando già era l'alba, Gesù stette sulla riva, ma i discepoli non si erano accorti che era Gesù. Gesù disse loro: «Figlioli, non avete nulla da mangiare?». Gli risposero: «No». Allora egli disse loro: «Gettate la rete dalla parte destra della barca e troverete». La gettarono e non riuscivano più a tirarla su per la grande quantità di pesci. Allora quel discepolo che Gesù amava disse a Pietro: «È il Signore!». Simon Pietro, appena udì che era il Signore, si strinse la veste attorno ai fianchi, perché era svestito, e si gettò in mare. Gli altri discepoli invece vennero con la barca, trascinando la rete piena di pesci: non erano infatti lontani da terra se non un centinaio di metri.Appena scesi a terra, videro un fuoco di brace con del pesce sopra, e del pane. Disse loro Gesù: «Portate un po' del pesce che avete preso ora». Allora Simon Pietro salì nella barca e trasse a terra la rete piena di centocinquantatré grossi pesci. E benché fossero tanti, la rete non si spezzò. Gesù disse loro: «Venite a mangiare». E nessuno dei discepoli osava domandargli: «Chi sei?», perché sapevano bene che era il Signore. Gesù si avvicinò, prese il pane e lo diede loro, e così pure il pesce. Era la terza volta che Gesù si manifestava ai discepoli, dopo essere risorto dai morti.Parola del Signore.

Evangelio del día - Evangelio de hoy
Evangelio 25 abril 2025 (Echad la red a la derecha de la barca)

Evangelio del día - Evangelio de hoy

Play Episode Listen Later Apr 24, 2025 10:02


Muchos más recursos para tu vida de fe (Santo Rosario, Oración, etc.) en nuestra web https://sercreyente.com________________Viernes, 25 de abril de 2025 (Viernes de la Octava de Pascua)Evangelio del día y reflexión... ¡Deja que la Palabra del Señor transforme tu vida! Texto íntegro del Evangelio y de la Reflexión en https://sercreyente.com/viernes-octava-de-pascua/[Juan 21, 1-14] En aquel tiempo, Jesús se apareció otra vez a los discípulos junto al lago de Tiberíades. Y se apareció de esta manera: Estaban juntos Simón Pedro, Tomás, apodado el Mellizo; Natanael, el de Caná de Galilea; los Zebedeos y otros dos discípulos suyos. Simón Pedro les dice: «Me voy a pescar». Ellos contestan: «Vamos también nosotros contigo». Salieron y se embarcaron; y aquella noche no cogieron nada. Estaba ya amaneciendo, cuando Jesús se presentó en la orilla; pero los discípulos no sabían que era Jesús. Jesús les dice: «Muchachos, ¿tenéis pescado?». Ellos contestaron: «No». Él les dice: «Echad la red a la derecha de la barca y encontraréis». La echaron, y no podían sacarla, por la multitud de peces. Y aquel discípulo a quien Jesús amaba le dice a Pedro: «Es el Señor». Al oír que era el Señor, Simón Pedro, que estaba desnudo, se ató la túnica y se echó al agua. Los demás discípulos se acercaron en la barca, porque no distaban de tierra más que unos doscientos codos, remolcando la red con los peces. Al saltar a tierra, ven unas brasas con un pescado puesto encima y pan. Jesús les dice: «Traed de los peces que acabáis de coger». Simón Pedro subió a la barca y arrastró hasta la orilla la red repleta de peces grandes: ciento cincuenta y tres. Y aunque eran tantos, no se rompió la red. Jesús les dice: «Vamos, almorzad». Ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle quién era, porque sabían bien que era el Señor. Jesús se acerca, toma el pan y se lo da, y lo mismo el pescado. Esta fue la tercera vez que Jesús se apareció a los discípulos después de resucitar de entre los muertos.________________Descárgate la app de SerCreyente en https://sercreyente.com/app/¿Conoces nuestra Oración Online? Más información en: https://sercreyente.com/oracion¿Quieres recibir cada día el Evangelio en tu whatsapp? Alta en: www.sercreyente.com/whatsappTambién puedes hacer tu donativo en https://sercreyente.com/ayudanos/Contacto: info@sercreyente.com

La catequesis del dìa de Tiziana, Apòstol de la Vida Interior
reflexiones sobre el Evangelio del viernes 25 de abril de 2025 (Jn 21 1-14)

La catequesis del dìa de Tiziana, Apòstol de la Vida Interior

Play Episode Listen Later Apr 24, 2025 6:53


+ Del Evangelio según san Juan +En aquel tiempo, Jesús se les apareció otra vez a los discípulos junto al lago de Tiberíades. Se les apareció de esta manera: Estaban juntos Simón Pedro, Tomás (llamado el Gemelo), Natanael (el de Caná de Galilea), los hijos de Zebedeo y otros dos discípulos. Simón Pedro les dijo: "Voy a pescar". Ellos le respondieron: "También nosotros vamos contigo". Salieron y embarcaron, pero aquella noche no pescaron nada.Estaba amaneciendo, cuando Jesús se apareció en la orilla, pero los discípulos no lo reconocieron. Jesús les dijo: "Muchachos, ¿han pescado algo?" Ellos contestaron: "No". Entonces él les dijo: "Echen la red a la derecha de la barca y encontrarán peces". Así lo hicieron, y luego ya no podían jalar la red por tantos pescados.Entonces el discípulo a quien amaba Jesús le dijo a Pedro: "Es el Señor". Tan pronto como Simón Pedro oyó decir que era el Señor, se anudó a la cintura la túnica, pues se lo había quitado, y se tiró al agua. Los otros discípulos llegaron en la barca, arrastrando la red con los pescados, pues no distaban de tierra más de cien metros.Tan pronto como saltaron a tierra, vieron unas brasas y sobre ellas un pescado y pan. Jesús les dijo: "Traigan algunos pescados de los que acaban de pescar": Entonces Simón Pedro subió a la barca y arrastró hasta la orilla la red, repleta de pescados grandes. Eran ciento cincuenta y tres, y a pesar de que eran tantos, no se rompió la red. Luego les dijo Jesús: "Vengan a almorzar". Y ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle: '¿Quién eres?', porque ya sabían que era el Señor. Jesús se acercó, tomó el pan y se lo dio y también el pescado.Esta fue la tercera vez que Jesús se apareció a sus discípulos después de resucitar de entre los muertos.Palabra del Señor.

Evangelio del Día
Reflexión del Evangelio del 25 de Abril de 2025

Evangelio del Día

Play Episode Listen Later Apr 24, 2025 7:03


Juan 21, 1-14: En aquel tiempo, Jesús se les apareció otra vez a los discípulos junto al lago de Tiberíades. Se les apareció de esta manera: Estaban juntos Simón Pedro, Tomás (llamado el Gemelo), Natanael (el de Caná de Galilea), los hijos de Zebedeo y otros dos discípulos. Simón Pedro les dijo: “Voy a pescar”. Ellos le respondieron: “También nosotros vamos contigo”. Salieron y se embarcaron, pero aquella noche no pescaron nada.Estaba amaneciendo, cuando Jesús se apareció en la orilla, pero los discípulos no lo reconocieron. Jesús les dijo: “Muchachos, ¿han pescado algo?” Ellos contestaron: “No”. Entonces él les dijo: “Echen la red a la derecha de la barca y encontrarán peces”. Así lo hicieron, y luego ya no podían jalar la red por tantos pescados.Entonces el discípulo a quien amaba Jesús le dijo a Pedro: “Es el Señor”. Tan pronto como Simón Pedro oyó decir que era el Señor, se anudó a la cintura la túnica, pues se la había quitado, y se tiró al agua. Los otros discípulos llegaron en la barca, arrastrando la red con los pescados, pues no distaban de tierra más de cien metros.Tan pronto como saltaron a tierra, vieron unas brasas y sobre ellas un pescado y pan. Jesús les dijo: “Traigan algunos pescados de los que acaban de pescar”. Entonces Simón Pedro subió a la barca y arrastró hasta la orilla la red, repleta de pescados grandes. Eran ciento cincuenta y tres, y a pesar de que eran tantos, no se rompió la red. Luego les dijo Jesús: “Vengan a almorzar”. Y ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle: ‘¿Quién eres?', porque ya sabían que era el Señor. Jesús se acercó, tomó el pan y se lo dio y también el pescado.Ésta fue la tercera vez que Jesús se apareció a sus discípulos después de resucitar de entre los muertos.

Spirit Force
Why do the fighters fight? 1 Corinthians 13

Spirit Force

Play Episode Listen Later Apr 23, 2025 66:20


Why do the fighters fight? What is the psychology that sustains the terribleand wonderful thing called a war?In nothing is this new history needed so much as in the psychology ofwar. Our history is stiff with official documents, public or private,which tell us nothing of the thing itself. At the worst we only have theofficial posters, which could not have been spontaneous preciselybecause they were official. At the best we have only the secretdiplomacy, which could not have been popular precisely because it wassecret. Upon one or other of these is based the historical judgmentabout the real reasons that sustained the struggle. Governments fightfor colonies or commercial rights; governments fight about harbours orhigh tariffs; governments fight for a gold mine or a pearl fishery. Itseems sufficient to answer that governments do not fight at all. Why dothe fighters fight? What is the psychology that sustains the terribleand wonderful thing called a war? Nobody who knows anything of soldiersbelieves the silly notion of the dons, that millions of men can be ruledby force. If they were all to slack, it would be impossible to punishall the slackers. And the least little touch of slacking would lose awhole campaign in half a day. What did men really feel about thepolicy? If it be said that they accepted the policy from the politician,what did they feel about the politician? If the vassals warred blindlyfor their prince, what did those blind men see in their prince?There is something we all know which can only be rendered, in anappropriate language, as _realpolitik_. As a matter of fact, it is analmost insanely unreal politik. It is always stubbornly and stupidlyrepeating that men fight for material ends, without reflecting for amoment that the material ends are hardly ever material to the men whofight. In any case, no man will die for practical politics, just as noman will die for pay. Nero could not hire a hundred Christians to beeaten by lions at a shilling an hour; for men will not be martyred formoney. But the vision called up by real politik, or realistic politics,is beyond example crazy and incredible. Does anybody in the worldbelieve that a soldier says, ‘My leg is nearly dropping off, but I shallgo on till it drops; for after all I shall enjoy all the advantages ofmy government obtaining a warm-water port in the Gulf of Finland.' Cananybody suppose that a clerk turned conscript says, ‘If I am gassed Ishall probably die in torments; but it is a comfort to reflect thatshould I ever decide to become a pearl-diver in the South Seas, thatcareer is now open to me and my countrymen.' Materialist history is themost madly incredible of all histories, or even of all romances.Whatever starts wars, the thing that sustains wars is something in thesoul; that is something akin to religion. It is what men feel about lifeand about death. A man near to death is dealing directly with anabsolute; it is nonsense to say he is concerned only with relative andremote complications that death in any case will end. If he is sustainedby certain loyalties, they must be loyalties as simple as death. Theyare generally two ideas, which are only two sides of one idea. The firstis the love of something said to be threatened, if it be only vaguelyknown as home; the second is dislike and defiance of some strange thingthat threatens it. The first is far more philosophical than it sounds,though we need not discuss it here. A man does not want his nationalhome destroyed or even changed, because he cannot even remember all thegood things that go with it; just as he does not want his house burntdown, because he can hardly count all the things he would miss.Therefore he fights for what sounds like a hazy abstraction, but isreally a house. But the negative side of it is quite as noble as well asquite as strong. Men fight hardest when they feel that the foe is atonce an old enemy and an eternal stranger, that his atmosphere is alienand antagonistic; as the French feel about the Prussian or the EasternChristians about the Turk. If we say it is a difference of religion,people will drift into dreary bickerings about sects and dogmas. We willpity them and say it is a difference about death and daylight; adifference that does really come like a dark shadow between our eyes andthe day. Men can think of this difference even at the point of death;for it is a difference about the meaning of life.Men are moved in these things by something far higher and holier thanpolicy: by hatred. When men hung on in the darkest days of the GreatWar, suffering either in their bodies or in their souls for those theyloved, they were long past caring about details of diplomatic objects asmotives for their refusal to surrender. Of myself and those I knew bestI can answer for the vision that made surrender impossible. It was thevision of the German Emperor's face as he rode into Paris. This is notthe sentiment which some of my idealistic friends describe as Love. I amquite content to call it hatred; the hatred of hell and all its works,and to agree that as they do not believe in hell they need not believein hatred. But in the face of this prevalent prejudice, this longintroduction has been unfortunately necessary, to ensure anunderstanding of what is meant by a religious war. There is a religiouswar when two worlds meet; that is, when two visions of the world meet;or in more modern language, when two moral atmospheres meet. What is theone man's breath is the other man's poison; and it is vain to talk ofgiving a pestilence a place in the sun. And this is what we mustunderstand, even at the expense of digression, if we would see whatreally happened in the Mediterranean; when right athwart the rising ofthe Republic on the Tiber, a thing overtopping and disdaining it, darkwith all the riddles of Asia and trailing all the tribes anddependencies of imperialism, came Carthage riding on the sea.The ancient religion of Italy was on the whole that mixture which wehave considered under the head of mythology; save that where the Greekshad a natural turn for the mythology, the Latins seem to have had a realturn for religion. Both multiplied gods, yet they sometimes seem to havemultiplied them for almost opposite reasons. It would seem sometimes asif the Greek polytheism branched and blossomed upwards like the boughsof a tree, while the Italian polytheism ramified downward like theroots. Perhaps it would be truer to say that the former branches liftedthemselves lightly, bearing flowers; while the latter hung down, beingheavy with fruit. I mean that the Latins seem to multiply gods to bringthem nearer to men, while the Greek gods rose and radiated outwards intothe morning sky. What strikes us in the Italian cults is their local andespecially their domestic character. We gain the impression ofdivinities swarming about the house like flies; of deities clusteringand clinging like bats about the pillars or building like birds underthe eaves. We have a vision of a god of roofs and a god of gateposts, ofa god of doors and even a god of drains. It has been suggested that allmythology was a sort of fairy-tale; but this was a particular sort offairy-tale which may truly be called a fireside tale, or a nursery-tale;because it was a tale of the interior of the home; like those which makechairs and tables talk like elves. The old household gods of the Italianpeasants seem to have been great, clumsy, wooden images, morefeatureless than the figure-head which Quilp battered with the poker.This religion of the home was very homely. Of course there were otherless human elements in the tangle of Italian mythology. There were Greekdeities superimposed on the Roman; there were here and there uglierthings underneath, experiments in the cruel kind of paganism, like theArician rite of the priest slaying the slayer. But these things werealways potential in paganism; they are certainly not the peculiarcharacter of Latin paganism. The peculiarity of that may be roughlycovered by saying that if mythology personified the forces of nature,this mythology personified nature as transformed by the forces of man.It was the god of the corn and not of the grass, of the cattle and notthe wild things of the forest; in short, the cult was literally aculture; as when we speak of it as agriculture.With this there was a paradox which is still for many the puzzle orriddle of the Latins. With religion running through every domesticdetail like a climbing plant, there went what seems to many the veryopposite spirit: the spirit of revolt. Imperialists and reactionariesoften invoke Rome as the very model of order and obedience; but Rome wasthe very reverse. The real history of ancient Rome is much more like thehistory of modern Paris. It might be called in modern language a citybuilt out of barricades. It is said that the gate of Janus was neverclosed because there was an eternal war without; it is almost as truethat there was an eternal revolution within. From the first Plebeianriots to the last Servile Wars, the state that imposed peace on theworld was never really at peace. The rulers were themselves rebels.There is a real relation between this religion in private and thisrevolution in public life. Stories none the less heroic for beinghackneyed remind us that the Republic was founded on a tyrannicide thatavenged an insult to a wife; that the Tribunes of the people werere-established after another which avenged an insult to a daughter. Thetruth is that only men to whom the family is sacred will ever have astandard or a status by which to criticise the state. They alone canappeal to something more holy than the gods of the city; the gods of thehearth. That is why men are mystified in seeing that the same nationsthat are thought rigid in domesticity are also thought restless inpolitics; for in

Daniel Ramos' Podcast
Episode 474: 21 de Abril del 2025 - Devoción matutina para Adultos - ¨Con Jesús Hoy"

Daniel Ramos' Podcast

Play Episode Listen Later Apr 20, 2025 5:11


====================================================SUSCRIBETEhttps://www.youtube.com/channel/UCNpffyr-7_zP1x1lS89ByaQ?sub_confirmation=1==================================================== DEVOCIÓN MATUTINA PARA ADULTOS 2025“CON JESÚS HOY”Narrado por: Exyomara AvilaDesde: Bogotá, ColombiaUna cortesía de DR'Ministries y Canaan Seventh-Day Adventist Church ===================|| www.drministries.org ||===================21 de AbrilHijos del trueno«[También escogió] a Jacobo, hijo de Zebedeo, y a Juan, hermano de Jacobo, a quienes apellidó Boanerges, es decir, "Hijos del trueno"» (Mar. 3: 17).Sabemos por los Evangelios que Jacobo (o Santiago) y Juan eran hijos de Zebedeo, un empresario de la pesca en el lago de Tiberíades, que disponía de otros jornaleros (Mar. 1: 20). Sin duda estos jóvenes se habían criado con la idea de heredar un día el negocio familiar. Su madre, como tantas otras, tenía planes mucho más ambiciosos para à ellos. Al ver que sus hijos querían abandonar definitivamente la empresa familiar para seguir al que muchos veían como el futuro rey de Israel, hizo todo que pudo para convencer a Jesús de que sus chicos eran capaces de asumir puestos gran relevancia en el reino venidero, un honor para el I que se sentían plenamente preparados (Mat. 20: 20-23).Estos jóvenes apuntaban tan alto que un día intentaron demostrar su celo y sus capacidades de asumir responsabilidades de mando. Indignados porque un pueblo de samaritanos se negó a albergarlos una noche, le dijeron a Jesús: «¿Quieres que hagamos caer fuego del cielo y los consuma a todos?» (ver Luc. 9: 52-54). Para ellos el reino de los cielos tendría que imponerse por la fuerza, a sangre y fuego, si hiciera falta. No habían entendido todavía, y Jesús los reprendió por ello, que el reinado de Dios se propone por la vía del servicio. Y desde entonces, el Maestro les puso el apodo de «Hijos del trueno» (Boanerges) (Mar. 3: 17).Entre los seguidores de Jesús siguen habiendo «hijos del trueno». Cristianos que siempre están listos para imponer a sus hermanos, a la fuerza si hace falta, las reglas de su manera de entender el reino de Dios. Celosos lugartenientes de la disciplina, para los que la defensa de «la causa» es más importante que la salvación de «los encausados». Empeñados en purificar la iglesia, no con rayos de fuego, pero con medidas de radiación igualmente fulminantes.Sin duda, como a Santiago y Juan, Jesús desea recordarnos a todos los Boanerges modernos que él no desea que impongamos a nadie nuestras visiones beligerantes del evangelio, sino que compartamos su amor con todos, como acabaron haciendo, gracias al poder divino, ambos hermanos. Santiago murió mártir, hacia el año 42 de nuestra era. Y su hermano Juan, por su parte, comprendió por fin que el que dice que ama a Dios mientras odia a su hermano «es mentiroso» (1 Juan 4: 19-20).Señor, si los primeros Boanerges obtuvieron tu misericordia y ayuda para aprender a amar a quienes no les gustaban, inspírame también a mí y dame tu amor. 

Stand Firm Podcast
#250: Quite Contrary: Mary on Both Sides of the Tiber

Stand Firm Podcast

Play Episode Listen Later Mar 28, 2025 37:58


Tides of History
Rome in the Middle Republic

Tides of History

Play Episode Listen Later Mar 27, 2025 41:22


A century of expansion and conquest in Italy transformed Rome from a minor spot on the Tiber to the hegemonic power in the peninsula, but what did that actually mean for the Republic and the city itself?Patrick's book is now available! Get The Verge: Reformation, Renaissance, and Forty Years that Shook the World in hardcopy, ebook, or audiobook (read by Patrick) here: https://bit.ly/PWverge. And check out Patrick's new podcast The Pursuit of Dadliness! It's all about “Dad Culture,” and Patrick will interview some fascinating guests about everything from tall wooden ships to smoked meats to comfortable sneakers to history, sports, culture, and politics. https://bit.ly/PWtPoDListen to new episodes 1 week early, to exclusive seasons 1 and 2, and to all episodes ad free with Wondery+. Join Wondery+ for exclusives, binges, early access, and ad free listening. Available in the Wondery App https://wondery.app.link/tidesofhistorySee Privacy Policy at https://art19.com/privacy and California Privacy Notice at https://art19.com/privacy#do-not-sell-my-info.

Montana Outdoor Podcast
Looking For Some Spring Walleye Fishing? Fishing Guide Josh Parrow Has a Great Idea!

Montana Outdoor Podcast

Play Episode Listen Later Mar 22, 2025 62:48


Send us a textThis week on the Montana Outdoor Podcast your host Downrigger Dale talks to Fishing Guide Josh Parrow about fishing for Walleye on Tiber Reservoir this Spring. Tiber is located about an hour or so north of Great Falls Montana. As far as we know Josh is the only one that guides on this legendary Walleye hot spot. In fact, Tiber is the former home of Montana's State Record Walleye and Josh is ready to take you out to find the next State Record which is no doubt out swimming around in Tiber Reservoir somewhere right now. When you listen to this Podcast Josh will tell you where you can find the Walleye in Tiber this Spring and some great ideas of what you can use to catch them! Josh and Rigger also talk about how Josh can help you a great deal if you have never tried walleye fishing before at all or have just never tried it on Tiber Reservoir. The ice will be off Tiber soon so now is the time to listen to this Podcast, so you are ready to get out there and catch some Walleye and just maybe find the next State Record!Links:Click here to learn more about Tiber Reservoir.Check out Josh's Facebook page, just click here!Josh talked about Lawrance electronics that he likes to use. Click here to learn more about the different models.Click here to take a look at the live cameras on Tiber Reservoir!To learn more about Montana Walleyes Unlimited and a chapter near you, click here.Questions for Josh or do you want to book a fishing trip with him? Click here to email him or text him at ‭‭(406) 491-6851‬. Your buddy Downrigger would love to hear what you thought of this podcast or let him know your ideas for future podcast topics. Click here to email him.Remember to tune in to The Montana Outdoor Radio Show, live every Saturday from 6:00AM to 8:00AM MT. The show airs on 30 radio stations across the State of Montana. You can get a list of our affiliated radio stations on our website. You can also listen to recordings of past shows, get fishing and and hunting information and much more at that website or on our Facebook page. You can also watch our radio show there as well.