Podcast appearances and mentions of carlos rey

  • 11PODCASTS
  • 853EPISODES
  • 4mAVG DURATION
  • 5WEEKLY NEW EPISODES
  • Sep 28, 2023LATEST

POPULARITY

20162017201820192020202120222023

Categories



Best podcasts about carlos rey

Latest podcast episodes about carlos rey

Un Mensaje a la Conciencia
«Nunca he conocido a nadie tan mentiroso como ella»

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Sep 28, 2023 4:01


En este mensaje tratamos el caso de un hombre que «descargó su conciencia» de manera anónima en nuestro sitio www.conciencia.net y nos autorizó a que lo citáramos, como sigue: «Conocí a una chica en una aplicación de citas por Internet. Ella es seis años menor que yo. Al principio, todo fue muy discreto. Sin embargo, en dos semanas nos volvimos muy íntimos.... »Un día, en una conversación casual, comenzó a contarme acerca de su pasado.... Algo dentro de mí [hizo sonar una alarma, así que] decidí investigar. Para mi mayor sorpresa, descubrí varias mentiras de ella.... Nunca he conocido a nadie tan mentiroso como ella.... Yo ni siquiera sabía que ella... tenía novio.... ¿Por qué aparecen en nuestra vida personas como ella?» Este es el consejo que le dio mi esposa: «Estimado amigo: »Sentimos mucho que haya sufrido esa decepción, pero conste que tiene la buena fortuna de haber descubierto la verdad antes de que la relación siguiera progresando.... »Usted se decepcionó porque comenzó con una falsa suposición. Creía que las personas a quienes conociera por Internet serían tan honradas como usted, o que podría discernir cuáles no lo eran.... »Lamentablemente, esa no es la realidad. La Internet está repleta de quienes fingen ser alguien diferente de lo que son. Algunos son delincuentes profesionales, depredadores y estafadores. Otros, por su parte, simplemente aprovechan el anonimato para tener una segunda oportunidad o para un nuevo comienzo, ocultando con frecuencia relaciones presentes y pasadas, conducta ilegal y su verdadera motivación. »A fin de protegerse al navegar en la Internet, hay que suponer que todo el mundo está ocultando algo y fijarse la meta de descubrir qué es. En vez de esperar varias semanas para investigar a un conocido, hay que formarse el hábito de verificar los pormenores antes de cultivar la amistad. Si bien pudiera parecer severo y desconfiado, lo prudente es nunca bajar la guardia. »En cuanto a la intimidad que usted dice que tuvieron juntos, ojalá que no haya dejado en posesión de ella fotos que ella pueda vender o publicar. Será usted muy afortunado si no sufre más que la herida de su ego masculino a causa de ese error que cometió. »El engaño y la traición no son nada nuevo. En el siglo primero, el apóstol Pablo advirtió sobre esos peligros, y añadió que algunas personas incluso inventan nuevas maldades.1 ¡Él tenía razón! Con el desarrollo de la Internet en la vida diaria de gran parte del mundo, toda suerte de nuevas maldades se están ingeniando y practicando. »Para aprender más acerca de cómo mantener su seguridad en la Internet, lea el Caso 64 en www.conciencia.net. Y, tal como Jesucristo mismo nos enseñó que oremos, pídale a Dios que lo proteja de toda clase de maldad.»2 Con eso termina lo que Linda, mi esposa, recomienda en este caso. El caso completo puede leerse con sólo pulsar la pestaña en www.conciencia.net que dice: «Casos», y luego buscar el Caso 766. Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 Ro 1:30 2 Mt 6:13

Un Mensaje a la Conciencia
«La patria de un cristiano»

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Sep 27, 2023 4:01


«Este libro fue escrito en París —explica el célebre pensador Miguel de Unamuno en el prólogo de su profunda obra titulada La agonía del cristianismo— hallándome yo emigrado, refugiado allí, a fines de 1924, en plena dictadura... española... presa de una verdadera fiebre espiritual.... Y fue escrito por encargo... para ser traducido al francés. «Escribo... fuera de mi patria, España, desgarrada... por la tiranía...; fuera de mi hogar, de mi familia, de mis ocho hijos —no tengo nietos todavía— y sintiendo en mí, con la lucha civil, la religiosa[,] la agonía de mi patria, que se muere.... [y] la agonía de Europa, de la civilización que llamamos cristiana, de la civilización grecolatina u occidental.... »Y en tanto dicen que esta Francia, donde escribo esto, de cuyo pan como ahora y bebo agua... que esta Francia se despuebla y se ve invadida por extranjeros, porque ha muerto en ella el hambre de maternidad y de paternidad, porque no se cree ya en ella en la resurrección de la carne. ¿Se cree en la inmortalidad del alma, en la gloria...?.... »Hay momentos en que uno se figura que Europa, el mundo civilizado, está pasando por otro milenio; que se acerca su fin, el fin del mundo civilizado, de la civilización, como los primitivos cristianos, los verdaderos evangélicos, creían que se aproximaba el fin del mundo. Y hay quien dice, con la trágica expresión portuguesa: «Esto da ganas de morir».... »Escribo estas líneas fuera de mi España; pero a ésta, a mi España, a mi hija, a la España de la resurrección y de la inmortalidad, la tengo aquí conmigo, en esta Francia, en el regazo de esta Francia, mi Francia, que me está alimentando la carne y el espíritu, la resurrección y la inmortalidad. Y con la agonía del cristianismo siento en mí la agonía de mi España y la agonía de mi Francia. Y digo a España y a Francia, y en ellas a toda la cristiandad y a la humanidad no cristiana también: “Vengan a nos el reino de Dios...”»1 Ahora bien, ¿a qué clase de reino se refiere Unamuno con esa cita del padrenuestro? En la introducción explica que cuando el editor francés le pidió que escribiera La agonía del cristianismo, él había estado leyendo un libro «profundamente anticristiano». Aquel libro sostenía que «un verdadero nacionalista pone la patria ante todo, y por ende concibe, trata y resuelve todas las cuestiones políticas en su relación con el interés nacional». Al leer eso —dice Unamuno— «me acordé de aquello de “Mi reino no es de este mundo” [que Jesucristo le aseguró a Pilato en su juicio], y pensé que para un verdadero cristiano... toda cuestión, política o lo que sea, debe concebirse, tratarse y resolverse en su relación con el interés individual de la salvación eterna, de la eternidad.... [Porque] la patria de un cristiano no es de este mundo.»2 Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 Miguel de Unamuno, La agonía del cristianismo, 6a ed. (Buenos Aires: Editorial Losada, 1975), pp. 7,130-37. 2 Ibíd., pp. 14-15; Jn 18:33-38; Fil 3:20

Un Mensaje a la Conciencia
«Mi papá... Dejó el arma cerca de su cama»

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Sep 26, 2023 4:01


En este mensaje tratamos el caso de un hombre que «descargó su conciencia» de manera anónima en nuestro sitio www.conciencia.net y nos autorizó a que lo citáramos, como sigue: «Cuando tenía catorce años... fuimos de paseo a donde nuestra abuela, y mi padre [me encargó del] cuidado de mi hermanito, que sólo tenía cuatro años.... Mi papá quedó de irnos a recoger, [pero] nunca llegó porque se sentía cansado [y se durmió allí en la casa].... Pasó que me llevé [a mi hermanito] para la casa, [pero] mi papá se confió que estaba conmigo donde mi abuela, y dejó el arma cerca de su cama. Llegó el niño y se puso a jugar con el arma, se pegó un tiro en la cabeza y murió. Y mi padre me decía: «¡Te dije que no te vinieras!» »Desde ese momento, he quedado con un trauma.... Para mí, todo lo que pasó fue mi culpa. Tengo mucho resentimiento conmigo mismo.» Este es el consejo que le dimos: «Estimado amigo: »¡Cuánto nos duele pensar en el horrible trauma emocional que usted ha experimentado! Cuando ocurren accidentes, es natural tratar de culpar a alguien. Además, el instinto de supervivencia nos lleva a tratar de justificarnos diciendo que la culpa la tiene otra persona a fin de evitar la angustia extrema que resulta de sentirse culpable. Creemos que por eso su padre le decía a usted que no debió haber vuelto a casa. Él sabía que tenía la culpa por no haber ido a recogerlos como dijo que haría, y por haber dejado un arma cerca de la cama. Sabía que él era el adulto y que era la persona responsable. Pero su instinto de supervivencia lo llevó a decir algo que aliviaría sus propios sentimientos horribles de remordimiento. Como resultado, usted se ha echado la culpa de modo irracional durante todos estos años. »Por supuesto, de nada le sirve a su padre culparse a sí mismo tampoco, así que no se trata de señalarle con el dedo acusador. Sin embargo, queremos ser muy claros en esto: Usted no tuvo la culpa. Usted no hizo nada malo. Cuando él no fue a recogerlos como había dicho que haría, usted trató de actuar de una manera responsable al llevar a su hermanito de regreso a casa.... »Hay una razón muy buena por la que Dios creó a cada ser humano con una conciencia. La conciencia nos ayuda a tomar decisiones acertadas y a tratar a otros como debemos. Y la conciencia nos ayuda a reconocer nuestra necesidad de Dios. Pero no es su conciencia la que está haciendo que se sienta culpable. Más bien, esos sentimientos de culpabilidad provienen de información errónea y de una mala interpretación de los hechos. La información errónea es lo que su padre (y tal vez otros familiares) le han dicho. La mala interpretación de los hechos procede de la profunda pena que usted ha sentido y de que no ha comprendido que un adolescente de catorce años no puede razonar como un adulto.... »Permita que Dios lo consuele, »Linda y Carlos Rey.» El consejo completo, que por falta de espacio no pudimos incluir en esta edición, se puede leer si se pulsa el enlace que dice: «Caso 74» dentro del enlace en www.conciencia.net que dice: «Casos». Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net

Un Mensaje a la Conciencia
Cuando cenamos juntos como familia

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Sep 25, 2023 4:01


(Día de la Familia en EUA) El 26 de septiembre de 2006, más de quinientas comunidades junto con sus gobernadores estatales y el presidente de la república de los Estados Unidos de América celebraron, por primera vez, el Día de la Familia. La declaración del cuarto lunes de septiembre como tal resultó de una encuesta en curso, de ocho años de duración, de adolescentes que mostraban un reducido riesgo en cuanto al uso de alcohol, drogas y cigarrillo debido a que cenaban con su familia tres o más veces a la semana. Cada año esa encuesta del Centro Nacional de Adicción y Abuso de Estupefacientes de la Universidad Columbia, realizada entre los adolescentes de doce a diecisiete años de edad, había demostrado que los que cenaban regularmente con la familia eran menos propensos a fumar y a abusar del alcohol y de estupefacientes. Los adolescentes que comían en compañía de su familia tres veces o menos a la semana corrían más riesgo, mientras que los que comían con sus familiares entre cinco y siete veces a la semana recibían el beneficio máximo: alivio de los factores primordiales del estrés, el aburrimiento y las presiones académicas que provocan los estudios. Joseph Califano, director y fundador del centro, dice que los resultados justifican hacer hincapié en el tiempo de interacción familiar durante las cenas juntos. Por eso sostiene que esta campaña anual no es sólo una oportunidad para recalcar que la familia es algo bueno. «El Día de la Familia es una celebración, un símbolo, para lograr que los padres de familia reflexionen y recuerden lo importantes que son las cenas familiares... en la crianza del niño —explica Califano—.... Ahora tenemos datos científicos sustanciales que demuestran... que si se logra que un menor de edad llegue a cumplir los veintiún años sin fumar, sin consumir drogas ilícitas y sin abusar del alcohol... es casi seguro que no lo hará el resto de su vida.» Califano además recomienda con insistencia que las familias apaguen el televisor durante su tiempo juntos alrededor de la mesa.1 ¿Cómo es posible que haya llegado a ser necesario realizar semejante encuesta en la sociedad actual para lograr que los miembros de la familia se porten tal y como tradicionalmente se han portado en el transcurso de los siglos? ¡Qué decepción se llevarían nuestros abuelos si se descorriera el velo y vieran que en cuestión de una o dos generaciones permitimos que se secaran tantas de nuestras sanas raíces familiares! Tal vez esta triste realidad se deba en parte a que muchos de esos mismos antepasados nuestros dejaron de hacer algo de suma importancia, algo que debemos hacer todos a título personal, para asegurar el futuro de nuestra familia. Debemos abrirle a Jesucristo la puerta de nuestro corazón, y por ese conducto la puerta de nuestro hogar. «Mira que estoy a la puerta y llamo —dice Cristo—. Si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré, y cenaré con él, y él conmigo.»2 Abramos esa puerta de par en par, y pidámosle que ocupe el puesto que le corresponde a la cabecera de la mesa como nuestro invitado de honor cada vez que, como familia, nos sentemos a cenar. Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 Ed Thomas, «Family Time Around the Table Good for Teens» (Tiempo con la familia alrededor de la mesa benéfico para adolescentes), AgapePress, 26 sep. 2006 En línea 25 septiembre 2006. 2 Ap 3:20

Un Mensaje a la Conciencia
«Me dijo que mi novio era de él»

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Sep 23, 2023 4:01


En este mensaje tratamos el siguiente caso de una mujer que «descargó su conciencia» de manera anónima en nuestro sitio www.conciencia.net, autorizándonos a que la citáramos: «Estoy en una relación de noviazgo con un joven... pero hace unos seis meses le descubrí unos mensajes con su mejor amigo en los que estaban enviándose fotos de una manera muy extraña, y el amigo se refería a mi novio como niño bonito. Y en una ocasión, estando los tres reunidos, el amigo me dijo que mi novio era de él, y que primero había sido él que yo. Confronté a mi novio, y me dijo que eso era sólo un juego y que no volvería a pasar. »Hace unos días mi novio me dejó su celular y... su amigo le escribió, sin saber que yo tenía su celular, [un mensaje que] me causó gran disgusto. Le pedí a mi novio que me explicara ese tipo de mensajes, y me dio la misma respuesta que antes.... [Yo] quiero [a mi novio], pero tengo miedo de que esta situación pueda volver a repetirse y llegar más lejos. Temo equivocarme al no dejarlo.» Este es el consejo que le dio mi esposa: «Estimada amiga: »Al parecer, usted nos está preguntando cómo distinguir entre un juego inocente y una grave amenaza. Esa es una buena pregunta, pero la pregunta que importa más es si debe correr el riesgo de casarse con alguien de quien tenga serias dudas. Y la respuesta a esa pregunta es mucho más importante que todos los pormenores y las razones en su caso. »En definitiva, usted no debe correr el riesgo de casarse con alguien de quien desconfíe. Cualesquiera que sean las razones y los pormenores, nadie debe casarse con alguien que le genere serias dudas. Le rogamos que lea los Casos 327 y 577, y observe que la respuesta es la misma a pesar de que los pormenores son diferentes.... »Obviamente su novio decidió continuar la relación con el amigo a pesar de que a usted le causó un gran disgusto. Él optó por hacer caso omiso de los sentimientos suyos y por valorar más la relación con el amigo que la relación con usted. Esa es una clara señal de advertencia a la que usted debe prestarle atención.... »Solamente los insensatos hacen caso omiso de las señales de advertencia. Y solamente los necios les dan más prioridad a los sentimientos amorosos que a los hechos concretos. En cambio, los prudentes tienen la capacidad de ver más allá de los sentimientos amorosos con el fin de examinar los hechos. »¿Cómo podemos llegar a ser sabios o prudentes? El rey Salomón, uno de los hombres más sabios de la historia, dijo: “Todo el que quiera ser sabio que comience por obedecer a Dios; conocer al Dios santo es dar muestras de inteligencia.”1 El reconocer que Dios la ama a usted y quiere ayudarla es un buen punto de partida. A medida que usted llega a conocerlo, mediante la oración y la lectura de la Biblia, Él le ayudará a comprender cada situación que se presente.» Con eso termina lo que Linda, mi esposa, recomienda en este caso. El caso completo, que por falta de espacio no pudimos incluir en esta edición, se puede leer si se pulsa la pestaña en www.conciencia.net que dice: «Casos», y luego se busca el Caso 637. Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 Pr 9:10 (TLA)

Un Mensaje a la Conciencia
Un gran logro para los chiapanecos

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Sep 22, 2023 4:01


(Antevíspera del Día Internacional de la Biblia) «Arthur Smith se inscribió en un curso intensivo de dialectos mayances, con particularidad el tzeltal, ya que el sitio que había escogido como término de su viaje era un campamento llamado Ah‑tún, en los Altos de Chiapas, al sur de la República Mexicana.... Recibió un diploma que lo acreditaba como conocedor de la lingüística prehispánica de Mesoamérica y, con él bien enrollado en la maleta, se dirigió al campamento de Ah‑tún.... El viaje fue rápido.... La fe en Dios era lo que ahora había movido a Arthur hasta regiones inexploradas, donde tribus de indios salvajes aguardaban el mensaje de luz y redención.... »Arthur y [el Pastor] Williams se entrevistaron en la estancia de la casa de visitantes.... “Como usted ve —explicó... el Pastor Williams a Arthur— un lingüista nos era indispensable. Lo que urge es que iniciemos la traducción del Evangelio al tzeltal. Sólo así será posible predicarlo con eficacia....” »... La primera vez que Arthur subió al púlpito... improvisó una modesta presentación de sí mismo.... Dijo que... lo había movido... el afán de difundir la palabra de Cristo; de que todos, hasta los que el “mundo” en su frivolidad y los “sabios” en su insensatez califican como los más pequeños, tuvieran la oportunidad de conocer el ejemplo del gran Maestro, de imitarlo y de salvarse.»1 Así cuenta la renombrada escritora mexicana Rosario Castellanos la historia de un traductor bíblico en uno de los cuentos que componen su obra titulada Ciudad real, que se publicó en 1960. Lo cierto es que el desenlace de esa historia ficticia habría de plasmarse en la vida real cuarenta y seis años más tarde, cuando terminó de traducirse la Biblia al idioma tzeltal de Bachajón. El 25 de noviembre de 2006, en la población de Ocosingo, Chiapas, México, se llevó a cabo la presentación de esa Biblia traducida para los indígenas de la zona e impresa en versión bilingüe con el español. Según el informe de José López en labibliaweb.com, «once años de intenso trabajo por parte de traductores de las Sociedades Bíblicas Unidas, misioneros y pastores de iglesias tzeltales vieron su culminación cuando se reunieron más de cuatro mil personas... para, al fin, recibir la Palabra de Dios en un idioma que pueden entender.... »El licenciado Luis Enrique Pérez Bedolla, director de Ministros de Culto... de la Secretaría de Gobernación del país, señaló que era un gran logro para las iglesias de la localidad, e igualmente para la cultura e historia de los chiapanecos.... »Una coral de ciento diez voces, vestida de sus trajes típicos, entonó himnos en su propia lengua para gozo de todos.... »Al final, se veían muy contentos los pastores que llevaban las cajas con su valioso libro para ser usado inmediatamente. »La alegría de todos los que estuvimos presentes —comenta el periodista López— se veía reflejada en una hermosa realidad que repitieron más de una vez: “Ahora Dios también habla tzeltal de Bachajón.” »Sí, gracias al esfuerzo de traductores, misioneros [y] pastores indígenas... —concluye López—, Dios habla, cada vez más, las lenguas de nuestros pueblos.»2 Ya que Dios así ha dispuesto hablarnos, dispongámonos también nosotros, al igual que aquellos pastores indígenas y sus feligreses, a escuchar alegres su voz mediante la lectura de la Biblia que otros se han esforzado por poner en nuestras manos. Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 Rosario Castellanos, Ciudad real, «Arthur Smith salva su alma» (México, D.F.: Suma de Letras, 2002), pp.210-26. 2 José López, «Nueva Biblia para indígenas de México», Sociedades Bíblicas Unidas, 5 diciembre 2006 En línea 12 diciembre 2006.

Un Mensaje a la Conciencia
«Mi padre viudo se casó con una joven»

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Sep 21, 2023 4:01


En este mensaje tratamos el siguiente caso de una mujer que «descargó su conciencia» de manera anónima en nuestro sitio www.conciencia.net, autorizándonos a que la citáramos: «Mi padre se casó con una joven treinta y ocho años menor que él. Ella no permite que él se relacione con sus hijos de su primera esposa, que ya falleció, o sea, mi madre.... »Recientemente operaron de urgencia a mi hermano menor.... Estuvo muy grave, y... mi padre no quiere ir a visitarlo.... Me sentí muy mal cuando me enteré de todo esto: Se me subió la tensión arterial y necesité atención médica. »No sé qué decirle a mi padre.... Como esto está perjudicando mi salud, he dejado de hablar con él; pero no sé qué hacer de ahora en adelante.» Este es el consejo que le dio mi esposa: «Estimada amiga: »Quisiéramos que su situación no fuera común, pero lo es. Hay hombres que se sienten tan solos y temerosos de vivir y morir en la soledad que están dispuestos a abandonar todo lo demás en su vida para evitar quedarse solos. Al parecer, su padre es uno de esos hombres. »Lamentamos tener que informarle que no hay nada en absoluto que usted pueda decirle a su padre que cambie la situación. Él ha tomado una decisión, y ni las palabras ni la salud de usted harán que cambie de parecer.... »Sin embargo, no hay ninguna norma bíblica ni legal que obligue a su padre a que siga cuidándolos ahora que llevan tantos años de ser adultos. De hecho, en los siglos pasados era común que las hijas (en particular) se casaran, se mudaran lejos y no volvieran jamás a verse ni a comunicarse con los padres. Las vías de transporte y las comunicaciones modernas contribuyen a que esto parezca absurdo en la actualidad, pero en aquel entonces se aceptaba como algo común y corriente. »Por muy difícil que parezca creerlo, la causa de su alta presión arterial y de sus otros problemas de salud no es su padre. La causa es más bien su enojo e indignación. Comprendemos por qué está enojada, y sin duda se justifica que así se sienta. Sin embargo, cuando usted opta por aferrarse al enojo, está eligiendo perjudicar su propia salud. »No esperamos que usted algún día comprenda o apruebe lo que ha hecho su padre. Sin embargo, usted puede tomar la decisión de perdonarlo y desprenderse de él. Puede llegar a ser muy difícil perdonar estando tan herida, pero Dios puede darle la fuerza sobrenatural para hacerlo. »Jesucristo, mientras colgaba en una cruz, optó por perdonar a quienes lo estaban matando. Y le pidió a Dios, su Padre, que hiciera lo mismo, diciendo: “Padre, perdónalos”.1 De entre todas las personas que han vivido en este mundo, Jesús fue el único que jamás pecó, y sin embargo fue torturado y matado. Tenía derecho a estar enojado y aun a vengarse, pero renunció a ese derecho y eligió perdonar.» Con eso termina lo que recomienda Linda, mi esposa. El consejo completo puede leerse con sólo ingresar en el sitio www.conciencia.net y pulsar la pestaña que dice: «Casos», y luego buscar el Caso 765. Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 Lc 23:34

Un Mensaje a la Conciencia
«Agobiados por una carga»

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Sep 20, 2023 4:01


(Día Internacional del Caballo) «La extracción de un caballo en la mina... había agrupado alrededor del pique a los obreros.... Todos eran viejos, inútiles para los trabajos del interior de la mina, y aquel caballo que, después de diez años de arrastrar allá abajo los trenes del mineral, era devuelto a la claridad del sol, [les inspiraba] la honda simpatía que se experimentaba por un viejo y leal amigo con el que se han compartido las fatigas de una penosa jornada. »... Todos conocían a Diamante, el generoso bruto que, dócil e infatigable, trotaba con su tren de vagonetas desde la mañana hasta la noche en las sinuosas galerías de arrastre.... Inutilizado [ahora] por incurable cojera para cualquier trabajo dentro o fuera de la mina, [su] última etapa sería el estéril llano.... La piel, que antes fue suave, lustrosa y negra como el azabache, había perdido su brillo, acribillada por cicatrices sin cuento. Grandes grietas y heridas en supuración señalaban el sitio de los arreos de tiro... y las crines de la cola habían casi desaparecido, arrancadas por el látigo cuya sangrienta huella se veía aún fresca en el hundido lomo. »Los obreros lo miraban con sorpresa dolorosa. ¡Qué cambio se había operado en el brioso bruto que ellos habían conocido! ... El más viejo de los mineros... con voz grave y vibrante... exclamó: »“¡Pobre viejo! ¡Te echan porque ya no sirves! Lo mismo nos pasa a todos. Allí abajo no se hace distinción entre el hombre y la bestia.... ¡... Este bruto es la imagen de nuestra vida! Como él, callamos, ¡sufriendo resignados nuestro destino!”... »[Luego] el viejo, con los ojos húmedos y brillantes... tomando entre sus manos la descarnada cabeza del caballo, [le acarició] las escasas crines, murmurando a media voz: “Adiós, amigo. Nada tienes que envidiarnos. Como tú, caminamos agobiados por una carga... hasta la muerte.” »... [Al final de la jornada]... el anciano carretillero... con pesado y lento andar, fue a engrosar las filas de aquellos galeotes cuyas vidas tienen menos valor para sus explotadores que uno solo de los trozos de ese mineral que, como un negro río, fluye inagotable [de las entrañas de la tierra].»1 ¡Qué trágico que en este cuento titulado «Los inválidos», a la miseria de aquellos mineros se sumara la de sus maltratados caballos! Así, en la obra clásica Sub terra: Cuadros mineros publicada en 1904, el escritor chileno Baldomero Lillo nos hace ver lo crueles que pueden llegar a ser los hombres. El sabio Salomón, consciente de que Dios nos creó a todos por igual a su imagen y semejanza, califica a tales hombres como malvados que no tienen compasión de nadie, y los contrasta con los buenos, que se preocupan por el bienestar de sus animales.2 Gracias a Dios, para salvar a la humanidad perdida Él envió al mundo a su Hijo Jesucristo, quien enseñó lo mucho que valemos, lo comprobó al morir en nuestro lugar, y prometió darnos descanso a los que acudamos a Él agobiados por las cargas pesadas que llevamos.3 Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 Baldomero Lillo, «Los inválidos», Sub terra: Cuadros mineros (Santiago de Chile: Imprenta Moderna, 1904), pp. 1-3,5-11,17-18. 2 Gn 1:25-27; Pr 12:10 (TLA/NBV) 3 Mt 6:26; Lc 12:6-7; 19:10; Jn 3:16; Mt 11:28-29

Un Mensaje a la Conciencia
«No confío en los hombres»

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Sep 19, 2023 4:01


En este mensaje tratamos el caso de una mujer que «descargó su conciencia» en nuestro sitio www.conciencia.net. Lo hizo de manera anónima, como pedimos que se haga; así que, a pesar de que nunca se lo había contado a nadie, nos autorizó a que la citáramos, como sigue: «Era yo de ocho años de edad cuando un joven de aproximadamente diecisiete años abusó de mí sexualmente. No lo conté a nadie, ni [siquiera] a mi madre.... Desde entonces no confío en los hombres. »Ahora tengo veintiún años de edad. Tengo muchos amigos, pero no dejo de desconfiar de ellos, pues tengo mucho miedo, miedo a que alguien ponga otra vez sus manos en mi cuerpo. Muchos jóvenes me pretenden, incluso me proponen matrimonio, pero no quiero que se me acerquen mucho. »¿Cómo hago para poder de alguna manera olvidar lo que pasó aquel día? Pues no quiero vivir odiando siempre a los hombres. Quiero poder acercarme a algún joven sin temor a que me pase algo malo. ¿Qué puedo hacer?» Este es el consejo que le dimos: «Estimada amiga: »¡Cuánto lamentamos la horrible experiencia que usted sufrió hace trece años, y las consecuencias que sigue sufriendo todavía!... »Uno de los problemas en su caso en particular es que usted no se lo contó a nadie. Como niña, usted estaba tratando de protegerse al guardar el secreto. Pero como adulta, el secreto tiene que revelarse para que usted pueda afrontarlo. Si tiene una médica a la que consulta con cierta frecuencia, esa es la primera persona a quien debe contarle lo sucedido. Ella puede recomendarle a una terapeuta profesional que tenga la preparación para ayudar a víctimas de abuso sexual.... »A los ocho años de edad, usted sabía que lo que ocurrió era malo, pero no tenía la lógica para comprender que no era culpa suya. Ahora que es adulta, puede comprender que no tiene nada de qué estar avergonzada. Usted no hizo nada malo. No hay nada por lo que tenga de qué sentirse culpable. Así que no hay razón alguna para guardar el secreto a sus seres queridos. Una vez que se lo haya contado a alguien, será más fácil contárselo después a cualquier miembro de su familia o a una amiga íntima.... »Es bueno que una joven soltera no permita que los hombres la toquen. Usted se ha mantenido pura para ese hombre especial con el que ha de casarse algún día. Pero aún antes de considerar siquiera el matrimonio, usted debe llegar a conocer a ese hombre a tal grado que pueda ser sincera con él sin temor alguno. Él necesita saber lo que le pasó a usted y, si es el que a usted le conviene, reaccionará con tanta paciencia y amabilidad que usted podrá confiar en él. Mientras tanto, exija que los hombres la respeten de manera que guarden la distancia que usted necesita. »Hay Otro con quien usted puede hablar cuando quiera sin temor alguno. Él ya sabe lo que le ocurrió, pero está esperando a que usted le pida ayuda. Él la creó, la ama y siente una compasión profunda por lo que le ha sucedido.1 Hable con Dios hoy mismo en oración. No hay razón alguna para seguir esperando. »Le deseamos que se sane por completo, »Linda y Carlos Rey.» El consejo completo, que por falta de espacio no pudimos incluir en esta edición, se puede leer si se pulsa el enlace en www.conciencia.net que dice: «Casos», y luego el enlace que dice: «Caso 73». Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 Sal 145:9

Un Mensaje a la Conciencia
«Por robarse una Biblia»

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Sep 18, 2023 4:01


(Último domingo de septiembre: Día Internacional de la Biblia) «Un juez de Singapur sentenció a un hombre a cuatro meses de cárcel por robarse una Biblia, reprochándole su conducta con la Biblia misma antes de mandarlo a la prisión —informó el periódico The Straits Times el 10 de octubre de 2007—. Además, el juez de distrito Bala Reddy le entregó una Biblia nueva al ladrón de veintiséis años de edad, quien dijo que había intentado robar ese ejemplar de la Biblia de una librería... porque quería reemplazar la suya, que estaba vieja y desgastada. »Al pronunciar sentencia... el juez le dijo al acusado, quien ya tenía antecedentes por robo, que abriera el regalo. “En la página 65 verás que dice: ‘No hurtarás’ —señaló Reddy—. Mientras estés en la cárcel, aprovecha el tiempo para leer la Biblia, y asegúrate de no tener que volver a comparecer ante un tribunal.”»1 Hizo bien el juez Reddy al resaltar la gran ironía del delito cometido por aquel hombre al que tuvo que sentenciar: ¡robarse un ejemplar del libro que contiene el código penal original, el decálogo de Moisés, que ha empleado el mundo entero como norma para establecer sus leyes, entre ellas la que establece el robo como un delito!2 No dejan de sorprendernos los móviles que impulsan a los hombres a tomar decisiones que son contrarias a las leyes humanas y a veces al sentido común. En este caso, se supone que al hombre no lo motivaba más que el inocente y noble deseo de reemplazar una Biblia vieja y desgastada por una nueva. De ser cierto eso que alegaba, el delito no consistía de modo alguno en sus móviles sino en sus métodos, es decir, en los medios que empleó para lograr el fin. Es que, a pesar de lo que pensaba Maquiavelo, hay ocasiones en que el fin no justifica los medios. Otro aspecto que nos conviene considerar es que a tales medios tampoco los justifica la ignorancia. Hay quienes piensan que si ignoran que algo es malo, y lo hacen, su ignorancia los absuelve de haber pecado. Pero consideremos el siguiente caso hipotético: ¿Qué sucedería si esas mismas personas se propusieran hacer el viaje por tierra desde Panamá hasta Colombia, e ignoraran que la travesía de la inhóspita región del Darién es muy difícil y peligrosa? ¿Acaso su ignorancia las salvaría de los contratiempos y peligros que afrontarían, y las ayudara a llegar sanas y salvas a su destino? ¡Claro que no! Porque la ignorancia no salva a nadie; contribuye, más bien, a que muchos se pierdan. De modo que un día de estos, cuando sintamos el deseo de cambiar este cuerpo desgastado y mortal por uno nuevo e imperecedero, más vale que no hagamos caso omiso del requisito que la Biblia establece, sin vueltas ni rodeos, como el único camino que conduce al cielo. Pues será grande nuestra desilusión si pensamos que podemos llegar a ese destino final por cualquier otro medio. Jesucristo, el Hijo de Dios, dijo categóricamente: «Yo soy el camino, la verdad y la vida. Nadie llega al Padre sino por mí.»3 Aprovechemos el tiempo leyendo la Biblia, tomemos a pecho lo que dice, y asegurémonos así de comparecer ante el tribunal de Cristo sin tener nada de qué avergonzarnos.4 Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 “Thou shalt not steal—especially the Bible” [«No hurtarás, sobre todo la Biblia»], Singapore (Reuters), 10 octubre 2007  En línea 20 octubre 2007. 2 Éx 20:15; Dt 5:19 3 Jn 14:6 4 1Co 4:3-5; 2Co 5:8-10; 2Ti 2:15

Un Mensaje a la Conciencia
«Mi esposa odia a mi madre»

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Sep 16, 2023 4:01


En este mensaje tratamos el caso de un hombre que «descargó su conciencia» de manera anónima en nuestro sitio www.conciencia.net y nos autorizó a que lo citáramos, como sigue: «Llevo tres años de casado. Mi esposa ya tenía una hija de su relación pasada. Yo no tengo hijos. Antes de que mi madre conociera a mi esposa, comentó que una mujer con un hijo de otro hombre no sirve. Se lo conté a mi esposa, y ahora ella, después de tres años, saca eso a relucir y odia a mi madre con todas las fuerzas de su corazón. Se la pasa diciendo cosas terribles de mi madre. ¿Qué puedo hacer?» Este es el consejo que le dio mi esposa: «Estimado amigo: »Usted ha aprendido una difícil lección a causa de esta situación que no tiene ninguna solución fácil. No se nos ocurre qué lo llevó a pensar que convenía contarle a su esposa lo que había dicho su propia madre.... »No confunda el decir la verdad con contar chismes. Cuando le contó a su esposa lo que había dicho la madre de usted, eso no era más que un chisme. Usted oyó un comentario negativo y, en vez de reservárselo, decidió contárselo a la persona a quien más lastimaría. »El chisme casi siempre causa problemas. El apóstol Pablo enseñó: “No empleen un lenguaje grosero ni ofensivo. Que todo lo que digan sea bueno y útil, a fin de que sus palabras resulten de estímulo para quienes las oigan.”1 A su esposa ¿le fue de estímulo o útil de manera alguna el comentario de la madre de usted? Creemos que no. »Usted cuenta su caso como si el problema fuera entre ellas dos, pero los verdaderos problemas son las decisiones que tomó usted. Optó por casarse con alguien sin la aprobación de su propia madre. Como usted es un adulto, esa decisión le correspondía. Pero es obvio que no consideró las consecuencias que acarrearía.... »... Es probable que la madre de usted no acepte a la hija como nieta suya, y que no ame a la niña ni la trate bien. Si eso es cierto, entonces su esposa está reaccionando de ese modo a fin de proteger a su propia hija. Su esposa protege a su hija así como la madre suya erróneamente piensa que lo está protegiendo a usted. »Cualquier hombre que opta por casarse con una mujer que tiene un hijo o una hija opta así mismo por llegar a ser un padre amoroso para tal hijo o hija. Sinceramente esperamos que usted haya hecho eso. »Usted está equivocado con eso de que no tiene hijos. Lo acertado es decir que no tiene ningún otro hijo. La niña a la que no identifica como su hija lo tiene a usted como el padre en su hogar. Ella necesita que usted la ame incondicionalmente y que la proteja de todo peligro, incluso del daño que le hacen las palabras de la presunta abuela. Y necesita que usted proteja a la madre, que es la esposa suya, de toda mala influencia.» Con eso termina lo que recomienda Linda, mi esposa. El consejo completo, que por falta de espacio no pudimos incluir en esta edición, puede leerse con sólo ingresar en el sitio www.conciencia.net y pulsar la pestaña que dice: «Casos», y luego buscar el Caso 636. Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 Ef 4:29 (NTV)

Un Mensaje a la Conciencia
«Defendiendo tu santa bandera»

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Sep 15, 2023 4:01


(Día de la Independencia de Honduras) (Himno cantado por Carlos Rey en audio y en video) Desde su separación de la antigua Federación Centroamericana en 1838, la República de Honduras carecía de un Himno Nacional oficial. Por eso, en 1904, el presidente, general Manuel Bonilla, invitó a un grupo de escritores hondureños a que presentaran propuestas para la letra del himno. La que resultó favorecida fue la del poeta tegucigalpense Augusto Constancio Coello Estévez, de sólo veintiún años de edad. Al maestro de origen alemán, Carlos Hartling, director de la Banda de los Supremos Poderes, que había llegado a Honduras en 1896 contratado por el gobierno del presidente Policarpo Bonilla, le tocó la suerte de componerle la música y hacerle el arreglo respectivo. Pero no fue sino hasta el 13 de noviembre de 1915, luego del fallido intento de reemplazarlo con la letra y la música de un himno diferente mediante un concurso convocado en 1910 y clausurado en 1912, que el gobierno del presidente Alberto Membreño adoptó oficialmente la composición de Coello y Hartling como el Himno Nacional de Honduras.1 He aquí el coro y la séptima estrofa como se cantan en la actualidad: //Tu bandera// es un lampo de cielo //por un bloque// de nieve cruzado; y se ven en su fondo sagrado cinco estrellas de pálido azul; en tu emblema, que un mar rumoroso con sus ondas bravías escuda //de un volcán,// tras la cima desnuda, //hay un astro// de nítida luz. Por guardar ese emblema divino marcharemos, ¡oh patria!, a la muerte; generosa será nuestra suerte si morimos pensando en tu amor. Defendiendo tu santa bandera, y en sus pliegues gloriosos cubiertos, serán muchos, Honduras, tus muertos, ¡pero todos caerán con honor! No queda duda alguna de la devoción que el pueblo hondureño siente por su «santa bandera» patria, «emblema divino» que no sólo sus próceres sino cada patriota, por lo mucho que la ama, debe estar dispuesto a defender hasta la muerte. Con ese nivel de lealtad de parte de sus ciudadanos, Honduras se asegura una «generosa suerte» a escala nacional. Gracias a Dios, para asegurarse un dichoso porvenir espiritual a título personal, basta con que cada hondureño manifieste verdadera devoción por Él como hizo Moisés, el libertador de Israel, edificando un altar en su corazón que diga: «¡El Señor es mi bandera!»2 Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 Francisco Arístides Medina M., Cuestionario cívico del Himno Nacional de Honduras (Tegucigalpa: Ediciones Culturales FAMA)  En línea 11 junio 2009; Roberto Ramón Reyes Mazzoni, «Antecedentes del Himno Nacional», La Tribuna, 7 octubre 2007 En línea 12 junio 2009; José Dolores González, «Así nació nuestro Himno Nacional», La Tribuna, 18 noviembre 2007 En línea 12 junio 2009; En linea 12 mayo 2009; En línea 12 mayo 2009; Gaspar Sanz y Tovar, «La federación centroamericana», diciembre 1950 En línea 12 junio 2009. 2 Éx 17:15 (DHH)

Un Mensaje a la Conciencia
«Me siento miserable» por el vicio de la marihuana

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Sep 14, 2023 4:01


En este mensaje tratamos el caso de un hombre que «descargó su conciencia» de manera anónima en nuestro sitio www.conciencia.net y nos autorizó a que lo citáramos, como sigue: «Desde los quince años fumo marihuana. A los veinticinco años acepté a Jesucristo [como mi Salvador y Señor], y mi vida cambió; pero por algún motivo, al año y medio de haber dejado la marihuana, volví a caer en ese vicio. Desde entonces no he logrado dejarlo.... Trato y trato, y no puedo. Lo he mantenido en secreto.... Asisto a la iglesia normalmente, pero me siento miserable con este pecado continuo. Me siento frustrado.» Este es el consejo que le dio mi esposa: «Estimado amigo: »Muchas personas sostienen que la marihuana no es adictiva.... Pero el caso suyo es evidencia de lo contrario. Usted no ha podido dejarla, a pesar de seguir tratando de lograrlo. Ese es el significado de adicción. »Debido a que es un vicio, puede compararse con la adicción al alcohol, al cigarrillo, a los juegos de azar, a morderse las uñas y aun a decir mentira. Todos esos son hábitos dañinos que son difíciles de dejar, causados por estímulos químicos en nuestro cerebro cuando los practicamos. Le animo a que lea el Caso 7 en www.conciencia.net a fin de aprender un poco acerca de cómo los malos hábitos modifican nuestro cerebro, lo cual a su vez hace que sea más difícil dejarlos. »Lo felicitamos por arrepentirse de lo que ha hecho y por querer cambiar. Usted teme que los que asisten a la iglesia no lo aceptarían si se enteraran de su secreto. Si lee el Caso 609 en www.conciencia.net, comprenderá que la iglesia es más bien un hospital para pecadores y no un club para personas santas.... »Tal vez no lo haya pensado de la siguiente manera, pero todos en la iglesia sin excepción son pecadores y no santos. Todos han quebrantado las leyes divinas. Algunos ya han vencido sus propias tentaciones, pero otros no. Muchos de éstos están librando una lucha en silencio, tal y como está luchando usted. »Los que, al igual que usted, asisten a la iglesia y aún así tienen la tendencia o sienten la tentación de pecar no son hipócritas. Los hipócritas son los que se hacen pasar por santos mientras ocultan su pecado de todos los demás. »Por eso, cuéntele a un amigo de confianza que tiene madurez y asiste a la iglesia acerca de la lucha que usted está librando. Pídale que ore por usted y que le pregunte con frecuencia cómo está progresando en su meta de dejar atrás la marihuana.... Saque de los rincones oscuros ese secreto, y deje que lo alumbre la luz de Cristo. »Si alguien decide que usted no está en condiciones de enseñar... en la iglesia debido a esas tentaciones, acepte con humildad la decisión como un desafío para vencer en el futuro. En cualquier momento en que alguien lo juzgue con severidad, recuerde que Jesús enseñó que “el que a sí mismo se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido”.»1 Con eso termina lo que Linda, mi esposa, recomienda en este caso. El caso completo se puede leer si se pulsa la pestaña en www.conciencia.net que dice: «Casos», y luego se busca el Caso 764. Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 Mt 23:12

Un Mensaje a la Conciencia
Como las golondrinas y las madreselvas

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Sep 13, 2023 4:01


(3er. sábado de septiembre: Día del Amor y de la Amistad en Colombia) Volverán las oscuras golondrinas en tu balcón sus nidos a colgar, y otra vez con el ala a sus cristales jugando llamarán; pero aquellas que el vuelo refrenaban, tu hermosura y mi dicha al contemplar; aquellas que aprendieron nuestros nombres, esas... ¡no volverán! Volverán las tupidas madreselvas de tu jardín las tapias a escalar, y otra vez a la tarde, aun más hermosas, sus flores se abrirán; pero aquellas cuajadas de rocío, cuyas gotas mirábamos temblar y caer, como lágrimas del día... esas... ¡no volverán! Volverán del amor en tus oídos las palabras ardientes a sonar; tu corazón, de su profundo sueño tal vez despertará; pero mudo y absorto y de rodillas, como se adora a Dios ante su altar, como yo te he querido..., desengáñate: ¡así no te querrán!1 Estos versos, que componen la más famosa de las Rimas del romántico poeta español Gustavo Adolfo Bécquer, se distinguen no sólo por su elegante forma sino también por su profundo contenido. En ellos el poeta recuerda con nostalgia y melancolía el amor que ha perdido, y advierte que ese amor es único y eterno. Por una parte, en medio de la separación de su amada, la naturaleza retoma su ciclo vital como si nada hubiera sucedido: las golondrinas oscuras vuelven en primavera y las madreselvas tupidas florecen otra vez. Por otra parte, hay golondrinas y madreselvas sentimentales que no vuelven ni florecen de nuevo. Aplicándolo a su amada, el poeta le advierte que, si bien alguien volverá a manifestarle su amor tal como lo hizo él, nadie volverá a quererla como la ha querido él. Pues la devoción que ha sentido por ella trasciende las fronteras de lo terrenal: es como la devoción que el creyente, «mudo y absorto y de rodillas», siente por Dios. Tal parece que lo único que le faltó a Bécquer fue comparar el amor que es capaz de sentir un hombre por una mujer con el amor que Dios siente por nosotros. Es que Dios no sólo es capaz de sentir un amor único y eterno, sino que lo sintió a tal grado que envió a su único Hijo Jesucristo al mundo para dar su vida por nosotros. Antes de morir en la cruz en nuestro lugar, Jesús les dijo a sus discípulos: «Así como el Padre me ha amado a mí, también yo los he amado a ustedes.... Este es mi mandamiento: que se amen los unos a los otros, como yo los he amado. Nadie tiene amor más grande que el dar la vida por sus amigos. Ustedes son mis amigos si... [se aman] los unos a los otros.»2 Más vale que nos apropiemos de ese amor único y eterno que Dios nos ha manifestado. Mostrémosle nuestra devoción, adorándolo ante su altar, y hagámonos amigos suyos de por vida, amándonos los unos a los otros. ¡Y no dejemos de agradecerle por amarnos como nadie jamás volverá a hacerlo! Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 Gustavo Adolfo Bécquer, Gustavo Adolfo Bécquer: Obras completas, «Rimas I: Del libro de los gorriones», LIII (38) (Santo Domingo, República Dominicana: Editora Alfa y Omega, 1986), pp. 436-37. 2 Jn 15:9,12-14,17

Un Mensaje a la Conciencia
De nada sirve afanarse

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Sep 12, 2023 4:01


Se cuenta que después del 11 de septiembre de 2001, durante una reunión matutina, el jefe de seguridad de una compañía de Manhattan, en la ciudad de Nueva York, comenzó a contar la historia de algunos de los sobrevivientes de los ataques perpetrados contra las Torres Gemelas. La mayoría de los empleados que se salvaron habían llegado tarde al trabajo ese día por razones que por lo regular tildaríamos de pequeñeces. El presidente de la compañía llegó tarde ese día debido a que había llevado a su hijo a su primer día en el kindergarten. Uno de los empleados sobrevivió porque ese día le tocaba comprar los pasteles para el refrigerio matutino, así que había pasado por la panadería. Una mujer llegó tarde porque no le sonó la alarma del despertador. Un hombre llegó tarde debido a una congestión en la autopista de Nueva Jersey que se produjo a causa de un accidente automovilístico. Otro no llegó a tiempo a la parada para tomar el autobús acostumbrado. Una secretaria se manchó la ropa al desayunar, y tuvo que dedicar tiempo para cambiarse a último momento. El auto de un hombre no quiso arrancar esa mañana. Una mujer, en el momento en que iba a salir de su casa, oyó el timbre del teléfono y entró para contestar la llamada. Uno de los empleados tenía un hijo que hizo todo muy lentamente esa mañana, de modo que no estaba listo para la escuela como de costumbre. Otro no logró que un taxi se detuviera y lo llevara oportunamente. Y, tal vez el colmo de la buena suerte disfrazada de mala, un hombre se puso un nuevo par de zapatos esa mañana, pero en el camino a Manhattan se le formó una ampolla en uno de los pies, de modo que entró en una farmacia para comprar una curita. ¿Qué podemos aprender de las historias de esos sobrevivientes? El sabio Maestro, hijo del rey David, subraya las siguientes lecciones en el libro de Eclesiastés: ¿Qué provecho saca el hombre de tanto afanarse en esta vida? ............................................................. En la tierra suceden cosas absurdas, pues hay hombres justos a quienes les va como si fueran malvados, y hay malvados a quienes les va como si fueran justos. ............................................................. Al dedicarme al conocimiento de la sabiduría y a la observación de todo cuanto se hace en la tierra, sin que pudiera conciliar el sueño ni de día ni de noche, pude ver todo lo hecho por Dios. ¡El hombre no puede comprender todo lo que Dios ha hecho en esta vida! Por más que se esfuerce por hallarle sentido, no lo encontrará; aun cuando el sabio diga conocerlo, no lo puede comprender. ............................................................. Vi además que nadie sabe cuándo le llegará su hora. Así como los peces caen en la red maligna y las aves caen en la trampa, también los hombres se ven atrapados por una desgracia que de pronto les sobreviene. ............................................................. ¿Qué provecho saca quien trabaja, de tanto afanarse? ... Dios hizo todo hermoso en su momento, y puso en la mente humana el sentido del tiempo, aun cuando el hombre no alcanza a comprender la obra que Dios realiza de principio a fin.1 Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 Ec 1:3; 8:14,16‑17; 9:12; 3:9,11

Un Mensaje a la Conciencia
«¿Por qué todos se están muriendo?»

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Sep 11, 2023 4:01


«¡No puedo comprender cuál es el propósito de Dios en todo esto!» Así se expresó Noemí Gullickson, de treinta y ocho años de edad, para quien el martes 11 de septiembre de 2001 fue un día trágico no sólo en un sentido cívico sino también en un sentido personal. Ese nefasto día pereció su querido esposo Joseph, con quien había estado casada ocho años y había tenido dos hijas, Amanda, de tres años, e Isabel, de un año. El teniente Joseph Gullickson, bombero al servicio de Nueva York durante los últimos trece años, había quedado sepultado bajo los escombros de una de las Torres Gemelas. Aquel padre de familia sólo había cumplido con su deber. Había arriesgado y perdido la vida en el intento de salvar la vida de muchas personas. Ese día quien consoló a Noemí fue su padre José Pérez, que tenía setenta y tres años, el doble de años de vida, treinta y siete, que tenía su yerno Joseph cuando falleció. Los brazos tiernos y fuertes de José Pérez habrían de consolar a Noemí, su hija viuda, hasta dos meses después, tanto en el velorio como en la misa que se celebró en honor del teniente Gullickson el viernes 9 y el sábado 10 de noviembre. Pero el afecto paternal de José habría de esfumarse también apenas dos días después del sepelio de su yerno. Ese lunes, 12 de noviembre, José pereció en el fatídico vuelo de American Airlines, en el avión que se estrelló en un barrio residencial de Nueva York, y donde murieron otros 174 dominicanos compatriotas suyos, entre los 265 que murieron en total. Junto con el avión, se desplomaron sus planes de pasar una semana en Santo Domingo, y recuperarse así del trauma emocional del ataque terrorista del 11 de septiembre. «¡No puedo creer que se hayan ido los dos hombres a quienes más amaba en el mundo! —le dijo Noemí al reportero de un diario neoyorquino—. Cada día en que esperaba que Joseph fuera encontrado bajo los escombros y regresara a casa, mi padre estaba a mi lado. Ahora él también se ha ido.... Hace dos meses, le dije a mi hija que su papá estaba en el cielo. El lunes le tuve que decir que el abuelo está en el cielo, junto con su papá. Ella me miró y me preguntó: “¿Por qué todos se están muriendo?”» Así como a Noemí Gullickson y a su pequeña hija, también a Job, el patriarca bíblico, le resultó casi imposible comprender por qué era objeto de semejante pena, habiendo perdido de un solo golpe a sus siete hijos y a sus tres hijas.1 Tal vez Dios, a la postre, compense a aquella madre viuda como compensó a su siervo Job, dándole una doble bendición a cambio de su doble pena. De ser así, algún día ella, al igual que Job, pudiera dar testimonio de haber recibido ayuda, aliento y consuelo no sólo de sus parientes cercanos sino también de todos sus conocidos.2 Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 Job 1:1‑2,18‑19; 3:20 2 Job 42:10‑11

Un Mensaje a la Conciencia
¿Unión libre o matrimonio?

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Sep 9, 2023 4:01


En este mensaje tratamos el siguiente caso de una mujer que «descargó su conciencia» de manera anónima en nuestro sitio www.conciencia.net, autorizándonos a que la citáramos: «Hace seis años me divorcié porque mi esposo me engañó y tuvo un hijo. Yo ahora tengo un novio... pero él no se quiere casar. ¿Qué debo hacer? No quiero vivir en pecado por él. ¿Debo dejarlo y pedirle a Dios que me dé otro novio, o seguir con este?» Este es el consejo que le dio mi esposa: «Estimada amiga: »Comprendemos por qué le está costando trabajo tomar esta decisión. Hay influencias culturales en todas partes que llevan a creer que la unión libre es aceptable y tal vez hasta preferible al matrimonio. La televisión y las películas dan la impresión de que el matrimonio es una opción que algunas familias escogen sólo porque quieren causarles una buena impresión a sus amistades con una gran boda seguida de una fiesta extravagante.... »Muchos han especulado acerca de las razones de este incremento en la unión libre y la correspondiente disminución en las tasas de matrimonio. Nosotros creemos que uno de los factores contribuyentes es la ignorancia generalizada de las enseñanzas de la Biblia. Muchos de los que creen en Dios no comprenden lo necesario que es conocer o seguir esas enseñanzas. »En cambio, los que no creen en Dios no sólo rechazan sus enseñanzas con relación al matrimonio de un hombre con una mujer, sino también rechazan sus otras enseñanzas, tales como el mandamiento que dice que no debemos cometer adulterio, y las enseñanzas del apóstol Pablo acerca de la relación exclusiva entre los cónyuges. »Otro factor que contribuye al incremento de la unión libre es la excusa económica. Hemos escuchado a muchos decir que no cuentan con los fondos necesarios para casarse. Para ellos el casarse equivale a una boda y una fiesta. Saben que no tienen los recursos para costear esos grandes eventos, así que por eso no pueden casarse. En realidad, el contrato de matrimonio por sí solo cuesta muy poco, y la excusa económica revela una falta de comprensión de su verdadero significado. »Usted dice que no quiere vivir en pecado a causa de su novio. Es sabio de su parte reconocer que, a los ojos de Dios, la unión libre es pecado. ¡La felicitamos por mostrar ese interés en lo que piensa Dios! »Le recomendamos que lea los Casos 417 y 600 en www.conciencia.net para enterarse de otras dos mujeres que tuvieron que tomar la misma decisión que tiene que tomar usted. En esos dos casos no fue sino hasta después de haber estado viviendo con el novio que se dieron cuenta de que la unión libre no les convenía. En el caso suyo, usted tiene la oportunidad de tomar la decisión que más le conviene antes de tener que experimentar todo el dolor y la desilusión que sufrieron ellas. Le rogamos que aprenda de los errores de esas mujeres.» Con eso termina lo que recomienda Linda, mi esposa. El consejo completo, que por falta de espacio no pudimos incluir en esta edición, se puede leer si se ingresa en el sitio www.conciencia.net y se pulsa la pestaña que dice: «Casos», y luego se busca el Caso 635. Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net

Un Mensaje a la Conciencia
¿Hay Dios para los pobres?

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Sep 8, 2023 4:01


(Antevíspera del Centenario de la Muerte de Baldomero Lillo) «Era uno de los últimos días de junio, y una llovizna fina y persistente caía del cielo entoldado, de un gris oscuro y ceniciento.... Ese día destinado al pago de los jornales era siempre esperado con ansia.... »Allí estaba todo el personal de las distintas faenas, desde el anciano capataz hasta el [niño] portero de ocho años... con los ojos fijos en la cerrada ventanilla del pagador. »Después de un rato de espera, el postigo de la ventana se alzó, empezando inmediatamente el pago de los jornales.... Los obreros eran llamados uno a uno por los capataces que custodiaban la pequeña abertura por la que el cajero iba entregando las cantidades que [correspondían a] cada cual.... »Cuando se hubo acercado a la ventanilla el último trabajador de la última faena, la voz ruda del capataz resonó clara y vibrante: »—¡Reclamos! »Y un centenar de hombres y de mujeres se precipitó hacia la oficina, todos... animados por la esperanza de que un olvido o un error fuese la causa de que sus nombres no aparecieran en las listas. »En primera fila estaba [una] joven viuda... con su hijo, un muchacho de doce años, pero tan paliducho y raquítico que no aparentaba más de ocho.... [La viuda] acercó el rostro a la abertura y dijo: »—José Ramos: portero. »—¿No ha sido llamado? »—No, señor. »El cajero recorrió las páginas del libro, y con voz breve leyó: »—José Ramos, 26 días a veinticinco centavos. Tiene un peso de multa. Queda debiendo cincuenta centavos al despacho. »La mujer, roja de ira, respondió: »—¡Un peso de multa! ¿Por qué? ¡Y no son veinticinco centavos los que gana sino treinta y cinco! »El empleado no se dignó contestar.... La joven quiso insistir, pero los capataces la arrancaron de allí y la empujaron violentamente fuera del círculo.... La rabia la sofocaba y sus miradas despedían llamas. »—¡Canallas, ladrones! —pudo exclamar después de un momento con voz enronquecida. »Con la cabeza echada atrás [y] el cuerpo erguido... quedó un instante en actitud de reto, lanzando rayos de intensa cólera por los oscuros y rasgados ojos. »—¡No rabies, mujer; mira que ofendes a Dios! —profirió alguien burlonamente entre la turba. »La interpelada se volvió como una leona: »—¿Dios? —dijo—. ¡Para los pobres no hay Dios! »Y lanzando una mirada furiosa hacia la ventanilla, exclamó: »—¡Malditos, sin conciencia! ¡Así se los tragará la tierra!»1 ¡Qué penosa la situación en que se encontraba la pobre viuda de este pasaje del cuento titulado «El pago», que forma parte de la obra clásica Sub terra: Cuadros mineros del escritor chileno Baldomero Lillo! Lo irónico del caso es que, según el sabio Salomón, los que ofenden a Dios no son los pobres oprimidos, como la viuda del cuento, sino quienes los explotan, y honran más bien a Dios los que le tienen compasión al pobre.2 De ahí que el cantautor inglés Graham Kendrick alabe a Dios a su vez como el «Dios de los pobres» y «Amigo de los débiles», y le ruegue a Dios que nos llene de su compasión divina.3 Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 Baldomero Lillo, «El pago», Sub terra: Cuadros mineros (Santiago de Chile: Imprenta Moderna, 1904), pp. 91-101. 2 Pr 14:31 (PDT) 3 Graham Kendrick, “The Story behind the Song ‘God of the Poor’” [La historia detrás de la canción «Dios de los pobres»] En línea 30 marzo 2023.

Un Mensaje a la Conciencia
Con ciento un años de retraso

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Sep 7, 2023 4:01


(Antevíspera del Día Internacional de la Alfabetización) Corrió a más no poder para llegar cuanto antes a la escuela ese día. Era su primer día de clases en la localidad de Marcachea, al sureste de Lima, Perú, y tenía muchos deseos de aprender a leer y a escribir. Y sin embargo, al acomodarse en su pupitre junto a dos de sus familiares, no pudo menos que observar que tanto ellos como los demás alumnos en el aula se habían dado cuenta de que él había llegado un poco tarde. ¡Es que Juan Paucar había llegado nada menos que con ciento un años de retraso! Aquel anciano indígena de la región tenía ciento ocho años de edad, y los familiares con los que habría de asistir diariamente a la escuela eran dos de sus nietos.1 Aprender a leer y a escribir es la primera conquista intelectual del ser humano. Ser analfabeto es vivir en una semipenumbra. Es estar aislado de las tres cuartas partes de la vida. Es carecer de luz, de verdad, de comunicación y de contacto con casi todo lo que la humanidad ha escrito, creado, descubierto y soñado. No saber leer y escribir es vivir a medias. El hombre alcanzó su verdadera grandeza, y comenzó la marcha ascendente de la civilización, cuando inventó el arte de la escritura. Por lo tanto, no conocer ese arte es estar cortado por la mitad, ser medio ciego y tener un solo oído. Saber leer y escribir es esencial porque la mayor revelación de Dios al hombre se encuentra en las Sagradas Escrituras. Sólo por medio de la Biblia podemos llegar a conocer a Dios plenamente. Sólo en su Palabra está escrita la verdad redentora del evangelio, que es la buena noticia acerca de su Hijo Jesucristo. Por eso debemos todos aprender no sólo a leer, sino a leer la Biblia. No saber leer y, por consiguiente, no poder leer la Biblia, es una tragedia. Pero saber leer, hasta en más de un idioma, y no leer la Palabra de Dios, no es sólo una tragedia sino también una negligencia espiritual suicida. Desconocer las Sagradas Escrituras —nos advierte Jesucristo— nos predispone a andar equivocados.2 En cambio, leerlas y conocerlas —afirma San Pablo—, nos predispone a adquirir «la sabiduría necesaria para la salvación mediante la fe en Cristo Jesús».3 Todos los que tenemos la ventaja de saber leer debiéramos examinar la Palabra de Dios todos los días, como lo hacían los seguidores de Cristo en Berea.4 A todos, sin excepción —mandatarios, gobernantes, legisladores, magistrados, médicos, cirujanos, científicos, astronautas, abogados, catedráticos, profesores, licenciados, estudiantes universitarios, bachilleres, ejecutivos, empresarios, padres de familia y amas de casa— nos sería de provecho eterno leer y estudiar la Biblia con dedicación. Sólo así estaremos capacitados para juzgar por nosotros mismos si es verdad lo que nos están enseñando moral y espiritualmente nuestros maestros.5 Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 «Juan Paucar», El País, 20 octubre 1982 En línea 6 mayo 2013. 2 Mt 22:29 3 2Ti 3:15 4 Hch 17:11 5 Ibíd.

Un Mensaje a la Conciencia
Un noviazgo con propósito

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Sep 6, 2023 4:01


En este mensaje tratamos de manera anónima el caso que nos contó un hombre en las siguientes palabras: «Tengo dieciocho años de edad... y una novia.... Los dos estudiamos en la universidad.... Yo quiero que nuestro noviazgo tenga un propósito: llegar al matrimonio. No quiero jugar con ella, pero tampoco quiero que caigamos en la inmoralidad. Mi inquietud es: ¿Qué debiera hacer yo como varón? ... ¿Cómo logro evitar toda tentación que nos llegue a hacer pecar? »Estuvimos hablando sobre vernos en un lugar sin nadie más... y nos estuvimos mandando fotos desnudos.... No nos vimos así, ni tuvimos actividad sexual físicamente... pero si no hago algo, podría suceder lo peor.... No sé cómo decirle que estas cosas me ponen mal porque nos alejan de Dios....» Este es el consejo que le dio mi esposa: «Estimado amigo: »Lo felicitamos por el deseo que tiene de seguir a Dios y de hacer lo que le agrada a Él.... Estamos de acuerdo en que debe tomar medidas preventivas ahora antes de cometer un error que lamentará por el resto de su vida. »Usted y su novia ya han intercambiado fotos al desnudo. Lamentablemente, esa es una señal de que están enfocados en el aspecto físico en vez del aspecto emocional. Bien pudiera negar que esto sea cierto, ya que siente una fuerte sensación sentimental cuando ve las fotos de su novia. Sin embargo, esa clase de emoción no es más que lujuria. No es amor, ni incrementa el amor mutuo que sienten. Al contrario, es dañino para su noviazgo. »Los novios que invierten tiempo hablando y llegando a conocer el trasfondo, las prioridades, las preferencias y las metas del otro están progresando en sus respectivos noviazgos. En cambio, los que cultivan una relación sexual pasan el tiempo enfocados en experimentar el placer físico en vez de profundizar la conexión sentimental. Están trazando su rumbo con miras a un noviazgo superficial e insatisfactorio. »Las películas y los libros se concentran en la interacción física entre los novios. A quienes leen o ven esas historias se les lleva a creer que la atracción física es la confirmación del amor verdadero. »Lamentablemente, ese mito ha causado más divorcios y corazones quebrantados que lo que podemos imaginarnos.... Las personas que tienen un noviazgo que está cimentado en una atracción física tienen muy pocas probabilidades de disfrutar juntos de una vida larga y dichosa.... »Si usted cree que de veras ama a su novia, aún es posible que salve su noviazgo. Niéguese a llevarla a sitios donde puedan pasar tiempo a solas. Dígale que respeta su pureza y que no la despojará de eso. Niéguese a sacarse fotos indecentes, y pídale a ella que no le envíe semejantes fotos a usted.... Lo más importante es que le diga con toda franqueza el deseo que usted tiene de edificar su noviazgo conforme al diseño divino.» Con eso termina lo que recomienda Linda, mi esposa. El consejo completo se puede leer si se ingresa en el sitio www.conciencia.net y se pulsa la pestaña que dice: «Casos», y luego se busca el Caso 763. Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net

Un Mensaje a la Conciencia
«Su hija la manipula con sus amenazas»

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Sep 5, 2023 4:01


En este mensaje tratamos el siguiente caso de una mujer que «descargó su conciencia» de manera anónima en nuestro sitio www.conciencia.net, autorizándonos a que la citáramos: «Tengo una hija de doce años con un comportamiento difícil. Como yo trabajo y ella se debe quedar sola en la casa, me preocupa que esté entrando niños a la casa sin mi autorización. La han visto besándose con un niño que no conozco, y en la Internet está viendo cosas indebidas. »Cuando me pongo a hablar con ella al respecto, se pone a gritar y dice que por qué nació y que se quiere matar. He tomado muchas [medidas correctivas] al respecto, y ninguna me ha funcionado. No sé qué hacer...» Este es el consejo que le dimos: «Estimada amiga: »... Algunas jovencitas de doce años tienen suficiente madurez como para tomar decisiones responsables, por lo que se les puede dejar solas en casa durante breves lapsos de dos horas o menos. Es evidente que su hija no es una de ellas. Las señales de advertencia le están anunciando ¡Peligro! en grandes letras rojas.... Le instamos a que busque supervisión en seguida para su hija después del día escolar, cueste lo que cueste.... »Usted ha descrito cómo su hija la manipula con sus amenazas. Usted necesita entablar una conversación apacible con ella (posiblemente en un restaurante donde ella no comience a gritarle), y decirle a ella que sus amenazas de suicidio son un asunto muy serio que usted no seguirá pasando por alto. La próxima vez (sin excepción alguna) en que ella diga que se quiere matar, usted va a hacer una cita con un consejero profesional o terapeuta, ya sea en la escuela o en una clínica psiquiátrica, a fin de que se determine si ella está en peligro de hacerse daño.... »Haga una lista del comportamiento que usted espera y de las consecuencias de no obedecer las reglas, y entréguesela a su hija. Para el mal uso de la computadora, quítele el teclado. Para las veces en que se niegue a hacer lo que se le exige, establezca consecuencias drásticas tales como el quitar la puerta de su cuarto de modo que no tenga nada de privacidad. Quítele ropa o pertenencias favoritas y el privilegio de usar el teléfono, y limite sus actividades sociales. El factor más importante de este plan es que no debe establecer ninguna consecuencia que usted no esté dispuesta a hacer cumplir de inmediato. No permita que ella tenga una segunda oportunidad de infringir las reglas. Ella debe ver que cada vez que desobedece una regla, la consecuencia será inmediata. »No se sorprenda de que ella reaccione con violencia. Dirá cosas hirientes y la mortificará durante meses y tal vez años. Pero si usted es constante con las consecuencias, siempre llevándolas a cabo de inmediato, a la larga ella aprenderá que podrá recibir más de lo que desea si obedece las reglas. El sabio Salomón enseñó: “Quien se burla de la instrucción tendrá su merecido; quien respeta el mandamiento tendrá su recompensa.”1 A la postre su hija descubrirá que el obedecer las reglas tiene su recompensa. Mientras tanto, usted debe aprender a hacer caso omiso de sus amenazas (salvo la del suicidio) y a no permitir que lo que ella le diga la afecte emocionalmente.... »¡Para criar bien a los hijos hay que ser fuerte! »Linda y Carlos Rey.» El consejo completo, que por falta de espacio no pudimos incluir en esta edición, puede leerse con sólo pulsar el enlace en www.conciencia.net que dice: «Casos», y luego el enlace que dice: «Caso 72». Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 Pr 13:13

Un Mensaje a la Conciencia
«Luego me involucré con su madre»

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Sep 2, 2023 4:01


En este mensaje tratamos el caso de un hombre que «descargó su conciencia» de manera anónima en nuestro sitio www.conciencia.net y nos autorizó a que lo citáramos, como sigue: «Hace seis años comencé una relación con una señorita cinco años menor que yo. Terminé la relación con ella, pero luego me involucré con su madre. Hubo muchos problemas... así que después de dos años nos separamos. Tres años más tarde volví a comenzar con la hija.... Ahora hasta pienso en el matrimonio.... Pero reconozco que cometí pecado... y que me equivoqué en el pasado al tener esa relación con su madre.... »A veces me preocupa que, si me casara con ella, nuestra vida se llenaría de problemas por todo lo que sucedió con su madre. Pienso que su madre interferiría en la relación.... Quisiera que me aconsejen. Temo equivocarme.» Este es el consejo que le dio mi esposa: «Estimado amigo: »... Nos imaginamos el resentimiento que hay entre la madre y la hija. Pero... no sabemos si usted causó... o si simplemente llegó a intervenir por voluntad propia, en los problemas [entre] ellas. De cualquier manera, hay una profunda brecha entre madre e hija. La única otra posibilidad es que [ellas] se hayan confabulado para engañarlo o estafarlo a usted. »El que usted reconozca que ha pecado significa que la relación que mantuvo con una de ellas o con ambas era sexual. Como no estaba casado con ninguna de las dos, esas relaciones íntimas violaron las normas de Dios. Además, uno de los actos inmorales prohibidos en Levítico, que es el libro de la ley en la Biblia, es el tener relaciones sexuales con una mujer y también con su hija.1 »Aunque usted sepa que se equivocó al tener tal relación con la madre, de todos modos hay consecuencias naturales de esa conducta. Dios está muy dispuesto a perdonar nuestros pecados cuando nos arrepentimos en el nombre de su Hijo Jesucristo, pero Él no quita las consecuencias naturales de esos pecados. »El pecado de mantener una íntima relación física con la madre de la novia tiene la consecuencia natural de que ella jamás podría ser una suegra imparcial para usted. ¡Claro que interferiría! ¡Y claro que se interpondría entre usted y la hija! »Lo que a usted más le conviene es desaparecer de la vida de las dos. Para que ellas algún día puedan restaurar la relación entre las dos, será necesario que usted no esté presente de ninguna manera. Así que si eso significa mudarse a otra localidad, cambiar de amigos o cambiar de empleos, hágalo. Haga todo lo que sea necesario. »Si usted se casa con la hija de todos modos, puede estar seguro de que las consecuencias de su conducta pasada determinarán los dolores de cabeza y quebrantos de corazón en su futuro. Así que, si no es eso lo que usted desea, entonces le aconsejamos que no sólo le pida a Dios que perdone sus pecados, sino que también le ayude a vivir de tal manera que dejen de perseguirlo las consecuencias de su pasado.» Con eso termina lo que Linda, mi esposa, recomienda en este caso. El caso completo, que por falta de espacio no pudimos incluir en esta edición, puede leerse con sólo pulsar la pestaña en www.conciencia.net que dice: «Casos», y luego buscar el Caso 634. Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 Lv 18:17

Un Mensaje a la Conciencia
La leyenda del viento

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Sep 1, 2023 4:01


Poco después de hacer al primero de los indios wawenock, Dios observó incrédulo una creación ajena a la suya. —Y tú, ¿de dónde has salido? —preguntó desde las alturas. —Yo soy maravilloso —dijo Gluskabe—. Nadie me hizo. Lo cierto era que de los restos de barro que habían quedado del primer ser creado, Gluskabe se había hecho a sí mismo. Esto no cuajaba bien con el Cacique Supremo, así que se puso al lado de Gluskabe y le señaló el universo. —Mira mi obra. Ya que eres maravilloso, muéstrame qué cosas has inventado. —Puedo hacer el viento, si quiero. Gluskabe sopló a todo pulmón, pero el viento murió tan pronto como había nacido. —Yo puedo hacer el viento —reconoció Gluskabe, cabizbajo—, pero no puedo hacer que el viento dure. Ya harto de semejante presunción, Dios sopló con tanta fuerza que Gluskabe se cayó y perdió todos los cabellos.1 Esta leyenda de los wawenock encierra una lección muy valiosa para los que, al igual que Gluskabe, se han formado por su cuenta, sin la intervención de Dios. La moraleja es ésta: Dios es el único que puede hacer que algo dure. Eso no quiere decir que no sean dignos de elogio quienes han llegado a su posición actual por sus propios esfuerzos, sino sólo que el fruto de esos esfuerzos no dura. El viento que son capaces de crear, cada uno a su manera y según sus talentos, es como el viento que creó Gluskabe: muere tan pronto como nace. Llegan a ser «hijos de sus propias obras» y no de Dios, porque confían en esas obras y no en Dios. A eso se debe que haya tantos que han llegado a tener todo lo que les parecía que los iba a hacer felices —el dinero, el placer sexual y el poder—, y sin embargo son las personas más infelices del mundo. Si no se suicidan, no es por falta de deseos ni por escrúpulos, sino por cobardía y por temor a la muerte. Transitan por ese callejón sin salida porque ignoran que son inútiles sus esfuerzos por que perduren esas obras suyas que tanto trabajo y fatiga les han costado. Y esto porque ignoran lo que aprendió Gluskabe: que sólo Dios puede hacer que algo dure. Por lo tanto, para que perduren sus obras, tendrán que caminar en dirección contraria, asegurándose de que esas obras sean de Dios. Y esto sólo podrán lograrlo si se disponen a ser instrumentos en las manos de Dios. Una vez que lo hagan, podrán afirmar, como San Pablo: «Por la gracia de Dios soy lo que soy, y la gracia que él me concedió no fue infructuosa. Al contrario, he trabajado con más tesón que todos..., aunque no yo sino la gracia de Dios que está conmigo.»2 Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 Eduardo Galeano, Memoria del fuego I: Los nacimientos, 18a ed. (Madrid: Siglo XXI Editores, 1991), pp. 6-7. 2 1Co 15:10

Un Mensaje a la Conciencia
«Mi esposo cayó de nuevo en las drogas»

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Aug 31, 2023 4:01


En este mensaje tratamos el siguiente caso de una mujer que «descargó su conciencia» de manera anónima en nuestro sitio www.conciencia.net, autorizándonos a que la citáramos: «Desde su juventud mi esposo ha tenido problemas con las drogas, la delincuencia y el alcohol.... Después de que nació nuestra hija, él se internó en un centro y dejó las drogas. Pero, cuando nació nuestro hijo, volvió a caer en las drogas y estuvo con otra mujer, con la que tuvo una hija.... Él volvió arrepentido, y lo perdoné. Hasta hace un tiempo estuvo bien, pero [luego cayó de nuevo en las drogas y, aunque] dijo que las iba a dejar, veo que no es así. »Ahora [estoy en] la casa de mi hermana porque no aguanto la situación.... Estoy pensando en separarme, pero... por mis hijos sigo adelante, siempre con ese miedo a que mi esposo caiga. ¡Es horrible vivir así!» Este es el consejo que le dio mi esposa: «Estimada amiga: »Al parecer, usted y su familia han estado sujetas a una montaña rusa emocional de la que no pueden bajarse. Su esposo mejora, y eso parece ser motivo para animarse, pero él luego empeora, y eso hace que usted caiga en el desánimo. Su familia ha tenido que seguir aguantando los altibajos de ese tren desenfrenado, y ahora usted quiere saber si debe bajarse con sus hijos y dejar atrás al padre y esposo. »Lo más prudente sería que consultara a un abogado. Usted necesita saber qué derechos paternos tendrá su esposo si decide separarse de él. ¿Podrá él llevarse a los hijos para una visita no supervisada a un hogar ajeno donde usted no podrá protegerlos de lo que pudieran presenciar o sufrir? ¿Se le exigirá a él que sustente a los hijos económicamente a pesar de que ya no vivan con él? Un abogado puede ayudarle a resolver esos asuntos importantes. »Debido a que su esposo le fue infiel, creemos que usted tiene una justificación bíblica para separarse de él.1 Además, la drogadicción de él constituye un pésimo ejemplo para sus hijos. Sin embargo, los estudios que se han hecho al respecto han demostrado repetidamente que a los niños les conviene más tener una relación estrecha con el padre. Por eso no hay manera alguna de que sepamos si sus hijos disfrutarían de mejor salud emocional con sus padres juntos o separados. »La voluntad perfecta de Dios para cada niño es que tenga padre y madre que sean sabios y amorosos, que estén felizmente casados y que no sean adictos a ninguna droga. Sin embargo, todos sabemos que muchos niños no gozan de las ventajas de vivir en un hogar intacto y estable. »Cualquiera que sea la decisión que tome, usted puede hacer que sean mínimos los efectos negativos que sufran sus hijos al no hablarles mal de su padre. No trate de convencerlos de que usted tiene razón y él no la tiene.... Tenga cuidado de que no le oigan hablar con nadie acerca de esta situación, y asegúrese de mantener en privado y en secreto las conversaciones con su esposo al respecto.» Con eso termina lo que Linda, mi esposa, recomienda en este caso. El caso completo puede leerse con sólo pulsar la pestaña en www.conciencia.net que dice: «Casos», y luego buscar el Caso 762. Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 Mt 5:31-32; 19:9

Un Mensaje a la Conciencia
Consecuentes con sus ideas

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Aug 30, 2023 4:01


«Nació el día 20 de abril de 1913 en Guayama, Puerto Rico.... [Según su] amigo y compañero de adolescencia,... “era un joven... estudioso... que [mostró] un gran interés y preocupación por la justicia e igualdad de todos.” »... [En la] década de 1930... ingresó en la Universidad de Puerto Rico.... El 22 de septiembre de 1935 se marchó a España... a estudiar Derecho en la Universidad Central de Madrid.... »En esa prestigiosa universidad... [participó] en la organización de grupos cuya misión era defender los principios democráticos de la recién creada República.... [Terminado] su primer año de estudios... vio que la libertad y la independencia que el pueblo español había conquistado tras arduos años de lucha estaban en peligro, [y] no dudó un instante en sumarse a la defensa de esos valores.... Cuando las tropas extranjeras intentaron tomar Madrid, empuñó el fusil y,... junto a sus compañeros de ideas liberales,... se sumó al frente de batalla a defender algo más grande que la República española: el derecho a la libertad de todos, en peligro por la fuerza bruta encabezada por Franco, respaldado por Hitler y Mussolini.... »Cayó preso en diciembre de 1936, en el campo de batalla, en la defensa de Madrid,... prisionero de las tropas fascistas de Francisco Franco.... El 25 de julio de 1937, el periódico El Mundo, en primera plana, acompañado de una foto suya, paralizó emocionalmente al pueblo de Puerto Rico. El titular era frío y escueto: “Carmelo Delgado fusilado en Valladolid, después de un consejo de guerra.” ... Sólo tenía veinticuatro años de edad a la hora de su muerte.... »... Luchador incansable contra la opresión y defensor de los derechos de la mujer,... se le atribuye la frase: “¡Qué importa ganar la vida si [a] cambio doy mi espíritu al opresor de mi pueblo!” »... Carmelo Delgado, el joven independentista de Guayama y Río Piedras, fue consecuente con sus ideas hasta el punto de dar la vida por ellas en el otro extremo del mundo.»1 Así reseña el doctor José Morales Dorta la vida heroica de su compatriota Carmelo Delgado Delgado en su obra titulada Galería de héroes de Puerto Rico. Lo cierto es que aquel joven héroe puertorriqueño nos recuerda a otro joven «luchador incansable contra la opresión» que también «mostró un gran interés y preocupación por la justicia e igualdad de todos». Se trata del héroe de la historia universal, Jesucristo, el Hijo de Dios. De un consejo de guerra celestial surgió la idea de salvar a la humanidad perdida. Cristo fue consecuente con esa idea hasta el punto de venir del cielo para dar la vida por ella en el otro extremo del mundo. Pero a diferencia de Carmelo Delgado, Cristo no tuvo que enfrentar un pelotón de fusilamiento. En aquel entonces no fusilaban a los condenados a muerte, sino que los crucificaban. De modo que murió clavado en una cruz. Sólo tenía treinta y tres años de edad a la hora de su muerte. Pero con ella pagó el castigo de nuestro pecado, para que cada uno de nosotros, con sólo apropiarnos de ese sacrificio supremo que hizo en nuestro lugar, pudiera tener vida eterna. Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 José Morales Dorta, Galería de héroes de Puerto Rico (San Juan: Plaza Mayor, Inc., 1997), pp. 105‑26.

Un Mensaje a la Conciencia
Infidelidad por alcoholismo

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Aug 29, 2023 4:01


En este mensaje tratamos el caso de una mujer que «descargó su conciencia» en nuestro sitio www.conciencia.net. Lo hizo de manera anónima, como pedimos que se haga; así que, a pesar de que nunca se lo había contado a nadie, nos autorizó a que la citáramos, como sigue: «Tengo ocho años de estar casada, y mi esposo es alcohólico.... Hace un tiempo me refugié en la Internet y conocí a un hombre de mi misma edad. Me enamoré de él como nunca (al menos eso creía). Él se aprovechó del amor que yo sentía por él, llegando al punto de pedirme dinero, a lo cual yo accedí en muchas ocasiones. Pero hace un par de meses él se enamoró de una chica, y nuestro romance terminó. »En el lapso de mi romance con él, mi esposo se puso en rehabilitación, y ya no bebe. Me duele mucho ver hacia atrás y saber lo que hice.... No hay un solo día que no me arrepienta de lo que hice.... No sé si dejar a mi esposo, porque la conciencia me lo pide a gritos.» Este es el consejo que le dimos: «Estimada amiga: »... No hay duda de que la vida conyugal con un alcohólico es sumamente difícil. Comprendemos que usted estaba desesperada por la grave situación en que se encontraba, y que sólo buscaba un poco de alivio. Sin embargo, como ahora sabe, entrar en una relación con otro hombre no era la solución. Con eso no hizo más que agravar la situación. »El primer paso que debe dar para tener una conciencia tranquila es reconocer su pecado ante Dios. El apóstol Juan escribió: “Si confesamos nuestros pecados, Dios, que es fiel y justo, nos los perdonará y nos limpiará de toda maldad.”1 Cuando usted le confiese sus pecados a Dios, Él no solamente la perdonará, sino que también le dará una conciencia limpia. Esto se debe a que su Hijo Jesucristo murió en la cruz a fin de llevar el castigo suyo para que usted no tuviera que llevarlo. Así que el castigo que usted merece ya lo sufrió Cristo. Y como su pecado ya ha sido perdonado y pagado, puede estar tranquila. »Sin embargo, usted también se siente culpable por lo que le hizo a su esposo. Así que para ser libre de esa culpa, debe confesárselo. Es posible que él reconozca que su propia conducta como alcohólico constituya una razón para pedirle a usted perdón a su vez. Tal vez los dos puedan perdonarse mutuamente y seguir viviendo juntos como esposos. Por otra parte, es posible que él no la perdone y que opte más bien por disolver su matrimonio. »Lamentablemente la infidelidad hace que se pierda la confianza entre dos personas. De modo que, aunque él desee perdonarla, usted tendrá que volver a ganarse su confianza.... Cuanto más franca y sincera sea con él, más rápido aprenderá él que puede volver a confiar en usted. »Ya sea que siga o no siga en pie su matrimonio, la animamos a que se esfuerce por cultivar una relación personal con Dios a diario. Mediante la oración y la lectura de la Biblia, usted puede adquirir la fortaleza emocional que actualmente le falta. Puede hallar propósito para su vida, y hallar a un Amigo que siempre la acompañará. »¡Dé los pasos necesarios para tener una conciencia tranquila hoy mismo! »Linda y Carlos Rey.» El consejo completo, que por falta de espacio no pudimos incluir en esta edición, se puede leer si se pulsa el enlace que dice: «Caso 71» dentro del enlace en www.conciencia.net que dice: «Casos». Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 1Jn 1:9

Un Mensaje a la Conciencia
«Sé que los culpables somos nosotros»

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Aug 26, 2023 4:01


En este mensaje tratamos el caso de un hombre que «descargó su conciencia» de manera anónima en nuestro sitio www.conciencia.net y nos autorizó a que lo citáramos, como sigue: «Tengo una familia formada por mi esposa y una hija de dieciocho años, que está en el último año de la preparatoria. Mi convivencia con mi esposa siempre ha sido de pleitos y malas palabras. Lamentablemente, mi hija ha estado viviendo en medio de toda esa situación, y siento que me tiene odio.... »Creo que no es correcta la manera que emplea mi esposa para hacer que mi hija la ayude en la casa. A veces la despierta y le grita [diciéndole] que no hace nada y que vive como una [reina].... »Nuestra hija está muy rebelde. Sé que los culpables somos nosotros.» Este es el consejo que le dio mi esposa: «Estimado amigo: »Es estimulante leer el caso de un padre que reconoce que su comportamiento ha contribuido en gran medida a la mala actitud y conducta de su hija.... Estamos de acuerdo con usted en que un ambiente de comunicación hostil frecuente es perjudicial para cualquier hijo o cualquier adolescente. »Recuerdo cómo me sentía yo cuando le subía el volumen a la música lo suficiente para no tener que oír las acaloradas discusiones de mis padres. También recuerdo lo intranquila que me sentía, preguntándome cómo iban a terminar. La ansiedad, la impotencia y la desesperanza hicieron que contara los días hasta que pudiera mudarme de la casa a un hospedaje universitario. Me esforcé trabajando en diversos empleos a fin de ganar suficiente dinero para escapar de esa casa y de su ambiente negativo.... »[Lamentablemente el ambiente suyo también parece negativo, con gritos y vociferaciones.] Sin embargo, con gritar a alguien no se logra que haga lo que se le pide o exige. Es más, sólo consigue fomentar el enojo y la hostilidad. ¿Lo motivaría a usted si su gobierno enviara a alguien para que le gritara por no haber pagado sus impuestos? Probablemente no, pero el gobierno no manda a nadie a que grite. Envía más bien una carta que indica la cantidad adicional que se debe en recargos por pago atrasado. Y si aun así usted no los paga, el gobierno de algunos países tiene la opción de reclamar los ingresos futuros que usted perciba. »El apóstol Pablo enseñó que “quien no quiera trabajar tampoco tiene derecho a comer”.1 Esta norma de conducta y consecuencias se encuentra de principio a fin en la Palabra de Dios. »Por supuesto, San Pablo no estaba dando a entender, como tampoco lo estamos haciendo nosotros, que los padres deben negarles la comida u otras cosas esenciales a sus hijos. Pero las cosas no esenciales deben ser privilegios que se conceden sólo cuando los hijos o adolescentes son responsables y cumplen con sus quehaceres domésticos. Cuando no los hagan, no es necesario gritarles. Hay que negarles, más bien, los privilegios. A pesar de las amenazas y la manipulación de los hijos, los padres deben permanecer constantes, sin vacilar de manera alguna. »Será muy difícil, pero no imposible, comenzar a poner en práctica tal sistema con su hija a la edad que tiene. Así que le recomendamos que busque ayuda de parte de un terapeuta que tenga experiencia con adolescentes.» Con eso termina lo que recomienda Linda, mi esposa. El consejo completo, que por falta de espacio no pudimos incluir en esta edición, puede leerse con sólo ingresar en el sitio www.conciencia.net y pulsar la pestaña que dice: «Casos», y luego buscar el Caso 633. Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 2Ts 3:10 (TLA)

Un Mensaje a la Conciencia
Acentos que faltan y que hacen falta

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Aug 25, 2023 4:01


Acababa de circular entre los honorables representantes a la Cámara de Puerto Rico una resolución en la que se aplaudía el cincuentenario de la fundación de la Legión Americana. Pero resultó que en vez de aplaudir a su vez aquella resolución del Representante por Bayamón, sus colegas del capitolio le criticaron la ortografía. Es que en su Exposición de Motivos, de apenas 36 líneas, encontraron no menos de 24 errores de acentuación. Terminada la lectura de la resolución, uno de los representantes se atrevió a inquirir sobre la ausencia de tantos acentos. El proponente le contestó: «Es que la máquina de escribir no tiene acento.» Lamentablemente para aquel representante por Bayamón, su respuesta no convenció a nadie, ya que había otras palabras en el texto que sí aparecían acentuadas. Por eso Jorge Javariz en su columna «Cosas del Capitolio» que publicó en el periódico El Mundo el 19 de marzo de 1969, comentó: «¡Es evidente que quien no tenía el acento era el mecanógrafo!»1 ¿Por qué será que hay tantas personas que no saben dónde ponerles los acentos a las palabras? Seguramente es porque se han convencido de que alguien inventó los acentos con el fin de hacerles imposible la vida, en vez de comprender que se crearon con el propósito de facilitarles la lectura. Si no hubiera acentos, no sabríamos cómo pronunciar un sinnúmero de palabras sin un diccionario, y tropezaríamos a menudo al leer, pues no podríamos distinguir siquiera entre expresiones tales como «el camino» y «él caminó». De modo que los acentos le dan sentido a lo que de otro modo no lo tendría. En una de sus cartas, San Pablo nos da a entender que cada uno de nosotros es una carta, conocida y leída por todos. La máquina de escribir de Dios sí tiene acento, pero Él se reserva el uso de ese acento. Si procuramos poner acentos nosotros a nuestra carta, fracasamos porque el Mecanógrafo divino es el único que sabe dónde poner los acentos. Más vale entonces que abandonemos nuestros inútiles esfuerzos por hacerlo nosotros mismos, y que le pidamos más bien a Dios que nos ponga los acentos que nos faltan para que tenga sentido esta vida que de otro modo no lo tiene. Sólo así podrán los demás saber y leer que somos personas plenamente realizadas, pues como lo afirma San Pablo, será evidente que somos una carta de Cristo que Él ha escrito en nuestro corazón.2 ¡Y se darán cuenta de que todos los acentos están bien puestos! Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 Antonio Quiñones Calderón, Anécdotas políticas (San Juan, P.R.: The Credibility Group, Inc., 1996), p. 59. 2 2Co 3:2-3

Un Mensaje a la Conciencia
«¿Ayuda en la brujería?»

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Aug 24, 2023 4:01


En este mensaje tratamos el caso de un hombre que «descargó su conciencia» de manera anónima en nuestro sitio www.conciencia.net y nos autorizó a que lo citáramos, como sigue: «Tengo cuarenta años. Hace casi tres años empecé a enfermar. Me vieron varios médicos y me hicieron muchos exámenes. Pero todos salieron normales, y nada cambió. Como resultado, caí en un estado de depresión y me sometí a un tratamiento horroroso con un psiquiatra. En mi gran desesperación, y por consejos de la gente, recurrí luego a un curandero o brujo. Pero no fue más que una estafa. Nada cambió tampoco. »He bajado mucho de peso, y sigo muy preocupado.... ¿Será posible que Dios me perdone por haber buscado ayuda en la brujería? ¿Será que algún día Dios me sanará?» Este es el consejo que le dio mi esposa: «Estimado amigo: »¡Cuánto sentimos la enfermedad y todo lo demás que usted ha estado sufriendo! »Tal como lo ha reconocido, hizo mal cuando acudió a un curandero. Si bien algunos presuntos brujos son embusteros que estafan a sus clientes, otros se valen de verdaderos poderes de Satanás para atraer y engañar a sus víctimas. Y como el objetivo principal de Satanás es lograr que las personas se vuelvan en contra de Dios, las que consultan a los brujos corren el riesgo de perder toda la fe en Dios que pudieran alguna vez haber tenido. »Por eso, usted hizo algo malo y peligroso al consultar a un brujo, pero Dios está dispuesto a perdonar todo pecado. De hecho, “si reconocemos ante Dios que hemos pecado, podemos estar seguros de que él, que es justo, nos perdonará y nos limpiará de toda maldad”.1 No hay pecado alguno que se excluya; “toda maldad” incluye todo pecado. Así que en vez de estar preocupado por lo que ha hecho, pídale a Dios en oración que lo limpie del pecado y de toda maldad. Una vez que se lo pida, Él lo perdonará y limpiará, y ya no tendrá que preocuparse por eso, entre otras cosas. »... La ciencia médica no deja de hacer nuevos descubrimientos acerca de cómo funciona nuestro cuerpo.... Uno de esos nuevos descubrimientos es cómo nuestro cerebro afecta todas las demás partes de nuestro cuerpo. Por ejemplo, en el caso suyo la depresión que usted atribuye a su incertidumbre en cuanto a su salud bien pudiera ser otro factor que lo afecta físicamente de manera negativa. El cerebro y el cuerpo están entrelazados a tal grado que es imposible saber con certeza si la enfermedad física causó la depresión, o si la depresión pudiera haber causado, al menos en parte, la enfermedad. »Usted nos pregunta si algún día Dios lo sanará. Sí, creemos que Dios a veces sana las enfermedades sobrenaturalmente, y por eso le pedimos que nos sane. Pero reconocemos que la mayor parte del tiempo Dios se vale de los médicos para darnos sabios consejos médicos y medicinas a fin de controlar infecciones y malestares.» Con eso termina lo que recomienda Linda, mi esposa. El consejo completo puede leerse con sólo ingresar en el sitio www.conciencia.net y pulsar la pestaña que dice: «Casos», y luego buscar el Caso 761. Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 1Jn 1:9 (TLA)

Un Mensaje a la Conciencia
Sinceramente equivocado

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Aug 23, 2023 4:01


«Candelario efectuaba [cada sábado]... una serie de visitas a los cabarets y [a las] discotecas más exclusivas de la ciudad, para asegurarse de que la [música] salsa, como la mala hierba, no volviese a levantar cabeza en ellos. [Acompañado de su amigo Pedro,] había entrado aquella noche [en el cabaret de Susana].... Pedro, como solía hacerlo cada vez más a menudo, prefirió sentarse solo.... »Hacía escasamente una semana había [surgido] entre ellos un altercado penoso: en una visita reciente a Guamaní, el pueblo del cual ambos eran oriundos,... se habían puesto las botas cazando soneros por los tinglados de Villa Cañona y, al regresar con ellos a la capital, Pedro le había pedido a Candelario que los pusiera en libertad. Entre los detenidos aquel día se encontraban su tío Monchín y tres primos suyos, quienes se habían unido recientemente a los soneros como trompetista, baterista y conguero. »—Son compueblanos suyos, Capitán —le dijo genialmente, seguro de que Candelario los protegería—. Le aseguro que, si se han metido a músicos, no es para luchar por la independencia, sino para no morirse de hambre. »Candelario, sin embargo, se negó a complacerlo. Le había sido muy doloroso tener que adoptar aquella actitud disciplinaria con los soneros, y a causa de ello, en las noches casi no lograba conciliar el sueño. [Pero] hacer una excepción de los parientes de Pedro... sólo lo haría sentirse peor. »—Lo siento, camarada —le dijo...—. Pero en la Academia me enseñaron que la ley se aplica sin excepción —y le prometió, que, una vez efectuada la paliza, les permitiría a sus parientes unirse a [su] banda militar, donde cambiarían la trompeta por un trombón de vara y los cueros por un tambor militar. »Enfurecido con su amigo, Pedro le señaló que parecía mentira que los preceptos humanitarios que tanto había predicado no hubiesen sido más que un barniz, y que hubiese sido necesario “rascar tan poco para que a él también le requintara lo salvaje”. En los días subsiguientes Candelario, que de veras apreciaba a Pedro, intentó subsanar el agravio de [los latigazos descargados] sobre sus familiares, pero la relación entre los dos amigos ya no volvió a ser la misma.»1 Así cuenta la escritora puertorriqueña Rosario Ferré uno de los insólitos incidentes en la cadena de acontecimientos que llevan a «La extraña muerte del Capitancito Candelario» en su obra ficticia, compuesta de cuentos, titulada Maldito amor. Por medio de su personaje Candelario, la doctora Ferré ilustra las repercusiones negativas que tienen hasta nuestros actos más sinceros si son arbitrarios y abusivos, demostrando hábilmente cómo es que cualquiera de nosotros puede estar sinceramente equivocado. Pero si bien nos parece inaudito que se persiga a determinado grupo de personas por el inocente delito de preferir el género musical de la salsa, más lamentable aún es que se persiga al prójimo por su fe en Dios, ¡como todavía sucede en pleno siglo veintiuno! ¡Que Dios nos libre de los intolerantes culpables de semejante persecución, a quienes les espera el día del juicio! Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 Rosario Ferré, La extraña muerte del Capitancito Candelario (Barcelona: Plaza y Janés, 2002), pp. 66‑69.

Un Mensaje a la Conciencia
«No se escucha ya la música»

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Aug 22, 2023 4:01


«Los soneros ganaban cada vez más partidarios en la capital.... Se habían entregado en cuerpo y alma a una verdadera fiebre de salsa.... Celebraban sus conciertos en todas partes. Su música se había puesto de moda no sólo en los cafetines de los barrios pobres, sino que se escuchaba ahora en los bares y las discotecas más elegantes de la ciudad, donde, para disgusto de los dirigentes del partido, ésta había ya casi aniquilado el rock.... »Candelario encontraba espantosa aquella música, pero no podía dejar de admirar el valor de sus ejecutantes.... Se alegraba de que sus compatriotas, si bien no tenían el valor de luchar por la independencia, en su música y en sus cantos sí se atrevieran a hacerlo.... »A poco de comenzada aquella locura, Candelario recibió una llamada telefónica confidencial. En el partido varios oficiales de alto rango se encontraban preocupados por el fenómeno de aquellos conciertos.... »—¿Me escucha, Candelario? [—le dijo una voz ronca e impersonal—].... Su primer deber de hoy en adelante será... evitar que esos conciertos se sigan celebrando. Así que meta a los soneros en cintura, si no quiere verse muy pronto, no sólo destituido como capitán, sino expulsado para siempre ignominiosamente de la tropa. »Candelario colgó molesto el receptor. Le parecía increíble que, bajo los pintorescos atuendos de los salseros, se ocultasen elementos políticamente sediciosos. La salsa, a más de esto, bien que grosera y de mal gusto (Candelario rehusaba considerarla música), era ya el modus vivendi de gran parte de la población, y coartarla sería injusto, además de prácticamente imposible. Aquellos sentimientos de conmiseración, sin embargo, pasaron a segundo plano en cuanto Candelario consideró las consecuencias de rehusarse a poner en efecto aquella orden.... »Haciendo, por lo tanto, de tripas corazón, al día siguiente organizó varias expediciones punitivas a los arrabales.... Llevado a cabo el propósito del partido, y devueltos a sus tugurios los malhechores con las cabezas hendidas y las costillas rotas, el silencio volvió a reinar una vez más supremo a lo largo de los farallones embestidos por el Atlántico de la antigua capital de San Juan.»1 ¡Con razón que a la escritora puertorriqueña Rosario Ferré —hija del estadista Luis A. Ferré, quien en su ilustre carrera llegó a ser gobernador y Presidente del Senado de Puerto Rico— le fue otorgado en 1986, en la Feria del Libro de Frankfurt, el Premio Liberatur por Maldito amor, libro compuesto de cuentos como este que lleva por título «La extraña muerte del Capitancito Candelario»! En la pluma de la ingeniosa Ferré, el pueblo boricua bien pudo haberse lamentado, junto con el pueblo de Israel, diciendo: «No se escucha ya la música de los jóvenes. En nuestro corazón ya no hay gozo; la alegría de nuestras danzas se convirtió en tristeza.»2 Menos mal que, a diferencia de los dirigentes políticos de esa obra ficticia, Dios el Señor, que nos creó con la capacidad de concebir un sinnúmero de géneros musicales y de disfrutar de ellos, no coarta ni limita nuestro libre albedrío en este gusto. Más bien, nos anima a que aplaudamos con Él la canción de Débora, que dice: «¡Escuchen, gobernantes!... Cantaré al Señor; tocaré música al... Dios de Israel.»3 Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 Rosario Ferré, La extraña muerte del Capitancito Candelario (Barcelona: Plaza y Janés, 2002), pp. 58‑65. 2 Lm 5:14,15 3 Jue 5:3

Un Mensaje a la Conciencia
«A veces es cariñoso, y otras no»

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Aug 19, 2023 4:01


En este mensaje tratamos el siguiente caso de una mujer que «descargó su conciencia» de manera anónima en nuestro sitio www.conciencia.net, autorizándonos a que la citáramos: «Soy una médica de veintinueve años.... Conocí a un hombre que estableció una relación sentimental rápidamente conmigo. A la semana de iniciada la relación descubrí que seguía en contacto con su ex novia, por lo que decidí terminar la relación. »Luego de cuatro meses de estar separados... me pidió una oportunidad y me dijo que anteriormente no estaba listo, pero que ahora todo sería diferente. »Así que decidimos intentarlo. Sin embargo, yo aún tengo dudas.... Su actitud es cambiante. A veces es cariñoso, y otras ni siquiera me contesta el teléfono.... Yo vivo con un miedo constante de que pase lo mismo otra vez.» Este es el consejo que le dio mi esposa: «Estimada amiga: »Sé por experiencia lo que uno siente cuando vive con miedo constante. ¡Lamento mucho que usted esté viviendo así! Tiene razón para estar preocupada. »El temor es un estado de ánimo que le señala al cuerpo que debe estar listo para luchar o escapar. El temor que usted siente hace que su cuerpo produzca la hormona adrenalina a fin de que esté preparada para huir del peligro o de quedarse y luchar en contra. Como usted ya sabe, ese flujo continuo de adrenalina causa estrés, lo cual es nocivo para su salud. »Cualquier hombre que la haga sentir temor y estrés no es el indicado para usted. Ese temor es una bandera roja de advertencia de que él pudiera representar peligro para usted en el futuro.... »... Como médica, usted ha aprendido a reconocer las señales de advertencia y de seguir su curso. Ahora, debido a que este es un asunto personal y no profesional, nos está preguntando si debe hacer caso omiso de las señales de advertencia. Nosotros creemos que Dios le dio esas señales para alejarla del peligro. »En el jardín del Edén, el primer hombre, Adán, estaba solo. Dios decidió darle una esposa para que no sintiera tanta soledad. Creó a Eva valiéndose de una de las costillas de Adán, y diseñó la relación entre los dos de modo que hubiera tanta intimidad y confianza mutua que los dos llegaran a ser como un solo cuerpo.1 »Esa relación nos sirve de modelo a cada uno de nosotros. Toda mujer debe tener la expectativa de ser valorada y protegida. Nunca debe tener que dudar de la devoción y fidelidad de su novio. Ninguna relación es perfecta porque ninguno de nosotros es perfecto, pero cuando usted tenga dudas y sienta temor con relación a un novio, aproveche ese torrente de adrenalina para huir de él lo más lejos posible.» Con eso termina lo que recomienda Linda, mi esposa. El consejo completo, que por falta de espacio no pudimos incluir en esta edición, se puede leer si se ingresa en el sitio www.conciencia.net y se pulsa la pestaña que dice: «Casos», y luego se busca el Caso 632. Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 Gn 2:24; Mt 19:5; Mr 10:8

Un Mensaje a la Conciencia
«Nadie se fija en los personajes buenos»

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Aug 18, 2023 4:01


«La labor del novelista que quiera reflejar en su obra la vida ambiente es, de suyo, agria y espinosa.... Y... lo hermoso del caso [es] que nadie se fija en los personajes buenos o elevados de una ficción novelesca, para buscarles el original en la vida real y efectiva; pero no se trate de algún tipo malvado o ridículo, porque al punto vemos en él la vera efigie de Zutano o de Fulana, y a cada cual nos faltan pies para correrle con el enredo. Con frecuencia ni los conoce el autor. Pero ¡vaya usted a probarles que no! El lector está siempre más enterado que el autor.»1 En esta autobiografía publicada en sus antologías de cuentos, el popular escritor colombiano Tomás Carrasquilla nos permite penetrar en el mundo del novelista. Desde esa perspectiva privilegiada, vemos el mundo de un modo creativo, diferente de lo acostumbrado. Es una visión que nos conviene no sólo porque nos ayuda a comprender a nuestros autores favoritos sino también al Autor mismo de la vida. Así como Carrasquilla tiene toda la razón al observar que el lector piensa que está siempre más enterado que el autor, también Dios estaría en lo cierto si reclamara que la creación piensa que siempre sabe más que el Creador. Porque no hay duda de que el lector moderno tiene la tendencia a hacer caso omiso de las leyes divinas consignadas en el manual de funcionamiento del ser humano, que es la Biblia. Por una parte, es capaz de leer la basura más inmunda, y por otra, hacerse el de la vista gorda en lo que tiene que ver con la lectura de lo que más le conviene: la Palabra de Dios. Quien se la pasa buscándole tres pies al gato, padece simple y llanamente de egoísmo. El mundo del tal malicioso y malpensado, que gira en torno suyo, es un mundo malo, un mundo perverso. Pero con todo y lo popular que ha llegado a ser esa manera de pensar, no tiene ninguna semejanza con la que nuestro Creador ha dispuesto para nosotros. Esta mentalidad saludable la describe San Pablo en dos de sus cartas bíblicas. En su Carta a los Romanos nos aconseja que no nos amoldemos al mundo actual, sino que permitamos que Dios nos transforme mediante la renovación de nuestra mente. En otras palabras, que cambie nuestra manera de pensar, para que así cambie nuestra manera de vivir y lleguemos a conocer la voluntad de Dios, es decir, lo que es bueno, agradable y perfecto.2 Y en su Carta a los Filipenses nos recomienda: «Por último, hermanos, piensen en todo lo verdadero, en todo lo que es digno de respeto, en todo lo recto, en todo lo puro, en todo lo agradable, en todo lo que tiene buena fama. Piensen en toda clase de virtudes, en todo lo que merece alabanza...: háganlo así y el Dios de paz estará con ustedes.»3 Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 Tomás Carrasquilla, «Autobiografía», El Padre Casafús y otros cuentos (Bogotá: Editorial Norma, 1989) p. 197; Carrasquilla, «Autopresentación del autor», Cuentos, pp. 8,9. 2 Ro 12:2 3 Fil 4:8,9 (DHH)

Un Mensaje a la Conciencia
«Mi madre falleció, y ahora tengo miedo, tristeza y furia»

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Aug 17, 2023 4:01


En este mensaje tratamos el siguiente caso de una mujer que «descargó su conciencia» de manera anónima en nuestro sitio www.conciencia.net, autorizándonos a que la citáramos: «Hace unos meses mi madre falleció, y no estoy segura si guardé luto por ella. Desde entonces he notado un gran cambio en mi personalidad.... Mi carácter y mi conducta han cambiado para mal al extremo de faltarle el respeto a mi familia.... Tengo miedo, tristeza y furia porque no sé cómo cambiar o deshacerme de esto que me ha hecho perder todo lo bueno que me enseñó mi mamá.» Este es el consejo que le dio mi esposa: «Estimada amiga: »Sentimos mucho que haya perdido a su mamá. Usted no pensó que la iba a afectar como nos ha contado, así que está preocupada de que esos cambios pudieran ser permanentes. »En primer lugar, queremos asegurarle que es muy común sentir enojo después de la pérdida de un ser querido. También es común manifestar ese enojo hacia personas que la aman y que forman parte de su círculo íntimo.... »Es obvio que eso daña las relaciones que tiene con los demás, y es posible que su familia se sienta herida emocionalmente, o esté enojada a su vez con usted, o tanto lo uno como lo otro. Usted ama a su familia y no quiere herirla, y eso hace que se sienta aún más frustrada consigo misma. »Nada de esto quiere decir que haya olvidado las lecciones que le enseñó su mamá, ni que se haya convertido en la clase de persona que no quiere ser. Es más bien una etapa temporal en la que está procesando emocionalmente lo que significa vivir sin que su mamá forme parte de su vida. »Lo que más le ayudará es pedir disculpas con humildad y de todo corazón. ¿Debe usted pedir perdón repetidamente cada vez que se deja llevar por el enojo? ¡En definitiva, sí! »Si no lo ha hecho ya, hable con los miembros de su familia en algún momento en que no esté usted enojada. Una opción pudiera ser que les prepare una comida y les informe que tiene algo que decirles durante la cena. Muéstrese transparente, dando a conocer que siente vergüenza por la manera en que los ha tratado. Admita que ha estado desahogando la pena que siente mediante el enojo que les ha mostrado, y que quiere dejar de hacerlo. »Si ellos responden emocionalmente, deje que le describan cómo los ha afectado ese enojo. No se defienda, ni justifique su conducta ni presente excusas. Reconozca que lo que ellos sienten es válido y que usted es responsable por lo que ha dicho. »Cuando el apóstol Pedro le preguntó a Jesucristo cuántas veces debemos estar dispuestos a perdonar a alguien, Jesús le respondió dándole a entender que debemos estar dispuestos a perdonar innumerables veces.1 Esperamos que los miembros de la familia de usted estén dispuestos a perdonarla una y otra vez a medida que se vale de maneras más saludables de afrontar el enojo que siente.» Con eso termina lo que recomienda Linda, mi esposa. Este caso y este consejo pueden leerse e imprimirse si se pulsa la pestaña en www.conciencia.net que dice: «Casos», y luego se busca el Caso 760. Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 Mt 18:21-22

Un Mensaje a la Conciencia
«El cuarto padre de la patria» dominicana

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Aug 16, 2023 4:01


(Día de la Restauración de la República Dominicana) «A Gregorio Luperón, expresidente dominicano y protagonista de la Guerra de la Restauración, hay que darle más visibilidad para que su memoria y legado perduren por su grandeza como ser humano, político, estratega militar y patriota» —comienza el artículo del periódico El Caribe publicado en septiembre de 2022 titulado “Historiadores coinciden en que Gregorio Luperón es el cuarto padre de la patria”—. [José Guerrero,] director del Museo de Historia [y Geografía], señaló que, para hablar de la personalidad de Luperón, hay que resaltar que él es un ejemplo de cómo República Dominicana ha dado hombres y mujeres, personalidades históricas, que vienen de abajo. »“Cuando uno lee... la biografía de Luperón... ve que hizo de todo en la calle: vendió dulces, su mamá tenía un ventorrillo [es decir, una tienda ambulante] y fue autodidacta por completo.... Hay que verlo como es —insistió el historiador Guerrero— [y] nunca desvincularlo de sus orígenes populares y humildes al destacar que llegó incluso a tener una visión empresarial y hasta estuvo en Europa, y [como] a quien en ningún momento se le vio riquezas ni cosas mal habidas....” Nunca le interesó ser presidente de la República, sino que se vio obligado a asumir el cargo para rescatar al país de una dictadura insoportable.1 De ahí que haya más razón que nunca para tomar a pecho lo que Luperón nos dejó por escrito en sus Notas Autobiográficas y Apuntes Históricos sobre la República Dominicana. «Lo que causó la decadencia de Atenas y lo que perdió a la Grecia —advirtió Luperón— fue que sus ciudadanos no tenían verdadera familia ni vida de hogar. Sus hombres públicos eran de costumbres ligeras y corrompidas... y su caída se hizo inevitable.... »Lo mismo sucedió a Roma. Su decadencia y su caída pueden muy bien ser atribuidas a la corrupción general del pueblo y al amor desenfrenado por el placer y la ociosidad de sus magnates, que miraron con desprecio la vida honrada porque el trabajo... estaba reservado únicamente a los esclavos.... Cayó porque ya no merecía vivir, por sus escándalos y sus injusticias. Así es como perecen siempre las naciones viciosas y corrompidas, que prefieren derramar su sangre en luchas infames en favor de los pillos y de los tiranos, antes que una gota de sudor en el trabajo honrado.... »Tales naciones están inevitablemente condenadas a morir políticamente.... Su sola esperanza está en la restauración y elevación del carácter individual, porque sólo eso puede salvar a una nación; y si el carácter está irrevocablemente perdido, no quedará cosa alguna que valga la pena de ser salvada», concluye Luperó­n.2 Aquel prócer dominicano tiene toda la razón. Para salvarnos de la condenación es imprescindible que el carácter de cada uno de nosotros sea elevado y restaurado. Pero la buena noticia es que, si nos sometemos con humildad a Dios como nuestra suprema autoridad y como quien en su gran amor nos ha llamado a tener parte en su gloria eterna en unión con su Hijo Jesucristo, el apóstol Pedro nos asegura que Dios nos restaurará y nos hará fuertes, firmes y estables.3 Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 «Historiadores coinciden en que Gregorio Luperón es el cuarto padre de la patria», Periódico El Caribe, 11 septiembre 2022 En línea 15 marzo 2023. 2 Gregorio Luperón, Hombres de la restauración, Cuadernos Patrióticos, 3a. ed., No. 111 (Santo Domingo: Ediciones Librería La Trinitaria, 1998), pp. 21-23, Proyecto de Digitalización: Academia Dominicana de la Historia En línea 15 marzo 2023. 3 1P 5:6-10

Un Mensaje a la Conciencia
Dos «héroes de la restauración»

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Aug 15, 2023 4:01


(Víspera del Día de la Restauración de la República Dominicana) «Nacido de cuna humilde en el pueblo de Puerto Plata el 8 de septiembre de 1839... desde temprana edad tuvo que salir a las calles de su ciudad natal en busca de manutención para su madre y sus hermanos. Aprendió las primeras letras en una modesta escuela metodista de Puerto Plata, dirigida por el reverendo William Towler.... Cuando apenas tenía doce años... dejó el hogar materno para irse a vivir a Jamao, donde se radicó para dirigir los cortes de caoba de don Pedro Eduardo Dubocq, quien se convirtió en su protector. Allí leyó a Plutarco y otros libros de la biblioteca del señor Dubocq, para de esa forma convertirse en un joven [autodidacta].»1 Así, con una reseña biográfica del autor, comienza el historiador puertoplateño Juan Ventura2 su «Presentación» a la obra titulada Hombres de la Restauración. El autor es Gregorio Luperón, y la obra fue publicada por primera vez en Puerto Rico en 1896 en el segundo tomo de sus Notas Autobiográficas y Apuntes Históricos sobre la República Dominicana, desde la Restauración a nuestros días. «En 1857 Gregorio Luperón ocupó su primer cargo público como Comandante Auxiliar del Puesto Cantonal de Rincón de Yásica.... [En] 1861, cuando Pedro Santana proclamó la Anexión del país a España, Luperón se declaró contrario a la misma y se negó a firmar el acta de la Anexión.... A partir de ahí... entró a la escena política e inició sus actividades revolucionarias, sufriendo persecuciones», escribe Juan Ventura.3 Aun antes del inicio de la Guerra de Restauración que se dio entre 1863 y 1865, en la que lucharon los partidarios de la anexión a España contra los independentistas o restauradores (de la Primera República), Luperón ya había sido proclamado General de Brigada. Los puestos que llegó a ocupar durante esa década y la siguiente fueron muy importantes: comandante de una de las columnas que atacaron Santiago, Jefe del Cantón de Marilópez, Jefe de Operaciones sobre el Este y el Sur del país, Segundo Jefe del Ejército dominicano, Jefe de Operaciones de la Línea Noroeste, Gobernador Civil y Militar de La Vega, Vicepresidente de la República cuando tenía sólo veintiséis años, miembro del primer Triunvirato que gobernó el país, diputado por Santiago, Ministro de Guerra y Marina, y Presidente provisional de la República. De ahí que el historiador Ventura califique al general Luperón como «héroe y... figura preponderante en la historia local, regional y nacional, que por sus actuaciones y méritos acumulados en la Gesta Restauradora se ganó el primer lugar en la misma».4 Así como nuestros hermanos dominicanos necesitaron una gesta restauradora en lo político, todos necesitamos una en lo espiritual. Pero gracias a Dios, esa gesta ya la libró su Hijo Jesucristo, y para apropiarnos de ella sólo hace falta que lo reconozcamos como el Héroe de nuestra historia personal que, al morir por nosotros, acumuló los méritos por los que se ganó el primer lugar en la misma. Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 Gregorio Luperón, Hombres de la restauración, Cuadernos Patrióticos, 3a. ed., No. 111 (Santo Domingo: Ediciones Librería La Trinitaria, 1998), pp. 9-10, Proyecto de Digitalización: Academia Dominicana de la Historia En línea 6 marzo 2023. 2 Antonio Heredia, «Reconocerán al puertoplateño Juan Ventura por sus aportes a la historia local de pueblos y comunidades», Diario Puerto Plata Digital, 18 octubre 2022 En línea 6 marzo 2023. 3 Luperón, pp. 10-11. 4 Ibíd., pp. 11-14.

Un Mensaje a la Conciencia
«Cielito de la Independencia»

Un Mensaje a la Conciencia

Play Episode Listen Later Aug 14, 2023 4:01


Durante la época colonial hispanoamericana, surgió un género musical llamado cielito. Era una canción patriótica danzada que estaba estrechamente vinculada con las guerras por la independencia. El siguiente cielito que cantaba a las Provincias Unidas del Río de la Plata, originalmente publicado anónimo en el folleto Día de Buenos Ayres que relataba los festejos del 13 al 15 de septiembre de 1816 en Buenos Aires con motivo de la independencia recién declarada por el Congreso de Tucumán, lleva por título: Cielito de la Independencia:1 Si de todo lo creado es el cielo lo mejor, el «cielo» ha de ser el baile de los Pueblos de la Unión. Cielo, cielito y más cielo, cielito siempre cantad que la alegría es del cielo, del cielo es la libertad. Hoy una nueva Nación en el mundo se presenta, pues las Provincias Unidas proclaman su independencia. Cielito, cielo festivo, cielo de la libertad, jurando la independencia no somos esclavos ya. Los del Río de la Plata cantan con aclamación, su libertad recobrada a esfuerzos de su valor. Cielo, cielito cantemos, cielo de la amada Patria, que con sus hijos celebra su libertad suspirada. Los constantes argentinos juran hoy con heroísmo eterna guerra al tirano, guerra eterna al despotismo. Cielo, cielito cantemos, se acabarán nuestras penas, porque ya hemos arrojado los grillos y las cadenas. Jurando la independencia tenemos obligación de ser buenos ciudadanos y consolidar la Unión. Cielito, cielo cantemos, cielito de la unidad, unidos seremos libres, sin unión no hay libertad. Todo fiel Americano hace a la Patria traición si fomenta la discordia y no propende a la Unión. Cielito, cielo cantemos, que en el cielo está la paz, y el que la busque en discordia jamás la podrá encontrar. Oprobio eterno al que tenga la depravada intención de que la Patria se vea esclava de otra nación. Cielito, cielo festivo, cielito del entusiasmo, queremos antes morir que volver a ser esclavos. ¡Viva la Patria, patriotas! ¡Viva la Patria y la Unión, viva nuestra independencia, viva la nueva Nación! Con semejantes versos, los que cantaban o declamaban este cielito no podían menos que vibrar de emoción al hacerlo e infundir aliento y avivar el fervor patriótico en los guerreros que los escuchaban prestos a luchar por la libertad en los campos de batalla. Gracias a Dios, así como aquellos héroes de nuestra independencia patria estuvieron dispuestos a morir para que no volviéramos a ser esclavos de ninguna otra nación, su Hijo Jesucristo dio su vida para que no volviéramos a ser esclavos del pecado. Más vale que permitamos que Él nos libre de esas cadenas, a fin de que podamos ser libres en todos los sentidos.2 Carlos ReyUn Mensaje a la Concienciawww.conciencia.net 1 «Cielito de la Independencia» En línea 11 marzo 2023; «Bartolomé Hidalgo: Obras completas — Prólogo de Antonio Praderio», Letras Uruguay En línea 11 marzo 2023. 2 Jn 8:31-36